domingo, 5 de marzo de 2023

Agencio.

 


Comentario radial.

 

 

 


Para poder interpretar, sumarme, entender, para decirle a mi creencia, ¿adónde quieren que vaya?; necesito autoincentivarme, automotivarme. 

Ando muy re lejos, me queda solamente el recuerdo de los olores. 

Para poder empaparme de las infinitas problemáticas y desafíos políticos orgánicos y sociales que tiene nuestro gobierno, me obligo a regresar a mis vivencias antiguas, a las tiras y aflojas, que hoy, son mucho más complicadas que ayer. 

Como que mis creencias y empujones de las 40 medidas, sus contenidos ya no asustan ni al mandinga. 

Sin embargo, se trata de lo mismo; del miedo cerval, que violenta y enloquece al riquerio, al Imperio, al capital: 

Perder sus hegemonías, sus supuestas pertenencias. 

Y tienen razón, la guerra entre Rusia y la OTAN, algunos guerreros anglosajones, son botón de muestra, y botones hay por todos lados…: Yemen, Afganistán, Siria, Myanmar, Irán, Arabia Saudita, Etiopía, Palestina Israel, Sahara…Ay Perú. 

Así lo dicen. 

El mostrario es muy de desdicha y sangre. 

A costa de matar por otros lados, les cambian la ropa a los iluminados patrióticos, republicanos, que invadieron la casa de Abraham Lincoln. 

Y muy cara de berenjena, nos llaman “patio trasero o bananeros”.  

Los que andamos y quedamos por lejos, con la próstata como animita, nos traemos las enseñanzas ya vividas del FRAP (Frente de Acción Popular) y sobre todo el de la UP (Unidad Popular). 

De lo que hicieron, de lo que hicimos, fuimos y somos. 

Y, sobre todo, como hemos influido en la lucha de los pueblos oprimidos. 

Actualmente, en el mundo entero, no hay noticiero que no hable el accionar de los mil días del gobierno de Salvador Allende. 

Hoy, políticamente hablando, somos un tanto extraño, nos perdimos en el árbol y cerramos los ojos al viento. 

En un parpadeo en estrecho, se nos va la vida. 

Yo era un niño y escuchaba los encuentros de los viejos. 

Qué manera de discutir y de agachar el moño. 

Centralismo Democrático le llamaban. 

Recuerdo que los viejos insistían en la unidad de todas las fuerzas progresistas de la época. A los demócratas cristianos les hacían los puntos. 

El enredo era grande, había, hay, algunas fuerzas que comulgan y proponen que la clase más revolucionaria y sus colectividades, vayan sola a la contienda. 

Clase contra clase, a “poto pelao”. 

En una de esas, otra Escuela Santa María, puede valer la pena. 

Nos olvidamos de la idiosincrasia de nuestro pueblo, de la cuestión transgénica…De la diversidad del pensar, de ser, de creer. 

Yo vi hogares, con la cruz de Cristo adornando la bandera de la hoz y el martillo. 

Las aniña no sirven. 

Nadie tenía en particular, la fuerza social necesaria para golpear la mesa. 

Es decir, la política de alianzas y la fuerza propia era y es, una llave maestra para educar, entregar cultura social, que el sentido común, sea un almacigo siempre viva. 

Tenemos que Imaginarnos, un pais que no tiene la misma calle que un día transitamos. 

El darnos cuenta de que los baches son los mismos, no queda otra que apretar los glúteos y seguir con la porfía de la madre naturaleza. 

Y a pesar de todo somos más jóvenes que antes… 

La ley maldita nos dejó más fuerte y más juntos más martillo; el Winnipeg nos sonríe, nos quedamos con la encacha de Fidel y Nikita; la mismita Cuba heroica la llevamos por todos los caminos, Vietnam corre por nuestras venas. 

La rebelión popular y el Frente Patriótico Manuel Rodríguez lo llevamos en primera línea. 

Tenemos el privilegio de haber sido condenados por pretender materializar el pan, el libro, el digno vivir y las calaminas a través de cambios estructurales, no mágicos, cambios en la ubicación del pueblo, a la salida de un medio de producción. 

