miércoles, 3 de diciembre de 2025

HACE 64 AÑOS FIDEL CASTRO SE DECLARÓ MARXISTA-LENINISTA

 


 

                                               Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                               Centro de Extensión e Investigación

                                               Luis Emilio Recabarren, CEILER

 

 

 

Portada del periódico “Revolución”, del sábado 2 de diciembre de 1961

 


El sábado 2 de diciembre de 1961, en  un extenso discurso transmitido por radio y televisión en Cuba, con motivo el quinto aniversario del desembarco del Granma, Fidel habló del  desarrollo de la Revolución Cubana.

El líder se dirigió al pueblo de la Isla y dijo:

¿Qué socialismo tenemos que aplicar aquí? ¿El socialismo utópico?

“Simplemente tenemos que aplicar el socialismo científico. Por eso comencé diciendo con total franqueza que creemos en el marxismo, que creemos que es la teoría más correcta, la más científica, la única teoría verdaderamente revolucionaria. Lo digo aquí con total satisfacción (aplausos) y con plena confianza: soy marxista-leninista, y seré marxista-leninista hasta el final de mi vida (aplausos prolongados)”.

Fidel ya había declarado la revolución socialista el día antes de la invasión de Playa Girón en abril de 1961, pero el 2 de diciembre fue su primera declaración pública y personal por el marxismo-leninismo.

En esa ocasión Fidel mostró sus profundos conocimientos con la historia revolucionaria y social. Citó a Carlos Marx y Federico Engels. También a Lenin  como el teórico que adaptó a Marx al siglo XX.

Se explayó sobre  el comunismo primitivo, la esclavitud, el surgimiento de la burguesía y el ascenso del proletariado. Se refirió a la  Revolución Francesa, a la Revolución Rusa y muchos otros aspectos de la historia que muestran su dominio teórico del marxismo-leninismo.

Llamó a estudiar la teoría revolucionaria y a poder aplicarla.

Resumió su apreciación de Marx: “¿Cuál es el mérito histórico de Marx? Marx escribe algo, una interpretación correcta de lo que iba a suceder, no simplemente porque la gente lo quiso, sino porque las mismas leyes de la evolución histórica lo predeterminaron. Este es el gran mérito de Marx, el fundador del socialismo científico, que da a la clase obrera una teoría “

Fidel ya había declarado la revolución socialista el día antes de la invasión de Playa Girón en abril de 1961, pero el 2 de diciembre fue su primera declaración pública y personal por el marxismo-leninismo.

La declaración de Fidel sobre su adhesión al marxismo-leninismo no está aislada. En la emisión, Fidel reveló su profunda familiaridad con la historia revolucionaria y social. Cita a Karl Marx y su colaborador, Frederick Engels. Cita a V.I. Lenin como el teórico que adaptó a Marx al siglo XX; Discute el comunismo primitivo, la esclavitud, el surgimiento de la burguesía y el ascenso del proletariado; La Revolución Francesa, la Revolución Rusa y muchos otros aspectos de la historia que muestran su dominio teórico del marxismo-leninismo.

Insta a las/os líderes a estudiar la teoría y a poder aplicarla. Resumió su apreciación de Marx: “¿Cuál es el mérito histórico de Marx? Marx escribe algo, una interpretación correcta de lo que iba a suceder, no simplemente porque la gente lo quiso, sino porque las mismas leyes de la evolución histórica lo predeterminaron. Este es el gran mérito de Marx, el fundador del socialismo científico, que da a la clase obrera una teoría “.

 

 

 


133 años de retazos zurcidos. Glosario histórico

 



 

 


Mi paisito, Chile, es un tanto diferente.

La Cordillera de los Andes, la Precordillera, encierran una primavera, un invierno y un otoño, que lo empuja, con humanidad y todo, al mar.

Es más bien flaco, por el extremo sur, pareciera que un cabro chico, tiritando de frío, estuvo jugando a juntar recovecos. 

La humanidad que vivía por ahí eran los Tehuelches, tenían los pies grandes.

Los Tehuelches, los que quedan, sobreviven en Argentina; los que habitaban nuestro paisito fueron exterminados por los invasores o por colones venidos de ultramar.

