Este blog tiene por finalidad dar a conocer la recopilación de algunos materiales como boletines, revistas, diarios, documentos, etc., que contribuirán en parte a mantener viva la memoria histórica del pueblo chileno, como asimismo la de algunos paises que conjuntamente a sus organizaciones han contribuido a la lucha por la liberación de la humanidad y la lucha por la conquista del socialismo y comunismo a nivel mundial. (BLOG DEDICADO A LOS 100 AÑOS DEL PARTIDO COMUNISTA DE CHILE.1912-2012)
sábado, 31 de marzo de 2018
170 AÑOS DEL MANIFIESTO DEL PARTIDO COMUNISTA
Querida compañera, querido
compañero:
El jueves 22 de marzo de
2018 tuvo lugar el Panel "170 años del Manifiesto del Partido
Comunista", organizado por el Centro de Extensión e Investigación Luis
Emilio Recabarren, CEILER.
Entregamos una de las tres
exposiciones.
Un abrazo,
Iván Ljubetic Vargas
170 AÑOS
DEL MANIFIESTO DEL PARTIDO COMUNISTA
A
partir de los años 20 del siglo XIX, Chile experimentó importantes cambios económico-sociales.
Luego
de haber roto la dependencia al rey español, nuestro país pudo vender cobre y
plata a Inglaterra. Con los recursos recibidos, se ampliaron los minerales
hasta entonces trabajados en forma artesanal, se mejoraron y se construyeron
caminos, puentes, puertos; se empleó el ferrocarril. Surgieron formas
capitalistas de producción. Aparecieron
dos clases nuevas: la burguesía, formada por los dueños de los medios de
producción, y el proletariado, los desposeídos de esos medios, que para vivir
debían vender su fuerza de trabajo.
Efectivamente,
en esas faenas, que funcionaban según normas capitalistas de producción, laboró un
trabajador de nuevo tipo, el
proletario. Así surgió la clase obrera
chilena.
Sus
primeros destacamentos nacieron en la región de Atacama.
CHAÑARCILLO
En 1832 inició su
funcionamiento el mineral de plata de Chañarcillo, el más importante del país.
Estaba ubicado precisamente en la región de Atacama, cerca de la ciudad de Copiapó. Las condiciones
de vida y trabajo de sus operarios eran terribles.
El escritor y periodista, José Joaquín Vallejo (que usó el
seudónimo de Jotabeche, tomado de las
iniciales de un vecino de Copiapó llamado Juan Bautista Chegneau), dejó un dramático testimonio, publicado
por El Mercurio de Valparaíso, en 1842,
sobre las labores en el mineral de plata de Chañarcillo. Escribió:
“A la vista de un
hombre semidesnudo que aparece en la bocamina, cargando a la espalda 8, 10 y 12
arrobas (una arroba equivale a 11,5 kilos), después de subir con tan enorme
peso por aquella larga sucesión de galerías, de piques y frontones; al oír el
alarido penoso que lanza cuando llega a respirar el aire libre, nos figuramos
que el minero pertenece a una raza más maldita que la del hombre, nos parece un
habitante que sale de otro mundo menos feliz que el nuestro, y que el suspiro
tan profundo que arroja es una reconvención amarga dirigida al cielo por
haberlo excluido de la especie humana”.
A lo narrado por Vallejo, se debe agregar las largas jornadas de
trabajo, los bajos salarios, la total carencia de seguridad laboral, pésima
alimentación, viviendas insalubres e incluso castigos físicos que, a veces,
llegaban hasta la muerte.
La primera reacción del trabajador ante la cruel
explotación fue individual. En las minas de plata llevaba a cabo la “cangalla”,
el robo del mineral, empleando las formas más audaces, incluso escondiendo
trozos de metal en el ano.
Pero pronto surgieron las protestas colectivas. La
primera huelga obrera tuvo lugar en 1834 en el mineral de plata de Chañarcillo,
cerca de Copiapó, que había iniciado sus actividades sólo en 1832. Se produjo
tres años después del primer levantamiento obrero del mundo, ocurrido en Lyon,
Francia, en 1831.
El investigador Roberto Hernández en su libro “Juan
Godoy o el Descubrimiento de Chañarcillo”, publicado en 1932, escribió:
“El alzamiento
de peones de 1834 se repitió más tarde, causando con ello una enorme
intranquilidad en Copiapó mismo, en donde la población llamada de La Placilla
era como una amenaza constante”.
Hernán Ramírez Necochea en un artículo publicado por “El
Siglo” con fecha 30 de abril de 1954 señaló:
“En 1846 un periódico de Copiapó informaba lo que sigue:
...Algunas asonadas, en varias épocas consternaron a los habitantes pacíficos
del mineral (Chañarcillo) por las amenazas de destruirlo todo y por el saqueo
de algunas tiendas y faenas... Los mineros (los empresarios) claman por una
protección, por un arreglo y por medidas que aseguren sus propiedades, pongan
en deber a los trabajadores, enfrenten a los díscolos y persigan la ociosidad”.
