martes, 31 de enero de 2023

VOLODIA TEITELBOIM VOLOSKY A 15 AÑOS DE SU PARTIDA FÍSICA

 


 

                                                        Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                                        Centro de Extensión e Investigación

                                                        Louis Emilio Recabarren, CEILER

 

 


 

“Odio no, nunca he tenido odio. Pero eso sí, considero que es necesario que haya memoria para que el animal humano chileno no choque de nuevo con la misma piedra; con una Dictadura que se va a hermosear y va a contar puras delicias, maravillas, para producir nuevos episodios de muerte”.    (Volodia Teitelboim)

SUS INICIOS

Nació en Chillán el 17 de marzo de 1916. Desde niño manifestó inquietudes literarias. También enorme sensibilidad social. Tenía 16 años cuando ingresó a las Juventudes Comunistas. Estudió Derecho en la Universidad de Chile, recibiéndose de abogado en 1945. Para entonces ya había hecho un largo camino como periodista y como dirigente político. Era miembro de la Comisión Política del Comité Central del Partido Comunista.

 

UN REVOLUCIONARIO  EJEMPLAR

Durante el gobierno de González Videla, al iniciar éste la represión contra quienes más habían trabajado para que llegara a La Moneda, Volodia debió actuar en la clandestinidad.

Posteriormente,  después de ser derogada la “Ley Maldita” en agosto de 1958, fue elegido  Diputado por Valparaíso por el período 1961 y 1965. Luego, Senador por Santiago durante dos períodos  consecutivos hasta que los fascistas en 1973 aplastaron la democracia. 

En el exilio durante 15 años trabajó en el programa “Escucha Chile” de Radio Moscú, fue dirigente del Partido y director de la revista Araucaria de Chile.

 

LA LITERATURA, SU AMANTE

Lo dijo muchas veces: "La política era mi mujer legítima y la literatura, mi amante. La amante me rondaba por las noches, pidiéndome cuentas".

Su obra literaria es numerosa y de elevada calidad. Por la que  recibió el Premio Nacional de Literatura 2002. 

En 1935 en colaboración con  Eduardo Anguita publicó la  “Antología de la Poesía Chilena Nueva”, con exclusiones increíbles, como la de Gabriela Mistral, a quien consideraban "conservadora y anticuada”.

En 1943 publicó su ensayo político “El amanecer del capitalismo  y la conquista  de América”.  (Memoria para optar al título de abogado).

En 1952 apareció su  primera novela “Hijo del Salitre”( Basada en la vida de Elías Lafertte).

En 1954 nació la revista Aurora dirigida por Volodia Teitelboim que dentro de sus objetivos estaba "mantener combate sin tregua contra las múltiples falsificaciones inspiradas por el idealismo, filosofía de una sociedad en decadencia.

En 1957 publicó “La semilla en la Arena”, novela que narra la experiencia de los prisioneros de Pisagua.

En 1969 publicó  “Hombre y Hombre”, ensayo dividido en dos partes "Hombre verde", en torno a la literatura rusa, y "Hombre rojo", en torno a la literatura soviética.

En el exilio fue director de la Revista “Araucaria de Chile”.

En 1973 apareció su ensayo  “El Oficio ciudadano”; en 1974,  su novela “La Guerra Interna”; sátira con claro trasfondo político;  y en 1976 su ensayo “La Lucha continúa”.

En septiembre 1978 se publicó en México su antología  “Narradores Chilenos del Exilio”. En 1984 apareció “Neruda, Biografía”. Ese mismo año, fue lanzado en Madrid  su libro “En el país prohibido”.

En 1993 publicó “Huidobro. Siempre en Marcha” y en 1996, “Los dos Borges. Vida, sueños, enigmas”.

En 1993 publicó “Huidobro. Siempre en Marcha” y en 1996, “Los dos Borges. Vida, sueños, enigmas”. Un año después apareció “Un muchacho del Siglo XX”.  Fue el primero de una serie autobiográfica que lleva por título “Antes del Olvido”.

En 1998  apareció “En el país prohibido” y “Notas de un concierto europeo”;  en  2003,  “La vida de una suma de historias”,  el tercer tomo de “Antes del Olvido”.

