miércoles, 16 de abril de 2025

PLAYA GIRÓN: LA PRIMERA DERROTA MILITAR DEL IMPERIALISMO EN AMÉRICA LATINA

 


Mañana 17 de abril, se cumplen 64 años de la Invasión de PLAYA GIRÓN: LA PRIMERA DERROTA MILITAR DEL IMPERIALISMO EN AMÉRICA LATINA. 

Entregamos a nuestras lectoras y lectores del Boletín Rojo un escrito del recordado Historiador Iván Ljubetic Vargas.

 

En su 64º aniversario:

 

 



                                               Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                               Centro de Extensión e Investigación

                                               Luis Emilio Recabarren,  CEILER

 

 

 


EL PRELUDIO

Sólo un mes y dos días después del anuncio de Kennedy sobre la “Alianza para el Progreso” (13 de marzo de 1961), aviones estadounidenses, pintados con los colores de la aviación cubana, tripulados por mercenarios, bombardearon sorpresivamente aeropuertos de la isla. Fue el 15 de abril de 1961. Asesinaron y sembraron la destrucción.

Fidel Castro respondió a la agresión imperialista proclamando, por primera vez, el carácter socialista de la Revolución Cubana. Fue en las masivas y combativas honras fúnebres de las siete  víctimas del bombardeo, frente al Cementerio Colón, realizadas el 16 de abril de 1961.

 

SE INICIA LA INVASIÓN

Tal como lo dijera Fidel, el ataque aéreo fue el preludio de una operación de mayor envergadura preparada por el imperialismo.

 

A las 1,30 de la madrugada del 17 de abril de 1961, mercenarios cubanos –apoyados por Estados Unidos– invadieron Cuba por Playa Larga y Playa Girón, ubicada en Bahía de Cochinos, al sur de la provincia de matanzas. Era la llamada Brigada 2506, que tenía las características de una unidad de asalto anfibio de las fuerzas armadas de Estados Unidos. Comprendía unos 1.500 hombres fuertemente armados, incluyendo tanques, artillería de campaña y 30 aviones.

Desde los primeros momentos, pequeñas fuerzas de las Milicias Nacionales Revolucionarias enfrentaron la agresión y dieron el aviso de ésta.

 

PLAYA GIRÓN

Playa Girón es una pequeña playa  en la margen oriental de la Bahía de Cochinos, al centro sur de Cuba,  que hoy es un centro turístico. Situada en uno de los mayores humedales del mundo, la Ciénaga de Zapata, pasó a la historia en 1961, cuando fue escogida como uno de los puntos de desembarco para la invasión de Bahía de Cochinos.

                 


Playa Girón

 


LA MOVILIZACIÓN

Fidel Castro ordenó la movilización de efectivos hacia el lugar de desembarco, trasladándose al central Australia, para dirigir las operaciones desde la misma región de los combates. El Batallón de la Escuela de Responsables de Milicias (Bon ERM) y otros dos batallones de milicianos de Matanzas constituyeron las unidades que derrotaron las avanzadas de paracaidistas en Palpite y Soplillar.

 

Ese día la Fuerza Aérea Revolucionaria hundió dos buques y varias lanchas de desembarco. Esto obligó a la agrupación naval de la CIA a retirarse mar afuera. Por su parte, el Bon ERM y la Columna 1 del Ejército Rebelde con blindados y artillería, lanzaron una ofensiva nocturna contra Playa Larga, posición que ocuparon al amanecer del siguiente día.

                     


  

LA DERROTA GUSANA

Comenzó a cerrarse el cerco el día 18 sobre Playa Girón y se redujo el terreno ocupado a la región de retaguardia enemiga.

El 19, inició el avance simultáneo de todas las fuerzas revolucionarias por el oeste y noreste de Girón; el Batallón de la Policía Nacional Revolucionaria, irrumpió por el oeste y, después por el norte, entraron cinco blindados, con el Comandante en Jefe Fidel Castro al frente.