Los dueños de las ovejas traídas de las Europas y que pastaban por las tierras Tehuelches, estos, le hacían chupete. 

Estaban hasta la tuza con el pescado y el guanaco.

Un cordero inmigrante a la fuerza y “a lo amerindio”, es rico.

Los colonos extranjeros pagaban bien, a los que les llevaban testículos o senos Tehuelches.

Por el centro, la cuestión era y es, totalmente diferente, y, horriblemente, igualito.

Los Mapuches guardaban con “mecha corta”, su tranquilidad y cultura.

Ni los Incas se atrevían a ojear esas tierras de Pewén.

Más al Norte, estaban los Diaguitas. 

Linda la cerámica que hacían.

Y bien para norte, el aimara, el colla y otros eran los obreros del Imperio Inca.

Por decirlo del algún modo, como que la geografía, nos hizo y nos hace ser diferente. 

No hablamos español, parecido sí, pero no igual.

Ay, mi país, de esa gente que vivía por cerros, ríos y árboles, borbotea por nuestro ADN, bueno; no todos, gracias, a la buena o a la mala, de esa migración venida del ultramar o de nuestra vecindad, la mayoría de nosotros somos receptores, venimos de los inmigrantes.

Cuento esto así, para acortar las distancias y que me puedan oír.

Eso de irse despacito por las piedras, o como decía Lenin, dos pasos para atrás y uno para adelante; es cierto, sin embargo, no quiere decir, que, a estas horas del partido, no nos mostremos y ventilemos los objetivos deseados por más de 133 años.

Si hablamos de muerte, el fascismo levantado por el imperialismo yanqui, más, la oligarquía nacional, se propuso con ahínco, hacernos desaparecer. 

Nos arrebató cobarde, atroz, a más menos 500 militantes.

Hoy por hoy, más de 1000 personas siguen mordiendo dolores y tierras; vaya a saber usted, por donde escondieron sus miradas.

Los hermanos Albornoz Prado, por Paine se esfumaron.

Vamos llegando a un ramal muy complicado, tenemos 15 días para “hacer parir la chancha”. 

Este ramal trae olores antiguos como lo son calendarios de Teresa Flores.

Es cuestión de recordar a la Unidad Popular en pañales.

Es bueno recordar esos momentos.

Nuestra historia de vida como país, ha sido cruenta. 

Nos inflamos con Manueles, con Bernardos y con los Carreras. 

Los cuicos de la independencia.

Los José Miguel Neira, por cuestión encopetada, los evitamos; sin embargo, eran, y son, el resultado de un país que se constituía para servir a los poderosos.

Al eco del martillazo de Zambrano, Chile ya estaba con cruces y repartida entre los apellidos de ultramar.

Con el tiempo, los buscadores de materias primas del mundo civilizado levantaron estructuras para organizar la depredación a goteo, de nuestro nuevo país.

Era un pueblo, vestido con una soberanía, de no sé qué. 

La lucha interminable del pueblo mapuche, allá por el Biobío, se caricaturizaba con un Caupolicán empalado, con un Lautaro sorprendido, con un Galvarino olvidado.

El negocio era mantener un pueblo hambriento, doliente, caminante de sur a norte y de norte a sur, acarreando el hambre, la miseria y su fuerza de trabajo. 

Y a esto le llamaban democracia.

El Imperio, sin mirar mucho las geografías, total, lo arreglaba gritando a degüello, levantaba campamentos, pueblos, aldeas, ciudades. 

Sobre todo, instancias para proteger los intereses del capital.

Actualmente, podríamos decir, que se levantan portones, para impedir la nacionalización de la minería, del agua y del mar.

El tratar de entender y enfrentar el hambre, la miseria, ya era, es, una actividad política, una búsqueda por implantar una justicia social.

El Partido Comunista de Chile de hoy, estaba, aun en remojo, entre una muchedumbre de artesanos, panaderos, ilustrados, fuerza de trabajo más de esclavitud, que de barata. 

El fantasma de Marx, la Revolución Francesa, se arrastraba por todos los centros de producción del país. 

