Todas
las imágenes sobre los sucesos en Nicaragua, transmitidas desde el 18 de abril
por los medios hegemónicos, viralizadas en las redes, se abstienen de mostrar
la otra cara, la de los ataques con armas a los locales públicos, los saqueos,
los militantes sandinistas quemados vivos en plena calle, la vejación a
jóvenes.
Nicaragua
es rehén de una realidad falseada y ficticia que mueve el terrorismo mediático
de esta guerra de cuarta generación, al ritmo de las redes sociales, donde la
realidad virtual se impone sobre la realidad real, donde, incluso, la masa de
gente que de forma autoconvocada, genuina y respetuosa de la paz se moviliza
por la democracia es convertida en carne de cañón, en ‘daño colateral’ para
lograr el objetivo final: salir del gobierno constitucional, cueste lo que
cueste.
Nadie
dice que los ‘manifestantes pacíficos’ atacaron, quemaron, saquearon,
destruyeron la oficialista Nueva Radio Ya, la Caja Rural Nacional
(Caruna), cooperativa que ha administrado los fondos ALBA para proyectos
sociales en beneficio de miles de familias, y el edificio del Ministerio de
Economía Familiar.
La
internacional capitalista existe, la moviliza el movimiento libertario de
extrema derecha y, obviamente , está muy bien financiada: funciona a través de
un inmenso conglomerado de fundaciones, institutos, ONGs, centros y sociedades , unidos entre sí por Todas las
imágenes sobre los sucesos en Nicaragua, transmitidas desde el 18 de abril por
los medios hegemónicos, viralizadas en las redes, se abstienen de mostrar la
otra cara, la de los ataques con armas a los locales públicos, los saqueos, los
militantes sandinistas quemados vivos en plena calle, la vejación a jóvenes.
Nicaragua
es rehén de una realidad falseada y ficticia que mueve el terrorismo mediático
de esta guerra de cuarta generación, al ritmo de las redes sociales, donde la
realidad virtual se impone sobre la realidad real, donde, incluso, la masa de
gente que de forma autoconvocada, genuina y respetuosa de la paz se moviliza
por la democracia es convertida en carne de cañón, en ‘daño colateral’ para
lograr el objetivo final: salir del gobierno constitucional, cueste lo que
cueste.
Nadie
dice que los ‘manifestantes pacíficos’ atacaron, quemaron, saquearon,
destruyeron la oficialista Nueva Radio Ya, la Caja Rural Nacional
(Caruna), cooperativa que ha administrado los fondos ALBA para proyectos sociales
en beneficio de miles de familias, y el edificio del Ministerio de Economía
Familiar.
Las
investigaciones del periodista estadounidense Max Blumenthal y del catedrático
venezolano Álvaro Verzi Rangel, pusieron al descubierto el rol de entidades como
la Usaid ,
Freedom House, y la NED
en el financiamiento de ONG’s nicaragüenses, que llamaron al derrocamiento de
Ortega. La Usaid
aportó 5,2 millones de dólares, para “la capacitación de la sociedad civil y
las organizaciones de medios de comunicación”.
En junio, los dirigentes del M19, el grupo
estudiantil que comenzó las protestas antigubernamentales viajaron a
Washington, financiados por Freedom House, donde se reunieron con la
ultraderecha parlamentaria estadounidense. Félix Madariaga, uno de los líderes
del M19, está al frente del Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas
Públicas, recibió 260,000 dólares de la NED. Otra fundaciones como “Hagamos Democracia”,
de Luciano García, recibió 525,000 dólares de la NED desde 2014.
Lo de Nicaragua es una demostración más del
poder del terror mediático de los medios hegemónicos trasnacionales y
cartelizados y de su capacidad de imponer imaginarios colectivos en la región.
Y, también, de una agencia propia de los medios alternativos (al mensaje
hegemónico), preocupados permanentemente por seguir reactivamente la agenda del
enemigo y creer que la resistencia es la denunciología, sin informar sobre lo
que realmente pasa.
Nicaragua, junto a Venezuela, Cuba y Bolivia,
se ha convertido en una piedra en el zapato de los proyectos “panamericanistas”
de Estados Unidos y sus repetidores, y hoy usan todos los argumentos para
aniquilarla. No es la primera vez, tampoco. Tras la revolución sandinista,
llegó la guerra del escándalo Irán-Contras, la agresión desde Honduras, el
bloqueo de los puertos, las sanciones económicas, el intento de rendir por
muerte o por hambre al pueblo.
En
el encuentro habanero del Foro de Sao Paulo, el segundo secretario del Partido
Comunista Cubano, José Ramón Machado Ventura, señaló que con respecto a
Nicaragua, la posición cubana es categórica: en la medida en que Estados Unidos
trata de manipular asuntos internos que solo los nicaragüenses deben resolver
sin injerencia externa alguna, nuestro Partido ha dado, da y dará toda la
solidaridad que demande el Frente Sandinista de Liberación Nacional para
posibilitar el retorno de la paz al país”.
(Párrafos
seleccionados del trabajo "Nicaragüita" de Aram Aharonian, periodista
y comunicólogo uruguayo. Mágister en Integración. Fundador de Telesur. Preside la Fundación para la Integración
Latinoamericana (FILA) y dirige el Centro Latinoamericano de
Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)
INVITACIÓN
El
CEILER, la Embajada
de Nicaragua, la
Confederación Nacional de la Construcción y el Sindicato de la
Construcción , excavadores-alcantarilleros, te invitan
al acto "Juan Vargas Puebla, el internacionalista, estaría hoy con
Nicaragua".
Jueves
9 de agosto, a las 19,30 horas, en el salón Camilo Guzmán Sandoval del ICHIL
(Brasil 153)