A las 17:30 horas fue vencida toda resistencia enemiga. Se le ocasionaron alrededor de un centenar de muertos, varios cientos de heridos y mil 197 prisioneros. Los pilotos y artilleros revolucionarios pusieron fuera de combate a catorce aviones B-26, de ellos ocho derribados y seis averiados, obligados a aterrizar en otros países.

La Agencia Central de Inteligencia fue poco audaz al desconocer la capacidad político militar del Alto Mando de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, así como  la preparación y decisión de lucha del pueblo, que con talento y valor les asestó la derrota en solo 65 horas. La historia de la agresión de Playa Girón no solo se tradujo en la gran derrota del imperialismo, sino también, en ocasión de aquella invasión, se proclamó el carácter socialista de la Revolución cubana.

 



MÁS DE MIL PRISIONEROS GUSANOS POR MEDICINAS Y ALIMENTOS DE NIÑOS

El 31 de agosto de 1962,  el abogado estadounidense James Donovan se reunió durante 4 horas con Fidel en el Palacio Presidencial. Se trataba de detallar las propuestas: el  pago en efectivo de 2,95 millones por los 60 ya liberados en abril y 25 millones en medicinas y alimentos de niños por el resto. La oferta se aceptó en septiembre. Se especificaba que los pagos citados, pagaderos en productos específicos, eran respectivamente una indemnización por los 60 primeros prisioneros liberados y 25 millones por los más de mil restantes. Se enviaría una lista de los productos que se necesitaban. Robert Kennedy se encargó de reunirse con los productores de artículos farmacéuticos y de alimentos para niños, para que hiciesen donaciones voluntarias teniendo en cuenta la responsabilidad de Estados Unidos.

 




SIGNIFICADO HISTÓRICO DE LA VICTORIA EN PLAYA GIRÓN

“La historia de la agresión de Playa Girón, no solo es un acontecimiento histórico importante y no solo se tradujo en una gran victoria de la Revolución Cubana y en una gran derrota del imperialismo, sino también, en ocasión de aquella invasión, se proclamó el carácter socialista de la Revolución Cubana”, recordó Fidel Castro en un discurso pronunciado el 19 de abril de 1991, en conmemoración del 30 aniversario de esa gesta revolucionaria.

              



DOS GRANDES PROTAGONISTAS

El triunfo de Playa Girón tuvo dos grandes protagonistas. El primero de ellos, fue el pueblo que desde el primer llamado de la Revolución se organizó en las Milicias Nacionales Revolucionarias, y se preparó en el manejo de las armas dispuesto a defender su obra. En el momento de la agresión el pueblo, representado en las milicias obreras, campesinas y estudiantiles y en el Ejército Rebelde, corrió a sus puestos de combate solo con una idea: defender la Revolución Socialista. Artilleros, policías, soldados rebeldes, pilotos, tanquistas, médicos, todos como un rayo cayeron encima de los invasores, que en 66 horas fueron liquidados.

 

El propio Fidel, cuatro días después de la victoria dijo: «Una de las características principales y fundamentales, más notorias de toda esta lucha, fue el valor con que lucharon nuestros hombres».

 

El otro gran protagonista fue el Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, no solo por la dirección exitosa de la batalla, sino por haber avizorado con mucho tiempo de antelación la invasión y haber organizado, preparado y armado al pueblo y convertirlo militar e ideológicamente en una fuerza decisiva de combate junto al Ejército Rebelde para ese inevitable día.

 

 


 

 



                           


HACE 64 AÑOS FIDEL PROCLAMÓ CARÁCTER SOCIALISTA DE LA REVOLUCIÓN CUBANA

 


Hace 64 años, en un día como hoy 16 de abril de 1961, el Comandante Fidel Castro proclama el carácter socialista de la Revolución Cubana.

Entregamos a nuestras lectoras y lectores del Boletín Rojo un escrito del recordado Historiador Iván Ljubetic Vargas.


 

 

                                                    Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                                     Centro de Extensión e Investigación

                                                     Luis Emilio Recabarren,  CEILER

 

                                     

 


1961. En los círculos gobernantes de Estados Unidos cada día que pasaba crecía la preocupación por su “patio trasero”. El ejemplo cubano era un fantasma que recorría América Latina. La influencia de su revolución estimulaba la lucha de los pueblos del continente. 

