martes, 5 de junio de 2018

FUNDACIÓN DEL PARTIDO COMUNISTA DE CHILE










       


Hace 106 años:

 

         FUNDACIÓN DEL PARTIDO COMUNISTA DE CHILE


                                                              Iván Ljubetic Vargas


                                                               “Y este habitante transformado
que se construyó en el combate,
este organismo valeroso,
esta implacable tentativa,
este metal inalterable,
esta unidad de los dolores,
esta fortaleza del hombre,
este camino hacia mañana,
esta cordillera infinita,
este armamento de los pobres,
salió de aquellos sufrimientos,
de lo más hondo de la patria,
de lo más duro y más golpeado,
de lo más alto y más eterno
y se llamó Partido.
PARTIDO COMUNISTA.”


            (Pablo Neruda: “Canto General”)


1912 fue la época de oro del salitre.  Funcionaban 170 oficinas salitreras, que empleaban el Sistema Shanks, que requiere abundante mano de obra.  Laboraban cerca de 50 mil obreros, que aportaban el 52% de los ingresos ordinarios del país.  El norte Grande, en especial la región de Tarapacá, bullía en actividad.
En ese escenario nació el Partido Comunista.  El 4 de junio de 1912, se reunieron alrededor de treinta  revolucionarios en el local de “El Despertar de los Trabajadores”, ubicado en  calle Barros Arana Nº 9 de la ciudad de  Iquique.
La proposición de Recabarren de constituir una nueva organización fue aprobada por unanimidad.  Por mayoría, se resolvió denominarla Partido Obrero Socialista. Por entonces los partidos revolucionarios se llamaban socialistas o socialdemócrata.

LOS FUNDADORES
En el Acta Oficial de esa reunión del 4 de junio, publicada en “El Despertar de los Trabajadores”,  de Iquique, con fecha 6 de junio de 1912, se mencionaban 27 nombre de participantes en ella y se agregaban:  “y otros amigos”.
Los fundadores del Partido, según esa Acta Oficial fueron:  Luis Emilio Recabarren (Presidente), Enrique Salas (Vicepresidente), Néstor Recabarren (Secretario), Ruperto Gil (Secretario), David Barnes (ciudadano ecuatoriano,Tesorero), E.  Aguirre Bretón ( ciudadano español, delegado), Teresa Flores (única mujer fundadora del PC), Elías Lafertte, L.  Zavala, J.  Faúndez, E.  Jorquera, L.  Vargas, E.  Díaz, J.  Francisco García, Luis Figueroa, Ladislao Córdova, D.  M.  Agüero, Juan Alvarez, R.  Olivares, A. López, E. Corbetto, José del Carmen Aliaga Véliz, A. Martínez, Salvador Barra Woll y Miguel Carrasco.  En total, veintisiete.
En otras versiones de esa sesión constituyente del Partido, se entregaron  siete nombres más: Emilio Alvarado, Julio Arredondo, Facundo Castro, Vicente Cortez, Eleodoro Rodríguez, Gregorio Salinas e Ignacio Salinas. Pensamos que éstos podrían ser los mencionados como “otros amigos” en el Acta.

MÁS ANTECEDENTES
En ese documento, partida de nacimiento del Partido Comunista -según afirma Orlando Millas en su trabajo “Medio siglo de Partido Obrero en Chile”, publicado en revista ‘Principios’ Nº 90, julio -agosto  de 1962-   se señalaba
“Se dio cuenta que la anterior Asamblea había nombrado una comisión que actualmente redacta las bases y reglamentos del nuevo Partido, los que una vez terminados serán presentados a las Asambleas y respectivamente a las seccionales”.
Ese mismo día 4 de junio, se constituyó el Partido en la Oficina salitrera “Abra”.  Casi simultáneamente surgió en Punta Arenas.  Poco después se organizaron las secciones de Tocopilla, Antofagasta y Taltal.  Algo más tarde, las de Valparaíso, Santiago, Concepción, zona del carbón y otras ciudades.