Lo de
Chañarcillo fue una acción espontánea, una elemental reacción a la super explotación.
Catorce años después de la
huelga de Chañarcillo, el 24 de febrero de 1848, apareció la primera edición
del Manifiesto del Partido Comunista.
EL ORIGEN DEL
“MANIFIESTO”
Exiliados
alemanes que vivían en París fundaron en 1834 la Liga de los Proscritos, una
sociedad secreta democrático-republicana.
En 1836, sus elementos más avanzados dieron
vida a la Liga de los Justos.
A mediados de 1847 esta asociación
realizó en Londres su Primer Congreso, al que asistió Federico Engels.
En este evento efectuado en la más
estricta clandestinidad, se produjo el cambio de su nombre por el de Liga de
los Comunistas.
Entre fines de noviembre y comienzos de
diciembre de 1847, se celebró, también en Londres y clandestinamente, el
Segundo Congreso de la Liga de los Comunistas. Concurrieron Carlos Marx y
Federico Engels, que expusieron y defendieron la teoría que habían creado.
Estos nuevos principios fueron aprobados por unanimidad. El viejo lema de
“Todos los hombres son hermanos”, fue reemplazado por el de “Proletarios de
todos los países, uníos”.
El Segundo Congreso de la Liga encargó a
Marx y Engels la redacción de un programa.
Tal fue el origen del Manifiesto del
Partido Comunista.
El 24 de febrero de 1848 se publicó en
Londres, en idioma alemán, la primera edición del Manifiesto del Partido
Comunista, redactado por Marx y Engels.
ALGO SOBRE EL
MANIFIESTO DEL PARTIDO COMUNISTA.
Es un
texto breve. En su primera edición tenía sólo 23 páginas.
Esta
obra –pequeño libro que vale por tomos
enteros, al decir de Lenin- consta de una Introducción y cuatro partes.
Se
inicia con la famosa frase: “Un fantasma recorre Europa: el fantasma del
comunismo”.
Agregando: “Ya es hora que los comunistas
expongan a la faz del mundo entero sus conceptos, sus fines y sus tendencias,
que opongan a la leyenda del fantasma del comunismo un manifiesto del propio
partido”
La
primera parte tiene por título “Burgueses y Proletarios”. Y allí se expone de
entrada su tesis central: “La historia de todas las sociedades hasta nuestros días, ha sido
la historia de la lucha de clases”.
En
esa parte Marx y Engels escribieron
(atención, pues parece que no fue
escrito hace ya 170 años) “Mediante
la explotación del mercado mundial, la
burguesía dio un carácter cosmopolita a la producción y al consumo de todos los
países... Ha quitado a la industria su base nacional. Las antiguas industrias
nacionales han sido destruidas y están
destruyéndose continuamente... En lugar del antiguo aislamiento de las regiones
y naciones que se bastaban a sí mismas, se establece un intercambio
universal... Los bajos precios de sus mercancías constituyen la artillería
pesada que derrumba todas las murallas de China...”
La
segunda parte: “Proletarios y Comunistas”, aplican a la práctica los enunciados
de la Primera Parte.
La
Tercera Parte: “Literatura Socialista y Comunista”, se realiza la crítica a los
diferentes corrientes socialistas y comunistas existentes en esa época
(mediados del siglo XIX).
La
Cuarta Parte: “Actitud de los comunistas respecto de los diferentes partidos de
oposición”, finaliza proclamando:
”Los comunistas consideran indigno ocultar sus ideas y propósitos. Proclaman abiertamente que sus objetivos sólo pueden ser alcanzados derrocando por la violencia todo el orden social existente. Las clases dominantes pueden temblar ante una Revolución Comunista. Los Proletarios no tienen nada que perder en ella más que sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo que ganar. ¡Proletarios de todos los países, uníos!”
VOLVAMOS A
CHILE
Desde
su nacimiento hasta comienzos del siglo XX, el proletariado chileno alcanzaba
la categoría que Marx llamó “una clase en sí”. O sea, existía
objetivamente, pero carecía de conciencia de clase y de organizaciones propias
en lo sindical y en lo político.
Tenía,
eso sí, capacidad de lucha por sus reivindicaciones económico-sociales, como lo
demostró Chañarcillo y otras numerosas huelgas llevadas a cabo en el siglo XIX.
Al
publicarse en Londres el Manifiesto
Comunista, Chile tenía una población de algo más de un millón de habitantes, de
los cuales 30 mil eran obreros, estando
la mitad de ellos ocupados en la minería.
EL MARXISMO
LLEGA A NUESTRO PAIS.
