Iván Ljubetic Vargas, historiador
Centro de Extensión e Investigación
Luis Emilio Recabarren. CEILER
Eran las 15 horas de hoy domingo 17 de abril de 2022 cuando
recibí una llamada telefónica de la compañera Carlota Espina. Era para darme
una triste noticia: había dejado de latir el corazón de una gran militante
comunista, la querida camarada Mireya Baltra Moreno.
Conocí a Mireya en Nueva Imperial, localidad en cuyo liceo era profesor de
historia y ella formaba parte de la delegación que acompañaba al entonces
candidato a
Después, he estado con ella en
reuniones en el exilio, en Congresos del Partido y en una serie de actividades,
varias de ellas en Ñuñoa.
UNA MUJER
EXTRAORDINARIA
Deseo mostrar algo de la existencia de esta comunista
ejemplar, que cumple 90 años de gloriosa historia.
Nació en Santiago el viernes 26 de febrero de 1932. Hija de José Baltra Baltra y María
Moreno Cabezas, humildes suplementeros de diarios y revistas en pleno centro de
la capital. Su padre fue miembro del Partido Radical. Su infancia transcurrió
entre el conventillo que habitaba y los montones de diarios.
Realizó sus estudios en el
Liceo Manuel de Salas y en el Liceo N° 5 de Niñas. Desde pequeña atendió junto
a sus padres el 0 que tenían en la esquina de las calles Ahumada con Agustinas.
Debido a los problemas económicos familiares, se estableció en 1957 por cuenta
propia en la venta de periódicos, con su quiosco ubicado en las calles Matías
Cousiño con Moneda que, según ella, fue su “propio mirador de observaciones
sociales”.
Trabajó como reportera de la revista "Vea" entre 1948 y
1950, y en "El Siglo" entre 1960 y 1964. “La mujer como fuerza política”
fue el título de su primer artículo en este diario. También
escribió en “El Espectador” y “La Última Hora”.
DIRIGENTE DE SUPLEMENTEROS
Como vendedora de diarios, ingresó al Sindicato de
Suplementeros. Fue elegida encargada del Departamento Femenino del sindicato,
luego promovida a
En el Tercer Congreso de
REGIDORA, DIPUTADA Y
MINISTRA DE ALLENDE
En 1963 fue electa regidora por Santiago de Chile, ejerciendo
hasta 1967, siendo reelecta ese año. En 1969 resultó elegida Diputada por el primer distrito de Santiago,
para el período 1969 -1973.
En 1972 renunció a su cargo de Diputada, al ser designada
por el Presidente Salvador Allende,
Ministra del Trabajo y Previsión Social.
En las elecciones de marzo de 1973 fue reelecta Diputada
esta vez por el cuarto distrito, cargo que ejerció hasta el 11 de septiembre de 1973.
PERSEGUIDA POR LOS
FASCISTAS
Desde los primeros días del Golpe militar de 1973 la
dictadura emitió bandos en los cuales Mireya Baltra, junto a otros destacados
miembros del Gobierno de
La dirección del Partido Comunista de Chile decidió que se
asilara en la embajada de Holanda junto con Gladys Marín diputada y secretaria
general de las Juventudes Comunistas de Chile, Julieta Campusano, Senadora y
Orlando Millas, Ministro de Hacienda del Gobierno de Allende; Permanecieron
asilados en esa sede diplomática durante nueve meses.
EN EL EXILIO
En 1974 partió al exilio, llegando primero a Holanda y
posteriormente se trasladó a Checoslovaquia. En Praga el cargo de Secretaria
General del Comité Sindical Internacional de Solidaridad con Chile. Después de
nueve años viajó a Cuba, asumiendo el cargo de secretaria ejecutiva del Frente
Continental de Mujeres contra
RETORNO CLANDESTINO
A
El 20 de marzo de 1987, junto con Julieta Campusano entró
clandestinamente a Chile atravesando la cordillera de los Andes a caballo, por
el paso Tronador, a la altura de Osorno,
acompañadas por arrieros y dirigentes del Partido Comunista Argentino.
Anteriormente había intentado entrar al país junto a otros exiliados; dos
intentos en avión los cuales fueron devueltos a Argentina y el último por el
túnel las Cuevas que cruza desde Argentina a Chile, donde veintiún exiliados
chilenos fueron detenidos, golpeados y devueltos a Argentina por agentes de
La travesía por la cordillera duró diez días. Cruzaron la
frontera, llegaron a Puerto Montt y de ahí se dirigieron a Santiago, a donde
llegaron el domingo 22 de marzo de 1987.
Permanecieron clandestinamente
hasta el martes 12 de mayo, día en que se presentaron, en medio de la
expectación de los periodistas, ante
RELEGACIÓN Y CÁRCEL
Mireya a Puerto Aysén en el
extremo sur; Julieta, a Sierra Gorda en
Cumplida su relegación, Mireya Baltra volvió a Santiago se
incorporó a la lucha contra la dictadura militar. Fue detenida luego de una
conferencia de prensa clandestina, junto a José Sanfuentes, Américo Zorrilla y
Guillermo Scherping.
En su detención fue aplicada
LUCHADORA INCANSABLE
En la década de 1990, fue
candidata del Partido Comunista en las elecciones de diputados de 1993 y de
senadores de 1997. En ambas fue derrotada.
Incansable, Mireya Baltra siguió tomando parte en diversas actividades políticas y sociales hasta que su salud le permitió.
El jueves 24 de octubre de
2014, medio siglo después de haberla
conocido, ambos Fuimos expositores en el Panel “Recabarren y el Movimiento
Obrero, a 43 años del inicio del Gobierno Popular” organizado por el Centro de
Extensión e Investigación Luis Emilio Recabarren CEILER, en el salón del ICHIL,
en avenida Brasil 153, Santiago Centro.