Ante este hecho, el imperialismo decidió actuar rápidamente. Por entonces, el presidente del imperio era John Kennedy. Joven y dinámico, su persona irradiaba simpatía.

 

El 13 de marzo de 1961, propuso a las naciones de América la llamada “Alianza para el Progreso”.  Consiste –afirmaba el político yanqui – en un nuevo trato hacia las naciones al sur de Río Grande (límite sureño de Estados Unidos).  Nunca más intervenciones de los marines. El hermano mayor estaba decidido a contribuir al progreso de los hermanos que habitaban su “patio trasero”.


DEL DICHO AL HECHO...

Bellas palabras. Pero los hechos eran otros. En los mismos momentos en que hacía su generoso anuncio, John Kennedy daba luz verde a una acción que preparaban mercenarios cubanos, adiestrados, financiados y apoyados militarmente por Estados Unidos.

 

Un mes y dos días después del anuncio de Kennedy sobre la Alianza para el Progreso, aviones norteamericanos, pintados con los colores de la aviación cubana, tripulados por mercenarios, bombardearon sorpresivamente aeropuertos de la isla.

 

 


 

COBARDE BOMBARDEO PÌRATA

Fue el amanecer del sábado15 de abril de 1961. Mientras surgían  los primeros rayos de sol, aviones enemigos camuflados con la insignia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR)  atacaron el aeropuerto de Ciudad Libertad, la base aérea  de San Antonio de los Baños y el aeropuerto de  Santiago de Cuba. (Hoy aeropuerto Internacional Antonio Maceo).

Ocho aviones B-26  partieron de  Puerto Cabezas, Nicaragua,  con el objetivo de destruir, en tierra, la modesta aviación cubana y para asegurar la impunidad de otras incursiones enemigas por vía terrestre.  El ataque pretendía, además, hacer creer a la opinión pública internacional que en la Isla tenía lugar una rebelión interna, para ello: Con ese objetivo  uno de los aviones camuflados con las insignias de las FAR, aterrizaría en Miami.

 

 



El  camuflaje  de los aviones como miembros de la fuerza aérea cubana permitieron que la sorpresa de los primeros momentos causara víctimas inocentes entre civiles y combatientes.

La respuesta no se hizo esperar.  Uno de los aviones enemigos fue derribado por la artillería revolucionaria; otro recibió varios impactos que lo obligaron a huir para aterrizar en  Cayo Hueso  y un tercero realizó un aterrizaje de emergencia en islas Gran Caimán.

 

La defensa también se organizó en el exterior. El canciller cubano Raúl Roa,  denunció el mismo día 15, ante la Asamblea General de las Naciones Unidas el ataque aéreo  contra Cuba y la posibilidad de una agresión a gran escala, ya expuesta casi un año antes frente a la mencionada asamblea.

 

En la Isla, el  Comandante  en Jefe Fidel Castro, organizó la defensa antiaérea de los aeropuertos ante la amenaza de un segundo ataque. Este tuvo lugar  el lunes 17 sobre la base de San Antonio de los Baños. Con nulo resultado.

 

Fidel Castro respondió a la agresión imperialista proclamando, por primera vez, el carácter socialista de la Revolución Cubana. Fue en las masivas y combativas honras fúnebres de las siete  víctimas del bombardeo, frente al Cementerio Colón, realizadas el 16 de abril de 1961.

 

ASÍ HABLÓ  FIDEL 

“En el día de ayer –señaló Fidel Castro-, como todo el mundo sabe, aviones de bombardeo divididos en tres grupos, a las 6 en punto de la mañana penetraron en el territorio nacional procedentes del extranjero y atacaron tres puntos del territorio nacional, en cada uno de esos tres puntos los hombres se defendieron heroicamente, en cada uno de esos puntos corrió la sangre valerosa de los defensores...

La hazaña yanqui que arma mercenarios y les paga para que vengan a asesinar jóvenes de 16 y  17 años es un ataque sorpresivo, artero y traicionero en todos los órdenes, contra un  país al que no se le puede perdonar su vergüenza, su dignidad, su valor.

