lunes, 14 de octubre de 2024

Kimniekan

 


 

 



Comentario radial y escrito

 

 

 

 


 

El mantener la memoria y el recuerdo con la puerta abierta de par en par, se asomará la esperanza, se guiará la porfía, lo cognitivo, y, el hacer crítico del conocimiento. 

Estas instancias, escalones del intelecto humano, son el enemigo más implacable que tienen los amos apátridas del Gran Capital Financiero.

 

Y lo que digo es muy complicado. 

Son cosas que empezaron a asomarse hace 4 millones de años atrás. 

Por esos tiempos, las necesidades de sobrevivir, de evolucionar y adaptación, fueron inimaginables, nos enseñó a defendernos, a protegernos unos a otros, le dieron identidad, inventaron la empatía, le dieron existencia a la familia y a la división del trabajo. 

No sé, cuándo, esas instancias de sobrevivencia, de organización, le dieron forma al patriarcado y a sus vivencias miserables, y, estas, a su vez, a un machismo matonesco, que se ve expresado en la apatía narcisista y en la bestialidad cruel del capitalismo.

 

Somos miles y miles de millones, que no queremos morir como un pajarito ignorante. 

Si, los más vulnerables de los pueblos, se dejan, mansamente manipular y los hacen creer que la cuestión es deshojar margaritas, viendo en la tele las posibilidades, conociendo todo el sentido común que les ha dado la historia, el trabajo mismo, el hambre, las herramientas, como la conciencia de clase y no conquistar el poder político; la vergüenza es muy re grande, y, la mentira también. 

Yo, no quiero morir avergonzado.

Menciono el poder político, porque allí se abriga y se sustenta la democracia, la soberanía, por ahí, está “la punta de la hebra”. 

Soy el concho de una generación, que dejó la “pronuncia” en las calles, gritando enloquecido:

 

¡PODER POPULAR! 

El que lo entiende, él que aroma él poder en manos del pueblo, sabe, que es un camino muy re largo, pero, puta que suena bonito. 

En mi paisito, 86 años atrás, en 1938, partidos de centro izquierda y de izquierda, parieron una coalición política denominada FRENTE POPULAR. 

Frente, que pretendió amasar una voluntad política y conquistar el nombrado y famoso poder político. 

Esa astuta idea de juntarse para defenderse y poder hacerle collera al despiadado explotador nacional y extranjero, ese que construía y construye maquinarias e ignorancias para obtener privilegios a costa del sudor ajeno, no surgió de la nada.

 

Se asomó y se asoma con sangre obrera derramada, vidas asesinadas, explotadas.

 

Ese FRENTE POPULAR se identificaba con la idea que llevo a los obreros del salitre, 29 años antes, a bajar a Iquique, y, exigir, entre otras cosas, que no les pagaran con fichas, ese metal acuñado, no tenía valor en la ciudad. Tenían solo valor en las salitreras del despojo. 

Al llegar a Iquique, fueron confinados en la Escuela Santa María, un 21 de diciembre de 1907. 

Cuatro días antes, de la venida del caballero. 

3.600 obreros de las salitreras fueron masacrados. 

A que puerto, a que ciudad, a que continente, tenemos que irnos para sobrevivir a una guerra nuclear. A este asustado y pavoroso final.

 

¡A lo que hemos llegado! 

Y caminamos por octubre, un mes con historia, que para los asalariados mal pagados o explotados fue, es y será, un mes maravilloso. 

Me refiero a la revolución bolchevique, en octubre de 1917, que, implanto un nuevo calendario en un nuevo ramal, una forma diferente de explotar los medios de producción, otra manera de vivir, otra orgánica política que busca y trabaja para construir una vida digna… Y mientras exista esa idea que profesa un sano juicio, la vida, por sobrevivir, la seguirá buscando. 

Lo he mencionado anteriormente; mi existencia, mi formación intelectual, mis principios y valores, me cubren y me arropan gracias a los curas Franciscanos del Seminario Seráfico y a los curas Barnabitas del Seminario Conciliar de La Serena. 

Necesito decirlo, no vayan a creer que no creo en el creer. Que soy un hereje. 

Yo creo inmensamente en la humanidad. En el intelecto de los que hacen las cosas. 

Vieron, sintieron ustedes, el rostro angustioso del japones, al saber que NIHON HIDANKYO, organización japonesa que lucha en contra de las armas nucleares, era nominada en Oslo, Noruega, con el Premio Nobel de la paz. 


Robert Lewis, uno de los pilotos del avión que lanzo la bomba atómica en HIROSHIMA, dijo:

 

“DIOS MIO, QUE HEMOS HECHO”. 

