El
12 de febrero tiene lugar una sesión solemne del Consejo Directivo Nacional con
motivo del 12 aniversario de la
CUT. En esa
oportunidad le corresponde a Juan Vargas Puebla leer los saludos de la Federación Sindical
Mundial, de la
Confederación de Trabajadores de Cuba y de organismos
nacionales.
Es
designado Tesorero de la Comisión Organizadora del IV Congreso Nacional de
la Central
Única. (“El Siglo”, sábado 23 de enero de 1965,
p. 5)
El
viernes 30 de abril, en un articulo titulado “Cambios, pero de verdad exigirá
el IV Congreso Nacional de la CUT ”,
entrega valiosos antecedentes sobre ese evento. (“El Siglo”, sábado 23 de enero
de 1965, p. 5)
En
la noche de ese mismo día es detenido en Managua, capital de Nicaragua, por la
policía somocista.
Había
salido de Chile en el último tercio de abril.
Del 23 al 25, participa cumpliendo una misión encomendada por el
Congreso Permanente de Unidad Sindical de los Trabajadores de América Latina,
en el Segundo Congreso de la
Confederación de Trabajadores Salvadoreños, celebrado en San
Salvador. A continuación viaja a
Nicaragua, para asistir en representación de la CUT al acto del Día Internacional de los
Trabajadores.
Posteriormente
relata lo ocurrido:
"Llegué
a Managua, por vía aérea e ingresé al país sin ninguna dificultad. El mismo día de mi llegada –el 30 de abril-
me reuní con dirigentes sindicales... La noche de ese día, estaba ya
descansando en el Hotel Estrella, cuando tocaron la puerta de mi habitación
ocho policías vestidos de civil." (“El Siglo”, jueves 20 de mayo
de 1965, p. 6)
Lo
llevan a hablar con 'el jefe', pero lo
dejan en un calabozo. Protesta
airadamente por el atropello. Exige ponerse en contacto con la Embajada chilena o con
los dirigentes sindicales nicaragüenses.
Se lo niegan. Queda prácticamente
incomunicado. Es tratado groseramente.
No
puede asistir al acto del 11,de Mayo. En
éste, el dirigente de la Confederación General del Trabajo nicaragüense,
Francisco Bravo, denuncia la detención del consejero de la CUT y exige su libertad.
Sólo
una vez concluido el mitin realizado en la Casa del Obrero de Managua,
es llevado a presencia del “jefe”, el “Mayor Pérez”, con quien tiene un agrio
diálogo.
Es
dejado en libertad. Vuela a Ciudad de
México, en donde participa en la
XI Periodo de sesiones de la CEPAL , representando a la Federación Sindical
Mundial. En la sesión del martes 11 de mayo, entrega el respaldo de la FSM a los gobiernos de México,
Chile y Cuba “por su valerosa y consecuente actitud ante la alevosa agresión
sufrida por el pueblo dominicano de parte del Gobierno y de las fuerzas armadas
norteamericanas". Agrega que “la
agresión a Santo Domingo es inaudita y a todas luces ilegal".
En
otra de las sesiones de la CEPAL
sostiene que "tenemos que hablar de una integración de los
latinoamericanos y para los latinoamericanos, y de una integración para mejorar
y no para empeorar las condiciones de vida de los pueblos".
Estando
en Ciudad de México visita en la cárcel a ocho presos políticos y sindicales,
que permanecen siete años en prisión.
Envía una carta personal al Presidente de México, Gustavo Díaz Ordaz,
solicitando la libertad para ellos.