miércoles, 3 de febrero de 2021

EL DESAFUERO DEL SENADOR PABLO NERUDA

 

 

                                               Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                               Centro de Extensión e Investigación

                                               Luis Emilio Recabarren, CEILER

 

 


 

El 3 de febrero de 1948 la Corte Suprema acordó el desafuero del senador Pablo Neruda.

 

El poeta había sido  el Encargado de Propaganda de la candidatura presidencial del radical González Videla, quien triunfó en las elecciones del 4 de septiembre de 1946 y asumió la Presidencia el 3 de noviembre de 1946.

En su primer Gabinete participaron tres ministros comunistas. Traicionó el Programa que había jurado cumplir. El 21 de octubre de 1947 comenzó la represión contra los comunistas. Fueron detenidos cientos de dirigentes y militantes. Los enviaron al campo de concentración de Pisagua y a otros lugares del país.

González Videla en septiembre de 1948 promulgó la “Ley Maldita”.

Pablo Neruda – entonces senador de la República – jugó en esos tiempos de persecución el rol de vocero, la voz irreductible  de los comunistas.

 

Neruda escribió un mensaje denunciando  la traición del Presidente Gabriel González Videla. Ante la imposibilidad de publicarlo en Chile – el único diario que se atrevería a hacerlo, ‘El Siglo’, está sometido a censura – lo envía a Venezuela con el título de “Carta íntima para ser leída por millones de hombres”.

El 27 de noviembre de 1947 aparece en “El Nacional”, de Caracas, causando enorme expectación mundial. 

 

González Videla inició un juicio político contra el poeta. Este respondió pronunciando,  el 6 de enero de 1948 un valiente  discurso en el Senado, publicado con el título “Yo acuso”.

En esa intervención señaló Neruda:

“Al acusarme de haber herido el prestigio de mi patria por haber publicado en el extranjero la verdad que en mi patria un régimen de facultades extraordinarias y de censura no me permite hacer saber, no me infiere una injuria a mí mismo sino a los más grandes hombres de la humanidad y a los padres de la patria”.

 

Neruda como Senador de la República.  Respondió: “A mí no me desafuera nadie, sino el pueblo”. El 3 de febrero de 1948, la Corte Suprema acordó  el desafuero de Neruda.

 

Al día siguiente los tribunales ordenaron su detención.  El poeta pasó a la clandestinidad.  La tarea principal que le entregó el Partido fue dar término a su “Canto General”.  Escribió oculto en distintas casas solidarias.

 

Lo acompañó Delia, su fiel compañera. Pasaron a ser el tío Pedro y la tía Sara. Debieron cambiar continuamente de morada. Estuvieron en 11 casas distintas. En una ocasión fueron sacados a las tres de la madrugada para trasladarlos a una parcela de Santa Ana de Chena. Fue allí donde terminó el poeta su ‘Canto General’, en el cual estuvo trabajando todos los días de clandestinidad. Y Delia, La Hormiga, llevando a cabo las correcciones de los originales con tinta verde.

El 5 de febrero, en la primera página del diario “El Imparcial”, con letras excepcionalmente grandes se anunciaba: “Se busca a Neruda en todo el país”.

El 24 de febrero de 1949 Neruda abandonó Chile cruzando la cordillera por la  región austral. Y en los momentos en que la policía del traidor aseguraba  tenerlo rodeado y pronto a ser detenido, apareció en París, el 25 de abril de 1949, en el Primer Congreso Mundial de los Partidarios de la Paz.