Después
de la Guerra del Salitre (1879 – 1883) la clase obrera chilena experimentó un
notable desarrollo. Ello, entre otras razones, por la incorporación al
proletariado nacional de los pampinos que laboraban la industria del salitre,
que hasta ese conflicto pertenecía al Perú (Tarapacá) y a Bolivia (Antofagasta).
Hacia 1883 eran unos 4.500.
Se
inició el período del conocimiento del marxismo en Chile, que
se prolongó hasta el primer decenio del siglo XX.
Surgieron
núcleos de obreros que conocían el movimiento sindical europeo, sus luchas, las
ideas que sustentaban. Por entonces era frecuente, que se mencionara a Marx y
se citaran párrafos del Manifiesto Comunista.
Veamos
algunos ejemplos.
El periódico “El Pueblo”, de Valparaíso,
en su edición del 31 de agosto de 1892 publicó un Manifiesto de la Sociedad
Marítima de Socorros Mutuos, donde se sostenía:
”No olvidéis las palabras del gran socialista Karl Marx: la gente de trabajo de todas partes del mundo debe ser hermana. Ellas deben hacer causa común con los demás. Ellas tienen un mundo que ganar y sólo las cadenas que perder”.
”No olvidéis las palabras del gran socialista Karl Marx: la gente de trabajo de todas partes del mundo debe ser hermana. Ellas deben hacer causa común con los demás. Ellas tienen un mundo que ganar y sólo las cadenas que perder”.
En febrero de 1896 se fundó en Santiago
el Centro Social Obrero, que en noviembre de ese año comenzó a editar su órgano
oficial “El Grito del Pueblo”, que difunde los principios del socialismo
científico. Con fecha 6 de diciembre proclama: “Somos socialistas. ¡Ya no
somos un pueblo ignorante!
El 29 de diciembre de 1896 apareció en “El
Grito del Pueblo” el artículo “El Socialismo en Chile”. Lo firmaba alguien con
el seudónimo Karl Marx, que sostenía:
“Las ideas para esparcirse no respetan nada... Atraviesan soberbias
cordilleras como los Andes, para sentar sus reales en el indolente Chile y
convertir en hijos del pueblo, acostumbrados a besar la mano del verdugo que
los azota, en hombres libres que luchan sin miedo por emanciparse del yugo
burgués”.
Hacia 1896, uno de los dirigentes de la Agrupación Fraternal Obrera, llamado
Luis Olea se declaró marxista. En una carta publicada en “El Proletario”, de
Santiago, el 20 de septiembre de 1897 afirmó:
”Diviso en esos temas al gladiador temerario que desafiando las fieras humanas esgrime con la seguridad del éxito las armas de la razón templadas en el yunque de las teorías de Marx... Tiemble ya la burguesía por su porvenir, que el día fatal de la vindicación llegará al fin, y entre los escombros de todo un régimen se alzará triunfante el sol del socialismo”.
”Diviso en esos temas al gladiador temerario que desafiando las fieras humanas esgrime con la seguridad del éxito las armas de la razón templadas en el yunque de las teorías de Marx... Tiemble ya la burguesía por su porvenir, que el día fatal de la vindicación llegará al fin, y entre los escombros de todo un régimen se alzará triunfante el sol del socialismo”.
“El Proletario” en su número del 17 de octubre
de 1897 proclamaba:
”La lucha de
clases, desconocida hasta ayer en Chile, se empeñará desde hoy, frente a frente
proletarios y burgueses, artistas y profanos, reformadores y reaccionarios,
víctimas y verdugos”.
En
Punta Arenas se fundó en 1897 la Unión Obrera. En su periódico “El Obrero”
proclamó con fecha 2 de enero de 1898:
“La lucha de
clases se desarrolla donde quiera que
existan burgueses y proletarios”.
En
febrero de 1898 se creó en Santiago el Partido Obrero Francisco Bilbao, que el
26 de ese mes afirmó en su periódico “El Trabajo”:
“El obrero no
debe esperar nada de tantos falsos apóstoles. Su emancipación social, política
y económica debe ser obra del obrero mismo y esto lo conseguirá mediante la
unión que hace la fuerza, formando el partido de los explotados”.
En
1907 escribió Luis Emilio Recabarren:
“La
emancipación de los trabajadores debe ser obra de los trabajadores mismos, ha
dicho Karl Marx hace 60 años en Alemania y esta frase inmortal es el faro que
nos guía y vivirá unida con otra del mismo autor: ¡Proletarios de todos los
países, uníos!”.
Comenzaba
a madurar el factor subjetivo que posibilitaría la fundación del Partido Comunista de Chile, el 4 de junio de
1912, y la transformación de la clase
obrera chilena en una clase para sí.
Y en este proceso el Manifiesto
del Partido Comunista de Marx y Engels tuvo gran importancia.
