El 30 de julio de 1915, hace
98 años nació un comunista ejemplar:
Enrique Kirberg. El Círculo Virtual
de Estudios Histórico-Políticos le rinde homenaje y coloca su vida como
modelo de luchador por un mundo mejor.
Carlota Espina.
Editora.
En el 98
aniversario de su
nacimiento:
ENRIQUE
KIRBERG BALTIANSKY
Iván
Ljubetic Vargas, historiador del
Centro
de Extensión e Investigación
Luis
Emilio Recabarren, CEILER
Lo conocí en Moscú en
un encuentro de dirigentes de los comunistas chilenos exiliados, repartidos por casi toda la
tierra, y una delegación venida desde la Patria. Él representaba a los comunistas
chilenos desterrados en Estados Unidos;
yo, a los que vivíamos el ostracismo en
la República Federal Alemana. Fue a mediados del año 1984. Por varios días
estuvimos debatiendo, con la cabeza y el corazón puesto en nuestro lejano país.
Ahí tuve la
oportunidad de conversar con el camarada Enrique Kirberg, conocer la modestia,
la fraternidad, la alegría de vivir, la sabiduría que emanaba su persona.
Desgraciadamente fue
la única ocasión en que estuvimos
juntos.
DESDE JOVEN UN REVOLUCIONARIO
Enrique Kirberg nació
en Santiago el 30 de julio de 1915. Era hijos de inmigrantes judíos. Pasó su
infancia en Valparaíso y Quilpué. Estudió, en calidad de alumno interno, en la
Escuela de Artes y Oficios.
Siendo adolescente
sufrió la desgracia de quedar huérfano.
Sus lecturas, pues era
un incansable lector, y las largas
conversaciones con su tío Mauricio, el menchevique, influyeron en el joven
Enrique. Era un observador agudo de los acontecimientos de su tiempo. Observador, pero especialmente
actor. Participó activamente en las guardias estudiantiles a la caída del
dictador Carlos Ibáñez el 26 de julio de
1931. Tenía por entonces 16 años.
En los
turbulentos doce días de la llamada
República Socialista, del 4 al 16 de junio de 1932, tomó parte en el Soviet,
presidido por Elías Lafertte, que funcionó en la Casa Central de la Universidad
de Chile.
CATEDRÁTICO UNIVERSITARIO
Fue fundador y primer
presidente de la Federación de Estudiantes Mineros e Industriales de Chile,
FEMICH. Le correspondió iniciar y encabezar la intensa y exitosa campaña que,
en los años 40 del siglo XX, hizo posible el surgimiento de la Universidad
Técnica del Estado, UTE, en base a las
siete escuelas técnicas superiores que existían en diversas ciudades del
país.
Sin abandonar las
tareas del Partido, en las que se destacó por su responsabilidad y
disciplina, Enrique Kirberg se tituló de ingeniero eléctrico y continuó
su carrera profesional y académica. Llegó a ser catedrático en la Universidad Técnica del Estado y en la Escuela
de Arquitectura de la Universidad de Chile en Santiago y Valparaíso.
CANDIDATO COMUNISTA A LA UTE
En 2001, el doctor
Hugo Díaz explicaba que “Eran los días
de la Reforma Universitaria. Recuerdo que estábamos en reunión de la Comisión
Universitaria a comienzos de 1968, estudiando una proposición hecha al Partido por los radicales y masones
para que le apoyáramos a su candidato a Rector en la UTE. Después que informó
sobre esto Fernando Ortiz, Enrique París dice: ¿y por qué no llevamos candidato propio? Creímos que era
un chiste. Nos reímos. Luego Fernando dijo que era una idea digna de
estudiarse. Preguntamos ¿quién podría ser nuestro candidato? Enrique Kirberg, respondió el compañero
París. Luego de un intercambio de opiniones, llegamos a la conclusión que no
era un chiste, que era posible realizar esa proposición. Y se acordó hablar con
el compañero Kirberg. Éste aceptó postular y llegó a ser elegido y reelegido
Rector de la UTE”.
