El Circulo
Virtual de Estudios Histórico-Políticos rinde homenaje al sabio y militante
comunista Alejandro Lipschutz con moltivo de conmemorarse el martes 28 de
agosto, el 129º aniversario de su nacimiento.
Carlota
Espina
Editora
UN SABIO LLAMADO
ALEJANDRO LIPSCHUTZ
Iván Ljubetic Vargas
“Cuando me vio llegar a esa inolvidable casa
de
Teatinos y Compañía, con
mi pequeño hijo Vladimir, me saludó con fineza y sencillez. Extendiendo su
mano, saludó con ternura a mi pequeño. Cada vez que nos volvíamos a encontrar
me preguntaba: ¿Y cómo está Vladimir? Es
que don Alejandro Lipschutz era de una altísima calidad humana”
(Ramón Meneses: “El Doctor Alejandro Lipschutz”. El
Siglo, 29 agosto - 4 septiembre de1992)
Alejandro Lipschutz Friedman, nació en Riga,
capital de Letonia, el 28 de agosto de 1883. Científico, médico, académico y
filósofo chileno de origen letón. Militante desde 1904 del Partido Obrero
Social demócrata Ruso, el Partido de Lenin, participó activamente en la
Revolución de 1905. La ofensiva reaccionaria que se desató a continuación lo
obligó a abandonar Rusia y a vivir como exiliado en Alemania, Austria y otros
países europeos. En 1907 se tituló en
Doctor en Medicina en la Universidad de Göttingen, Alemania. En 1908 fue contratado por la
Universidades de Berlín, donde inició investigaciones sobre el sistema
nervioso . Más tarde ejerció la docencia en la Universidad de Berna, Suiza, Sus
trabajos en el campo de la fisiología le dieron pronto un prestigio
internacional. Sobre esta especialidad
escribió más de veinte libros. Su obra “¿Por qué morimos?” alcanzó más
de dieciséis ediciones en alemán y otros idiomas, antes que abandonara Europa.
LLEGA A
CHILE
En abril de 1926 llegó a Chile, acompañado de su
esposa Margarita Vogel, invitado por la Universidad de Concepción para ejercer
como profesor de Fisiología, especialidad recién creada. en la Facultad de
Medicina. Así se inició la relación entrañable que el Profesor Lipschutz iba a
mantener toda su vida con Chile, donde desplegó, a lo largo de más de medio
siglo, una portentosa labor científica en diversos campos: fisiología, endocrinología,
investigación sobre el cáncer, antropología, investigaciones marxistas. En 1941
el Congreso Nacional le entregó la
nacionalidad chilena.
SU LABOR
CIENTÍFICA
Pronto se transformó en decano de la Facultad de
Medicina de esa Universidad de Concepción. Luego fundó el Instituto de Fisiología de la misma
Universidad y la Sociedad de Biología de Concepción, y dirigió el Boletín que
ésta publica. En 1937 fundó el Instituto de Medicina Experimental del Servicio
Nacional de Salud, cuya dirección ejerció hasta 1960. Después fue catedrático
de la Universidad de Chile, donde creó la cátedra de Fisiología
También se dedicó a la sicología. Hizo profundos
estudios sobre las teorías de Freud y Pavlov. En Buenos Aires se publicó su
obra “Pavlov, Freud y Schweitzer, Tres médicos contemporáneos”. Dedicó largos
años a la antropología. Entre los libros que escribió sobre esta materia, hay
dos que son verdaderos hitos: “El problema racial en la conquista de América y
el mestizaje” e “Indoamericanismo y raza india”. En ambos se encuentran
fundamentales investigaciones sobre las culturales indígenas y la destrucción
que de ellas hicieron los civilizados invasores europeos. En “Oriente y
Occidente: del neolítico al siglo XX”, una de sus últimas obras, entregó
valiosa y desconocida información en que demostró los avances de la cultura
indigenista.
MILITANTE
COMUNISTA
El domingo 8 de julio de 1945, en un teatro Caupolicán que se hizo estrecho para contener a los asistentes, tuvo lugar un acto político, con el cual se clausura la XVI sesión plenaria del Comité Central del Partido Comunista de Chile. Como telón de fondo en el proscenio, un enorme retrato de Luis Emilio Recabarren, el fundador, con la consigna ‘Por la grandeza de Chile’. Abre El mitin el diputado Carlos Rosales. Se canta la canción nacional. Hace uso de la palabra el diputado y dirigente del Magisterio César Godoy Urrutia. Luego se vive un momento de honda emoción. Ingresan al Partido una serie de personalidades. Son saludados con un discurso por Galo González. Entre los que reciben su carné de militante y hacen la solemne promesa están el sabio Alejandro Lipschutz, el poeta Pablo Neruda; el director de la Orquesta Sinfónica de Chile, Armando Carvajal, la soprano Blanca Hauser, la poeta Olga Acevedo, el poeta Juvencio Valle; el director del Teatro de la Universidad de Chile, Pedro de la Barra; el escritor Nicomedes Guzmán, la maestra María Marchant y varios destacados dirigentes sindicales. Hablan Alejandro Lipschutz y Pablo Neruda.
Ricardo Fonseca pronuncia el discurso de resumen
del Pleno y da cuenta de sus principales resoluciones. La Internacional,
cantada a todo pulmón, puso fin a esa jornada.