Porque lo que no pueden perdonarnos los imperialistas es que estemos aquí, lo que no pueden perdonar los imperialistas es la dignidad, la entrega, el valor, la firmeza ideológica, el espíritu de sacrificio y el espíritu revolucionario del pueblo de Cuba”.

“Eso es lo que no pueden perdonarnos, que estemos en sus narices ¡y que hayamos hecho una Revolución socialista en las propias narices de Estados Unidos!

Compañeros obreros y campesinos, esta es la Revolución socialista y democrática de los humildes, con los humildes y para los humildes.  Y por estas Revolución de los humildes, por los humildes y para los humildes, estamos dispuestos a dar la vida...

Compañeros obreros y campesinos de la patria, el ataque de ayer fue el preludio de la agresión de los mercenarios, el ataque de ayer que costó siete vidas heroicas, tuvo el propósito de destruir nuestros aviones en tierra, mas fracasaron, sólo destruyeron tres aviones, y el grueso de los aviones del enemigo fue averiado o abatido”.

 

Fidel finalizó su discurso diciendo: “Marchemos a nuestros respectivos batallones y allí esperemos órdenes, compañeros”

 

 

 

 

 

 

 


A 23 AÑOS DEL GOLPE DEL 11 DE ABRIL CONTRA CHÁVEZ

 

Se cumplieron el día 11 de abril recién pasado, 23 años del Golpe fascista en contra del Presidente Hugo Chávez, el gobierno bolivariano y su proceso revolucionario. Entregamos a nuestras lectoras y lectores del Boletín Rojo un escrito del recordado Historiador Iván Ljubetic Vargas.



 

                                                   Iván Ljubetic Vargas, historiador del

                                                   Centro de Extensión e Investigación

                                                    Luis Emilio Recabarren, CEILER

 

 

 


 

El 11 de abril  de 2002 un sector de la oposición venezolana convocó a una marcha. En principio recorrería los sectores caraqueños de Parque  del Este. Pero, arengados por los convocantes, los manifestantes se dirigieron hacia al Palacio de Gobierno ubicado en Miraflores, Caracas, donde se encontraban simpatizantes del gobierno concentrados en sus alrededores desde el 9 de abril.

Enfrentados estos grupos, francotiradores de la oposición dispararon. Se produjeron 18 muertos y unos 69 heridos. Ello fue utilizado por militares golpistas para justificar su alzamiento contra el gobierno constitucional.

 

EL GOLPE

El 11 de Abril del 2002 Chávez fue secuestrado por algunos militares traidores y sus mentores civiles -empresarios, la jerarquía  de la Iglesia católica. Los medios, confabulados con los golpistas, se limitaban a seguir con sus rutinas tradicionales y no informaban de nada.

Pero poco después los golpistas lanzaron la noticia de que Chávez había renunciado, siendo que, en verdad, aquél se rehusó valerosamente a firmar la carta de renuncia que los golpistas le habían preparado.

Los reaccionarios  convocaron a una reunión en el Palacio de Miraflores, donde  designaron  como presidente provisional de Venezuela al líder de la organización empresarial Fedecámaras, Pedro Carmona Estanga. Allí se procedió a dar lectura al Acta de Constitución del Gobierno de Transición Democrática y Unidad Nacional.

Pedro Carmona derogó la constitución bolivariana, disolvió el Poder Legislativo y destituyó a todos los diputados a la Asamblea Nacional, suspendió a los magistrados del Poder Judicial, al Fiscal General, al Contralor y al Defensor del Pueblo y concentró la suma del poder público en sus manos.

 

LOS APOYOS EXTERNOS

El golpe del 11 Abril  contó con el apoyo de Estados Unidos y España. También obtuvo la aprobación de algunos otros gobiernos: de Colombia,  presidida entonces por Andrés Pastrana, y el gobierno de Francisco Flores en El Salvador.

El golpe del 11 de abril se produjo mientras tenía lugar en San José, Costa Rica, la XVI Cumbre del Grupo de Río. Los presidentes allí reunidos consensuaron una tibia declaración en donde se condenaba la “interrupción del orden constitucional” cuidando de no emplear la expresión “golpe de estado” en el documento.