(Exposición del historiador
Iván Ljubetic Vargas, leída por Carlota Espina y el autor en el Panel del
CEILER “170 años del Manifiesto del Partido Comunista)
En el 101
aniversario de su nacimiento:
HERNAN RAMIREZ
NECOCHEA
Iván Ljubetic Vargas, historiador del
Centro de Extensión e Investigación
Luis
Emilio Recabarren, CEILER
.
Hernán Ramírez Necochea nació en
Santiago el 29 de marzo de 1917. En
1934 ingresó al Partido Comunista de
Chile, en el que militó hasta su muerte y, en ese mismo año, comenzó a estudiar en el Instituto
Pedagógico. En 1938 recibió el título de
Licenciado en Filosofía con mención en Historia.
Realizó estudios en Estados Unidos,
Inglaterra, España, Unión Soviética y Checoslovaquia.
EN EL INSTITUTO PEDAGÓGICO
Ejerció como profesor de historia en liceos de
Santiago. En 1945 comenzó a trabajar
en el Instituto Pedagógico, como
ayudante de cátedra del profesor Juan Gómez Millas.
En 1952,
fue profesor fundador de la cátedra de Historia Económica y Social.
“LA GUERRA CIVIL DE 1891”
Su primer libro, titulado “La Guerra Civil de 1891”, tiene un extenso prólogo del historiador Guillermo Feliú Cruz. En él,
refiriéndose a Hernán Ramírez, relató: “Me tocó conocerlo y apreciarlo en el Departamento de Historia en la época en
que fue mi alumno. Era casi un niño. Dentro de una seriedad desconcertante,
disciplinado, estudioso, fino y delicado en su trato, Hernán Ramírez poseía un
temperamento ardiente, apasionado y reflexivo. Un profundo don de observación
le distinguía de sus compañeros”.
“En Hernán Ramírez –continuaba don Guillermo
Feliú Cruz- me ha parecido ver, por la claridad del pensamiento y la disciplina
de su espíritu, un artista embebido en los estudios históricos. El don de la
armonía me parece su más acentuada característica intelectual”.
Finalizaba
su prólogo afirmando: “Lo que yo
no había conocido y nunca consideré un factor decisivo en las causas de la
Revolución de 1891, era la acción de esta aristocracia, mejor dicho ahora con
precisión, de una plutocracia al servicio de intereses que no fueran los
permanentes del país... Esta es una conclusión desafortunada a la que he llegado después de la lectura de este
libro.”
Ya en esa, su primera obra, Hernán Ramírez
Necochea, demostró sus notables
cualidades: un historiador serio, documentado y muy riguroso que, utilizando el
marxismo, desentrañó las claves para explicar muchos momentos de la historia de
Chile.
“HISTORIA DEL MOVIMIENTO OBRERO”
En 1956,
fue publicado su libro “Historia del Movimiento Obrero en Chile.
Antecedentes- Siglo XIX”.
En la introducción de esta notable obra,
escribió Hernán Ramírez:
“Ni la clase obrera ni el movimiento por ella generado han merecido la debida atención de los hombres de estudio; existe así, inédito, un gran capítulo de la historia nacional... Ha llegado el momento de llenar este vacío”
“Ni la clase obrera ni el movimiento por ella generado han merecido la debida atención de los hombres de estudio; existe así, inédito, un gran capítulo de la historia nacional... Ha llegado el momento de llenar este vacío”
Uno de los méritos de este libro fue demostrar con antecedentes irrefutables
que la lucha obrera no apareció en Chile, como sostienen algunos historiadores,
sólo en el siglo XX, sino en la centuria anterior. En 1834, se produjo en el
mineral de plata de Chañarcillo la primera huelga obrera y durante los
restantes años del siglo XIX hubo no menos de 110.
“BALMACEDA Y LA CONTRARREVOLUCIÓN DE 1891”
Hernán Ramírez tenía una notable modestia y
gran sentido autocrítico. En 1958
apareció su tercer libro: “Balmaceda y la Contrarrevolución de 1891”.
En él explicó: “En 1951 publiqué un libro titulado ‘La
guerra Civil de 1891. Antecedentes económicos’.
Esa obra, a pesar de sus defectos –que reconozco-, encontró benévola y favorable
acogida; tanto así, que a los pocos meses de publicada, la edición se agotó.
Desde entonces para acá –continúa el
historiador-, he tenido oportunidad
suficiente para reflexionar sobre las observaciones muy atinadas hechas por
lectores, colegas y críticos. Por otra parte, en estos siete años, realicé
nuevas investigaciones tanto en Chile
como en Inglaterra... A la luz de los nuevos elementos de juicio que había
logrado reunir, emprendí la tarea de rehacer el libro publicado en 1951,
introduciendo algunas modificaciones importantes en su estructura”.
