sábado, 29 de octubre de 2022

A CIEN AÑOS DE LA LLEGADA DE MUSSOLINI AL PODER EN ITALIA

 


Un día como hoy,  29 de octubre, hace cien años,  el rey Víctor Manuel III pidió a Mussolini  la formación de un gobierno. Así llegó el fascismo al poder en Italia con el concurso del rey.  El ascenso al poder de Mussolini no significó de forma automática la implantación en Italia de un Estado fascista. 

Un abrazo antifascista,  

Iván Ljubetic Vargas



A CIEN AÑOS DE LA LLEGADA DE MUSSOLINI AL PODER EN ITALIA

 

                                                         Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                                         Centro de Extensión e Investigación

                                                           Luis Emilio Recabarren,  CEILER

 

 

 


A comienzos de los años veinte del siglo XX en Italia existían tres fuerzas políticas. La más importante era el Partido Popular Italiano, de ideología católica moderada, fundada en 1919 por Luigi Sturzo, secretario de la Acción Católica, con el apoyo del papa Benedicto XIV. Le seguía en importancia el Partido Socialista, con grandes contradicciones internas, que culminaron con su división. De allí surgió el Partido Comunista, marxista, miembro de la Internacional Comunista que, en 1921, se convirtió en la tercera fuerza política de Italia. Uno de sus fundadores fue Antonio Gramsci, destacado escritor y filósofo.

 

                           

 Antonio Gramsci

 

 

La cuarta fuerza presente en la vida política italiana era el Partido Fascista, surgido en 1921 de los "Fasci di Combattimento" (Grupos de Combate), en cuyo seno convergían diversos sectores, desde antiguos socialistas (como por ejemplo el propio Benito Mussolini)  hasta grupos ultraconservadores.

El Partido Fascista  tuvo un acelerado desarrollo. En 1920 sus miembros protagonizaron numerosos actos de violencia contra militantes de izquierda y sindicalistas. En 1922 su presencia en la vida política italiana era ya un hecho. Había logrado ganar numerosos gobiernos de carácter local y provincial y reunido en sus filas numerosos  simpatizantes procedentes de círculos empresariales, la Iglesia y el Ejército.

 

LOS TRABAJADORES REPRIMIDOS POR FASCISTAS

Desde el fin de la Primera Guerra Mundial reinaba en Italia una situación política inestable junto a una grave crisis económica. Los trabajadores, organizados en activos sindicatos como la socialista Confederación General Italiana del Trabajo participaban en importantes movilizaciones. Realizaron ocupaciones de tierras y fábricas entre 1919 y 1920. Esas acciones culminaron con una huelga general el 31 de julio de 1922. Ésta fue aplastada por la represión violenta de los grupos fascistas que sembraron de víctimas el país.

 

UNA VEZ MÁS LA BANDERA PIRATA DEL ANTICOMUNISMO

Los grandes propietarios industriales y agrarios, los católicos, los conservadores, atemorizados por el  crecimiento de las fuerzas revolucionarias  apoyaron el profundo anticomunismo de los fascistas. La violencia se desató en  pueblos y ciudades, favorecida por la inoperancia de los débiles y efímeros gobiernos que se sucedían con rapidez. Surgió el  descrédito del sistema parlamentario. Estos hechos favorecieron que un creciente número de italianos reclamara la acción de un gobierno fuerte y estable.

 

EL ASALTO AL PODER DEL FASCISMO

En ese ambiente se produjo el definitivo asalto al poder del fascismo. La oportunidad llegó tras la “Marcha sobre Roma” organizada en el mes de octubre de 1922. Mediante esa maniobra los fascistas pretendían forzar la dimisión del gobierno constitucional e imponer el de Mussolini.

 

 

Benito Mussolini

 

El Jefe de Gobierno, Luigi Facta, pidió al rey Víctor Manuel III que declarara el estado de sitio para impedir la marcha, pero éste se opuso a la medida. El monarca temía más a una revolución socialista que a los fascistas. Por lo demás, los patrones  e importantes sectores del ejército, simpatizaban en forma abierta con Mussolini.      

El 29 de octubre de 1922 el rey pidió a Mussolini  la formación de un gobierno. Así llegó el fascismo al poder con el concurso del rey Víctor Manuel III.  El ascenso al poder de Mussolini no significó de forma automática la implantación en Italia de un Estado fascista.

 

GOBIERNO DE COALICIÓN

Investido como Primer Ministro, Mussolini gobernó durante unos meses con una coalición, formada por  partidos liberales, nacionalistas y católicos, dentro de los canales constitucionales. Su primer gabinete, en 1923, contó sólo con cuatro ministros fascistas.