El presidente Ricardo Lagos declaró en San José que “lamentamos profundamente los hechos de violencia y la pérdida de vidas humanas. Instamos también a la normalización de la institucionalidad democrática, pero al no tener el cuadro completo de situación le pedimos a la OEA que sea la encargada de hacer una evaluación del asunto”, al paso que agregaba que “tal como se ven las cosas hasta el momento «sería apresurado hacer declaraciones concluyentes”. 

Pero la Canciller chilena, Soledad Alvear, entonces militante demócrata cristiana (renunció al PDC el 21 de abril de 2018), vio las cosas de otra manera y atolondradamente emitió un venenoso comunicado que, siguiendo puntualmente la línea establecida por la Casa Blanca, acusaba de los hechos de violencia y alteración de la institucionalidad al depuesto presidente Hugo Chávez.

El vergonzoso mensaje de Alvear –¡jamás repudiado o desautorizado por Lagos!- decía textualmente que “el gobierno de Chile lamenta que la conducción del gobierno venezolano (es decir, Chávez) haya llevado a la alteración de la institucionalidad democrática con un alto costo de vidas humanas y de heridos, violentando la Carta Democrática Interamericana a través de esta crisis de gobernabilidad”.

 

NUNCA RENUNCIÓ CHÁVEZ

El 12 de abril de 2002, en cadena nacional, el general Lucas Rincón, anunciaba que se le había solicitado la renuncia al presidente y que este había aceptado:

"Los miembros del Alto Mando Militar de la República Bolivariana de Venezuela deploran los lamentables acontecimientos sucedidos en la ciudad capital en el día de ayer. Ante tales hechos, se le solicitó al señor presidente de la República la renuncia de su cargo, la cual aceptó. Los integrantes del Alto Mando ponen sus cargos a la orden los cuales entregaremos a los oficiales que sean designados por las nuevas autoridades", dijo general Lucas Rincón Romero.

Sin embargo, no fueron presentadas pruebas que avalaran las declaraciones del general Rincón. La realidad fue que la renuncia nunca se produjo, puesto que no se firmó ningún documento.

 Militares y civiles habían  trasladado al líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, a distintos lugares, inicialmente al Fuerte Tiuna en Caracas intentando evitar que el pueblo lo rescatara, para posteriormente ser llevado hasta la isla venezolana de La Orchila, a 170 kilómetros de Caracas.

 

AGRESIONES CONTRA LOS BOLIVARIANOS

Se realizaron allanamientos y agresiones por todo el país a diferentes funcionarios del Gobierno. Detienen sin orden judicial al para ese entonces diputado Tarek William Saab y al ministro de Interior y Justicia, Ramón Rodríguez Chacín.

Liderado por el entonces alcalde del municipio Baruta, Henrique Capriles, se realizó un ataque contra la embajada de Cuba en Venezuela, secuestrando a las personas que se encontraban en el lugar.

 

PARTIDARIOS DE CHAVEZ LO RESTAURAN EN EL PODER

El nuevo gobierno de facto tuvo que enfrentarse con protestas de ciudadanos que se mantenían concentrados en sectores del país en apoyo de Chávez. En diferentes puntos de la capital y en algunas ciudades se presentaron disturbios y hubo saqueo de negocios. Durante todas estas protestas, el canal del Estado Venezolana de Televisión, y las compañías de televisión privadas fueron rodeadas por simpatizantes de Chávez.

Cuando fue retomado el canal del Estado, se transmitió que el entonces vicepresidente Diosdado Cabello, había  jurado como presidente temporal, al margen de la constitución, hasta que Hugo Chávez pudiese retomar el poder.

En la madrugada del 13 de abril, Chávez fue trasladado del Fuerte Tiuna a la base naval de Turiamo. Allí  escribió una nota que indicaba que no había renunciado "al poder legítimo que el pueblo me dio". Para aquella fecha aún se mantenían reunidos un buen número de simpatizantes de Chávez que habían salido a protestar frente al Palacio de Miraflores y en la Brigada de Paracaidistas en la ciudad de Maracay. 

