lunes, 3 de abril de 2023

Contradicciones.

 


Comentario radial y escrito.

 



 


 

 

 

Desde el punto de vista del desarrollo integral del “pá onde vamos”, algunos verán “cachuos” y en contradictorios, los encuentros de mandatarios europeos con el gobierno comunista chino. 

Mandatarios, por ejemplo, como Pedro Sánchez, Socialdemócrata, presidente de y con, un gobierno de coalición, coalición compuesta por organizaciones políticas de izquierda. 

La Socialdemocracia, me atrevo a decir que, predomina gobernanza al libre albedrio, con conservadores, liberales y fascistas, en casi toda Europa. 

Y no es solamente en China, los encuentros se están dando por todos lados y rincones. 

Y no es malo…A pesar de cocinas como en latas de sardinas, todas enladrilladas a dedo para tal efecto. 

Un fenómeno de “mano negra” se está dando por todo el mundo, especialmente en Europa, que, obedientes y en susurros, empaquetan y criminalizan al unísono, al país de azul y bicicleta. 

Tienen al pais de Mao, que arropa a 56 etnias, como ofensores consuetudinarios de los derechos humanos. 

Lo ven como una amenaza potencial, extraña, es el espectro de las correlaciones de fuerzas. 

España, Dinamarca, Suecia, Noruega, Reino Unido, Marruecos, Países bajos, Arabia Saudita, no son extraños ni raros. 

Hoy, se habla del socialismo siglo XXI, del agua en la luna y en la posibilidad de Saturno, y en estos países nombrados, hay reyes, príncipes y princesas. Historiadores cuentan los haceres reales, sus vivires y cobertizos. 

Todo en desmedro del pan y del lápiz público, derechos que no llegan a los rincones por donde se mueven los que sobran. Todo en desmedro del verso y del sentido común, del desespero del medro y de la mentira. 

Tener reinas y princesas, sequitos, personal para barrer largas escaleras, dormitorios y cocinas; el cuidar y mantener jardines y parques prohibidos al tránsito del pobrerío, debe de costar tanto y más, que, el costo de ser, el de todos los días, de un país como Haití. 

¡Que viva el accionar mediático que mantiene orgullosos a los hidalgos linajes! 

¡Honor y gloria! 

Cuando se dice que un gobierno es elegido en un estado de derecho, este es, mandatado por el poder del pueblo. 

Es el pueblo, que ha ejercido a través del voto, universal y secreto su parecer e identidad soberana. 

Este gobierno elegido para y por su pueblo, se desenvuelve y vuelve, como en mi país, con una democracia mentida. 

La transforman en un parpadeo en una contradicción infame; de doble filo, estacas sé asoman a los bordes del agua y levantan mostradores en un mar de desiertos sedientos. 

El pueblo no puede desarrollar su soberanía con estacas ajenas. La relación social con el medio productivo se transforma en una lucha de clases inconciliable. 

Puede ser una república, como lo es mi paisito Chile, como lo es Perú, Bolivia, Argentina. Se asoma lo judicial, lo legislativo y lo ejecutivo. (Y en cada habitación de poder, un montón de mentiras corcheteadas por el milagro de la presión mediática) 

De acuerdo con una “bitácora al yugo y muerte”, Europa, sus países, exceptuando Cuba, no son tan diferentes a los países de nuestro sur de América. 

Antes de la llegada de Colon a Guanahani, nuestra América, su desarrollo social y de vida, del conocimiento y el de andar en dioses de tierra y firmamento, nos hace angelitos recontra buenos, al lado de la vida llevada por las civilizaciones de Eurasia. 

Ando muy choriao, por ser cómplice de los sepultureros. 

La vida es bella dicen los que vuelan la perdiz, y comparto eso de lo maravilloso que es la vida, en si…Pero, vivirla como lo hacemos, es una infamia. 

España, país invasor, con carabelas o con empresas, lleva arrastrando, toda ella, una monarquía, como, para no olvidar los despojos y genocidios del colonialismo, que aún pueden ordeñar. 

En sus “venas abiertas” tienen “Guernica”; 36 años de fascismo criminal, mentiroso y clerical. 

Hoy, en los parlamentos en que se abriga la democracia, se asoman “democráticamente” los perros de presa del Capital, el fascismo, las creencias religiosas, el analfabetismo político, el oportunismo, el “lumpen proletario”, mandatados a proteger el neoliberalismo; que no es otra cosa que la actualización, de la explotación del hombre por el hombre 

Y esto que digo, es el dibujo, más menos, del 80 % de los países del mundo. Francia, Alemania, Reino Unido, Italia, Estados Unidos, Irán, Turquía; tienen a su pobrerío iracundo y en las calles, hoy, húmedas de sangre y con miedos. 

Los guardianes del orden, mete palo y bala. 

Y a estas alturas del partido, es una contradicción muy retriste. 

Acaso, no maldicen ustedes, no escupen, a los que matan segundo tras segundo a Julián Assange. 

¡Cadalso que avergüenza Suecia! 

Es una contradicción hedionda. 

Me atraen las contradicciones, sin ellas, nos bañaríamos en arenas movedizas. 

Como resolver contradicciones. 

Si no las resuelves, en ellas se quedarán, se esconderán, se esfumarán los caminos… y quedaremos por allá abajo varados… 

Mirando admirado, babiano agradeciendo el poder mirar pa arriba. 

Que contradicción más canalla. 

¿Como desatamos condena? 

Como desato mi propia contradicción, como llegue a este país de agua que amo, como hablo este idioma que no entiendo y me confunde, me escribe, lo escribo, lo canto, lo imagino. 

No me viste por dentro y por fuera es mío. 

Resolver las contradicciones, será la lucha de clases, la que eliminará el zozobrar. 

Las contradicciones antagónicas, las no antagónicas, sus análisis, las corregidas, la vida de los pueblos, la dialéctica, serán ellas las herramientas para cambiar la vida. 

Chemimare. 

Un existir, que no obligue al enfrentamiento a muerte, del que tiene harto, porque le roba al otro, a ese, que no le queda ni para morir. 

La propiedad privada en los medios de producción es la causa de una contradicción ajena al sentido común. 

Los momios, el capital imperial, impiden a sangre y fuego las intenciones de emparejar la vida. 

Y tanto es lo maldito, que apuestan con el son mediático al exterminio. 

Dan ganas de llorar, de reír a carcajadas. 

Lo que tenemos que hacer es elegir, votar bien, y defender con tu alma y entendimiento, con tu fuerza y conciencia de vida y clase, la identidad de ese voto que callo en la urna. 

Hay una contradicción irreconciliable, deshonesta y hedionda: 

Dar una preferencia y luego negarla. 

Alejandro Fischer Alquinta. 

Estocolmo 20230403.