Por el sur y por el norte.

El Partido Radical, el Partido Demócrata aglutinaban por esos tiempos a los indignados. 

Y estamos hablando de acontecimientos anteriores, al triunfo de la Revolución Bolchevique en Rusia.

Las carencias inmensas de esa población obrera y artesanal desataron huelgas y masacres que aún, a pesar de la Cantata, Santa María de Iquique; una inmensa población la canta, pero no les duele lo que canta.

Los programas y postulados de esos partidos de centro, con la pata resbalando por la izquierda, no daban respuesta a los porqués de la miseria, menos enfrentaban la explotación del capital.

Luis Emilio Recabarren, junto a otros visionarios, fundaron en Iquique, en 1912, el Partido Obrero Socialista; 10 años más tarde, en Rancagua, los viejos, ven la necesidad de cambiar el nombre y unirse a otros estamentos que luchaban por la justicia social, en el mundo entero.

Y así interrumpe, digno, el Partido Comunista de Chile.

Siendo, aún, partido obrero socialista, entran en la encrucijada parlamentaria, y, en 1921, eligen diputado a Luis Emilio Recabarren y a Luis Víctor Cruz.

Desde allí, la vida del partido ha sido un devenir de cosas que son para el intelecto humano una cuestión de clase.

 Es decir, una bendición o una maldición.

En 1992, Gladys Marín, presento la primera querella, contra el General fascista, Augusto Pinochet. 

En 1999, Gladys fue la primera mujer y comunista, candidata a la presidencia de la República, arrinconada por el anticomunismo y por un sistema de sufragio como el binominal, que le perjudicaba.

El partido de Víctor Jara, en su búsqueda del poder político, ha formado parte de varias coaliciones políticas. 

En todas ellas, siendo leal a todos los acuerdos programáticos, asumiendo toda responsabilidad política.

Su estrategia no ha cambiado nunca, su táctica ha sido siempre enmarcada en el desarrollo del sentido común, del pensamiento crítico.

En 1938, fue parte de una coalición llamada Frente Popular; formados por el Partido Socialista, el Partido Radical, el Partido Democrático, el Radical Socialista, llevando como candidato y triunfando, a Pedro Aguirre cerda. 

En 1958, formo parte del Frente de Acción Popular. 

El FRAP.

Fueron tiempos complicados. Las ambiciones de tenerlo todo de un solo viaje, tenían sus rincones. 

El partido de Rolando Alarcón, de Pablo Neruda, vivía ausente y más presente que nunca. 

Estaba fuera de la ley, proscrito. 

Con la fraternidad del Partido Socialista, éramos representados en su diario de vida política.

El FRAP se vestía con Salvador Allende. 

Fueron derrotados por la derecha conservadora de Jorge Alessandri, y, más tarde, por la Democracia Cristiana de Eduardo Frei Montalva.

En 1960, un 9 de octubre, el partido de Marta Ugarte, junto al Partido Socialista, gritan un manifiesto, invitando a todas las fuerzas progresistas, a formar parte de una coalición política, para cambiarle la vida al país.

En diciembre, dos meses después, el Partido de Acción Popular Unitario, más conocido como MAPU, el Partido de Acción popular Independiente API, El Partido Socialdemócrata, constituyen la coalición denominada Unidad Popular. La UP. 

En 1971, la Izquierda Cristiana, el Partido de Izquierda Radical se adhieren a esta hermosa idea de construir un nuevo Chile.

Este zurcido de 1971 es igualito, a lo que estamos viviendo ahora.

El Partido de Sola Sierra, de Violeta, sigue teniendo la misma estrategia, construir un país con las herramientas que otorga la democracia, la soberanía, la ética y la lealtad.

La táctica, es esta, la que se está haciendo ahora, interpretando al pueblo, sus necesidades y anhelos.

El enemigo es poderoso, más que poderoso.

No es, solo nuestro país el que está en juego. 

Es nuestro Sur.

Miren ustedes, al otro lado de la Cordillera; Argentina, está en manos de un León con hidrofobia. 

