jueves, 18 de abril de 2013

Declaración del PC y JOTA de la U de Chile






A LA COMUNIDAD DE LA UNIVERSIDAD DE CHILE

EN EL CONTEXTO DE LA SOSTENIDA CRISIS DE LA EDUCACIÓN PÚBLICA GENERADA EN DICTADURA, PERPETUADA EN LAS ÚLTIMAS DOS DÉCADAS POR LA CONCERTACIÓN Y AGUDIZADA DURANTE EL GOBIERNO DE SEBASTIÁN PIÑERA, EN EL MARCO DEL LANZAMIENTO DE CANDIDATURAS A RECTOR (A) Y CONVENCIDOS DE LA NECESIDAD DE CONSTRUIR CON LAS GRANDES MAYORÍAS UN MODELO EDUCATIVO A LA ALTURA DE LAS CIUDADANÍAS Y DE UN PROYECTO DE DESARROLLO NACIONAL, EL PARTIDO COMUNISTA Y LAS JUVENTUDES COMUNISTAS DE LA UNIVERSIDAD DE CHILE DECLARAMOS:

1) Nuestra defensa irrestricta de la educación pública, gratuita, de calidad, transparente y sin lucro; la vindicación de la misión y naturaleza de las universidades estatales y su rol insustituible en la creación y transmisión de conocimiento con una perspectiva latinoamericana, de país y de región. Reafirmamos la necesidad de revertir la injerencia de la economía de mercado en la producción y trasmisión de saber, contradictoria con nuestra misión pública.
2) Nuestro terminante rechazo del lucro en la educación,  del uso de  fondos estatales generados por todos los chilenos y chilenas en beneficio de universidades-empresa, de carácter privado,  así como del autofinanciamiento y la obtención de fondos estatales en el marco de convenios de desempeño. El gobierno de Sebastián Piñera y los gobiernos de la Concertación han universalizado la privatización y desregulación de las universidades, tal como ha quedado dramáticamente demostrado en el caso de la Universidad del Mar. No se trata de “ayudar” a las personas o a las familias a financiar la educación mediante el endeudamiento y enriquecimiento de la banca y del sector privado.
3) Nuestro compromiso coyuntural y estratégico con una formación estatal de profesores, de carácter público, al servicio de las comunidades regionales y del país a modo de revertir la intervención militar de 1981. Se trata de una reparación histórica de carácter masivo, a la altura de las necesidades del país, que debe resultar de procesos trasparentes, informados y participativos, que involucren a todos los actores e instituciones públicas involucrados. 
4) Nuestra alarma frente a la situación del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, el cual se autofinancia actualmente en más de un 95% de su presupuesto. Ello ha significado la merma constante del Hospital en sus valiosas e históricas funciones de docencia para la formación de profesionales y especialistas médicos, en la investigación y en su vinculación con la red del sistema público.
5) Nuestro compromiso con la lucha por crear una nueva institucionalidad en Ciencia y Tecnología, que permita situar la generación/aplicación de conocimiento al servicio de las grandes mayorías. Rechazamos las medidas arbitrarias de Gobierno vía CONICYT en detrimento de los postulantes a becas de postgrado nacionales y extranjeros y llamamos a apoyar su organización y sus demandas.
6)  Nuestra convicción sobre la necesidad de articular plena participación con excelencia académica, equidad e igualdad.  La meritocracia propia de la carrera académica no contradice los requerimientos de gobierno democrático.  Todo lo contrario. La calidad educativa se conjuga con calidad de vida y pleno ejercicio ciudadano de las comunidades que la ejercen. Repudiamos el accionar antidemocrático de autoridades universitarias en aquellas facultades que impiden el ejercicio de la participación estudiantil.
EXIGIMOS, EN CONSECUENCIA:
a) Participación triestamental ponderada de las comunidades en las elecciones de rector y de otras autoridades unipersonales.
b) Una carrera funcionaria para académicos, no académicos orientada a su desarrollo, capacitación y formación, con remuneraciones dignas y estabilidad laboral tendiente a incrementar la planta, disminuir las contratas y honorarios y poner fin definitivo a las contrataciones de servicios externos; un trato justo al desarrollo y remuneraciones de los académicos de postgrado.
c) Plena equidad social, intercultural y de género en el acceso de estudiantes de pre y postgrado a la Universidad, así como poner fin a las sostenidas alzas arancelarias y de matrículas estudiantiles. Ni el estudiantado ni las familias deben cargar sobre sus hombros una calidad educativa que debe ser responsabilidad del Estado.
d) Transparentar una política de financiamiento integral, transversal y equitativo que ponga fin a las desigualdades e innecesarias rivalidades en la distribución presupuestaria institucional.
e) La recuperación de la Señal Televisiva de nuestra Universidad.
NO SEREMOS PARTE DE DISPUTAS ESTRECHAS, CORPORATIVISTAS NI MEZQUINAS. LA ÚNICA GARANTÍA DE DEMOCRACIA REAL ES LA EXISTENCIA DE UN SISTEMA EDUCATIVO NACIONAL, ESTATAL Y PÚBLICO.

A NIVEL INTERNO, LLAMAMOS A LAS COMUNIDADES UNIVERSITARIAS A EJERCER TRIESTAMENTALMENTE SU VOLUNTAD CIUDADANA PARA UNA NUEVA REFORMA DE LOS ESTATUTOS VIGENTES.

A NIVEL DE PAÍS, SÓLO UNA NUEVA CONSTITUCIÓN NOS DEVOLVERÁ LA PLENA CONFIANZA EN EL EJERCICIO POLÍTICO CIUDADANO PARA CONSTRUIR CON GRANDES MAYORÍAS UN NUEVO PROYECTO DE DESARROLLO NACIONAL QUE GARANTICE NUESTROS DERECHOS A LA EDUCACIÓN, A LA SALUD, A LOS RECURSOS BÁSICOS.

A PARTIR DE UNA AMPLIA CONSIDERACIÓN PROGRAMÁTICA, LLAMAMOS A CONVERGER MAYORITARIAMENTE EN UNA UNIVERSIDAD A LA ALTURA DE NUESTROS SUEÑOS Y UN CAPÍTULO REAL Y PROFUNDAMENTE DEMOCRÁTICO DE NUESTRA HISTORIA NACIONAL


PARTIDO COMUNISTA DE CHILE (UNIVERSIDAD DE CHILE)
JUVENTUDES COMUNISTAS DE CHILE (UNIVERSIDAD DE CHILE)
ABRIL 2013