La nacionalización del cobre y la reforma agraria. 

Con esos pecados capitales la hegemonía del imperio estaba valiendo un moco. 

El fascismo, ganador de muerte, hoy por hoy, esa ideología de contención y de exterminio, se ha cambiado de ropa y se sienta inmoral y soberbio, arrogante, en las cámaras legislativas de los países del mundo, 

Y habitantes como yo, que hemos perdido una batalla, la vida, los sueños, nos obliga a gritar que la problemática es la misma de siempre. 

Se sabe que los incendios forestales en su mayoría son provocados, el paro de camioneros y todo lo que manifieste caos, tiene un fin político. 

El riquerio, se mantiene vivo en las masacres, en el caos. Lo he dicho otras veces. 

Respiren Berlín, Londres, Polonia…Hasta Leningrado esta bonito y con el mismo nombre de antes. San Petersburgo. 

Ciudades, que, por la guerra, tienen las mismas calles, la misma gente. 

Uno queda un tanto avergonzado de nosotros mismos. Uno se pone cachuo. 

Quizás por eso me miro dos veces en el espejo 

¿Seré yo? 

Por andar tan re lejos, me llamo la atención el decir de un funcionario de gobierno: “Desde el punto de vista programático”. 

Yo cerré los ojos, asustado… 

Me había olvidado del programa, de su seguir. 

La cuestión de los impuestos. 

Que todos paguen impuestos de acuerdo con las entradas y ganancias, bajar las horas de trabajo. 

Los tifones que sopla el capital se vienen temibles y terriblemente ciegos e inmorales. 

Si realmente se entendiera lo que pasa en Europa, en Ucrania en Rusia, no quedaría ninguna arma de fuego o de metal en movimiento. 

El intelecto tiene que funcionar. 

En los medios de comunicación informan, instruyen de la conducta a seguir, de actuar en un posible conflicto nuclear. 

Este pensar, es para mí un crimen de lesa humanidad. 

Se está mintiendo. 

Lo que paso en Hiroshima es peor que el Alzheimer. 

Y claro, lo digo muy prisco, estoy, casi, al centro de lo que puede quedar mi sombra…Estiro la mano y llego a la Plaza Roja, saludo a Lenin. 

Hace frio en Moscú. 

Pero tengo que decirlo… 

Yo no quiero tanto grito, tanta rabia, tanto canto, yo no quiero “Hasta siempre compañero, compañera.” 

Carlos Marx, Federico Engels, 175 años atrás demostraron científicamente en el “Manifiesto”, no solamente la explotación del hombre por el hombre, sino también, el supuesto caminar del pirgüín, su adaptación y desarrollo. 

Como se puede entender que, a estas alturas del árbol, no se entienda la necesidad ineludible de cambiar sistemas que hacen más ricos a los ricos y al pobrerío más pobre… 

El sistema de pensiones, de seguridad social, por ejemplo. 

Existimos por el hacer de ese hombre barreno y pala que llego a ser un viejo, ese que canta viruta, del caminante de cerros y pizarrones, del que canta canto, del poeta y artesano, del intelectual, del culto con o sin conocimientos. 

Y no solamente en mi paisito, en el mundo entero; sin embargo, hay aleteos de águilas oscuras, que pretenden acortar la vida. 

Si una previsión social de acuerdo con el desarrollo de la humanidad y al sentido común, se aplican en un sistema democrático, humanista, solidario, existe la posibilidad lógica, que algunos de los privilegios del riquerio se transformen en capitales públicos para levantar poblaciones y centros modernos de geriatría. 

Detrás de este decir, hay una verdad política que da miedo, una realidad y un hacer, que necesita de todo el sentido común para almacenar una identidad de país, de planeta. 

La propiedad privada, cueva de empresarios corruptos, propietarios del metal, del trigo y del agua… MALINCHE.

 

Alejandro Fischer Alquinta. 

Estocolmo 20230305.