Un día como hoy, 2 de febrero, hace
80 años, el ejército rojo derrotó a las tropas hitlerianas en Stalingrado, batalla
que fue decisiva en el desarrollo de
Un abrazo internacionalista,
Iván Ljubetic Vargas.-
2 de Febrero de 1943: victoria soviética
en
Iván
Ljubetic Vargas, historiador del
Centro
de Extensión e Investigación
Luis
Emilio Recabarren, CEILER
El General nazi Friedrich Paulus avanzó hacia la ciudad de
Stalingrado con 250.000 hombres, 500 tanques, 7000 morteros y ametralladoras, y
25.000 caballos.
Durante el transcurso de las siguientes semanas, sus tropas mataron o capturaron a
50.000 rusos. El 18 de agosto, Paulus,
se encontraba ya a tan solo 55 kilómetros de la simbólica ciudad de Stalingrado.
La defensa encabezaba el general Semión
Timoshenko.
SE INICIA
El 23 de agosto de 1942 se inició la batalla de
Stalingrado. Paulus decidió ahorrar combustible y optó por avanzar solo con su
XIV Cuerpo Panzer. El Ejército Rojo atacó y se produjo la detención del avance nazi junto a las afueras de
Stalingrado.
El resto de las fuerzas nazis retomaron el avance. Paulus tenía rodeada la
ciudad. Su flanco norte fue atacado. Paulus decidió retrasar el ataque sobre
Stalingrado hasta el 7 de septiembre de 1942. Mientras esperaba,
Una vez iniciada la ofensiva terrestre, los alemanes
pudieron comprobar que los soviéticos estaban dispuestos a sacrificarse en la
ciudad cuyo nombre honraba a Stalin. Cuanto más se adentraban los
alemanes en la ciudad, mayores dificultades experimentaban al tener que
enfrentarse a luchas callejeras interminables que se saldaban con elevados
números de bajas.
LUCHA CASA POR CASA
Los tanques alemanes eran menos eficaces en un área urbana
fortificada como la de Stalingrado, ya que aquí era más bien cuestión de luchar
casa por casa con rifles, pistolas, ametralladoras y granadas de mano. Los
nazis tuvieron graves problemas con las posiciones de artillería y los nidos de
ametralladora, hábilmente camuflados por el Ejército Rojo a lo largo de toda la
ciudad.
Además, los soviéticos hicieron un gran uso de sus
francotiradores, agazapados en los ruinosos edificios que ahora conformaban el
paisaje de la otrora gloriosa ciudad de Stalingrado. El 26 de septiembre, el
6.º Ejército fue capaz de izar la bandera con la esvástica en los edificios
gubernamentales de
HITLER: TOMAR
STALINGRADO A CUALQUIER PRECIO
Llegados a este punto, un furibundo Hitler le ordenó a
Paulus conquistar Stalingrado al precio que fuera. Ahora bien, Paulus, que
había perdido a 40.000 soldados desde su entrada en Stalingrado, estaba
quedándose sin combatientes y el 4 de octubre le hizo llegar a Adolf Hitler una petición
desesperada de refuerzos.
Al cabo de unos días, recibió cinco batallones de
ingenieros y una división panzer. Con una estrategia de guerra de desgaste en
mente, Stalin respondió a estos refuerzos ordenando la entrada de tres
ejércitos más en la ciudad. Las bajas soviéticas fueron mucho más
elevadas que las de los alemanes.
Las fuertes lluvias de octubre
convirtieron las carreteras en lodazales
y los convoyes de suministros del 6.º Ejército nazi comenzaron a verse atrapados en el barro. Y
la situación iba de mal en peor: el 19 de octubre la lluvia se convertía ya en
nieve. Paulus siguió, pese a todo, avanzando, y a comienzos de noviembre de
1942 ya controlaba el 90 % de la ciudad de Stalingrado.
NUEVA POTENTE OFENSIVA NAZI
Sin embargo, sus hombres se
enfrentaban ahora a problemas de munición y comida. A pesar de estos problemas,
Paulus decidió ordenar de nuevo otra potente ofensiva el 10 de noviembre. El
Ejército Alemán sufrió graves pérdidas durante los dos días siguientes y
entonces el Ejército Rojo inició un contraataque.
Paulus se vio obligado a retroceder hacia el sur, pero
tras llegar al aeródromo de Gumrak, Adolf Hitler le ordenó detenerse y oponer
resistencia, pese al gran riesgo de ser rodeados en una bolsa por el enemigo.
Hitler le aseguró que Hermann Goering había prometido que
Los oficiales de Paulus plantearon sus serias dudas sobre
si una operación aérea de dicha envergadura podría llevarse a cabo con un clima
invernal como el que estaban soportando. Hubo un acuerdo sobre la necesidad de
una retirada antes de que el Ejército Rojo lograse consolidar sus posiciones.
El propio General Hans Hube le dijo a Paulus que una retirada era su única
posibilidad de salvación. Paulus respondió diciendo que no le quedaba más
remedio que acatar las órdenes del Führer.
APOYO AÉREO NAZI
Durante el mes de diciembre de 1942,
FRACASA OPERACIÓN DE
RESCATE ALEMÁN
Adolf Hitler, ante la posibilidad de que el 6.º Ejército se rindiera, ordenó al
Mariscal de Campo Erich von Manstein y al 4.º Ejército Panzer el inicio de una
operación de rescate. Los refuerzos logaron
llegar a
En Stalingrado, perdieron la
vida 28.000 soldados nazis en solo un
mes. Con apenas comida, Paulus dio la difícil orden de no alimentar a los
12.000 soldados heridos que no podían combatir. Erich von Manstein le dio
entonces a Paulus la orden de realizar una retirada masiva de tropas. Paulus
rechazó la orden y argumentó que sus hombres estaban demasiado débiles para
realizar un movimiento como el que se les exigía.
RENDICIÓN DE TROPAS INVASORAS
El 30 de enero de 1943, Adolf
Hitler ascendió a Paulus a Mariscal de Campo y le envió un mensaje recordándole
que nunca se había apresado a un Mariscal de Campo alemán. De esta manera, Adolf Hitler le
sugería a Paulus de manera clara el suicidio, pero Paulus decidió hacer caso
omiso y al día siguiente se rindió al Ejército Rojo. Las últimas fuerzas
alemanas en territorio ruso se rindieron el 2 de febrero de 1943.