 

UN MÉRITO NO RECONOCIDO PLENAMENTE

Pero, entre los grandes méritos, aportes y lecciones que nos dejó Volodia Teitelboim, debemos rescatar un hecho que no ha sido considerado como corresponde  y que  tiene enorme importancia para la historia del Partido Comunista de Chile: haber reivindicado la verdadera fecha de su fundación.

Recuerdo que, a mediados de octubre de 1981, estando en el exilio tuve la suerte de asistir  a una magistral charla dictada por Volodia en la ciudad de Francfort del Meno, en la entonces República Federal Alemana. Fue en esa ocasión  en que, por primera vez,  escuché plantear  la necesidad de estudiar el tema de la fecha de la fundación del Partido.  Volodia habló de recuperar 10 años de historia de los comunistas chilenos.

Debo confesar que sus palabras me dejaron  sorprendido e impresionado.

 

UN ARTÍCULO DE 1989

Años más tarde, en su artículo “El Renacimiento de Octubre: reflexiones sobre la revolución”, publicado en  Revista Internación N.º 11, de noviembre de 1989, página 8, Volodia afirmó:

“Yo creo que la Revolución de Octubre marcó el inicio en la cronología del movimiento comunista internacional, pero no significó el comienzo del comienzo. En esto hubo actitudes de amputación de su propia historia en muchos partidos, incluido el nuestro.

“Yo sostengo, por ejemplo, que algún día los comunistas chilenos tendremos que tomar la decisión en el sentido de que nosotros no nacimos como Partido el 2 de enero de 1922, cuando se pidió el ingreso a la  Tercera Internacional, sino diez años antes, en el momento de la fundación del Partido Obrero Socialista. Es ese mismo partido que pasó a llamarse Partido Comunista.

“Esta decisión fue aprobada por unanimidad. A diferencia de lo que ocurrió en otros países, no hubo escisión, no hubo división basada en divergencias ideológicas. Por eso creo que algún día nuestro Partido cambiará la fecha oficial de su fundación, estableciendo que nació en el año 1912, y no en Rancagua, sino en Iquique”.

                        

MOTIVADO POR  VOLODIA

Impresionado y motivado por las palabras de Volodia en Fráncfort, yo había  comenzado por entonces a   investigar y reunir material sobre el tema. ¿A qué conclusiones llegué?

Que hasta 1956 (durante 44 años) se aceptó como fecha fundacional el 4 de junio de 1912. Que en  el XIV  Congreso Nacional, realizado en forma clandestina, en abril de 1956 en Cartagena, se resolvió cambiar la fecha del 4 de junio de 1912, por la del 2 de enero de 1922.

¿Cuáles fueron los argumentos para adoptar esa resolución? Que era falta de modestia aparecer como uno de los 3 o 4 primeros partidos comunistas  del mundo y que éstos eran fruto de la Revolución de Octubre.

Entonces comprendí mejor lo planteado por Volodia  en 1981 y desde ese momento fui un decidido  partidario de su tesis. Escribí en el exilio varios trabajos en ese sentido. Luego estudié la enumeración de los Congresos Nacionales del Partido.

 

SECRETARIO GENERAL

En mayo de 1989, en el llamado “XV” Congreso Nacional del Partido (en realidad fue el XIX),  llevado a cabo bajo las estrictas normas clandestinas, el compañero Volodia Teitelboim fue elegido Secretario General del Partido, cargo que ocupó hasta el XX Congreso efectuado en Santiago del 11 al 15 de agosto de 1994. 

Entre fines de mayo y comienzos de junio de 1990, tuvo lugar en la capital una importante Conferencia Nacional. En su informe, Volodia señaló:

“Tal vez más que nunca hoy tenga sentido retornar a nuestras entrañables raíces históricas y sea la hora de aprobar en principio la proposición de reconocer como fecha de nacimiento de nuestra organización el año 1912, cuando Luis Emilio Recabarren fundó en Iquique el Partido Obrero Socialista, que diez años más tarde, en su IV Congreso celebrado en Rancagua pasó a llamarse Partido Comunista de Chile. Así recuperaríamos un trozo de nuestra historia, desplegando orgullosamente nuestro nombre como Partido Comunista de Chile”. 

Esa Conferencia Nacional aprobó la proposición de Volodia Teitelboim, adoptando la histórica resolución de reivindicar la auténtica fecha fundacional del Partido de los comunistas  chilenos: el 4 de junio de 1912.