En ambiente de extrema violencia tuvieron lugar las elecciones generales de 1924. De un total de siete millones de votos, los fascistas obtuvieron algo más de cuatro millones. La oposición reunió tres millones de sufragios.

Pese a estos resultados, los fascistas lograron la mayoría, en virtud de una ley electoral aprobada en 1923, según la cual el partido que obtuviese un 25 % de los votos se alzaría con una representación de dos terceras partes de la Cámara.

 

CRIMEN Y REPUDIO

El diputado socialista Giacomo Matteotti denunció en el Parlamento las arbitrariedades y la violencia ejercida  por los fascistas en el proceso electoral. La respuesta fue el secuestro y posterior asesinato del diputado. Las investigaciones llegaron a la conclusión que el responsable de este crimen era Mussolini.

Todos los sectores políticos repudiaron este crimen. La prensa nacional y del extranjero protestaron y culparon al Primer Ministro. Miembros de la coalición de gobierno le volvieron la espalda. El Partido Popular y sectores de la Iglesia  condenaron el asesinato.

Los parlamentarios de oposición abandonaron sus puestos  en el Congreso. Y ya no en  el Congreso y ya no volvieron a ocuparlos.

Intelectuales y académicos firmaron una declaración repudiando a Mussolini. Este sufrió una fuerte crisis que lo tuvo a un paso de perder el poder.

 

DICTADURA FASCISTA

A partir de 1925, Mussolini se propuso convertir Italia en un régimen totalitario. Una ley lo nombró jefe de Gobierno y le otorgó todos los poderes. En 1926 la Ley Rocco prohibió todos los partidos y sindicatos, a excepción de los fascistas.

La administración pública fue “depurada”. Se creó una policía política, la Organización de Vigilancia y Represión del Antifascismo (OVRA), que perseguía a la oposición.

Se atrajo a la Iglesia Católica, firmando en 1929 el Tratado de Letrán.

Llevó a cabo una política expansionista. Esta política implicaba la posesión de Albania, África, Somalia, Libia Y Etiopía.

 



CAMILO CIENFUEGOS, “EL SEÑOR DE LA VANGUARDIA”

 



A 63 años de su partida física:

 


 

                                                                Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                                                Centro de Extensión e Investigación

                                                                  Luis Emilio Recabarren, CEILER

                                                       

 

 


 

Camilo Cienfuegos Gorriarán desapareció el 28 de octubre de 1959, en un vuelo en que regresaba en su avión Cessna 310 desde Camagüey a La Habana.

Había nacido en la capital de Cuba,  el 6 de febrero de 1932. Fue un gran revolucionario cubano. Una de las personalidades más importantes de la Revolución Cubana, junto con Fidel y Raúl Castro, el Che Guevara y Juan Almeida.

Era un destacado combatiente, de extracción humilde y amplia ascendencia popular «por su carácter jovial y natural desprendimiento».

Efectuó sus primeros estudios en la escuela pública número 20, en San Francisco de Paula.

Ya en 1948  comenzó a involucrarse en la lucha política participando en las protestas populares contra el aumento de la tarifa de los ómnibus urbanos.

El 10 de marzo de 1952, al producirse el golpe de Estado de Fulgencio Batista, con un grupo de jóvenes concurrió a la Universidad en procura de armas para resistir a la dictadura. En esa época establece amistad con otros jóvenes que tendrían un destacado papel en los sucesos posteriores, Carlos Leijás, Israel Tápanes, Reinaldo Benítez y los hermanos Mario y José Fuentes.

En abril de 1953 viajó a los Estados Unidos en busca de una mejor situación económica. Allí trabajó en varias ciudades como obrero y camarero. Vinculado a los emigrados latinoamericanos, participó en diversas manifestaciones y escribió para el periódico La voz de Cuba un crítico artículo contra Batista titulado Identificación Moral.

En 1955 fue detenido en San Francisco por el departamento de inmigración y finalmente deportado a México.  

 

SE SUMA A LA LUCHA CONTRA BATISTA

Regresó a Cuba el 5 de junio de 1955. Se unió  a la lucha contra el régimen de Batista. En septiembre contrajo matrimonio con Isabel Blandón, una enfermera salvadoreña que había conocido en San Francisco.

El 14 de diciembre de 1955, fue herido por un arma de fuego durante una manifestación en honor del héroe independentista cubano Antonio Maceo, lo que no le impidió participar del acto en conmemoración del 103 aniversario del nacimiento de José Martí en el parque Central.