RECTOR DE LA UNIVERSIDAD TÉCNICA
Fue así como el 20 de
agosto de 1968, en las primeras elecciones democráticas en la UTE, en que como
fruto de la Reforma Universitaria votaban por primera vez académicos,
estudiantes y funcionarios, cuando se produjo la gran sorpresa: el candidato
comunista Enrique Kirberg era elegido Rector.
Su excelente gestión,
unida al trabajo de la izquierda, permitió su reelección al año siguiente.
Y ya en pleno Gobierno
Popular presidido por Salvador Allende,
fue reelegido por tercera vez. En las elecciones del 29 de julio de 1972, la
Unidad Popular obtuvo un importante triunfo en la Universidad Técnica del
Estado. Enrique Kirberg fue elegido rector y Ricardo Núñez, secretario general.
De los 80 miembros del nuevo Consejo Universitario, 54 eran de la Unidad
Popular y de estos, 26 del Partido Comunista, que se transformó en la primera
fuerza política de la UTE.
UN RECTOR REVOLUCIONARIO
Gracias a los
gigantescos logros de la gestión administrativa del Rector Kirberg y a la
Reforma Universitaria, la UTE se
transformó en la segunda Universidad en importancia y la única, junto con la
Universidad de Chile, con existencia
nacional. Entre 1969 y 1973 Kirberg fundó 24 institutos tecnológicos de Arica a
Punta Arenas
La UTE experimentó un
cambio de calidad. Abrió sus puertas al Chile que vivía los tiempos de la
revolución llevada adelante por la Unidad Popular. El Convenio CUT-UTE permitió
el ingreso a ella de los trabajadores.
En lo interno, todos
sus estamentos participaban activamente en la conducción del proceso de la
Reforma. En los claustros renovados se realizaban riquísimas discusiones sobre
los problemas de la Universidad, del país y del mundo. Nada era ajena a esa
comunidad empapada del pensamiento y de la
práctica revolucionaria.
EL ODIO DE LOS FASCISTAS
Lo anterior explica la
furia fascista contra la UTE.
El 11 de septiembre de
1973 la historia de Chile fue cortada en dos por la espada asesina de los
usurpadores del poder. La Moneda fue bombardeada y atacada con tanques. Murió
allí el heroico Compañero Presidente.
La UTE fue rodeada por
la soldadesca. Ese día, estaba programado en ella un acto en que actuaría
Víctor Jara y el Presidente Salvador Allende convocaría a un plebiscito para
superar la crisis política planteada por la oposición derechista-democratacristiana.
Y, como si se tratara de una fortaleza, el 12 de septiembre las fuerzas armadas
asaltaron esa Universidad. El rector, académicos, estudiantes y funcionarios
que se encontraban en la sede, fueron tomados prisioneros y llevados al Estadio
Chile. Ahí fue torturado y asesinado Víctor Jara.
LA CONTRARREVOLUCIÓN EN LA UTE
La dictadura arrasó
con los cambios revolucionarios en la UTE como en todo Chile.
Sobre la UTE cayó la
represión fascista. Víctor Jara fue uno de los 62 miembros de su comunidad asesinados, otros cientos fueron
detenidos, cruelmente torturados, enviados a la cárcel, campos de concentración
o el destierro. El 50% de los profesores y funcionarios fueron exonerados. Las
23 sedes provinciales fueron borradas del mapa.
Enrique Kirberg fue
durante dos años un prisionero de guerra y luego lanzado al exilio.
El destierro lo vivió
en Nueva York y Montevideo.
VIVIRÁ EN SU OBRAS
Retornó a Chile en
1987. Lo que quedaba de su Universidad, lo recibió en triunfo: dos mil
estudiantes lo pasearon por el Campus de
Avenida Ecuador al grito: ¡¡Aquí está
nuestro rector!”
En agosto de 1991, ya
muy enfermo, volvió al viejo teatro de la Escuela de Artes y Oficios. Esta vez
para recibir el Doctorado Honoris Causa.
El corazón de Enrique
Kirberg dejó de latir el 23 de abril de 1992, pero su ejemplo de comunista
consecuente sigue vivo en el recuerdo de todos los que lo conocieron.