domingo, 5 de junio de 2022

CRÓNICA DE UN ACTO MEMORABLE

 



Uno de los muchos actos en homenaje a los 110 años de la fundación del Partido Comunista de Chile que se están realizando en el país, fue el convocado por el Centro de Extensión e Investigación Luis Emilio Recabarren, CEILER,  efectuado vía Zoom, el sábado 4 de junio de 2022. 

Entre las personalidades que concurrieron podemos citar a la delegación  de la República de Nicaragua, formada por la Embajadora  Lylliam Méndez, y Silvia Serra; al abogado Eduardo Contreras; a Nancy Larenas,  secretaria política del Coordinador del Partido Comunista en La República de Alemania, a Héctor Repetto, miembro de la Comisión Internacional del Partido Comunista de Chile. 

El acto, bajo la dirección de la directora Norma Acuña, se inició con la Canción "Pongo en tus manos abiertas: A Luis Emilio Recabarren", de Víctor  Jara, el himno del CEILER, que es  al mismo tiempo un homenaje  a nuestro  recordado Presidente, Max Berrú, quien  propuso que debía iniciar todos los actos del Centro. 

A continuación, la presidenta del CEILER, Carlota Espina en una emotiva y hermosa intervención saludó a  los participantes y rindió homenaje a todos los militantes comunistas que han lucha y luchan por un mejor. 

Después me correspondió leer un trabajo titulado "A 110 años  de la fundación del Partido Comunista de Chile", que adjunto. 

Luego, siguiendo la tradición heredada de Recabarren, se hizo presente el arte popular. El artista Carlos Jeldes, como en muchas otras ocasiones,  nos  emocionó con sus bellas canciones. 

Aún vibraban nuestros corazones con la melodías que nos entregó Carlos Jeldes, cuando el diputado comunista, Boris Barrera, nos entregó una lección de revolucionario, al relatarnos con palabras sencillas y elocuentes, como se había incorporado a las filas comunistas, en medio de la lucha contra la dictadura fascista. 

Culminó el hermoso y combativo evento con el himno de la trabajadores del mundo, La Internacional. 

La transmisión del acto fue impecable, gracias a la  excelente labor técnica de Cristian Órdenes.

 

Un abrazo,

Iván Ljubetic Vargas




A 110 AÑOS DE LA FUNDACIÓN DEL PARTIDO COMUNISTA DE CHILE

 

Gracias al correo enviado por el compañero Rodrigo Molina me dí cuenta que en la Crónica de un Acto Memorable, que envié en la mañana de hoy, adjunté otro trabajo sobre los 110 años, y no el que leí en el acto de ayer sábado.4 de junio. 

Ahora adjunto el que corresponde.

 

Un abrazo 

Iván Ljubetic Vargas

 

 

 

 

 

A 110 AÑOS DE LA FUNDACIÓN DEL PARTIDO COMUNISTA DE CHILE

 

 

  Pablo Neruda escribe en el “Canto General”:

                                          

                                                             “Y este habitante transformado

que se construyó en el combate,

este organismo valeroso,

esta implacable tentativa,

este metal inalterable,

esta unidad de los dolores,

esta fortaleza del hombre,

este camino hacia mañana,

esta cordillera infinita,

este armamento de los pobres,

salió de aquellos sufrimientos,

de lo más hondo de la patria,

de lo más duro y más golpeado,

de lo más alto y más eterno

y se llamó Partido.

PARTIDO COMUNISTA.”

 

 

El Partido Comunista de Chile fue uno de los primeros partidos revolucionarios surgidos en el mundo.  En Chile, es el segundo más antiguo. Sólo el Partido Radical se fundó antes.

Fue necesario que se conjugaran dos factores para que naciera el partido revolucionario de la clase trabajadora chilena.

Uno objetivo: la existencia de una combativa clase obrera. Otro subjetivo: las ideas revolucionarias del marxismo.

 

 

Ambos factores,   maduraron en un período que el historiador Hernán  Ramírez  Necochea   denominó “Una especie de Prehistoria del Partido Comunista de Chile”. 

 

EL FACTOR OBJETIVO 

Esta Prehistoria se inició  en los años 20 del siglo XIX, con el surgimiento de los primeros destacamentos obreros. Estos nacieron en la Región de Atacama, al aparecer las primeras formas capitalistas de producción en las faenas mineras y otras actividades,  como obras públicas, fundiciones, fábricas, transporte. 

La clase trabajadora nació combatiendo. Ya en el año 1834 estalló la primera huelga obrera de la historia de Chile, en el mineral de plata de Chañarcillo, ubicado cerca de Copiapó, en la provincia de Atacama.