 

SOBRE LA EMUNERACIÓN DE LOS CONGRESOS DEL PC DE CHILE

En Julio  de 1994 se desarrolló el Primer Congreso Regional Metropolitano del Partido Comunista. Tanto en la Comisión en que participé, como en la plenaria final, enfaticé en la necesidad de llevar la proposición de que se cambiará la enumeración de los Congresos Nacionales del Partido, que el XVI se convirtiera en el XX. 

Expliqué que en el XIV Congreso de Cartagena, en su Informe Galo González dijo:   “El anterior Congreso es conocido como el Trece Congreso. En tal enumeración se incluían los congresos efectuados por el Partido Obrero Socialista, que en 1922 se transformó en Partido Comunista. Lo más justo es enumerar nuestros congresos a partir de esta última fecha, es decir, a partir del último Congreso del Partido Obrero Socialista y Primer Congreso del Partido Comunista” 

Agregué: Si aceptamos la tesis aprobada por la inmensa mayoría de los componentes del  Congreso de Cartagena,  de enumerar los congresos a partir de la fecha del IV Congreso del POS, que corresponde –de acuerdo con la resolución allí aprobada– al I Congreso del PC, se deben eliminar los tres Congresos del POS. Por tanto, si el anterior es el XIII, el de 1956 le correspondería ser el XI,  pues 14 menos 3 son 11. Sin embargo, en vez de denominar al Congreso de Cartagena como el XI,  lo enumeran con el número X.  Fue un simple error de aritmética. 

Pensé que como nadie objetó mi proposición se daba por aceptada.

Ocurrió que terminada la sesión plenaria me  encontré  con los miembros de la Comisión redactora de las conclusiones del Congreso Regional y me dijeron que no iba mi proposición, porque ello no había quedado claro como una resolución.

Estábamos en esa discusión cuando pasó la compañera Gladys Marín. Le expliqué de lo que se trataba y ella dijo: “Iván tiene razón, la proposición que él hizo fue aprobada. Debe ir  en las resoluciones del Congreso”. 

Del 11 al 15 de agosto de 1994 se celebró el Congreso Nacional que se inició como XVI y finalizó como XX. 

En el Informe, rendido por Volodia Teitelboim, se  dijo: “Después del XV Congreso, tras el análisis de su historia, se resolvió establecer como fecha de fundación de nuestro Partido el 4 de junio de 1912. Tomando en cuenta los Congresos nacionales realizados por el Partido Obrero Socialista, queremos proponer a esta magna reunión que este XVI Congreso pase a llamarse el 20º Congreso del Partido fundado por Recabarren, del Partido Comunista. Corresponde pronunciarse democráticamente sobre   esta proposición”.

Fue aprobada. De este modo, el evento iniciado como el XVI, finalizó como el XX  Congreso del Partido Comunista de Chile.

Nosotros hemos mantenido y mantendremos la correcta enumeración de los Congresos Nacionales del Partido Comunista de Chile, la que fue reivindicada en el Congreso de agosto de 1994, que se inició como el XVI y finalizó como el XX.

 

HASTA SIEMPRE, CAMARADA VOLODIA

El jueves 31 de enero de 2008  dejó de latir el corazón de un muchacho del siglo veinte,  Volodia Teitelboim Volosky.

El sábado de 2 de febrero, luego de haber sido velado en el edificio del ex Congreso Nacional, el féretro con sus restos salió cubierto con una bandera del Partido Comunista y rodeado por cientos de personas. Militantes y simpatizantes comunistas enarbolaron banderas chilenas y de la colectividad para hacer un estrecho pasillo entre el edificio y la calle. 

Camino al Cementerio General, recibió el homenaje de las floristas, quienes lanzaron pétalos al paso del cortejo fúnebre. En las afueras del cementerio se realizó un multitudinario acto. Uno de los oradores fue  su hija del, Marina Teitelboim, quien viajó desde Polonia. Dijo 'vine a despedir a un padre que no es sólo mío'. 'Con tu fuerte valentía, esperaste a que llegara (desde Polonia). Aquí estoy papá para rendirte un homenaje de hija'.

Marina Teitelboim  agradeció las numerosas señales de apoyo de miles de chilenos y representantes del mundo político y cultural.

