jueves, 19 de enero de 2023

ETTORE SCOLA: GRAN CINEASTA Y REVOLUCIONARIO ITALIANO

 


A 8 años de su partida física:

 

 

 

                                                        Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                                        Centro de Extensión e Investigación

                                                        Luis Emilio Recabarren, CEILER

 

 


 

Etorre Scola nació el 10 de mayo de 1931 en Trevico, provincia de Avellino, Italia.

Poco después de su nacimiento, su familia se trasladó a Roma, ubicándose en el distrito de Esquilino.

Con solo quince años comenzó a dibujar caricaturas que le llevaron a trabajar el periodismo humorístico en el diario Marc'Aurelio, mientras estudiaba Derecho en la Universidad de Roma. 

Un edificio, dos protagonistas. Una obra de arte. Así se podría resumir "Una Giornata Particolare" ("Un día particular", 1977), una de las mejores películas del director italiano Ettore Scola, quien falleció este miércoles en Roma a los 84.

Los actores: los enormes Sofía Loren y Marcelo Mastroniani. La historia: dos personas que se encuentran en medio de la soledad de un enorme edificio el mismo día en que Hitler visita por primera vez la Italia conducida por Benito Mussolinni.

Con sutiles, pero profundos planos y secuencias, Scola, considerado como uno de los fundadores del cine moderno italiano, logró darle un tono épico al encuentro de una ama de casa y a un locutor sin empleo que aprovechan un día entero para entablar una relación inolvidable.

Y ese sello le dio fama a Scola en el mundo del cine y por eso el planeta de la cultura lo despide como el último maestro de la época dorada del cine italiano. 

Además de "Una Giornata Particolare" sus obras más conocidas son "Il Sorpasso" (1962), "La Familia" (1987), "La Cena" (1990) y tal vez una de las más recordadas en América Latina: "Nos habíamos amado tanto", de 1974.

  

 



Su obra se enmarca en una crítica social no exenta de humor negro, como sucede con Brutos, feos y malos, premiada en Cannes, en 1976. Historia de un pobre hombre (1995) narra la amistad entre dos generaciones marginadas, la juventud y la vejez. En La cena (1998) relata lo que sucede en las dos horas en que esta gente está sentada en la mesa del restaurante, toca muchos otros temas como los celos y la envida. 

Nunca ocultó sus simpatías políticas a la izquierda y formó parte del Partido Comunista Italiano. En 1989 asumió la responsabilidad del Patrimonio Cultural.

Casado con la guionista y directora Gigliola Scola. Junto a sus dos hijas, Paola y Silvia, presentó en noviembre de 2015, en la Fiesta del Cine de Roma, un documental sobre su vida y su carrera: Ridendo e scherzando. 

Ettore Scola falleció el 19 de enero de 2015 en el Policlínico de Roma a los 84 años.