En el siglo XIX contabilizamos 110 huelgas obreras en Chile. 

En 1883 finalizó la Guerra del Salitre, que Recabarren, con toda razón, llamó “guerra  de conquista de 1879, en que la clase gobernante de Chile se anexó  la región salitrera”

A partir de ese momento fueron incorporadas al territorio nacional las provincias de Tarapacá y Antofagasta, pasando a formar parte del proletariado chileno los trabajadores que laboraban en ellas.

En 1890, asalariados de la provincia de Tarapacá fundaron la primera organización obrera, llamada  “La Unión es Fuerza”.

 

EL FACTOR SUBJETIVO 

En 1882 llegaron a Chile las ideas revolucionarias del “Manifiesto Comunista”, escrito por Carlos Marx y Federico Engels en 1848.

En 1894, Luis Emilio Recabarren, el más grande líder de los trabajadores chilenos y la más importante personalidad de la historia de Chile, se inició en la lucha social. Por entonces tenía 18 años y se incorporó al Partido Demócrata. 

Recabarren había nacido en Valparaíso, el 6 de julio 1876. Sólo pudo estudiar tres años en una escuela de ese puerto. En 1890, su familia se trasladó a Santiago, donde el joven Luis Emilio  comenzó a trabajar, a la edad de 14 años, como obrero tipógrafo en una Imprenta.

A pesar de ser duramente explotado, tuvo el valor de leer, de estudiar por su cuenta. Fue un autodidacta. Y lo más importante: puso sus conocimientos al servicio de sus hermanos de clase.

  

LA FUNDACIÓN 

Hacia 1912 Chile  vivía   la época de oro del salitre.  Funcionaban 170 oficinas salitreras, que empleaban el Sistema Shanks, que requiere abundante mano de obra.  Laboraban cerca de 50 mil obreros, que aportaban el 52% de los ingresos ordinarios del país.  El norte Grande, en especial la región de Tarapacá bullía en actividad.

En ese escenario nació el Partido Comunista. 

El 4 de junio de 1912, se reunieron alrededor de treinta  revolucionarios en el local de “El Despertar de los Trabajadores”, ubicado en  calle Barros Arana Nº 9 de la ciudad de  Iquique.

La proposición de Recabarren de constituir una nueva organización fue aprobada por unanimidad.  Por mayoría, se resolvió denominarla Partido Obrero Socialista.

Por entonces, todos los partidos revolucionarios se llamaban socialistas o socialdemócrata. Por ejemplo, el de Lenin se llamaba Partido Obrero Socialdemócrata de Rusia.

 

LOS FUNDADORES 

En el Acta Oficial de esa reunión del 4 de junio, publicada en “El Despertar de los Trabajadores”,  de Iquique, con fecha 6 de junio de 1912, se mencionaban 27 nombre de participantes en ella y se agregaban:  “y otros amigos”. 

Los fundadores del Partido eligieron el siguiente directorio:  

Luis Emilio Recabarren (Presidente), Enrique Salas (Vicepresidente), Néstor Recabarren (Secretario), Ruperto Gil (Secretario), David Barnes (ciudadano ecuatoriano,Tesorero), Nicolás Aguirre Bretón (, ciudadano español, delegado).

 

Los otros asistentes a la reunión fundacional fueron:

Teresa Flores (única mujer fundadora del PC), Elías Lafertte, L.  Zavala, Julio Arredondo, J.  Faúndez, Ernesto  Jorquera, L.  Vargas, E.  Díaz, J.  Francisco García, Luis Figueroa, Ladislao Córdova, D.  M.  Agüero, Juan Alvarez, R.  Olivares, A. López, E. Corbetto, José del Carmen Aliaga Véliz, Carlos Alberto Martínez, Salvador Barra Woll y Miguel Carrasco.  En total, veintisiete. 

En otras versiones de esa sesión constituyente del Partido, se entregaron  seis nombres más: Emilio Alvarado, Facundo Castro, Vicente Cortez, Eleodoro Rodríguez, Gregorio Salinas e Ignacio Salinas. Pensamos que éstos podrían ser los mencionados como “otros amigos” en el Acta.

