sábado, 13 de enero de 2024

Abrazos.

 


 

 

 


 

50 años han pasado como oleajes. 

Para los amarantos, el frente de organización es pan y escuela. 

Es nuestra bisagra para abrir ventanas, puertas; es un bracero, es nuestro símbolo de vida. 

El golpe fascista, nos obligó a confundirnos en el gentío, a intentar ser invisibles, a buscarnos para no morir, 200 mil compatriotas, fuimos, diente de león. 

En el desparramo nos buscábamos; la palabra fue silencio, desconfianza. 

Se hizo necesario escuchar…Y al igual que un sembrado, se asomó Radio Moscú, con su “ESCUCHA CHILE”. 

El orgánico amaranto lentamente se vestía en medio mundo. 

Los que llegaron a Brasil, Paraguay, Uruguay, Argentina, nos salió, “vale otro”. 

En esos países había que buscar una forma de juntarnos, de conversar, de mirarnos. 

Buscar un día para abrazarse, para saberse, era primordial. 

Nos abrazábamos en Mendoza, en el Parque San Martin. Todavía tengo esos aromas. 

43 años han pasado. 

Con todo mis respetos, admiración y amor. 

Aquí estoy, para lo que mandes. 

Partido; un abrazo. 

Alejandro Fischer Alquinta.