jueves, 28 de marzo de 2013

La crisis capitalista y la inmigración latinoamericana en España









La crisis capitalista y la inmigración latinoamericana en España

Por: José Antonio Luis

Fuente: Chaskillakta


Cuando desde España, y desde el mundo desarrollado en general, se intenta analizar el fenómeno de las migraciones siempre surgen del imaginario colectivo aspectos relacionados con la marginación, la delincuencia, aspectos todos ellos emanados de un pensamiento clasista que trata de criminalizar la pobreza. El racismo se centra en l@s pobres. Sudaca, con perdón, es el jornalero del campo, pero no Shakira por muy colombianos que sean ambos.

Cuando existe una realidad social y económica como la que se sufre en el sur de Europa desde hace al menos tres años, son las clases trabajadoras las que sufren una pérdida en derechos sociales y en calidad de vida, y, de entre ellos, l@s inmigrantes son l@s más vulnerables debido a su diferente estatus legal.

La crisis capitalista creada por la avaricia del propio sistema y de sus servidores ha provocado en España una escalada de supresión de derechos sociales y laborales adquiridos por la lucha constante de la clase obrera organizada. Por un lado, el futuro de la economía se basa en la llamada competitividad, que no deja de ser la hipócrita manera de llamar al abaratamiento de los costes del proceso productivo y de la mano de obra, para así mantener el nivel de beneficio del empresario y del accionista. Y por otro lado, se dejan de prestar servicios como la sanidad y la educación por parte del estado, para brindar nuevos negocios que generen más beneficios a esos empresarios e inversores. Este doble proceso destinado a seguir saciando la gula del sistema y de sus servidores no hace más que rebajar la dignidad y la calidad de vida de las clases trabajadoras en general, rebajas en derechos laborales, en salarios y en prestaciones de servicios.

¿La situación de crisis afecta de igual forma a l@s trabajadores españoles que a l@s inmigrantes? Es necesario reconocer que l@s trabajadores extranjer@s sufren un chantaje adicional al que sufren l@s españoles, el dilema de ¨o lo que yo digo o a la calle¨, derivado de la Ley de Reforma Laboral, tiene en el caso del extranjer@ una lectura más amplia, ya que el desempleo conlleva una pérdida del permiso de residencia y una pérdida de derechos y prestaciones para l@s trabajadores y sus familias, como son el derecho a la atención sanitaria gratuita, el derecho a la educación y la amenaza constante de una repatriación forzosa, todo ello debido a la reforma de la Ley de Extranjería que condena a la persona inmigrante desempleada a la clandestinidad.

Hay que recordar que según datos oficiales, durante 2010 se afiliaron a la Seguridad Social española unos 652.000 latinoamerican@s, un 35% del total de personas extranjeras afiliadas ese año y que para el 2011 el desempleo afectaba a un 26% de las mujeres inmigrantes latinoamericanas en España y a un 36% de los hombres, y eso, a pesar de que según el informe de la OEA sobre migraciones de enero de 2013, la emigración latinoamericana hacia España disminuyó en el periodo 2008-2010 un 38% respecto al periodo 2005-2007, esto es, llegaron un@s 550.000 trabajadores latinoamerican@s en vez de l@s 860.000 del periodo anterior. La actualización de estos datos a la realidad del año 2013 presentaría un cuadro todavía peor, sobre todo en lo relativo al desempleo.

El cruce de datos certifica que la crisis capitalista tiene un efecto devastador en las condiciones de vida de cientos de miles de trabajadores inmigrantes latinoamerican@s en España, ya que se calcula que 7 de cada 10 trabajadores inmigrantes no cuentan con ninguna prestación económica declarada o son víctimas de la economía sumergida, sin contrato, y con unas condiciones laborales muy precarias. Sólo en Madrid se cree que hay entre 400.000 y medio millón de inmigrantes en esa situación.

La precariedad de las personas inmigrantes en España arrastra consecuencias que afectan a numerosos aspectos de la lucha obrera contra la crisis. El descenso de afiliados extranjeros a la Seguridad Social, debido al efecto de la economía sumergida, rebaja la caja de donde sale el dinero para pagar las prestaciones por desempleo, enfermeda. El desmarque de escolares extranjeros por el desempleo de sus padres pone en grave peligro la continuidad de escuelas, sobre todo en el mundo rural.

Todo ello nos lleva a enfatizar en la idea de que la inmigración tiene que estar acompañada de derechos laborales plenos y que para conseguirlo es necesaria la acción sindical y la participación de l@s inmigrantes en esa lucha.

La lucha actual en la Europa meridional es de resistencia ante las agresiones del sistema capitalista hacia los ciudadanos, hacia la clase obrera y hacia las personas inmigrantes, pero la lucha de mañana debe ser por la construcción de un mundo nuevo con nuevas relaciones sociales que acabe con el sistema de depredación actual.

A luchar!

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