 

SURGE DESDE EL PARTIDO DEMÓCRATA 

Con fecha 18 de febrero de 1913,  apareció en le periódico ‘El Despertar del Trabajadores’, de Iquique, un Informe de Luis Emilio  Recabarren dirigido   a la Segunda Internacional y titulado ‘La Labor Obrera en Tarapacá’. En él se afirmaba: “En enero de 1912, no existía en Tarapacá organización obrera ni socialista, con excepción de la Cooperativa Obrera Tipográfica y el gremio de cargadores y panaderos... Agregaba  que “en el mes de junio, 22 secciones del Partido Demócrata se transformaron en Partido Socialista y continúan una marcha regular, desde el punto de vista orgánico político”.

Las secciones de Tarapacá a las que hacía mención Recabarren eran:  Iquique, Centro Lagunas, Gloria, Primitiva, San Pablo, Argentina, Alianza, Rosario de Huara, Cala Cala, Cholita, Barcelona, Ramírez, Bellavista, Amelia, Abra, Jazpampa, Pan de Azúcar, Agua Santa, San Lorenzo, San Remigio, Pozo Almonte y Pisagua.

 

AÚN PENABA LA MASACRE de 1907 

En ese mismo Informe se sostenía que al iniciarse 1912, junto con el auge de la industria del salitre, Tarapacá aún vivía con el recuerdo y las hondas cicatrices dejadas por la masacre de la Escuela Santa María de Iquique.  Durante ese año “el espíritu obrero muy decaído por la cruel matanza en la huelga de 1907 recién empieza a reanimarse”.

Fue en estas condiciones,  que revolucionarios chilenos dieron nacimiento al Partido de la Clase Obrera.


UN PARTIDO PARA LA REVOLUCIÓN 

Marx y Engels escribieron en el ‘Manifiesto del Partido Comunista’, editado el 24 de febrero de 1848:  “Los comunistas sólo se distinguen de los demás partidos proletarios en que, por una parte, en las diferentes luchas nacionales de los proletarios, destacan y hacen valer los intereses comunes a todo el proletariado,

independientemente de la nacionalidad; y, por otra parte, en que, en las diferentes fases de desarrollo por que pasa la lucha entre el proletariado y la burguesía representan siempre los intereses del movimiento en su conjunto...

El objetivo inmediato de los comunistas es el mismo que el de todos los demás partidos proletarios:constitución de los proletarios en clase, derrocamiento de la dominación burguesa, conquista del poder político por el proletariado”.

 

ARREBATAR EL PODER A LA BURGUESÍA 

En el Programa del POS, publicado como folletín por “El Despertar de  los Trabajadores”, entre el 8 de octubre y el 21 de noviembre de 1912, se sostiene:

“Considerando que la necesidad, la razón y la justicia exigen que la desigualdad y el antagonismo entre una y otra clase desaparezcan, reformando o destruyendo el estado social que produce.

El Partido Obrero Socialista expone que el fin de sus aspiraciones es la emancipación total de la Humanidad, aboliendo las diferencias de clases y convirtiendo a todos en una sola clase de trabajadores, dueños del fruto de su trabajo, libres, iguales, honrados e inteligentes, y la implantación de un régimen en que la producción sea un factor común y común sea también el goce de sus productos.  

Esto es, la transformación de la propiedad individual en la propiedad colectiva o común...

“Realizaremos lucha política, para arrebatar a la burguesía el poder político dominante en el actual estado de cosas.”

 

COINCIDEN EN VARIOS ASPECTOS 

Es evidente la influencia que en ese primer Programa del Partido Comunista de Chile tuvo el Manifiesto Comunista, cuya primera edición se hizo en Londres, en alemán, el 24 de febrero de 1848.  Veamos algunas de las coincidencias entre ambos documentos.

 

MANIFIESTO COMUNISTA (1848)             PROGRAMA DEL PC DE CHILE (1912)

 

“Un fantasma recorre Europa:                        “Los enemigos del socialismo

el fantasma del comunismo”                            lo desfiguran y presentan su

                                                                   doctrina muy distinta de lo

                                                                   que es en su realidad”

 

 

 

“La historia de todas las so-                               “Las clases existen.  Son un

ciedades hasta nuestros días                               hecho.  Desde que existen cla-

es la historia de las luchas                                   ses, existe lucha entre ellas”.

de clases”.

 

“En sustitución de la antigua                                “El fin de sus aspiraciones

sociedad burgués con sus cla-                           (del Partido) es la emancipa-

ses y antagonismos de clase,                             ción total de la humanidad,

surgirán de una asociación en que                    aboliendo las diferencias de

el libre desenvolvimiento de ca-                        clases y convirtiendo a todos

da uno será la condición del                             en una sola clase de trabaja-

libre desenvolvimiento de todos”                      dores, dueños de los frutos

                                                                   del trabajo, libres, iguales,

                                                                   honrados e inteligentes”.