Esta vez, golpeado y conducido al BRAC (Buró para la Represión de Actividades Comunistas) donde fue fichado como comunista por el cuerpo policial del dictador Fulgencio Batista. Al verse perseguido y sin trabajo, decidió ir al exilio por lo que en marzo de 1956 viajó nuevamente a los Estados Unidos.

En septiembre se encontraba en México, donde logró establecer contacto con Fidel Castro, quien organizaba una expedición revolucionaria que regresaría a Cuba para iniciar la gesta contra el régimen de Batista. Cienfuegos fue el último elegido para la expedición del yate Granma.

 

EN LA REVOLUCIÓN

Durante la lucha revolucionaria jugó un destacado papel. En la Sierra Maestra se le otorga el grado de Capitán del Ejército Rebelde.

Su valentía y arrojo contribuyen a formar el mito del «Señor de la Vanguardia».

En marzo de 1958 se convirtió en el primer jefe del movimiento que llevaba el combate más allá de la Sierra Maestra, a los llanos del Cauto. El éxito de esa breve campaña, en la cual hostigó las comunicaciones enemigas, le valió en abril ser ascendido por Fidel Castro al grado de Comandante.

 

Camilo Cienfuegos con Fidel

Tras el triunfo de la Revolución Cubana, Cienfuegos formó parte del alto mando del Ejército Revolucionario como su jefe supremo. Combatió en los levantamientos contra revolucionarios y participó también en la Reforma Agraria.

El comandante Camilo Cienfuegos era muy querido por su humildad, sencillez y sonrisa franca, incluso se llegó a comparar su popularidad con la del jefe revolucionario Fidel Castro.

 

SU MUERTE

Camilo Cienfuegos falleció el 28 de octubre de 1959 en un accidente de aviación a causa del mal tiempo mientras retornaba de Camagüey a La Habana  a bordo de su avión Cessna 310. Toda Cuba se movilizó en su búsqueda durante varios días, en uno de los eventos más conmovedores de los primeros años de la Revolución.

Las extrañas circunstancias de su desaparición han hecho circular numerosas versiones acerca de su muerte. Pese a ello, cabe destacar que en su último discurso, pronunciado el 26 de octubre de 1959 frente al Palacio Presidencial de La Habana, Cienfuegos subrayó su lealtad al gobierno revolucionario y a Fidel Castro. Pese a tener fuertes discrepancias con algunos miembros del gobierno cubano, sin embargo siempre fue fiel a Fidel.

Camilo fue el compañero de cien batallas, el hombre de confianza de Fidel en los momentos difíciles de la guerra y el luchador abnegado que hizo siempre del sacrificio un instrumento para templar su carácter y forjar el de la tropa ... Camilo era Camilo, señor de la vanguardia, guerrillero completo que se imponía por esa guerra con colorido que sabía hacer.

 




 

 

 

MIGUEL SERVET: QUEMADO VIVO POR SUS IDEAS HACE 489 AÑOS

 


Un día como hoy, 27 de octubre, hace 489 años, el médico  Miguel Servet fue quemado vivo en la hoguera, por no creer en la santísima Trinidad. 

Un abrazo, 

Iván Ljubetic Vargas









miércoles, 26 de octubre de 2022

ESTADOS UNIDOS INVADE ISLA DE GRANADA

 



Hace 39 años:

 

 

                                               Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                               Centro de Extensión e Investigación

                                               Luis Emilio Recabarren, CEILER

 



El Gobierno estrechó relaciones con países como Cuba y la URSS. | Foto: EFE

El 25 de octubre de 1983 se inició la invasión militar conocida como operación Furia Urgente, perpetrada por el Gobierno de los Estados Unidos contra la isla de Granada,   en que participaron 1.200 marineros estadounidenses y en la que murieron 70 granadinos y 358 resultaron heridos.  Además de  28  cubanos muertos y 59 heridos, que trabajaban en la construcción del aeropuerto  de la isla.

 

Fue la primera gran operación militar llevada a cabo por el imperialismo,  desde el desastre sufrido en la Guerra de Vietnam

La ocupación del país caribeño fue sólo un ensayo general de la forma de obrar de EE. UU., creando un mecanismo político de desarrollo de conflictos militares, que desembocaría más adelante en la operación de Panamá, la guerra del Golfo y la ocupación de Irak.

 

Los pretextos utilizados para la invasión fueron tres: proteger a los estadounidenses residentes, restaurar el orden y la democracia y evitar que la isla se transformara en una "base cubana- soviética" (ello, debido a que Granada mantenía buenas relaciones con Cuba y la Unión Soviética).

El imperialismo usó una vez más en 1983  la falsedad de  que Granada constituía un peligro para la seguridad de EE. UU.

y de las naciones caribeñas. Pero lo que en realidad temía era la propagación de las ideas socialistas que, poco a poco, iban penetrando en varios países de Latinoamérica y el Caribe.

