Iván
Ljubetic Vargas, historiador del
Centro
de Extensión e Investigación
Luis
Emilio Recabarren, CEILER
Marinus van der Lubbe nació en Leiden el 13 de enero de 1909. Fue un comunista neerlandés, luchador antifascista, acusado falsamente por los nazis (igual que a Jorge Dimitrov) de perpetrar el incendio de Reichstag en Berlín. El 27 de febrero de 1933 murió guillotinado por los nazis. Póstumamente, la justicia alemana lo declaró inocente de ese caso en dos ocasiones en 1980 y en 2008.
Su padre, Franciscus Cornelis van der Lubbe, fue vendedor ambulante y abandonó a su familia cuando Marinus tenía siete años. Marinus recibió educación en un orfanato. Su madre murió en 1921, y él empezó a trabajar a los 14 años de aprendiz de albañil. En esta época entró en contacto con las ideas revolucionarias. En la biblioteca de Leyden leyó a Karl Marx y recibió educación por las tardes.
En 1925 ingresó al Partido Comunista de los Países Bajos.
En 1924 y 1927 sufrió dos accidentes que le dañaron los ojos. Desde entonces cobró una pensión que complementó con varios trabajos temporales.
Intervino en manifestaciones públicas del Partido Comunista. Ello le trajo problemas con la policía de Leiden.
En 1933, tras la llegada al poder de Hitler, pensó que la clase obrera alemana reaccionaría y se desataría la revolución en Europa, por lo que acudió a Berlín. Sin embargo, allí encontró resignación ante el fascismo. Entonces decidió llevar a cabo alguna protesta llamativa por su cuenta para animar a la clase obrera a luchar contra el gobierno nazi.
El día 25 de febrero intentó incendiar el Palacio Imperial y una oficina de desempleo sin éxito. El 27, le acusaron de haber incendiado el Reichstag. Fue detenido inmediatamente después del incendio.
El día 24, la policía afirmó, tras un registro a las oficinas del partido comunista, que había encontrado propaganda que animaba a la revuelta, aunque en realidad no encontraron nada. Hubo detenciones masivas de comunistas y socialistas. Se puso en marcha la maquinaria de propaganda nazi. Al día siguiente el decreto de emergencia le dio más poder al Reichstag y a Hitler. Este decreto, que acabó con las libertades individuales, fue la plataforma sobre la que se asentó la dictadura nazi.
Marinus van der Lubbe fue juzgado en Leipzig con tres
ciudadanos búlgaros: Dimitrov, Tanev y Popov.
acusados también del complot. Los búlgaros fueron absueltos, tras una
histórica defensa realizada por Dimitrov.
Pero van der Lubbe fue condenado a muerte. Estuvo siete meses encadenado
en su celda. Emprendió una huelga de hambre, pero le obligaron a alimentarse.
Marinus van der Lubbe murió en la guillotina de la prisión de Leipzig el 10 de enero de 1934, tres días antes de cumplir veinticinco años. Fue enterrado en una tumba sin nombre en el Cementerio Sur de Leipzig.
Póstumamente, la justicia alemana lo declaró inocente en
ese caso en dos ocasiones en 1980 y en 2008.