Al acto asistieron delegaciones de los gobiernos de Venezuela y Cuba.

La ceremonia finalizó con La Internacional interpretada por el coro del Teatro Municipal de Santiago. 

Volodia Teitelboim fue sepultado en forma privada.

 

 

 


lunes, 30 de enero de 2023

CUBA EXPULSADA DE LA OEA

 


 

                                                        Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                                        Centro de Extensión e Investigación

                                                        Luis Emilio Recabarren, CEILER

 

 


 

En la madrugada del  sábado 15 de abril de 1961, aviones estadounidenses tripulados por “gusanos” instruidos  por los imperialistas, camuflados con la insignia de las  Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) atacaron el aeropuerto de Ciudad Libertad, la base aérea de San Antonio de los Baños y el aeropuerto de Santiago de Cuba, hoy aeropuerto Internacional Antonio Maceo.

 Ocho aviones B-26 partieron desde Puerto Cabezas, Nicaragua, con el objetivo de destruir, en tierra, la modesta aviación cubana y para asegurar la impunidad de otras incursiones enemigas por vía terrestre.

El domingo 16 de abril de 1961 se realizaron las honras fúnebres a los caídos en los ataques aéreos en el Cementerio Colón de La Habana. Frente a él tuvo un lugar un masivo acto en el que habló Fidel Castro, presidente de la República de Cuba.

En esa ocasión Fidel Castro respondió a la agresión imperialista proclamando, por primera vez, el carácter socialista de la Revolución Cubana.

 

 

 


Estados Unidos con sus presiones y chantajes, logró que el 31 de enero de 1962, hace hoy 61 años, Cuba fuera expulsada de la Organización de Estados Americanos durante su Octava Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores, que tuvo por escenario el balneario uruguayo de Punta del Este.

En esta  reunión,  iniciada el 22 de enero, se aprobaron en total 9 resoluciones, 4 de las cuales estarían directamente relacionadas con Cuba y en particular la cuarta titulada: “Exclusión del actual gobierno de Cuba de su participación en el Sistema Interamericano”, que era la máxima aspiración de Estados Unidos para deslegitimar en lo político a la Revolución Cubana.

En esta reunión Cuba fue representada por el entonces Presidente de la República, Doctor Osvaldo Dorticós Torrado, quien en los debates de las resoluciones dejó bien claro la posición de la Isla expresando: “Si lo que se pretende es que Cuba se someta a las determinaciones de un país poderoso (…), en una palabra, se intenta esclavizar a un país que ha conquistado su libertad total después de siglo y medio de sacrificios, sépase de una vez: Cuba no capitulará”.

 



Cuba fue expulsada ese 31 de enero de 1962 de la OEA, pero no unánimemente como pretendía el imperialismo, sino que 14 países votaron a favor de la medida, uno en contra, Cuba, y seis abstenciones: Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Ecuador y Méjico, aunque después, excepto la nación azteca los demás se plegaron a los designios de Washington, rompiendo sus relaciones con la Isla.

Cuba se retiró con la frente bien en alto de aquella reunión de Punta del Este, donde quedaron latentes las palabras de su Presidente Osvaldo Dorticós: “Podremos no estar en la OEA, pero Cuba socialista estará en América, (…) pero el gobierno imperialista de los Estados Unidos seguirá contando a 90 millas de sus costas, con una Cuba revolucionaria y socialista”

La delegación cubana a la Octava Reunión de Consulta de la OEA, celebrada en Punta del Este, Uruguay, regresó victoriosa a la Patria a principios de febrero de 1962, donde el Presidente Dorticós fue aclamado por el pueblo que le dio la bienvenida.

En respuesta a ese acuerdo de la OEA, el 4 de febrero de 1962 más de un millón de cubanos reunidos en la Plaza de la Revolución José Martí, aprobaron la Segunda Declaración de La Habana, un documento político que ha regido los destinos de Cuba y América Latina desde hace 57 años.

61 años después de la expulsión de Cuba de la Organización de Estados Americanos puede decirse que la OEA, bajo el tutelaje de Estados Unidos, es ya un organismo anacrónico que va camino del lugar que merece: el basurero de la historia.

 









Ay si la tranquera hablara.

 


Comentario radial y escrito.

 

 

 


 

Últimamente se me asoman en demasía las hebras de mi vida; vienen amarradas en nudo de pescador doble. 