DIRIGENTE SINDICAL DEL MAGISTERIO
Hernán Ramírez
fue un responsable y activo miembro de la organización sindical del
Magisterio, un luchador decidido por la educación del Estado. Participó en
varios eventos de su gremio, la Sociedad
Nacional de Profesores, que agrupaba a los maestros de liceos. Por ejemplo, en
la Tercera Convención Nacional, efectuada en abril de 1958., Hernán presentó un
documentado trabajo sobre el profesorado secundario y el Estado Docente. Sus
tesis sirvieron de base para algunas de las resoluciones aprobadas en esa
Tercera Convención, realizada durante el
segundo Gobierno de Carlos Ibáñez del Campo.
Una de ellas,
planteaba “la reducción del monstruoso horario de 36 horas que
actualmente desempeñan los profesores de Educación Secundaria y declarar que
ninguna reforma podrá prosperar mientras el profesorado carezca de tiempo
suficiente para el estudio, la reflexión y el perfeccionamiento de su profesión
docente”.
Otra resolución, sobre el estado Docente, exigía: “Que el total de subvenciones
destinadas a colegios particulares se supriman y los dineros pasen a integrar el Fondo Nacional de
Educación.” Era abril de 1958.
En esa Convención de los maestros secundarios
del país, Hernán Ramírez fue elegido director de la Sociedad Nacional de Profesores,
SONAP.
“ANTECEDENTES ECONÓMICOS DE LA INDEPENDENCIA DE
CHILE”
En 1959 fue editado el cuarto libro de Hernán
Ramírez. Su título “Antecedentes económicos de la Independencia de Chile”. En
el Prefacio, el autor escribió: “El juicio que merezca este ensayo a los
estudiosos y a los lectores interesados en la materia, será una referencia muy
valiosa en la prosecución de mis estudios sobre la historia económica de Chile;
me permitirá aquilatar en que medida la orientación de mis esfuerzos es
correcta y científicamente válida”.
En esa obra planteó, refiriéndose a la
principal causa de la Independencia:
”Hacia fines del siglo XVIII, las posibilidades de mayor expansión de nuestro país eran entrabadas por su calidad de colonia. Todos sus elementos, comprimidos por la potencia metropolitana y por estructura del Imperio habían llegado a un máximo de crecimiento posible dentro del molde colonial. Pero, las férreas ligaduras que le ataban a España, impedían que tales elementos –dotados ya de propias energías- pudieran continuar su desarrollo. Se suscitó de esta manera un antagonismo o contradicción entre los intereses de Chile y los de la Metrópoli”.
”Hacia fines del siglo XVIII, las posibilidades de mayor expansión de nuestro país eran entrabadas por su calidad de colonia. Todos sus elementos, comprimidos por la potencia metropolitana y por estructura del Imperio habían llegado a un máximo de crecimiento posible dentro del molde colonial. Pero, las férreas ligaduras que le ataban a España, impedían que tales elementos –dotados ya de propias energías- pudieran continuar su desarrollo. Se suscitó de esta manera un antagonismo o contradicción entre los intereses de Chile y los de la Metrópoli”.
En otra parte agregaba: “Los pocos patriotas
que ‘pensaron’ la Independencia, representaron la conciencia naciente de un
profundo proceso en desarrollo; ellos actuaron con tesón y audacia y, colocados
en una encrucijada pudieron dar cima a sus propósitos”.
“HISTORIA DEL IMPERIALISMO EN CHILE”
En 1960 publicó Hernán Ramírez su quinto
libro, “Historia del imperialismo en Chile”. Esta obra le sirvió de base para
obtener el grado de Doctor en Ciencias Históricas en la Universidad Carolina de
Praga.
“ORÍGENES Y FORMACIÓN DEL PARTIDO COMUNISTA DE CHILE”
En 1965 apareció su sexto libro. Título:
“Orígenes y formación del Partido Comunista de Chile”. En el prefacio escribió:
“El estudio de su pasado (del
Partido) permite desentrañar con nitidez
la dinámica de la lucha de clases en Chile; es decir, permite ver la totalidad
de las fuerzas que operan en la sociedad, la naturaleza y orientación de esas
fuerzas, las contradicciones que hay
entre ellas y la forma cómo se comportan”
“ESTADOS UNIDOS Y AMÉRICA LATINA”
También en 1965 se publicó su obra “Estados
Unidos y América Latina. 1930-1965”.Colección Realidad americana. Colección
vertientes de la libertad. Editora Austral, 1965. 298 páginas.
Finaliza esta obra, escribiendo: La revolución
latinoamericana está en marcha; ha comenzado un movimiento semejante al de
1810. Los pueblos de América Latina, gradualmente y con vigor, se colocan a la
altura de esa legión de próceres –conocidos y anónimos- a quienes todos veneran
porque tuvieron el coraje de rebelarse y de luchar bravamente contra los
metrópolis que sojuzgaban a sus patrias.