 

 

 

 

 

“El Gobierno del Estado moderno                     “Los privilegios de la burgue-

no es más que una junta que ad-                      sía están garantizados por el

ministra los negocios comunes                         poder político, el que tiene

de la clase burguesa”                                     en sus manos y con el cual dis-

                                                                   dispone de las fuerzas                                                                               

                                                                      opresoras”

 

“El rasgo distintivo del comu-                             “La transformación de la pro-

nismo no es la abolición de la                              piedad privada en colectiva no

propiedad en general, sino la                               significa en ningún caso un

abolición de la propiedad bur-                              despojo de los bienes necesa-

guesa”.                                                            rios para el individuo en be-

                                                                      neficio de la comunidad”.

 

“La propiedad privada burguesa                       “La existencia de la propie-

moderna es la última y más aca-                        dad privada y su consagración

bada expresión del modo de pro-                        presente es la causa motriz

ducción y de apropiación de lo                            de todos los males existen-

producido basado en los antago-                          tes.  Por eso es que el socia-

nismos de clase, en la explota-                            lismo ha nacido como remedio

ción de los unos por los otros.                             ineludible para este mal social”.

En este sentido, los comunistas                                

puede reasumir su teoría en esta

fórmula única:  abolición de la

propiedad privada”.

 

Con toda razón, pudo manifestar Recabarren en su discurso ante la Cámara de Diputados, el 15 de julio de 1921: “El Partido Socialista desde el año 12 ha acogido las ideas comunistas”.

 

LOS PRIMEROS PASOS 

Elías Lafertte relata en ‘Vida de un Comunista’:

“Nuestra ideología, en aquella época, era muy incipiente.  Creo que ninguno de nosotros –salvo Recabarren- había leído a Marx o Engels.  Los libros de estos pensadores eran escasísimos. 

  

Indudablemente el hombre más capacitado de todos los que formábamos en el movimiento era Recabarren, pero entre Recabarren y nosotros había una enorme distancia en cuanto a preparación, madurez política y formación ideológica.  No éramos propiamente marxistas.  El marxismo llegó al POS andando el tiempo, a través de los estudios, de los libros que vinieron de Europa, de las relaciones internacionales, de los viajes de los compañeros y de la cooperación de la Internacional Comunista.  Pero teníamos en nuestro interior, me refiero a los militantes socialistas, la materia prima para forjar luchadores:  la capacidad de lucha, la resistencia a la injusticia, el espíritu de organización, el sentimiento de la unidad, el orgullo proletario, y sobre todo, el sentido de clase”

 

UN EDUCADOR COLECTIVO 

Con esas cualidades y limitaciones, el Partido realizó valiosas tareas en los años iniciales de su existencia.  En 1912, por ejemplo, llevó adelante una importante labor de educación política en Tarapacá. En el Informe a la Segunda Internacional ya citado, Recabarren señalaba: Las conferencias efectuadas “pasan de 60, con unos 20 oradores.  Temas: explicación de la doctrina socialista, medios de lucha, organización obrera, cooperativas, crítica, anticlericalismo, antimilitarismo.  Entre los oradores de que dispone la organización obrera se cuenta una niña de 14 años, Rebeca Barnes, y una joven de 22 Teresa Flores...  Las conferencias, la prensa y los folletos van produciendo buenos resultados en la formación de la conciencia”.

 

HACIA  LOS OBREROS Y LAS MUJERES 

Desde los primeros meses de la existencia del Partido, los comunistas dedicaron serios esfuerzos a organizar los gremios obreros.

A partir de 1913, se crearon Centros Femeninos, con el estímulo que significó la visita de la conferencista española Belén de Sárraga.  En esta labor se destacó Teresa Flores.  Estos Centros Femeninos se adherían públicamente a los postulados del Partido.

El desarrollo del movimiento de las mujeres, especialmente significativo en el norte, tuvo enorme relevancia debido a que ocurrió en momentos que aún subsistía el reflujo del movimiento sindical, producto de la masacre de la masacre de la Escuela Santa María de 1907.

 

GRANDES APORTES DEL PARTIDO COMUNISTA 

Durante los 110 años de historia, el Partido Comunista  ha vivido momentos estelares. Uno de ello fue el decisivo papel jugado en el triunfo del 4 de septiembre de 1970 y en el gobierno Popular. Al respecto, Luis Corvalán escribió: 

“En la gestación de la victoria de 1970 y en las realizaciones del gobierno del Presidente Allende, entregaron su contribución todos los partidos de la Unidad Popular. Eso está fuera de discusión.  Pero lo está también el hecho de que el Partido Comunista  de Chile fue el principal artífice de la Revolución Chilena.