 

La invasión imperialista fue condenada por la mayoría de la comunidad internacional y no contó con el apoyo de las Naciones Unidas, ya que fue una demostración de fuerza militar de los EE.UU. en su intento de intimidar a otros gobiernos socialistas, además de representar una abierta violación del derecho internacional y de la soberanía de los pueblos.

 

 

Daniel Ortega, Maurice Bishop y Fidel Castro

 

 

DESTRUYERON UNA REVOLUCIÓN HABLADA EN INGLÉS

PRIMER MINISTRO

El 13 de marzo de 1979 fue proclamado el Gobierno Popular Revolucionario (PRG) y Bishop fue designado como primer ministro. De inmediato, estableció relaciones con Cuba y la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), y desarrolló una serie de transformaciones sociales de carácter socialista.

Esta pequeña isla comenzó a vivir un proceso transformador y socialista, impulsado por el líder de Nueva Joya Maurice Bishop y estos cambios no fueron aceptados por Washington, lo que trajo como consecuencia que EE.UU. generó el contexto necesario para lograr su propósito de invasión.

 

El Gobierno de Bishop se orientó, en el plano internacional, por dos derroteros fundamentales: la ideología y la asistencia para el desarrollo, con el objetivo de otorgarle una renovada visibilidad  al país caribeño dentro de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y otros organismos internacionales.

En este sentido, el Gobierno Popular Revolucionario  desarrolló un programa de vinculación activa con movimientos revolucionarios y liberadores de América Latina, África y Asia, se integró al Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) y estrechó relaciones de cooperación con Cuba y la URSS.

 

GRANDES CAMBIOS A FAVOR DEL PUEBLO

La gratuidad y amplio acceso a la formación educativa fue una de las primeras prioridades del Gobierno, con organización y acción de masas.

El 98 por ciento de la población supo leer y escribir. Se triplicó el número de escuelas secundarias y se incrementó el envío de estudiantes becados al extranjero.

Maurice Bishop consagró el derecho de todos los trabajadores a fundar sindicatos con toda libertad.  De esta forma, los trabajadores, por primera vez, pudieron participar junto al Gobierno en la elaboración del presupuesto de la nación y comenzaron a recibir un tercio de las utilidades empresariales.

Tras 450 años de colonialismo y neocolonialismo, el PRG inauguró la primera planta agroindustrial. La pesca fue la base esencial de la industria por lo que se desarrolló la flota pesquera nacional para aportar alimentación al pueblo.

Mediante el apoyo de la colaboración médica cubana, Granada desarrolló un sistema de atención primaria de salud para todo el pueblo y al mismo tiempo envió estudiantes a estudiar la carrera de Medicina en la mayor de la Antillas.

El desempleo en Granada se ubicaba en el 49 por ciento antes de 1979. En apenas dos años y medio de Gobierno revolucionario se generaron más de 2.000 empleos y se redujeron los índices de desocupación al 12 por ciento.

 

El Gobierno de Bishop aplicó el principio del pago igualitario a igual trabajo, se luchó por la igualdad y la no explotación sexual de la mujer, así como porque en las zonas rurales del país se tuviera acceso a una vivienda digna.

 

EL AEROPUERTO: PROGRESO Y PRETEXTO

En Punta Salinas, al este de Granada, se desarrolló el ambicioso proyecto del nuevo aeropuerto civil, nacional e internacional. En esta importante obra para el comercio de la isla participaron 350 granadinos y 250 cubanos.

Con esta obra de 1.500 metros y capacidad para operaciones de aeronaves pequeñas y grandes, se mostraría el potencial turístico del territorio nacional ante el mundo.

La construcción de este aeropuerto sirvió de pretexto al Gobierno de Ronald Reagan para acusar  a Bishop de utilizar el nuevo aeropuerto como base militar soviética. Los Estados Unidos fomentaron el clima de tensión que provocó un golpe de estado contra Bishop, preparando una invasión a  Granada con una feroz guerra mediática.

 

DERROCAMIENTO Y MUERTE DE BISHOP

En octubre de 1983, al regresar de una visita diplomática a Checoslovaquia y Hungría, Maurice Bishop fue derrocado por los partidarios del viceprimer ministro Bernard Coard (antiguo compañero de Bishop), y puesto bajo arresto domiciliario. Una revuelta popular lo liberó, pero el gobierno de Coard y Hudson Austin ordenó su ejecución en la base militar de Fort Rupert.

Maurice Bishop fue ejecutado junto a la Ministra de Educación y pareja de éste, Jacqueline Creft, y otros miembros del gobierno como Unison Whitman.