“Esta epopeya que tenemos por delante la van a
escribir las masas hambrientas de indios, de campesinos sin tierra, de obreros
explotados, la van a escribir las masas progresistas; los intelectuales
honestos y brillantes que tanto abundan en nuestras sufridas tierras de América
Latina; lucha de masas y de ideas; epopeya que llevarán adelante muchos pueblos
maltratados y despreciados por el imperialismo, nuestros pueblos desconocidos
hasta hoy que empiezan a quitarse el sueño. Nos consideraba rebaño impotente y
sumiso y ya se empieza a asustar de ese rebaño: rebaño gigante de doscientos
millones de latinoamericanos en los que advierte ya a sus sepultureros el
capital monopolista norteamericano”(*)
(*) Segunda Declaración de la Habana. 1962.
EL DECANO DE LA REFORMA UNIVERSITARIA
En 1967,
Hernán Ramírez fue elegido decano
de la Facultad de Filosofía y Educación de la Universidad de Chile, jugando
desde cargo un importante papel en las luchas por la reforma universitaria.
En entrevista publicada por la revista
Araucaria Nº 3 de 1978, a la pregunta
de si la Reforma 1967- 1969 fue
fundamentalmente obra del
movimiento estudiantil,
respondió:
“En gran medida, sí. Los
estudiantes de la Universidad Católica de Valparaíso primero, de la Universidad Católica de Chile enseguida y
luego los de la Facultad de Filosofía y Educación de la Universidad de Chile,
fueron quienes asumieron la responsabilidad de promover el proceso reformista
en sus respectivas corporaciones. Pero, muy rápidamente, encontraron eco entre
los académicos...”
El entrevistador interrumpe: “¿Y usted qué
papel desempeñó? Porque recuerdo muy bien que se le llamó el ‘Decano de la
Reforma’.”
Contestó Hernán Ramírez, con su característica
modestia:
“Me parece que en asuntos como los que ahora
merecen nuestra atención, las actuaciones personales no cuentan mayormente. En
realidad, me correspondió desempeñar
cierto papel en la reforma de la Universidad de Chile. Creo que en esto, el
azar y las circunstancias tuvieron mucho que hacer. Pienso que fundamentalmente
fui intérprete, portavoz y ejecutor de la voluntad de mi Facultad,
prácticamente de toda ella. En algún sentido, fui punto de convergencia de
aspiraciones colectivas y pude actuar en función de ellas. Por otro lado,
pienso que mi militancia política –que de ningún modo menoscababa mi condición
de universitario, sino más bien la enriquecía- y aún mi calidad de profesor de
Historia, me permitieron ser sensible a los procesos que tenían lugar en el
país y comprender el lugar que en ellos correspondía a la Universidad”.
EN EL EXILIO
El 11 de septiembre de 1973 se produjo el
golpe militar que instauró la dictadura fascista. Hernán Ramírez, como muchos
otros patriotas, debió salir al exilio. Tenía 56 años de edad. Vivió el destierro en París, junto a su
esposa la profesora Matilde Aguirre. Desde Francia siguió atentamente lo que
ocurría en Chile. Participó en las
acciones solidarias con la lucha del pueblo contra la tiranía. Trabajó en la
Universidad de Vicennes.
Falleció en el destierro, en París, el 21 de octubre de 1979.
“LAS FUERZAS ARMADAS Y LA POLÍTICA EN CHILE”
En 1984 fue publicado por la Casa de Chile en
México su libro “Las Fuerzas Armadas y la política en Chile”. En él se explica:
“El profesor Hernán Ramírez Necochea trabajaba
aún en el presente texto, cuando la muerte interrumpió una vida y una obra
plenas de significado”.
SEGUNDA EDICIÓN DE “ORÍGENES Y FORMACIÓN DEL PARTIDO
COMUNISTA DE CHILE”
También en 1984, la editorial Progreso de
Moscú publicó una segunda edición de “Origen y Formación del Partido Comunista
de Chile”.
En el prólogo
firmado en París en junio de
1979, sólo cuatro meses antes de su fallecimiento, Hernán Ramírez relató:
“Este libro debió haberse publicado en Chile a
fines de 1973. Sin embargo, los acontecimientos que han tenido lugar a partir
del 11 de septiembre de ese año, impidieron que tal cosa sucediera. Sus
originales fueron quemados y sólo pudo
salvarse una fracción del primer borrador manuscrito. Venciendo no pocas
dificultades, pude rehacer el trabajo que el lector tiene ahora en sus manos”.
Más adelante señaló: “He reescrito este libro
en un tiempo de tinieblas para mi Patria... Con él he querido, antes que nada,
rendir mi modesto y emocionado homenaje
de admiración y respeto a todos mis compatriotas que fueron inmolados o martirizados,
que sufrieron y sufren el terror, que no se han doblegado, que conservan su
integridad de hombres y de ciudadanos dignos y que combatieron y combaten
–hasta el sacrificio- por el restablecimiento de la paz, la justicia y la
libertad de Chile y por la reanudación del curso de una historia nacional que
nos enorgullece y que ha sido ominosamente
interrumpido.”