SURGE DEL PARTIDO DEMÓCRATA
Con fecha 18 de febrero de 1913,  apareció en le periódico ‘El Despertar del Trabajadores’, de Iquique, un Informe de Luis Emilio  Recabarren dirigido   a la Segunda Internacional y titulado ‘La Labor Obrera en Tarapacá’. En él se afirmaba: “En enero de 1912, no existía en Tarapacá organización obrera ni socialista, con excepción de la Cooperativa Obrera Tipográfica y el gremio de cargadores y panaderos... Agregaba  que “en el mes de junio, 22 secciones del Partido Demócrata se transformaron en Partido Socialista y continúan una marcha regular, desde el punto de vista orgánico político”.
Las secciones de Tarapacá a las que hacía mención Recabarren eran:  Iquique, Centro Lagunas, Gloria, Primitiva, San Pablo, Argentina, Alianza, Rosario de Huara, Cala Cala, Cholita, Barcelona, Ramírez, Bellavista, Amelia, Abra, Jazpampa, Pan de Azúcar, Agua Santa, San Lorenzo, San Remigio, Pozo Almonte y Pisagua.

AÚN PENABA LA MASACRE de 1907
En ese mismo Informe se sostenía que al iniciarse 1912, junto con el auge de la industria del salitre, Tarapacá aún vivía con el recuerdo y las hondas cicatrices dejadas por la masacre de la Escuela Santa María de Iquique.  Durante ese año “el espíritu obrero muy decaído por la cruel matanza en la huelga de 1907, recién empieza a reanimarse”.
Fue en estas condiciones,  que revolucionarios chilenos dieron nacimiento al Partido de la Clase Obrera.

UN PARTIDO PARA LA REVOLUCIÓN
Marx y Engels escribieron en el ‘Manifiesto del Partido Comunista’, editado el 24 de febrero de 1848:  “Los comunistas sólo se distinguen de los demás partidos proletarios en que, por una parte, en las diferentes luchas nacionales de los proletarios, destacan y hacen valer los intereses comunes a todo el proletariado, independientemente de la nacionalidad; y, por otra parte, en que, en las diferentes fases de desarrollo por que pasa la lucha entre el proletariado y la burguesía representan siempre los intereses del movimiento en su conjunto...
El objetivo inmediato de los comunistas es el mismo que el de todos los demás partidos proletarios:constitución de los proletarios en clase, derrocamiento de la dominación burguesa, conquista del poder político por el proletariado”.

ARREBATAR EL PODER A LA BURGUESÍA
En el Programa del POS, publicado como folletín por “El Despertar de  los Trabajadores”, entre el 8 de octubre y el 21 de noviembre de 1912, se sostiene:
“Considerando que la necesidad, la razón y la justicia exigen que la desigualdad y el antagonismo entre una y otra clase desaparezcan, reformando o destruyendo el estado social que produce.
El Partido Obrero Socialista expone que el fin de sus aspiraciones es la emancipación total de la Humanidad, aboliendo las diferencias de clases y convirtiendo a todos en una sola clase de trabajadores, dueños del fruto de su trabajo, libres, iguales, honrados e inteligentes, y la implantación de un régimen en que la producción sea un factor común y común sea también el goce de sus productos.  Esto es, la transformación de la propiedad individual en la propiedad colectiva o común...
“Realizaremos lucha política, para arrebatar a la burguesía el poder político dominante en el actual estado de cosas.”

COINCIDEN EN VARIOS ASPECTOS
Resulta evidente la influencia que en ese primer Programa del Partido Comunista de Chile tuvo el Manifiesto del Partido Comunista, cuya primera edición se hizo en Londres, en alemán, el 24 de febrero de 1848.  Veamos algunas de las coincidencias entre ambos documentos.

MANIFIESTO COMUNISTA (1848)         PROGRAMA DEL PC DE CHILE (1912)

“Un fantasma recorre Europa:                          “Los enemigos del socialismo
el fantasma del comunismo”                              lo desfiguran y presentan su
                                                                               doctrina muy distinta de lo
                                                                               que es en su realidad”

“La historia de todas las so-                              “Las clases existen.  Son un
ciedades hasta nuestros días                            hecho.  Desde que existen cla-
es la historia de las luchas                                 ses, existe lucha entre ellas”.
de clases”.

“En sustitución de la antigua                              “El fin de sus aspiraciones
sociedad burgués, con sus cla-                         (del Partido) es la emancipa-
ses y antagonismos de clase,                            ción total de la humanidad,
surgirán de una asociación en que                   aboliendo las diferencias de
el libre desenvolvimiento de ca-                         clases y convirtiendo a todos
da uno será la condición del                                 en una sola clase de trabaja-
libre desenvolvimiento de todos”                         dores, dueños de los frutos
                                                                                 del trabajo, libres, iguales,
                                                                                 honrados e inteligentes”.