A 84 AÑOS DEL TRIUNFO DEL FRENTE POPULAR EN CHILE

 



                                                    Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                                    Centro de Extensión e Investigación

                                                    Luis Emilio Recabarren,  CEILER

 

                          

 



El 25 de octubre de 1938 tuvo lugar elecciones presidenciales en Chile. Triunfó Pedro Aguirre Cerda,  el candidato del Frente Popular. Obtuvo 222.720 preferencias. Gustavo Ross Santa María, 218.609. La diferencia fue sólo de 4.111 votos. "Pero tales resultados -como sostiene Luis Corvalán  en “Algo de mi vida” (páginas 78 y 79)- sólo reflejaron muy pálidamente la voluntad del pueblo, pues el sistema electoral permitía las más groseras de­formaciones de los verdaderos sentimientos ciudadanos... Abunda­ban las dobles inscripciones, votaban los muertos de la derecha, se robaban las urnas, se compraba  y vendía votos".

FUE DERROTADO EL COHECHO

Luis Corvalán relata que para ese 25 de octubre, la candidatura de Ross organizó "las encerronas de elementos venales a fin de llevarlos a votar, mediante el sistema del acarreo, para asegurarse así que no iban a fallar. También hubo -agrega- encerronas de obreros conscientes”

 Al analizarse los resultados de esos comicios se aprecia cla­ramente que fueron las zonas proletarias -las del salitre, cobre y carbón- las que decidieron la victoria del abanderado de la izquier­da.

 

SE CELEBRÓ A LO GRANDE

El pueblo celebró en las calles el triunfo. "Estalló -re­cuerda Volodia Teitelboím en “Un muchacho del siglo XX” (página 431)-  una algarabía frenética. Fueron ho­ras de vítores y gritería. Los hombres aprovecharon para besar a las mujeres. Y ellas se dejaron besar. También tomaron la ini­ciativa. Todo estaba permitido, incluso la alegría. Se sucedie­ron los oradores, los cantantes, los bailarines. La fiesta continuaba. La gente no se quería dispersar".

 

                           

 


LA INTERNACIONAL COMUNISTA Y EL FRENTE POPULAR

Del 25 de julio al 20 de agosto de 1935 se realizó en Moscú el VII Congreso de la Internacional Comunista. Concurrieron 513 delegados de 65 partidos comunistas y organizaciones afines. Estuvieron presentes personalidades como Dolores Ibarruri, Ho Chi Ming, Palmiro Togliatti, Jorge Dimitrov. También Carlos Contreras Labarca, Secretario General del Partido Comunista de Chile.

Ese importante evento mundial llamó a constituir amplios frentes antifascistas en todos los países, los frentes populares, y crear gobiernos de frente único antifascista.

Apenas retornado al país, Carlos Contreras Labarca se dedicó a crear las condiciones para la fundación del Frente Popular en Chile. No fue tarea fácil. Pero logró vencer el sectarismo y los prejuicios anticomunistas.

 

EL FRENTE POPULAR EN CHILE

En la tarde del 26 de marzo de 1936, concurrieron a las oficinas del diario "La Opinión" -que estaban ubicadas en la Alameda frente a la calle Estado- dirigentes del Partido Comunista, del Partido Socialista, del Partido Democrático, del Partido Radical-Socialista y del Partido Radical. En la oficina de su Director, Juan Bautista Rosetti, firmaron el pacto que da vida al Frente Popular (FP).

El 8 de abril, los mismos personeros suscribieron el Programa del Frente Popular, "esencialmente democrático, antiimperialista y anti oligárquico", que constaba de tres partes; en verdad tres programas. Uno de orden general; otro, que comprendía las tareas inmediatas del gobierno, una vez triunfante el Frente Popular. Finalmente, un programa destinado específicamente a la juventud".

 

QUIÉN ERA PEDRO AGUIRRE CERDA

Según escribe Elías Lafertte en “Vida de un Comunista” (página 36), “Aguirre Cerda era un viejo y experimentado político radical, con un pasado parlamentario y ministerial que le permitía afrontar esta elección. Profesor secundario y universitario, había observado una tranquila oposición a la dictadura de Ibáñez, por lo cual había debido expatriarse.  Sus libros sobre los más  candentes problemas nacionales lo presentaban como un político estudioso, comprensivo de nuestra realidad nacional. Su carácter era alegre, socarrón a veces y creo que su aspecto de roto chileno, con los bigotes caídos en los extremos y los ojos “achinados” lo ayudó mucho a ganar la simpatía popular.  No era orador fogoso, pero indudablemente sabía decir las cosas.  Las largas giras políticas y electorales en que me tocó acompañarlo, me dieron la oportunidad de conocerlo”.