Las imágenes, los aromas y las tesuras se vienen como en bandadas de golondrinas. 

Escucho los acordes “grotesco trovero”. 

Y en un entremedio de voces …“Pero hasta la samba se vuelve triste cuando se dice adiós.” 

Es el coro de la Universidad Técnica del Estado en La Serena. 

Mi paisito largo y flaco me tiene en corazón de colibrí. 

Duermo poco y desordenado; en vela revivo miles de cantos y reuniones 

“Como Fidel que brilla en las montañas, cinco franjas y una estrella”. 

Hoy, camino poco y segmentado, me olvido de muelas falsas y útiles que visten y adornar mis agradecidas encías. 

Cachuo estoy, me tinca que estoy viejo. 

Recorro en adobe mis caminos; me traen dulzuras, represas, odios y despertares; me traen nombres y vuelvo… 

Vuelvo en no sé qué; tengo almanaques de tragedias, tengo acordes de alegrías y de esperanzas, de sueños. 

Estoy dejando los anhelos y me amarro a una pala, a un martillo, a una papa, a un grano de maíz. 

Me duele en antiguo la paila e huevo en El Premier”, veo las chirimoyas y juncos en mi casa de estudio, admiro y respeto, agradezco a esa población hermosa y femenina de silabarios que la habitaba. 

Escucho en segunda el canto del mar. Y en las Cuatro Esquina susurro un nombre. 

¡Puta que estoy viejo! 

Tengo ataques subjetivos diría un politólogo. 

Me miro al espejo y me beso, me abrazo. 

El tiempo ha pasado volando, me veo colchón al hombro, con esperanzas de mariposa a internarme al Seminario. 

Hoy, me puedo agachar, me puedo arrodillar, pero…volver a pararme no puedo. 

Me pesan los calendarios, las hormigas y sus sicarios, la incertidumbre me están pasando la cuenta. 

El predio en el que he vivido, lo veo hoy de otra manera y me pone preguntón; me agradezco ser comunista por entender qué se hace necesario apretar los glúteos al sentir en ráfagas la dialéctica de la vida. 

Entre más calendarios más dignidad necesita la vida, el vivir, la existencia. 

“Me rio porque me rio y esta risa de mi boca es como el agua del rio que corre entre peñas locas”. 

El autor de estos versos y tonos se llama Osmán Pérez Freire. 

Nieto del militar Ramon Freire, capitán de ejército, general después y por un tiempo corto, a los 40 años, presidente provisional de Chile. 

Junto a Bernardo O’Higgins, en 1814 en Rancagua fueron vencidos por el ejército monárquico español. 

Nueve años después, en la batalla de Podeto y Bellavista vence al Ejército Invasor Español, expulsándolos para siempre de Chiloé. 

Los padres de Osmán Pérez Freire eran liberales, (lo mas de izquierda en esos tiempos) partidarios del presidente Manuel Balmaceda. 

La situación política, de control y poder era parecida a toda la historia de vida republicana de nuestro pais. 

En el parlamento, los conservadores en mayoría, ponía en tela de juicio el hacer de la política del liberal Balmaceda. 

Fueron tantos los impedimentos del Congreso, que el presidente, hizo lo mismo que Pedro Castillo del Perú. 

Mandato cerrar el Congreso. 

Este accionar coloco a Chile por un tubo hacia una maldita guerra civil. 

Mas de 20 mil muertos, una chorrera arrancando pa la Argentina y un presidente suicidado. 

Entre los arrancados iba la Familia Pérez Freire. 

La pretendida tranca en el Congreso Peruano, congreso inmoral y rastrero, corrupto, tiene al presidente Castillo en prisión y a mi amado pueblo peruano arrinconados por balas y bayonetas. 

Funeral de pobrerío. 

Ustedes dirán que tiene que ver el sentirme y ser viejo comunista, con una pena y un cariño o con La Tranquera de Pérez Freire. 

Pá mi harto. 

Me gusta hilvanar. 

Los padres de este musico, lo dije antes, arrancaron de Chile por ser partidarios de Balmaceda. Un presidente para la época, progresista, que pretendía asegurar la economía del país. 

Nada de comunismo, ni de igualdad, menos de la clase. 

Querían tener una patria con harta plata. 