Por el norte, tenemos inmensos sentimientos cochinos, sentimientos que comparto, pero en manos de lacayos del Imperio, es como estar en una guerra, mandatada por la Unión Europea.

Esta coalición sufre por gaza, hay que ser enfermo de la cabeza, no estarlo, no serlo

Aquí me quedo, y que sea, lo que mi “dios de los coloraos” diga.

Alejandro Fischer Alquinta.

Estocolmo 1 de diciembre de 2025



BERNARDO ARAYA ZULETA

 


En su 114 natalicio:

 


 

                                          Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                          Centro de Extensión e Investigación

                                           Luis Emilio Recabarren,  CEILER

 

                                 

 


Bernardo Araya Zuleta nació en Tocopilla el 1 de diciembre de 1911. Fue hijo de Abelardo Araya y de Carmela Zuleta.

El joven Bernardo cursó sus estudios  secundarios en el Liceo de Hombres de Antofagasta.

Tenía 16 años de edad cuando trabajó como mensajero de Telégrafos de Chile en Antofagasta. Luego laboró hasta 1932 en la Maestranza del Ferrocarril de la Anglo-Chilena en Tocopilla. Allí aprendió su profesión.

 

SE INCORPORA A ORGANIZACIONES OBRERAS

También en el año 1932, inicios sus actividades en organizaciones obreras. En Tocopilla fundó la Unión Obrera Ferroviaria,  en el Ferrocarril de Antofagasta a Bolivia. Fue dirigente del Sindicato Industrial hasta 1938. Ese año lo despidieron.

 

MILITANTE COMUNISTA

En 1936 ingresó en Antofagasta al Partido Comunista. Fue elegido miembro del Comité Central y de su Comisión Política. Se educó en su intensa acción en las organizaciones sindicales obreras y ,sobre todo, en las filas comunistas.

Fue redactor de la Página Obrera en el “Diario Popular” de Antofagasta.

En 1940 realizó un curso sobre economía marxista en el Partido Comunista.

Se casó con María Olga Flores Barraza. Tuvieron cuatro hijos.

 

EN LA CTCH

En Antofagasta resultó elegido dirigente provincial de la Confederación de Trabajadores de Chile  (CTCH)  y en 1940, secretario provincial. En 1943 ocupó  el cargo de dirigente nacional de la CTCH y  como delegado de Antofagasta.

 

DIPUTADO

En las elecciones parlamentarias de 1945, Bernardo Araya fue elegido diputado por la Segunda Agrupación Departamental (Antofagasta, Tocopilla, El Loa y Taltal) para el período  1945-1949. Figuró en una lista del Partido Progresista Nacional, denominación ocupada por el PC en esos comicios.

 

MASACRE, PARO EN 1946

El 28 de enero de 1946 el gobierno del Vicepresidente Alfredo Duhalde perpetró la masacre de la Plaza Bulnes, donde fueron asesinados seis obreros, uno de ellos la joven comunista Ramona Parra.

La respuesta de los trabajadores fue imponente: los masivos y combativos funerales de las seis víctimas y un gran paro general, convocado por la CTCH, que se inició el miércoles 30 de enero de 1946.

Durante el exitoso desarrollo del paro, el día 6 de febrero, el secretario general de la CTCH y militante socialista Bernardo Ibáñez Águila llamó, desde el Salón Rojo de La Moneda, a romper el paro.  A pesar de esta maniobra divisionista, el movimiento continuó exitosamente hasta el 9 de febrero.

 

DIVISIÓN DE LA CTCH

Al finalizar el paro, el Consejo Nacional de esta central expulsó a Ibáñez Águila por haber traicionado el acuerdo de Paro, al cual él mismo había concurrido con su voto.

Esta medida, rechazada por los dirigentes socialistas, motivó la división de la CTCH.  A partir de febrero de 1946 funcionaron dos CTCH.  Una orientada por el PC y dirigida por Bernardo Araya Zuleta.  La otra controlada por el PS y encabezada por Bernardo Ibáñez Águila.