EL GOBIERNO DEL FRENTE POPULAR

El 23 de diciembre de 1938, Pedro Aguirre Cerda asumió la Presidencia de la República. Le planteó al Partido Comunista que designara mi­nistros, pero éste declina su participaci6n en el Gabinete, asegurando su total respaldo al gobierno, pero desde afuera.

"Entonces -relata Elías Lafertte- nos pidió el Presidente una lista con nombres de camaradas que pudieran ocupar puestos en la administración pública. La lista se entrega,  los candidatos fueros entusiastamente aprobados por don Pedro, pero ... no se designó a ninguno"

El gabinete se constituyó con tres ministros socialistas y el resto  radicales.

 

 

ALEGRÍA  PARA LA GENTE SENCILLA

Se inició el gobierno del Frente Popular. Una noticia sorprendió y alegró a mucha gente modesta:

"En la mañana de hoy se ha iniciado el rescate de prendas y máquinas de coser. Decreto del Gobierno de Pedro Aguirre Cer­da:

'La Caja de Crédito Popular devolverá gratuitamente ropa y herramientas para obreros que hayan recibido en garantía de préstamos hasta por la suma de veinte pesos. También devolverán todas las máquinas de coser. Capital e intereses devengados serán pagados por la Caja. Esto se iniciará el 1 de enero de 1939.

Pedro Aguirre Cerda. Antonio Poupin”.

 

RECONSTRUCCIÓN Y PROGRESO

Cuando recién se cumplía un mes del nuevo gobierno, Chile sufrió uno de los más terribles terremotos de su historia, el 24 de enero de 1939. Asoló la zona agrícola del centro sur del país, ubicada entre Talca y Bio-Bio. Destruyó las ciudades  de Chillán, Concepción y otras poblaciones. En minutos perecieron más de 25 mil personas, decenas de miles quedaron sin techo ni medios de subsistencia.

El gobierno adoptó inmediatas medidas para ir en ayuda de los damnificados. Entre ellas, la de crear la Corporación de Reconstrucción y Auxilio, con la tarea de restaurar la región devastada.

 

 

 

Terremoto del 24 de enero de 1939: Chillán

 

 

La Admi­nistración Aguirre Cerda abrió una nueva etapa de desarrollo e­conómico y social. Democratizó el país: amplió las libertades públicas, puso fin a la represión ejercida por regímenes ante­riores. Por primera vez, desde su fundación, el PC no fue perse­guido. Fueron reincorporados los exonerados por Arturo Alessandri. Se facilitó la creación de organizaciones de los trabajadores: se constituyeron 1.172 sindicatos.

En mayor medida que cualquier gobierno anterior, el del Frente Popular -en apenas tres años- aceleró el desarrollo de Chile.

 

LA CORFO Y DESARROLLO  NACIONAL

El 29 de abril de 1959, se promulgó la Ley N. 6.332 por medio de la cual se creó la Corporación de Fomento de la Pro­ducción, CORFO, entidad estatal, encargada de promover el cre­cimiento planificado de una economía independiente, que privilegió la industria nacional, con el objetivo de elevar el nivel de vida de las masas trabajadoras.

La CORFO tuvo por finalidad elaborar, financiar y llevar a la realidad una serie de planes de electrificación, industrialización y fomento agrícola.

Trazó un audaz plan de electrificación,  el mayor esfuerzo hecho hasta entonces en favor del progreso nacional. Su realiza­ción estuvo a cargo de una filial de CORFO, la Empresa Nacional de Electricidad Sociedad Anónima, ENDESA. Esta comenzó, a partir de 1940, la construcción de importantes centrales hidroeléctricas: Sauzal, Abanico Los Molles y Los Cipreses.

Otro plan de CORFO fue el relacionado con el acero. Creó la Compañía de Acero del Pacifico, CAP, que hizo realidad la prime­ra gran usina chilena: Huachipato.

Otra filial de CORFO fue la Empresa Nacional del Petróleo, ENAP. Se dictaron disposiciones legales que reservaban para el Esta­do el dominio y explotación de todos los yacimientos de hidro­carburos, en estado líquido o gaseoso, ubicados en el territorio nacional.

También fundó IANSA, para impulsar la industria azucarera. Planificó el desarrollo agrícola y de la industria petroquímica.

La administración de Aguirre Cerda suspendió el pago de la deuda externa, elevó los impuestos que debían cancelar las empre­sas estadounidenses que explotaban el cobre. Aumentó el monto de sueldos y salarios, y el índice del poder adquisitivo de éstos.