“El Gobierno del Estado moderno                      “Los privilegios de la burgue-
no es más que una junta que ad-                      sía están garantizados por el
ministra los negocios comunes                            poder político, el que tiene
de la clase burguesa”                                         en sus manos y con el cual dis-
                                                                                 dispone de las fuerzas                                                                            
                                                                            opresoras”

“El rasgo distintivo del comu-                               “La transformación de la pro-
nismo no es la abolición de la                                piedad privada en colectiva no
propiedad en general, sino la                                 significa en ningún caso un
abolición de la propiedad bur-                                despojo de los bienes necesa-
guesa”.                                                                      rios para el individuo en be-
                                                                                    neficio de la comunidad”.

“La propiedad privada burguesa                        “La existencia de la propie-
moderna es la última y más aca-                         dad privada y su consagración
bada expresión del modo de pro-                         presente es la causa motriz
ducción y de apropiación de lo                             de todos los males existen-
producido basado en los antago-                          tes.  Por eso es que el socia-
nismos de clase, en la explota-                              lismo ha nacido como remedio
ción de los unos por los otros.                               ineludible para este mal social”.
En este sentido, los comunistas                                 
puede reasumir su teoría en esta
fórmula única:  abolición de la
propiedad privada”.


LOS PRIMEROS ESTATUTOS
En los Estatutos o Reglamento del Partido, incluido es el mismo folletín, se señala:

“Artículo 1.-  El Partido Obrero Socialista es fundado con el objeto de reunir todas las fuerzas proletarias del país, a fin de mejorar de común acuerdo, la suerte del proletariado”.
“Artículo 2. -  Para cumplir esta tarea y para realizar enseguida su objetivo más elevado:  la demanda completa de los trabajadores, el Partido se organizará sobre el terreno económico y político”. 
Con toda razón, pudo manifestar Recabarren en su discurso ante la Cámara de Diputados, el 15 de julio de 1921: “El Partido Socialista desde el año 12 ha acogido las ideas comunistas”.

LOS PRIMEROS PASOS
Elías Lafertte relata en ‘Vida de un Comunista’:
“Nuestra ideología, en aquella época, era muy incipiente.  Creo que ninguno de nosotros –salvo Recabarren- había leído a Marx o Engels.  Los libros de estos pensadores eran escasísimos.  Indudablemente el hombre más capacitado de todos los que formábamos en el movimiento era Recabarren, pero entre Recabarren y nosotros había una enorme distancia en cuanto a preparación, madurez política y formación ideológica.  No éramos propiamente marxistas.  El marxismo llegó al POS andando el tiempo, a través de los estudios, de los libros que vinieron de Europa, de las relaciones internacionales, de los viajes de los compañeros y de la cooperación de la Internacional Comunista.  Pero teníamos en nuestro interior, me refiero a los militantes socialistas, la materia prima para forjar luchadores:  la capacidad de lucha, la resistencia a la injusticia, el espíritu de organización, el sentimiento de la unidad, el orgullo proletario, y sobre todo, el sentido de clase”

UN EDUCADOR COLECTIVO
Con esas cualidades y limitaciones, el Partido realizó valiosas tareas en los años iniciales de su existencia.  En 1912, por ejemplo, llevó adelante una importante labor de educación política en Tarapacá. En el Informe a la Segunda Internacional ya citado, Recabarren señalaba: Las conferencias efectuadas “pasan de 60, con unos 20 oradores.  Temas: explicación de la doctrina socialista, medios de lucha, organización obrera, cooperativas, crítica, anticlericalismo, antimilitarismo.  Entre los oradores de que dispone la organización obrera se cuenta una niña de 14 años, Rebeca Barnes, y una joven de 22 Teresa Flores...  Las conferencias, la prensa y los folletos van produciendo buenos resultados en la formación de la conciencia”.

HACIA  LOS OBREROS Y LAS MUJERES
Desde los primeros meses de la existencia del Partido, los comunistas dedicaron serios esfuerzos a organizar los gremios obreros.
A partir de 1913, se crearon Centros Femeninos, con el estímulo que significó la visita de la conferencista española Belén de Sárraga.  En esta labor se destacó Teresa Flores.  Estos Centros Femeninos se adherían públicamente a los postulados del Partido.
El desarrollo del movimiento de las mujeres, especialmente significativo en el norte, tuvo enorme relevancia debido a que ocurrió en momentos que aún subsistía el reflujo del movimiento sindical, producto de la masacre de la masacre de la Escuela Santa María de 1907.