martes, 14 de octubre de 2014

CRÓNICA DE UNA GIRA MARAVILLOSA









CRÓNICA  DE UNA GIRA MARAVILLOSA

Iván Ljubetic Vargas, historiador del
Centro de Extensión e Investigación
Luis Emilio Recabarren, CEILER
   
Eran más de  las dos de  la madrugada de hoy lunes 13 de octubre de 2014, cuando el avión en que veníamos Max Berrú y el Diputado Hugo Gutiérrez  tocó tierra en el aeropuerto de Santiago. 

Con Max habíamos partido hacia el norte el viernes 10. Nuestra misión era el lanzamiento del libro “El Partido Comunista de Chile, un joven combatiente de más de 100 años” en Antofagasta e Iquique, regiones muy ligadas a la historia del partido revolucionario de la clase trabajadores chilena, en especial de su fundador, Luis Emilio Recabarren.

En Antofagasta nos esperaba un comunista a carta cabal, amigo de Max  y que ya pasó a integrar mi lista de buenos amigos.  Su nombre Rubén Pizarro. Nos llevó a su hogar. Nos dijo están en su casa. Y fue así, de verdad. Su compañera, Rosa Pastene, nos atendió con cariño y esmero.  Una de sus hijas, Génesis Pizarro es la secretaria de las JJCC  de Antofagasta; su hermano Moisés tiene un excelente conjunto  musical, el “Grupo Sindicato” que actuó con Max.

La presentación del libro en Antofagasta fue organizada, de manera impecable, por la célula Emérita Villa,  encabezada por las compañeras Nelly Lemus y Marisol Victoriano. Hubo 90 personas en un local muy bien adornado. Habló Max. Luego lo hice yo. En mi intervención agregué escrito a mano,
lo siguiente:
“Entre las muchas alegría que he tenido en esta ciudad, una me ha emocionado profundamente. Me di cuenta que no había arado en el mar. La compañera. Génesis Pizarro Pastene, SP de las JJ CC de Antofagasta me contó que, por iniciativa del joven comunista Víctor Tapia Araya, en esa ciudad se conmemora la verdadera fecha de fundación de la Jota, que nació en Antofagasta, el 1 de abril de 1923, en los tiempos de Recabarren.

Después de 20 años –agregué-  de intentos porque las JJ CC recuperen sus años perdidos, mis planeamientos han encontrado eco en esta ciudad. Los jotosos de Antofagasta deben estar orgullosos de ser los primeros en el país de celebrar  su cumpleaños en la fecha que corresponde”.

Se vendieron los 20 libros que habíamos enviados. Y faltaron. Encargaron siete más.
Después hubo una hermosa peña, con la actuación de un joven cantante. Y luego la brillante actuación de Max Berrú con el Grupo Sindicato.

Esta peña, dedicada a nuestro viaje, alcanzó tal éxito, que permitió cancelar los pasajes de toda la gira.

En Antofagasta tuvimos la oportunidad de visitar la sede del Partido, propiedad adquirida por el propio Luis Emilio Recabarren: allí se conserva una histórica imprenta también adquirida por el fundador. En ese local funciona Radio Mundo, que nos realizó, junto con Max, una extensa entrevista.

A Iquique llegamos a mediodía del sábado 11 de octubre. Allí la presentación del libro fue tomada por el propio Comité Regional del Partido, a cuya cabeza está el camarada Julio Aránguiz. El mismo nos fue a buscar al aeródromo, junto con la compañera    Irene Bravo, miembro del CR, que jugó   el rol protagónico en la preparación y realización del  exitoso y emotivo acto de lanzamiento del libro.

Este ser efectuó en el salón 0’Higgins del Palacio Astoreca. Abrió el acto la compañera Irene Bravo. Luego intervino e interpretó bellas canciones Max. El diputado Hugo Gutiérrez, que viajó especialmente para estar en este lanzamiento, hizo una presentación brillante, documentada y plena de emotividad del libro y se refirió con elogiosas palabra al autor.  Nos conmovió profundamente.

Luego vino una verdadera lucha por comprar un libro. Habíamos enviado 20. También faltaron. Se encargaron otros  9.

Para mi esta gira fue una experiencia inolvidable: ver con qué cariño los compañeros y amigos, recibían el libro; con orgullo lo lucían viejos pampinos y jóvenes revolucionarios; como la forma en que nos trataron en ambas ciudades. Ahí percibí con claridad que los comunistas constituimos una gran familia.   

Eso me hizo recordar los versos  de Neruda del  “Cuando de Chile” :     
                                                                                                                                    
“Ay cuando
podré entrar en la sala del Partido
a sentarme con Pedro Fogonero,
con el que no conozco y sin embargo
es más hermano mío que mi hermano.”

Pero esta crónica sería incompleta si no dijera lo importante que es Max Berrú para el CEILER. Es, como yo le digo, un abridor de puertas y también de corazones. Lo conocen en todos lados. Vi a jóvenes emocionadas y emocionados pedirle un  autográfo. Y él siempre tan sencillo y fraternal. Tan solidario. Gran parte del éxito de esta gira tiene que ver con Max.
Tampoco serían completas estas líneas si no dejara constancia del excelente trabajo, a control remoto, realizado por la compañera Norma Acuña.
En Iquique fui entrevistado por tres canales de televisión. En ambas ciudades me emocionaba cuando compañeros y compañeras querían sacarse fotos conmigo. Otros me regalaban libros. El diputado me regaló un maravilloso libro sobre Iquique. Un obrero me dio el tomo 1 de los escritos de Recabarren, casualmente el mismo que no me devolvió un compañero hace unos 20 años atrás.
Creo, para terminar, que le atinamos el palo al gato al publicar este libro: Aborda un tema que es deseado conocer por mucho. Si estos primeros pasos se ven ratificado en un mediano plazo, no es irreal pensar en una segunda edición.