Y “una pena y un cariño” que tienen que ver con la olla común en la trinchera. 

La culpa la tiene mi abuja. 

“ Ay si la tranquera hablara, las cosas que contaría”, la cantó Gloria Simonetti en 1985…pero, en 1982 en el Festival de Viña del Mar, en plena dictadura fascista cívico militar, Gloria Simonetti hizo volar el “Ojalá” de Silvio Rodríguez:

“Ojalá que el deseo se vaya atrás de ti

A tu viejo gobierno de difuntos y flores”


Tengo que zurcir así, somos parte de un todo. 

Cada hacer del humanismo es un silabario, una semilla. 

El gobierno nuestro de hoy camina con dignidad e integridad por todas las Alamedas del país. 

Esta juventud de hoy, son hijos de los cabros que salieron a las calles a plantarles cara a la ignominia parda, son nuestra historia…Las movilizaciones sociales, de sindicatos y de estudiantes eran siembras, son, almacigo de esperanza y rebelión. 

En 1983 se asoma el Frente Patriótico Manuel Rodríguez, arropados por otros movimientos, puros novatos haciendo patria…Por otra vereda, criminales haciendo seminarios de pilastras y de proxenetas. 

Sientan los aromas, la autenticidad de este gobierno de hoy, es una victoria de pueblo. 

Pero Malinche. Se agarran como garrapata y aparecen actualizados los contrarios, los sabedores del hacer política, el Senador Jaime Quintana Leal, por ejemplo, del PPD declara que “la política exterior chilena está en manos de grupos novatos, irresponsables. 

Válgame que dolor. 

Él está sentado donde esta, gracias al hacer de 50 años de novato lidiando. 

Vale la pena entender lo que digo: 

Las dos ocurrencias, de Balmaceda y Pedro Castillo, permitieron y permiten funerales para el pueblo. 

Y no quiere decir que los parlamentos sean los notarios, los abogados, los jueces, las encomiendas del riquerio. 

No, quiere decir, que no se ha podido explicarle al pueblo, lo que significa un voto. Y el pueblo no ha querido, ni ha podido escuchar. 

Como decir que ganar una elección es poder dignificar una república, una democracia, una soberanía. 

Un poder que podría levantar torres y muros, para gritar a los cuatro vientos…”PARA QUE NUNCA MAS EN CHILE”. 

Y para adornar más el pelambrerio en los medios de comunicación, asoman e invitan a Ximena Rincón, senadora de la república a tirarle parafina a los audios que se arrancaron y catalogaban de cierta manera al representante de la hermana argentina. 

Se le olvido a la Senadora Rincón el micrófono abierto poniéndola gozosa en el coliseo imaginándose como apaleaban pan y cuaderno. 

Yo amo a mi Argentina. 

Me ha salvado la vida 3 veces, pero que hay algunos argentinos cachiporras incitando al improperio, los hay. 

Y ese improperio es una credencial que la llevamos en la piel. 

Y por ultima, que tiene que ver Argentina en el intento de exterminio marítimo con el proyecto minero Dominga. 

Que, dicho sea de paso, un saludo a la comisión que rechazo el proyecto, favoreciendo así, la actitud responsable y humanista del gobierno frente al cambio climático. 

Por supuesto el riquerio nacional, y los estudiantes de ética, como Delano, Julio Ponce Lerou, lloran al hombro de Sebastián Piñera. 

Y el alcalde de la Higuera, lugar de la matanza de pingüinos osa decir: 

“Todos queremos proteger el medio ambiente, pero también hay que tener límites.” 

¿Entenderá este edil de derecha el crimen terminal que comete la avaricia del hombre en este planeta tierra…? 

Esta como Bolsonaro en la Amazonia. 

“Un árbol menos no le hace mal a nadie.” 

En las parlamentarias de 1973, la derecha no pudo reunir los votos necesarios para poder acusar constitucionalmente a Salvador Allende. 

Por decirlo a la pasada, el partido comunista, en esa contienda obtuvo un porcentaje tan alto de votos que corroboraba que el pueblo, su clase, a pesar de todos los embargos, de la precariedad, de los conflictos internos de la clase política, de los obstáculos y acaparamientos, de la huelga infame de camioneros, el pueblo comenzaba a entender y a empujar al gobierno de la Unidad popular. 