Pan de Huevo
Comentario radial y escrito.
Como anclaron
ustedes a este país de agua, no lo sé; yo llegue con guitarra, medio
perejil y con "cara e bala"; andaba ansioso sin saber por que...
Llegue y viví en el hogar de una familia que amo, me ayudaron, lograron que la guitarra rota sonara otra vez.
Anduve cachuo de todo, alumbraba mi caminar Radio Moscú y su programa
"Escucha Chile"...
No era un aprendiz, era un veterano de la
ausencia.
Mi creencia
en este país solidario mantenia la misma estrutura Organica aprendida en
los desiertos y salitreras, en la vida de su clase obrera, en las luchas
politicas de los trabajadores chilenos.
Un saludo de agradecimiento a aquellos
compañeros que la levantaron en terrenos alquilados con la forma y gracia de
nuestra cultura y memoria politica.
Las necesidades eran enormes , se hizo de todo
para cumplir nuestra tarea logistica...
fue tanto el empeño que la empanada llego a ser parte de la Mesa Escandinava.
El pebre, la cazuela e chancho con chuchoca,
el canto, la poesía, el teatro, los medios de difusión nuestras, eran, son
vivencias simbioticas para los suecos en
general, era una solidaridad entendida, que de paso, nos sacaba de la soledad,
oscuridad y frio de un invierno largo...
Para nosotros, la aceituna de la empanada o
del pastel de choclo era un "miguelito", un vaso de leche, el trámite
de un abogado.
Yo venia respaldado por todo los cerros y
arenas, por ventanales oscuros, rejas, payasas, soledad y dolor; aulas y mitines, mi aire de bala y clase, de
intelectual imberbe , indignado, no sirvieron para nada; las normas de
Organización Leninista, impedían que se fabricaran gratuitamente más
gaseosas.... No era fácil entrar al partido... te lo tenias que ganar y
"si llegas sin que te llamen", no era una recomendación muy acertada.
Los caminos han sido recontra espinuos,
seguirán siéndolo, la vigilancia revolucionaria es necesaria, esencial, cuando
se tiene por una dinámica necesaria y dialéctica de abrir la puerta; si no eres
cuidadoso, vigilante, te puedes ir a los infiernos con el alma vendida o
destrozada.
La verdad en el hacer politica es algo parecido a la "clase"...y
la clase es un puma incrustado al interior de tu cuerpo, en tu intelecto...es
una mariposa misteriosa que cosquillea, que ama las manos que hacen las cosas,
las manos de tus hermanos, entiende la unidad...se necesita tiemp para
entenderla, sentirla, estar enamorado de ella.
Ha sido muy difícil, complicado tener y
mantener la casa de Víctor Jara en Estocolmo, Suecia.
"Todavía me llora la maldicion, la
cobardia"
Tengo el privilegio, el orgullo de tener
hijos, dos de ellos me los robe chiquititos.
Los cincos forjaron sus propios
hogares con sus hijos adentro.
Una de mis hija, la mayor, vive en Chile, es
otra historia, otras vivencias, la amo, y me va a doler siempre el tiempo bruto
que tuvimos y que tenemos; desgraciadamente, todavia ayudamos a construir...
Ha sido para ellos desafios que supieron
enfrentar, con todos sus conflictos personales, en patota... pudieron salir adelante....
"Y es un salir de todos los dias".
Los
cuatro que están a mi alcance, completaron sus estudios, superiores,
Universitarios, técnicos, administrativos... Todos aprovecharon el sistema, y
estudiaron, terminaron, lloraron pero tienen su carton, Llave sin candado, para
integrarse a una sociedad demandante y ciega...
Acostumbramos a juntarnos una o más veces al
mes.
Es una invasión de alegria tener a 22/23
personas en 56 mts cuadrados.
Es maravilloso, me contenta, me enorgullece...
Yo no
hablo mucho, yo cocino, sirvo y escucho...
Hablan de sus planes, de los niños, de la escuela, de sus proyectos...
pelan, copuchean, se ríen de sí mismos y de medio mundo...
Los cuatros
son salvajemente explotados.
Alguien comenta su trabajo...
el ambiente cambia, se pone indefinido, herido, una atmosfera indefinida nos aplasta... Y eso
que estoy jubilado.
"Anoche llegue a las diez a la
casa", dice una, "yo me hice pichi, no pude colgar la llamada, era un
cliente importante" dice otra, "te casaste con tu trabajo",
"sino trabajo no tiengo oportunidad de vacaciones... Es mi
trabajo"discuten otras..