 

LA EDUCACIÓN PÚBLICA

En su Mensaje ante el Congreso Nacional del 21 de mayo de 1939  enfatizó el Presidente:

"Gobernar es Educar, y con esta firme concepción aprove­charé todas las fuerzas de que el Estado pueda disponer para despertar el espíritu constructivo, de organización y perseve­rancia, que tanto necesita la colectividad y, rectificaré el abandono en que se ha desarrollado la educación pública."

"Para que la enseñanza -agrega más adelante- pueda cumplir su misión social con toda amplitud, es necesario que sea: Gratui­ta, única, obligatoria y laica".

No se quedó en meras palabras. Creó tres mil plazas de maestros. Entregó al servicio de la comunidad más de 500 es­cuelas primarias, 13 escuelas hogares, 6 escuelas-granjas, 140 escuelas de adultos, 47 escuelas y grados vocacionales, 3 escuelas industriales y de minas. 11 escuelas de artesanos, 3 institutos comerciales y una escuela Técnica Femenina.

Desmintiendo la falsa propaganda de la derecha, el Go­bierno del Frente Popular mantuvo buenas relaciones con la Iglesia Católica. Durante su periodo, se realizó en Santiago un importante Congreso Eucarístico.

 

POLÍTICA INTERNACIONAL

En lo referente a política internacional,  la administración frentista se negó a participar en la llamada "Acción Conjunta Americana Contra la Unión Soviética", que tomaba como pre­texto el conflicto ruso-finés iniciado en noviembre de 1939. De esta forma se desbarató la maniobra de los Estados Unidos, lanzada a través de las cancillerías de Ecuador, Perú, Boli­via y Uruguay.

Junto con ello, mantuvo una firme actitud solidaria con el pueblo español, víctima de la guerra civil provocada por Franco. Otorgó asilo a republicanos perseguidos por el "generalísimo". Tarea en la cual Pablo Neruda jugó un rol decisivo.

El poeta realizó las gestiones en favor de los refugiados españoles entre abril y julio de 1939. Logró que zarpara el "Winnipeg", que llegó a Valparaíso el 5 de septiembre con 2.5OO republica­nos.

 

EL ARIOSTAZO

El 25 de agosto de 1939, el general Ariosto Herrera se di­rigió al regimiento Tacna, cuartel elegido para encabezar el golpe. Pero el comandante de ese regimiento, coronel Meza Luco, arengó a los oficiales y a la tropa y los convenció que debían respetar la Constitución y defender la autoridad legítimamente elegida. De esta manera, el complot fracasó.

Mientras tanto, al conocerse la noticia, masas de trabaja­dores, cincuenta mil personas, salieron a la calle, se instalaron frente a La Moneda, dispuestos a defender al gobierno del Frente Popular.

Ariosto Herrera fue detenido y llevado ante la justicia mi­litar. Ibáñez se asiló en la Embajada de Paraguay y salió del país. Este fallido intento de golpe se conoce como el "Ariostazo".

El general Carlos Prats,  en sus “Memorias. Testimonio de un Soldado”, escribe:

"Los oficiales del 'Maturana' nos mantenemos leales al man­do institucional. Mahn, Matus y yo, habíamos rechazado tajantemente, días antes, las sutiles insinuaciones de algunos camara­das de la guarnición que buscaron nuestro apoyo... Es mi prime­ra experiencia, como joven teniente, del absurdo de la ingenua concomitancia de la oficialidad joven con intereses espurios y oscuros que ellos, con la limpieza y honestidad de sus convicciones, no logran percibir. Pronto queda demostrado que el Ge­neral Ibáñez no estuvo ajeno al frágil contubernio antigubernamental."

El 31 de agosto de 1940 apareció el primer número de "El Siglo" que vino a reemplazar al  "Frente Popular". Era un dia­rio nuevo, diferente, ágil, moderno.

 

LOS COMUNISTAS Y EL GOBIERNO DE  PAC

El entonces Secretario General Comunista, Carlos Contreras Labarca, recuerda:

"Nuestro Partido se singularizó por su apoyo decidido a las medidas progresistas adoptadas por el Gobierno y defendió a este ante la tentativa de golpe de Estado del 25 de agosto de 1939. Pero no renunció a su derecho a expresar disconformidad  y cri­ticar las medidas que se apartaban del programa que, en con­secuencia, ponían en peligro la estabilidad del Gobierno y la integridad del Frente Popular. Observó que algunos pretendían arrebatar las conquistas sociales de los trabajadores a pre­texto de realizar  'planes económicos'; que la reforma agraria no se ponía en ejecución; que las masas eran víctimas del 'com­plot de la vida cara' , que no se depuraba el aparato del estado; que algunos utilizaban  el Poder con fines proselitistas;  que había manifestaciones de corrupción, etc."

