martes, 18 de agosto de 2020

JOSÉ VEGA DÍAZ, REVOLUCIONARIO EJEMPLAR





En su 118º natalicio:




                                                     Iván Ljubetic Vargas, historiador del
                                                     Centro de Extensión e Investigación
                                                     Luis Emilio Recabarren, CEILER


             


Conocí   al compañero José Vega Díaz en 1991 cuando, acompañado por el camarada Américo Zorrilla, llegamos a su modesto hogar. Andábamos buscando antecedentes sobre Luis Emilio Recabarren para el libro que aparecería en 1992 con el nombre de “Don Reca”. El compañero Vega Díaz nos proporcionó importantes antecedentes. Conversé con él en varias oportunidades. Poco después, el 18 de abril de 1994, su viejo y aguerrido corazón de comunista ejemplar dejó de latir.  

EN LA PAMPA SALITRERA
José Vega Díaz había nacido en Sotaquí, Ovalle, el 15 de agosto de 1902. Sus padres fueron Crispín Vega y Cruz Díaz. Estudió en una escuela primaria desde los 6 a los 12 años. A esa edad entró a trabajar en las salitreras como minero, y en ferrocarriles en el puesto de ayudante de calderero. A los 17 años fue elegido dirigente sindical en las salitreras. También de la Federación Obrera de Chile, FOCH, al constituirse ésta en 1919.

SE INCORPORA AL PARTIDO COMUNISTA
Ingresó a las filas del Partido Comunista. Ocupó el puesto de máximo dirigente de esta colectividad en Tocopilla. En esa ciudad, en 1924, cuando tenía 22 años de edad, comenzó a laborar como tipógrafo. Colaboró en la revista ‘Vanguardia’ y en los periódicos ‘El Despertar de Tocopilla’, ‘Defensa Obrera’, de Iquique. Fue publicista, regente de taller, redactor y director de ‘El Socialista’, de Antofagasta, que después se pasó a llamar ‘El Comunista’.

ASÍ LO  RELATÓ UN COMUNISTA AUSTRÍACO
En julio de 1930, José Vega junto con su camarada Manuel González Vilches,  llevaron a cabo una audaz e increíble acción.
Tuve la suerte de encontrar un manuscrito inédito, escrito por el comunista austriaco Federico Glaubauf, dirigente de la Internacional Comunista. Lo tituló “Primer encuentro con Chile”. Lo traduje del alemán. Allí relata:

"Fue en julio o agosto de 1930. Una tarde estaba en una reunión con algunos compañeros en la sede del Partido Comunista argentino, la 'Casa del Proletariado', en calle Independencia (Buenos Aires), cuando repentinamente llegó Ítala Codovilla –esposa de Vittorio Codovilla- muy nerviosa. Buscaba a su esposo, el conocido dirigente comunista argentino. Al no encontrarlo en el local, me pidió que la acompañara a su hogar, que estaba cerca.
"Ahí, en el umbral de la puerta de la casa, donde vivían también otros militantes del Partido, estaban sentados dos hombres. Sus ropas deterioradas. Se veía que habían hecho un largo viaje. No tenían equipaje, salvo unos trastos, que cada uno de ellos había unido en un atado, a la usanza campesina.
"En la habitación de los Codovilla, que era al mismo tiempo sala de estar, pieza de trabajo y dormitorio, uno de los hombres -alto y con un tupido bigote- se sacó el viejo sombrero y de él extrajo un muy bien doblado papel, que legitimaba a ambos como representantes del entonces ilegal Partido Comunista de Chile”.

CRUZARON A PIE LA CORDILLERA

"El compañero alto era el "huaso" González; el otro era conocido en el Partido como 'El Negro' (se trataba de los compañeros Manuel González Vilches y de José Vega Díaz, que fue diputado del Partido, nota del autor). Habían viajado más de un mes. Primero intentaron llegar a Argentina pasando por Bolivia. Varias veces fracasaron en sus intenciones de cruzar esa frontera. Finalmente se arriesgaron a traspasar la alta cordillera en pleno invierno y sin contar con la ropa adecuada. Así llegaron a Mendoza. Allí algunos compañeros les proporcionaron el dinero para viajar hasta Buenos Aires.
"¿Qué los había motivado para hacer ese viaje?
"El senador Hidalgo, que hasta la ilegalización del Partido, estuvo en su dirección, había afirmado a su regreso de un viaje a Europa, que la Internacional Comunista recomendó la disolución del Partido Comunista de Chile. Los compañeros, que enviaron a los dos delegados, querían una clara respuesta del parte del Secretariado Sudamericano de la Komintern sobre el problema planteado. Por eso venían donde Codovilla, pues sabían que pertenecía al Secretariado Sudamericano. Requerían una respuesta inmediata. De no ser así, estaban dispuestos a llegar hasta Moscú para lograr la clarificación.