Seis meses después, en septiembre, mi paisito fue negado en dolor y sangre por el yatagán fascista mandatado por el riquerio nacional, vasallos de la Casa Blanca. 

Si no es por las urnas, por ataúdes será. 

Tengo un hilvanar de nudos que me almorrana. 

Leia que cierta gente no estaba contenta con el Festival de Olmué…Dicen que ha perdido su autenticidad de huaso. 

Mire usted, no homenajear a un eximio, a Benjamín Mackenna de los Huasos Quincheros. 

Las ideas transforman al individuo, también pueden vestirlos a la medida. A Benjamín Mackenna lo vistió el fascismo, los gritos de horror y espanto de Víctor Jara no le dijeron nunca nada. 

Y para el colmo del infortunio, el público del Festival de huaso de Olmué los deleito y los hizo reír un comunista.


Alejandro Fischer Alquinta 

Estocolmo 20230129


domingo, 29 de enero de 2023

EN EL 77 ANIVERSARIO DE LA MASACRE DE LA PLAZA BULNES

 



                                                        Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                                         Centro de Extensión e Investigación

                                                         Luis Emilio Recabarren, CEILER

 

 

 


Tarde de verano del 28 de enero de 1946. El acto era multitudinario.  Veinte mil personas habían concurrido al llamado de la CTCH.  La gente, a medida que iba llegando, tendía a ubicarse – como era usual en los mítines que allí se efectuaban- alrededor del monumento del general Bulnes (donde hoy se encuentra el de O’Higgins), pero los carabineros la empujaban hacia atrás de la estatua ecuestre. Lo hacían con violencia, creando un clima de irritación, de exasperación, de choque.

 

EL MOTIVO DE LA CONVOCATORIA DE LA CTCH

A comienzos de enero de 1946,  el Presidente de la República Juan Antonio Ríos, gravemente enfermo, había sido reemplazado por el radical reaccionario Alfredo Duhualde,  que gobernaba en calidad de Vicepresidente.

En el norte, los sindicatos de las oficinas salitreras Humberstone y Mapocho habían declarado la huelga en protesta por la descarada alza de los productos de primera necesidad, decretada  arbitrariamente por las empresas de esos yacimientos.

El Gobierno se puso al lado de los patrones. Eliminó la personalidad jurídica de ambos sindicatos, dejando a los trabajadores en la indefensión. Entonces, la CTCH convocó el mitin solidario. 


PROVOCACIÓN POLICIAL

Iris Figueroa, a la época Encargada Femenina del Comité Regional de Santiago del Partido Comunista, explica:

“El permiso que había extendido el Intendente de Santiago, decía que el mitin, nosotros lo teníamos que hacer detrás del monumento a Bulnes, pero había demasiada gente, y empezaron a pechar porque la concentración se hiciera frente al monumento, con vista a la Alameda...  de repente un oficial da la orden de apaleo.  En aquel entonces era parlamentario del Partido el compañero Andrés Escobar y a pesar de que él se había identificado y le explicaba que más daba que la concentración se hiciera delante o detrás del caballo... A pesar de eso, el oficial de carabineros procedió y le rompió la cabeza de un sablazo.  Cuando ya la gente vio que le salía un chorrito de sangre de la cabeza, cuando vio correr sangre por la ropa del compañero, la gente tuvo una reacción... pero inmediata y se empezó a enfrentar con los carabineros.  Ahí con los listones, con los motes, con lo que llevaba en sus manos”.

 

ASESINADA UNA JOVEN RUBIA

Todo indicaba que había  una premeditada provocación en marcha.

Especialmente brutal fue el comportamiento de las fuerzas represivas en el sector frente al entonces Ministerio de Defensa.  Allí estaban, entre muchos otros, los del sindicato Recalcine.  Indignada ante la actuación de carabineros, una muchacha rubia se acercó a un oficial y protestó airadamente.  El policía respondió con un golpe que la derribó al suelo.  La joven se puso de pie y le lanzó a la cara un puñado de pasto que ha recogido en su caída.  Este sacó su revolver y le disparó en la cabeza, hiriéndole de muerte.  Ese balazo fue el comienzo. 