 

PC: TODO EL PODER AL  FRENTE POPULAR

Los días 6 y 7 de agosto de 1939, tuvo lugar una sesión plenaria. del Comité Central del PC, donde se estudió la situación existente en el país y resolvió exigir "todo el poder al Frente Popular".

Hacia 1939 había signos evidentes de que el gobierno se deslizaba a la conciliación con la reacción.

Un ejemplo de ello fue lo que ocurrió con la política  agraria. Con fecha 28 de marzo de 1939, el Ministerio del Trabajo dictó la Orden Ministerial N.º 34 sobre Organización Sindical en los Campos, donde se ordenaba "la suspensión de toda tramitación de los procesos de constitución de sindicatos agrícolas, mientras la Comisión Obrero-patronal no emitiera su informe so­bre la controvertida cuestión del sindicalismo campesino".

Los comunistas  habían realizado exitoso trabajo hacia los campesi­nos en los marcos de la campaña electoral de 1938. Al año si­guiente, junto con los socialistas, constituyeron el Movimiento Pro- Asociación de los Campesinos y recorrieron los campos ha­blando de la necesidad de organizarse. Ello asustó a los lati­fundistas, que lograron que las autoridades suspendieran, a través de la Orden Ministerial 34, la formación de sindicatos campesinos y se constituye una comisión bipartita de patrones y obreros.

Se organizaron en el campo diversas organizaciones, unas controladas por el PS; otras, por el PC. Una de éstas es la Federación Nacional de Sindicatos Agrícolas; una segunda, la Federación Industrial de Trabajadores Agrícolas.

 

LA RUPTURA DEL FRENTE POPULAR

Hacia fines de 1940, tuvo lugar en La Habana una Conferen­cia Consultiva de Cancilleres Americanos. En ella, Estados Uni­dos, aprovechando las dificultades financieras y económicas de los países latinoamericanos, les impuso condiciones en favor de los intereses económicos y bélicos de los monopolios estado­unidenses.  La Conferencia Consultiva de Cancilleres de La Habana se caracterizó por un encarnizado anticomunismo, disfrazado bajo el llamado panamericanismo, concepto inventado por Estados Uni­dos ya en 1889, cuando se reunió la Primera Conferencia Panamericana.

Al encuentro de La Habana concurrió, representando a Chile, el ministro y dirigente socialista Oscar Schnake. Regresó a Santia­go el 15 de diciembre de 1940. Apenas pisó territorio nacional, declaró roto el Frente Popular y lanzó duros ataques contra el Partido Comunista. Planteó que el programa del Frente Popular

debía ser dejado de lado y, en su lugar, proclamó la necesidad de una po­lítica de emergencia ante la Guerra Mundial, de colaboración con Estados Unidos, "aunque no podamos comer tan bien como de­biéramos comer". En lugar del gobierno del Frente Popular, propició "un gobierno fuerte", "una democracia nueva, jerarquiza­da, dirigida", cuya misión seria imponer "orden y disciplina" y establecer una "dictadura económica". 

El Partido Comunista  respondió con firmeza. Ratificó, una vez más, su fidelidad al Programa del Frente Popular; reafirmó su voluntad de defender la soberanía y la dignidad de Chile.

Radicales y  comunistas reaccionaron ante las declaraciones de Schnake, conminando al PS a pronunciarse si continuaba o no en el Frente Popular. Los socialistas respondieron diciendo que no volvían al FP porque "estaba inspirado por el Partido Comunis­ta, cuya Política nacional e internacional... (era) contraria a los intereses del país"

 

ELECCIONES PARLAMENTARIAS DE 1941

El 2 de marzo de 1941, ya disuelto el Frente Popular, se efectuaron elecciones parlamentarias. Se presentaron juntos radi­cales y  comunistas, mediante un pacto aprobado por el PR el 13 de enero. Los comicios arrojaron los siguientes resultados:

Para senadores: 9 elegidos por el Frente Popular ( 6 del PR y 3 del PC), 2 del PS;  9 de la derecha (5 P. Conservador, 3  PL, 1 Agrario)

 

Diputados:  68 del Frente Popular ( 41 PR; 17 PC; 7 PD, 2 de César

Godoy Urrutia; 1 PR-Socialista);  15 del PS

62 de oposición (29 conservadores; 22 liberales; 5 agrarios; 3 Falange Nacional; 2 Vanguardia Nacional;  2 P. Demócrata; 1 Liberal Independiente.