Al ver ese rostro del japones, rostro de corteza de árbol, se me asomo esa niña vietnamita, desnuda, vestida en llamas invisibles, provocadas por el NAPALM.

En 1989, en Concepción/ Chile, Sebastián Acevedo, desesperado por no encontrar a sus dos hijos por la policía fascista de Pinochet detenidos, se empapo de gasolina y se prendió fuego. 

Que fuerzas, que poder más ciego, más infeliz, puede provocar tantos dolores infernales. 

Escribo esto, el 12 de octubre…Dia de estupores, de invasiones con genocidios a granel; torturas, esclavitud, dolor…Y esos recuerdos, venidos de civilizaciones de ultramar, lloran y duelen todavía, la mienten y la esconden, y, hoy, esta patria mía, no quiere soltar la herencia de una tierra ajena, ultrajada por la avaricia.

 

Estos recuerdos de hoy me lloran y duelen tanto. 

Gracias a la evolución, a la adaptación en las formas geográficas del vivir, hemos logrado llegar a ser lo que somos. 

Un vivir con geografía y todo, en manos de unas docenas de miserables locos y locos miserables, que quieren poseerlo todo. 

Y lo que duele, es, que el mismo pueblo que tiene hambre, que sale a las calles a exigir dignidad, se deja mentir entre vitrinas y entre medios de difusión masiva. 

Pa` que somos república, si no tenemos idea como se practica. 

Pa`que queremos poder popular, sino sabemos cómo aserruchar con el poder político.

 

Estimados oyentes, lectores, solo quiero gritar que la vida es hermosa, maravillosa, y, no solamente los seres humanos, no, lo es todo, todo, lo que nos acompaña en el planeta, lo que esta y lo que hemos hecho. Quiera el dios de los coloraos, que, en los planetas que puedan existir en el universo estén poblados. 

Ojalá que nos puedan ver, que logren ellos, amalgamar correctamente las matemáticas, la química y la biología. 

Ojalá, que se entienda el trabajo titánico, increíble, de aquellos pirgüines para irse adaptándose, transformándose, árbol tras árbol, rio tras rio. 

Son millones de años, de bosques y selvas. Este caminar es tan maravilloso que ni ellos mismos pueden explicarse esa adaptación, ese dedo, esa ala, ese pie, esas uñas, esa hambre, esa boca. 

Ese sentir que te hace ayudar, amar, cooperar, ofrecerte sin que nadie te lo pregunte; todo es un enigma que vive en tu interior. 

Ese sentir, es el espíritu, el enigma del existir, del saber amarse, del saber amar, del ser más que dos.

 

Las dosis de los ingredientes de vida, en algún momento se hicieron disparejos. 

Cuando el fuego, provocado por un rayo colérico, quemo por vez primera, la mano de un curioso cavernoso; este, atrevido vivaracho “le cayó la teja”.

Hijo del fuego se puso y fue…Y le creyeron. 

Llego un hijo del sol, de la luna, del amor.

Todos enviados por un dios.

Por ahí nos fuimos matando como locos en nombre de los dioses.

 

En el medio oriente, en las Cruzadas, por 614 años se mataron brutal cristianos y musulmanes.

Qué manera de matar.

Y todos en nombre de sus dioses. Menos mal, que la revolución industria llego más tarde. Sino no habría quedado, ni para hacer una película. 

No importa que hoy, podemos hacer los puntos al universo, o hacer un robot que pueda hacer todo lo que tu mecánicamente puedas hacer. 

Allí, no hay que agradecer a ningún dios, es el desarrollo de la humanidad en todo su esplendor, tampoco podemos pedirle a ningún dios, que enmudezca el dolor, los gritos de los miles que gritan hoy en Gaza, en el Líbano, en Ucrania, en Yemen, en Sudan…

 

Chemimare, por todo el mundo andamos en lo mismo.

Y no podemos llegar al intelecto del vulnerable y hablarle que está en sus manos, el modo de la muerte y de la vida. 

En Europa, la extrema derecha, guardianes del Imperio ganando escaños en parlamentos y tribunales. 

Si no lo consiguen, provocan caos, guerras y odios.

Escuchen a Venezuela, a Colombia, a Cuba. 

En mi paisito, Chile, tenemos la posibilidad, que ese pueblo reflexione, que escuche su historia, que vea las posibilidades de tener una vida digna. 

En ninguna parte del mundo, en ningún país tendría que existir la pobreza, en ninguno. 

La geografía del planeta, con el hacer integral del intelecto humano, del trabajo de otros habitantes, por ejemplo, las abejas, las hormigas, el perro y la Loica, la vida en el planeta, como diría mi hermanita linda, estaría, para vivirla a todo chancho.

 

Alejandro Fischer Alquinta. 

Estocolmo 20241012