CON BALAS DE GUERRA

“En un momento determinado – relata Américo Zorrilla testigo ocular de los hechos – yo presencié desde muy cerca cuando un oficial dio una orden, los carabineros pusieron una rodilla en tierra – toda una hilera de carabineros – y apuntando hacia la masa de gente, empezaron a disparar.  Fueron varias descargas, por orden del oficial.  Quedaron muchas personas heridas, fueron seis los muertos.  Inmediatamente después de eso, los carabineros se replegaron, desaparecieron y dejaron la plaza llena de gente botada en el suelo, algunos heridos, otros muertos.  Había sangre por todas partes.  La gente que en el primer momento había arrancado, volvió ahora.  Algunos hacían parar a gritos los autos y camiones que pasaban, para llevar los heridos a la Asistencia Pública”.

 

                     


 Ramona Parra, asesinada, en la Asistencia Pública

 

 



 


 

EL PUEBLO SE ADUEÑA DE LAS CALLES

Superado el terror y la sorpresa inicial, los trabajadores reaccionaron con indignación.  Muchos de ellos tiñeron con la sangre derramada sus pañuelos, camisas, periódicos y los enarbolan como banderas.  Marcharon por las calles céntricas de Santiago, en donde no se veía un solo carabinero.  Todos estaban escondidos en sus cuarteles.  Las masas eran dueñas de las vías de la capital.  A pesar de tanto odio acumulado, actuaron de manera muy disciplinada.

“Recuerdo haber caminado – narra Américo Zorrilla – entre los cuerpos que estaban tendidos en el pavimento.  Podría indicar en la Plaza Bulnes, el sitio en que estaba Ramona Parra (la rubia muchacha de Recalcine.) muerta.  Estaba en la vereda, pálida.  Era la palidez de la muerte.  En su sien había un círculo, una perforación nítida, sin que saliera sangre de ella.  Al lado, de pie estaba su hermana y uno o dos jóvenes que la miraban”.

 

UNA JOVEN OBRERA

Ramona Parra, Encargada Femenina del Comité Regional Santiago de las Juventudes Comunistas, desde 1945 trabajaba en el Laboratorio Recalcine, donde envasaba medicamentos.

A la pregunta de sí la conocía, responde Américo Zorrilla: 

“Sí.  Se le veía mucho en el local del Partido o en las oficinas del diario, a menudo con su hermana.  Una morena, la otra blanca.  Llamaban la atención.

“Ramona era una muchacha delgada, pálida, de rostro muy agradable.  Siempre con una sonrisa a flor de labios.  Hay una fotografía que se ha conservado para la historia, en que ella va detenida entre dos carabineros, a raíz de alguna de las manifestaciones tan frecuentes en aquellos días.  Ella va sonriendo, con su gesto habitual”. 

 

PABLO NERUDA CANTA A LA JOVEN COMUNISTA

 “Ramona Parra, joven

estrella iluminada,

Ramona Parra, frágil heroína.

Ramona Parra, flor ensangrentada,

Amiga nuestra, corazón valiente,

Niña ejemplar, guerrillera dorada:

Juramos en tu tumba continuar la lucha

Para que así florezca tu sangre derramada”.

 

 

LOS MUERTOS EN LA PLAZA

El poeta evoca a los caídos el 28 de enero de 1946:

Manuel Antonio López

Lisboa Calderón

Alejandro Gutiérrez

César Tapia

Filomeno Chávez

Ramona Parra

 

Y dice:

“La lluvia empapará las piedras de la plaza,

pero no apagará vuestros nombres de fuego.

Mil noches caerán con sus alas oscuras,

sin destruir el día que esperan estos

muertos”.

 (Del poema “Los muertos en la Plaza”, Canto General)

 

 

 

Elías Lafertte, Presidente del Partido Comunista de Chile, 
rinde homenaje a los caídos en la Plaza Bulnes

 


LAS BRP

En homenaje a su heroica militante, las Juventudes Comunistas dieron su nombre, en febrero de 1966, a las Brigadas de Propaganda Ramona Parra, las BRP.

El acuerdo fue adoptado en el V Congreso Nacional de las JJCC, realizado en Santiago entre el 8 y el 13 de febrero de 1966.  Pero cuando iniciaron su actividad práctica fue en la gran marcha de la juventud chilena en solidaridad con Vietnam efectuada entre Valparaíso y la capital en 1967.

 

 

 

Carné de identidad de Ramona Parra