Tuvo el mérito de vislumbrar la posibilidad de conquistar el gobierno por la vía  no armada y de jugarse con todo tras el propósito de materializarla. Luchó incansablemente, durante años y años, por la unidad de las fuerzas antiimperialistas y anti oligárquicas alrededor de la clase obrera y en función de las transformaciones que maduraban en la sociedad. Definió acertadamente el carácter de la revolución y la política de alianzas.

Llegó a la conclusión -continúa Luis Corvalán-  de que la vía pacífica no excluía confrontaciones más o menos violentas,  como la toma de tierras por los campesinos y de terrenos por los pobladores de la periferia urbana, y que se requería ante todo de la unidad y de la movilización activa y constante de las masas.

En la lucha por esta línea, cuya justeza demostró la práctica, libró un combate permanente contra las posiciones erróneas, contra el sectarismo de izquierda que cuestionaba su política y se oponía a las amplías alianzas y contra las tendencias  derechistas de conciliación con el enemigo”. (Hasta aquí la cita de Luis Luis Corvalán) 

Efectivamente, la victoria del 4 de septiembre de 1970 fue fruto de la estrategia del Frente de Liberación Nacional del Partido Comunista de Chile, cuyos planteamientos -como la vía no armada, sus objetivos antiimperialistas  y antioligarcas, así como  la unidad de amplios sectores en torno a la clase obrera-  fueron  esbozados en la IX Confrencia Nacional de 1952 y se convirtieron  en Programa del Partido en el XIV Congreso Nacional, realizado clandestinamente en Cartagena en abril de 1956. 

Esta línea estratégica del Frente de Liberación Nacional la mantuvo el Partido Comunista hasta el 11 de septiembre de 1973.

 

¿CUÁL ES LA ACTUAL ESTRATEGIA DEL PARTIDO? 

La estrategia para el actual período histórico fue trazada por el XX Congreso Nacional del Partido, efectuado en  agosto de 1994 y ha sido ratificada por los seis congresos siguientes. Es la  estrategia de la Revolución Democrática, cuyo objetivo estratégico es conquistar un Chile realmente democrático. 

En base a esta estrategia y a una amplia política de alianzas,  el Partido Comunista de Chile  formó parte  de la  coalición Nueva Mayoría y participó  en el segundo Gobierno de Michelle Bachelet, en el, que a pesar de las difultades internas, se lograron aprobar  importantes reformas como el poner fin al antidemocrático sistema electoral binominal, otorgar el derecho a voto a los chilenos en el exterior.

Posteriormente el Partido Comunista integró la coalición Apruebo Dignidad y participa en el gobierno de Gabriel Boric. 

Siendo fiel a su vocación unitaria y a su tradicional  política de  lealtad  con los gobiernos en que ha participado, el Partido Comunista de Chile tiene como uno de sus objetivos prioritarios el apoyo y defensa del gobierno de Gabriel Boric. 

Y, teniendo en cuenta, que la Nueva  Constitución, escrita por primera vez en la historia de Chile por sus pueblos, es un importante paso hacia el objetivo estratégico de conquistar una patria más  democrática, otra  de las tareas del momento de los comunistas  es contribuir al triunfo del Apruebo en el plebiscito de salida. 

¡A conquistar el 4 de septiembre del 2022 una gran victoria como la lograda por nuestro pueblo hace 52 años, el glorioso 4 de septiembre de 1970! 

Cuando celebramos los 110 años de gloriosa historia de Partido Comunista de Chile, rendimos homenaje emocionado a quienes pusieron las primeras piedras de este armamento del pueblo. Lo hacemos en la persona del padre del movimiento obrero chileno.

 

Y con Pablo Neruda proclamamos:  

 

“Recabarren, hijo de Chile,

padre de Chile, padre nuestro,

en tu construcción, en tu línea

fraguada en tierras y tormentos

nace la fuerza de los días

venideros y vencedores.

 

Tú eres la patria, pampa y pueblo,

arena, arcilla, escuela, casa,

resurrección, puño, ofensiva,

orden, desfile, ataque, trigo,

lucha, grandeza, resistencia.

 

Recabarren, bajo tu mirada

juramos limpiar las heridas

mutilaciones de la patria.

 

Juramos que la libertad

levantará su flor desnuda

sobre la arena deshonrada.

 

Juramos continuar tu camino

Hasta la victoria del pueblo”.