"Para mí – explica Federico Glaubauf – no fue fácil seguir la exposición de los compañeros. Mis aún precarios conocimientos del castellano me permitían entenderlo en Buenos Aires, pero yo desconocía las particularidades del lenguaje chileno y, sobre todo, no podía comprender la forma poco clara de hablar del 'huaso'.
"Vittorio Codovilla llegó luego. Conocía personalmente a los delegados. Les aclaró que el senador Hidalgo había traicionado y que estaba fuera de toda discusión la disolución del Partido Comunista de Chile".

DIPUTADO COMUNISTA
Ese mismo año de 1930, Vega Díaz viajó a Rusia Soviética,  en representación del Partido Comunista y la FOCH,  para participar  en Moscú en una reunión del Buró Político de la Internacional Comunista y en el V Congreso de Internacional Sindical.
En marzo de 1933 fue elegido diputado por la Segunda Agrupación Departamental de Tocopilla, El Loa, Antofagasta y Taltal.
El diputado del Partido Democrático Juan Pradenas Muñoz, que apoyaba el gobierno de Arturo Alessandri Palma, pronunció a comienzos de abril de 1933 un discurso en la Cámara protestando porque se habían tomado “medidas que vulneran las más elementales garantías constitucionales y se apresa arbitrariamente a un parlamentario”
Agregaba que: "No creo que el peligro de que se perturbe el orden social y político pueda estar en los comunistas, sino que más bien en otros elementos que están vinculados al ejército. Pero el único objeto al usar de la palabra es protestar del atropello al fuero parlamentario que significa la prisión arbitraria de un miembro del parlamento como el diputado señor Vega".
Éste era uno de los 82 delegados al IX Congreso del Partido Comunista que se realizaba en la casa quinta de la calle Santa Elisa Nº 84 de Lo Ovalle y que fueron detenidos el 30 de marzo de 1933.

PARTICIPÓ EN UN CONGRESO QUE FINALIZÓ EN LA CÁRCEL

José Vega Díaz relató posteriormente: “La noche del 30 de marzo acompañé al sitio de reunión a la delegación de Tocopilla, encabezada por Raúl Barra Silva, pero cuando me estaba acomodando debajo de una mesa para dormir, se hizo presente la policía y procedió a cargar cuatro camiones con los 82 delegados... Al pasar por la Plaza de Armas, rompimos el silencio de la noche con las notas de La Internacional. La Cárcel se llenó de gritos contra el gobierno... Yo asistí a esa reunión, por derecho propio, por ser uno de los dos diputados que tenía el Partido. El otro, Andrés Escobar, no asistió, no sé por qué. Y se libró".

"El Mercurio" del sábado 1 de abril de 1933, informaba:
"Aproximadamente a las 1.30 de la madrugada un grupo de agentes de investigaciones y fuerza de carabineros rodearon la casa en cuestión, procediéndose, acto seguido, a escalar los muros para introducirse al interior del edificio. Una vez dentro de la casa, los detectives se encontraron en una de las habitaciones en que estaba reunido un grupo numeroso de elementos comunistas, entre los cuales se hallaba el diputado comunista señor José Vega Díaz, el  Secretario General del Partido Comunista, señor Carlos Contreras Labarca, y setenta y ocho personas más, entre ellas tres mujeres".
Agregaba que la Corte de Apelaciones, en pleno, designó al Ministro Miguel Aylwin para que resolviera sobre la detención del diputado José Vega.

DESAFORADO POR PARTICIPAR EN UN CONGRESO LEGAL
El domingo 2 de abril, "El Mercurio" en su página 23 titula: "Por unanimidad acordó la Corte desafuero al diputado Sr. Vega D."
En esa misma página, otro artículo tenía un largo encabezamiento: "Más de quince horas de abrumadora labor significó el interrogatorio a los comunistas". En él se expresaba: "Cerca de las 12,30 PM, se puso término a todos los interrogatorios, siendo ingresados los hombres a la Cárcel Pública y a dos de las mujeres, Edelmira Farías y Ana Gutiérrez Sandoval, a la Casa Correccional, en tanto Inés Aravena Villalón era conducida a la casa de Menores, a disposición del Juez de Menores".
Más adelante se informaba que “el Ministro Miguel Aylwin ordenó en la tarde del sábado 1 abril de 1933, la libertad incondicional del diputado José Vega, el que abandonó la Cárcel alrededor de las 17 horas”.

Por su parte, el exdiputado José Vega Díaz en su obra “El Aprendiz de Comunista”, recordaba: "En la galería 15 se reiniciaron las sesiones del Congreso, allí aparecieron antiguas posiciones sectarias, enemigas de la unidad popular y que hablaban de 'Frente Único Proletario'..."   Y agregaba que "el día 4 de mayo, la justicia ordinaria dejó en libertad a todos los detenidos en Lo Ovalle".

En 1937 fue reelegido diputado por la Segunda Agrupación Departamental.
Sufrió detenciones, relegaciones y fue desaforado en dos ocasiones. Nada lo amedrentó.

Siguió luchando por la causa del pueblo hasta su muerte, ocurrida en Santiago el 18 de abril de 1994.