  

LA CONFERENCIA NACIONAL DE LA CTCH

En marzo de 1946, presidida por Bernardo Araya, se realizó la Segunda Conferencia Nacional de la CTCH.  Participaron veinte Consejos Provinciales, la casi totalidad de las Federaciones Nacionales, más algunos Consejos Departamentales y Sindicatos especialmente invitados.

Esta conferencia tuvo un sello unitario, pues asistieron a ella trabajadores radicales, democráticos, falangistas, comunistas y sin partido.  El balance realizado demostró que desde 1943 a fines de 1945 se llevaron a cabo 2.843 conflictos colectivos.

 

Bernardo Araya en su artículo “La segunda Conferencia de la CTCH: sus tareas y futuro”, publicado en la revista ‘Principios’ Nº 58, de abril de 1946–, señaló que la Conferencia destacó la necesidad de ampliar la acción fraternal con las organizaciones de empleados públicos y particulares en torno a la lucha por los problemas y reivindicaciones comunes, por la defensa de la democracia y las conquistas sociales”.

 

UN 1º DE MAYO CON DOS ACTOS PARALELOS

A comienzos de 1946, la CTCH era el organismo sindical más amplio existente en el país.  Pero se dividió en febrero, por la traición de quien era su secretario general.

A consecuencia de esa nefasta división,   1º de mayo de 1946, tuvieron lugar en Santiago dos actos paralelos para conmemorar el Día Internacional de los Trabajadores.  En uno, el principal orador fue Bernardo Ibáñez; en el otro, el más masivo, habló Bernardo Araya. 

 

DESAFORADO

Bernardo Araya, que ejercía  sus funciones como diputado desde 1945, fue desaforado por oficio  por la Corte de Apelaciones de Concepción, el 4 de enero de 1949. Imperaba en Chile, por entonces, la “ley maldita” promulgada por el traidor.

En 1961, derogada la ley maldita tres años atrás, fue reelegido diputado por la Séptima Agrupación Departamental Santiago, Primer Distrito, para el período 1961-1969

 

FUNDADOR Y DIRIGENTE DE LA CUT

Participó en 1953 en la fundación de la Central Única de Trabajadores de Chile, CUT, en la que ocupó el cargo de Secretario Nacional de Organización.

 

DETENIDO-DESAPARECIDO

Durante la dictadura fascista continúa la lucha en la clandestinidad.  El 2 de abril de 1976 fue detenido, junto a su esposa María Olga Flores Barraza, de 62 años de edad, sus nietos Vladimir, Ninoska y Eduardo, más su cuñado Juan Flores Barraza.

El arresto se produjo en su casa de calle Barros Luco Nº 1220, de Quintero, en un operativo llevado a cabo por ocho agentes de la DINA. 

Posteriormente el cuñado y los niños fueron dejados libres.  Bernardo Araya Zuleta, que al momento de su detención tenía 70 años de edad, y su compañera pasaron a formar parte de la larga lista de detenidos–desaparecidos. 

 

UNA HIJA DE BERNARDO ARAYA  Y MARÍA OLGA FLORES HIZO NOTICIA EN EL 2013:

 

“Mónica Araya, la mujer que enfrentó a los encapuchados, es víctima de la dictadura

 

                             


 

La abogada Mónica Araya (74 años) es desde ayer es uno de los temas más comentados en Twitter, luego de que enfrentara a un grupo de encapuchados en la masiva marcha de ayer de los estudiantes en Santiago, y que se repitió en regiones. La profesional fue entrevistada anoche por CNN Chile, donde reveló que es víctima de la dictadura de Augusto Pinochet. “Los que logramos salir de la dictadura somos los campeones de la democracia. Yo soy hija de Bernardo Araya Zuleta y María Olga Flores Barraza, mis padres están detenidos desaparecidos. Los detuvieron en la casa de Quintero que teníamos junto a mis hijos Ninoska Henríquez Araya, Wladimir Henríquez Araya, a un sobrino y a un tío”, dijo, añadiendo que su hijo Juan Henríquez Araya fue ejecutado en la Operación Albania, en 1987. “Yo fui secuestrada, junto a un grupo de profesores fuimos maltratados, manoseados,...

                                                                  (soychile (Chile) 12/04/13)