“EL HOMBRE
MÁS IMPORTANTE DE MI PAÍS”
En 1963, cuando Alejandro Lipschutz cumplió 80
años de edad, Pablo Neruda escribió: “El hombre más importante de mi país vive
en una vieja casa que enfrenta la gran Cordillera. Desde el fondo de su jardín
suele sentarse a contemplar los inmensos muros de piedra nevada que nos aíslan,
haciéndonos daño, y nos preservan, haciéndonos bien. Se ve muy frágil mi amigo,
con la mirada puesta en la colosal blancura, su cabeza y su barba parecen un
pequeño pétalo caído desde la magnitud de la nieve... El más universal de los
chilenos nació lejos de estas tierras, de estas gentes, de estas cordilleras. Pero
nos ha enseñado más que millones de los que aquí nacieron: nos ha enseñado no
sólo ciencia universal, método sistemático, disciplina de la inteligencia,
devoción por la paz. Nos ha enseñado la verdad de nuestro origen mostrándonos
el camino nacional de la conciencia. Y su sabiduría nos revela que la
exactitud, la plenitud y la pasión pueden convivir con la justicia y la
alegría.
“El hombre más importante de mi país en estos años
en que escribo es don Alejandro Lipschutz, vecino de Los Guindos, suburbio de
Santiago. En estos días cumple ochenta años de vida, y me siento orgulloso de
dejar aquí este débil retrato escrito de un alma ardiente, de un sabio
verdadero. Mi orgullo es, además, decir aquí que casi nunca nos vemos desde que
yo me vine a vivir a Isla Negra, seguimos siendo los sencillos amigos que se
intercambian de casa a casa hallazgos nuevos, flores y poesía.”
“EL MÁS
UNIVERSAL DE LOS CHILENOS”
Pablo Neruda agrega más adelante:
"Es el gran iluminador marxista de regiones
oscurecidas de nuestra historia, oscurecidas por la charlatanería sin sustancia
o por la interesada vileza. Por lo tanto, sus palabras despiertan, como las
revelaciones poéticas, la contraola del furor, la estéril espuma reaccionaria. Sobre
esos oleajes del pasado, nuestro inextinguible amigo trabaja a plena conciencia
dándonos tanta luz que aun somos incapaces de medirla.
El hombre más importante de Chile no mandó nunca
regimientos, ni ejerció nunca un Ministerio, no mandó sino que fue mandado en
una Universidad de provincia. Sin
embargo, para nuestra conciencia, es una General del pensamiento, un Ministro
de la creación nacional, el Rector de la Universidad del porvenir.
El más universal de los chilenos nació lejos de
estas tierras, de estas gentes, de estas cordilleras. Pero nos ha enseñado más
que millones de los que aquí nacieron; nos ha enseñado no sólo ciencia
universal, método sistemático, disciplina de la inteligencia, devoción por la
paz. Nos ha enseñado la verdad de nuestro origen, mostrándonos el camino
nacional de la conciencia. Y su sabiduría nos revela que la exactitud, la
plenitud y la pasión pueden convivir con la justicia y la alegría".
RECONCIMIENTO INTERNACIONAL
Numerosas universidades europeas, asiáticas y
americanas lo designaron Doctor Honoris Causa.
Recibió premios de categoría
internacional, como el de la Academia de Ciencias de Nueva York, en
1944, el de la Casa de Las Américas, de La Habana, en 1974.
En nuestro país recibió en 1969 el Premio Nacional
de Ciencias. En 1972 fue investido como Académico Honorario del Instituto de
Chile..
LOS FASCISTAS SE ENSAÑAN CON EL SABIO
Después del
11 de septiembre de 1973 la soldadesca irrumpió en su hogar de la calle
Hamburgo 366. Los esbirros de Pinochet
mostraron su valor ante dos débiles ancianos. El sabio y su esposa contemplaron cómo los asaltantes vaciaban
brutalmente los estantes, botando libros y objetos que se destruían al caer;
cómo les robaban cosas. En 1975 murió Margarita, su esposa. Habiendo quedado
solo y sin recursos para vivir en
condiciones normales, fue llevado al
Hogar Israelita de Ancianos. Allí falleció el 10 de enero de 1980, a la edad de
97 años.
EN EL
CENTENARIO DE SU NACIMIENTO
En 1983, el
escritor y periodista José Miguel Varas publicó en ‘El Boletín Rojo’ un
artículo titulado “El centenario de un sabio comunista”, donde expresó: “El
profesor Lipschutz nunca ocultó sus convicciones y participó a lo largo de
muchos años en la actividad del Partido Comunista. Siempre acompañado por
Margarita, su esposa, lo vimos participando en actos públicos de diverso
carácter, incluso durante la proscripción del Partido, bajo el régimen de
González Videla. En 1944, intervino en la fundación del Instituto
Chileno-Soviético de Cultura, a cuya actividad entregó un gran aporte. En marzo
de 1972, cuando algunos partidarios de la Unidad Popular vacilaban ante la
creciente ofensiva de la reacción, ingresó en un acto público al Partido
Comunista de Chile. Al periodista soviético Guenadi Sperski, que conversó con
él aquel día, le dijo sonriendo; "De hecho, hace mucho que estoy en el
Partido. Trabajo en él desde hace muchos años. Mi ingreso ahora es más que nada
un acto formal.”