Esa practica de trabajo que escucho, crea un
círculo oscuro, individual y enfermo...
Las necesidades reales y las inventadas, la
presión social y laboral, te va modelando por dentro y por fuera en otra persona,
la globalización enfarda, acumula... Son
14/ 18 horas diarias de trabajo.
El trabajo de tres o más trabajadores lo hace,
lleno de risa, uno solo...
El ambiente se ponía rebelde y buscaban
culpables...
Ahí asomo yo con mi explotación del hombre por
el hombre, con la lucha de clases, de la necesidad de sindicalizarse y ser
parte activa de él, de la unidad de los trabajadores, de la solidaridad con el
sindicato portuario, de lo que pasa en Peru, Venezuela, Ecuador, de la
responsabilidad social, cívica, de clase...
El neoliberalismo es un crimen.
Me miran muy raro, huelen el vaso de agua que
tenía al frente...Las más chica, la más explotada y la que mas cuestiona, me
miro con pena sonriente y me dijo..."Yaaaa papá"
Cuando yo llegue a Suecia, trabaje en lo que
no era necesario hablar... es decir, lavando platos y suelos, levantado muros,
incrustando azulejos, cantando... paso el tiempo, estudie y aprendí algo del
idioma y comencé a trabajar en un Jardin Infantil... Ahí ocurrió el primer
milagro, no tengo idea como los niños, el personal, los padres, me entendían...
Parecía Tarzán Argentino.
Parecía Huemul en cumpleaños de Alce.
El ambiente laboral era macanudo...
tres/cuatro niños por personal, tres/cinco personales por sección... cuatro
secciones...... Un paraíso.
Esto que voy a contar, sucedió hace más de 40
años atrás. quedan aun los olores... y por esos olores, quiero confesar una
verdad que me dejo mexicano con sombrero y todo, apoyado en adobes que dividían
la tierra y el hombre.
Mi Compañera estamos juntos, casados casi mas
de 40 años juntos, apunta sus ojos, me
mira y dispara sin piedad...:
"Mira guatón, me dijo, déjate de molestar
a las niñas, es otra generación, ya no llegas...
"Yo te conocí cuando necesitaban un
vicario para un personal que estaba muy seguido con licencia medica a cada
rato... no se sabía cuándo regresaba al trabajo; llegaba y se iba... Por esos tiempos la
licencia medica daba derecho a un 100 % de sueldo...
Claro, el perla enfermo, andaba en cuestiones
de su partido...
Llegaste una vez de vuelta, un mes estuviste y
te fuiste de nuevo, decidieron dejarme igual, "por i acaso", el enfermo podría tener recaía...
En ese tiempo las cosas comenzaron a cambiar,
el gobierno empezo a ahorrar y las instituciones también... Se podía tener 3/4
niños por personal, se subieron a 6/7 niños.
Quedo la crema, alegatos por aquí y por allá,
tú tirabas fuegos y consignas, era una explotación, se pisoteaban los derechos
del niño...
El sueco te salia clarito... Entusiasmaste a
medio mundo, nos diste "un fusil y una bandera".
Al otro día, nadie iría a trabajar, todos
enfermos... estamos hablando de 15/16
profesores parvularios...más de 50 padres que tuvieron que quedarse en
casa sin poder ir a trabajar.
El inspector escolar llamaba por telefono como
loco... Todos sabían por qué, pero nadie decía nada.
Y ahora que, gritaban las conferencias
telefónicas... Sigamos enfermos decías tú, se trataba de unidad, de demostrar
que no pueden pasarnos a llevar...
El sueco, su mentalidad es diferente:... Yo
voy mañana a trabajar, dijo una, yo también dijo la otra... Pediremos una
reunión y diremos el porqué del descontento...
Llego ese mañana y a ti, se te olvido el
sueco.
Retaron a medio mundo, hablaron contigo y Así
termino la huelga...
No hablaste en la reunión, ni con otros
jardines tampoco, muy pocos se enteraron de la
revolución en tu jardin infantil..."
Lo que canto mi compañera fue cierto, se me
chupo el habla, no tenía argumento para lo venidero.
Ahora, un personal tiene a 16/17 niños, hablan
como 100 dialectos y un niño de 7 años te dice que va a cohabitar con tu
mama...
Dios mío de los coloraos, se me había olvidado
esa parte de mi vida...
Mis hijos se rieron; "Viejo, aquí no se puede".
"En
casa del herrero, cuchillo y palo " golpeaba mi intelecto, mi ser.
Todos mis hijos, mis nietos, son miembros de
la Organización Cultural Víctor
Jara" y lo saben, tienen 30/40 años y entienden mis caminos, pero no
pueden seguir mis caminares, cada uno tiene sus propios caminos, Yo tengo mi
"pan de huevo"
Alejandro
Fischer Alquinta.
Estocolmo
2018/03/24
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