El general Raúl Isaías Baduel se opuso al gobierno de Carmona, y empezó a buscar activamente el modo de restaurar a Chávez en el poder. 

El 14 de abril de  2002 Chávez fue liberado de la prisión militar en la  Isla La Orchila y fue repuesto como presidente de Venezuela.











La Pulpería

 


Comentario radial y escrito

 

 


 

Quien no ha jugado cuando niño, al mercado, a la tienda, al restaurant, a la cantina o la pulpería.

Se podía vender o comprar de todo, el surtido era grande, una piedra era un tuto de pollo, un palo un rouge, una rama un melón, un poco de tierra, era un sabroso charquicán.

Nuestra fantasía, podía traer en un parpadeo cualquier cosa.

Que había niños que jugaban a los indios contra los “cara pálida”, los había. Mi primo y yo matábamos cientos de indios, con una sola bala.

La pulpería era atrayente.

Aprendías a sumar y restar, a ser amable, curioso, a pensar, a inventar que cosa vender, que cosa comprar.

Todos jugaban su papel a la pinta.

Este juego infantil, de roles y oficios, en las escuelas básicas de los países europeos, le han dado en los últimos años, “como bombo en fiesta”.

Esta en los planes de estudios para ser aplicada, dirigida y orientada desde los 6 años del infante.

La cuestión de jugar al mercado ha servido, además de lo social, para ir entendiendo que las cosas no vienen por milagro.

Recuerdo la respuesta de un niño al preguntarle de donde se sacaba la leche, respondió, del ARLA. En mis tiempos de niño, respondería del Nestlé o del Nido.

Si uno piensa y reflexiona sobre el origen y consecuencias del mercado, me atrevo a pensar, a decir, que a pesar de las infinitas infamias ocurridas y que ocurren, que sin “el casero o la caserita, sin al fiado, sin los intrépidos, sin las rutas comerciales; los que están por allá arriba, mirando a los de abajo y los de abajo mirando para arriba, sin los acomodos de los del medio, hace tiempo que no quedaríamos ni pal recuerdo.

Como, la actividad del mercado, que pario el movimiento, el andar, el buscar e inventar el trueque, la venta y compra, el objeto que permitía y permite la posibilidad de la compra y venta; de saber y sentir que somos mucho más que dos, nos tiene, endemoniados matándonos “contratados al tanto”.

Constatar además que una pulpería, puede levantar civilizaciones, con todas sus contradicciones a cuesta, porque nadie, es igual al otro; se pone de manifiesto, urge, que hay que construir “en patota”, “un mínimo común denominador”

Es la pega del caminar y del caerse, de volver a pararse, de volver a caer y a empezar de nuevo.

Yo le llamo lucha de clases.

La adaptación y la porfía que nos tiene aun existiendo, es una pega que nos lleva 200.000 años.

Anda tu a saber, que había en el planeta antes de la Lucy.

El comercio, el mercado, el intercambio fueron y tendrían, y no son, los soportes de una estructura al servicio total del bienestar del pueblo

Sin embargo, el adobe de esta matriz de civilizaciones, la hemos convertido, manipulado, en un motivo para matar.

Yo siento que nos han manipulado tanto, que no reaccionamos a lo bestial de nuestro hacer y ser.

Santos Discépolo y su Cambalache nos enrostra no solamente el intelecto, la moral y la ética, nos bofetea.

Más de 185 millones de vidas humanas fueron cercenadas en el siglo XX. Sin contar con los desplazados y las infamias de los vencedores.

Yo me indigno por la mortandad a destajo, de más de 4 millones de cristianos, judíos y musulmanes, utilizando y usufructuando el recuerdo de Cristo, en las inventadas e impuestas “colonias” en las Cruzadas.

Y con todo respeto, esta semana, se asomará devoto, la traición de clase y de acomodo, perpetrado en la Vieja Jerusalén.

Y dale con el Medio Oriente.

Y cosa insultante.

Cuando el siglo XX tenía 38 años, el nazismo, el fascismo, perros de presa del Gran capital, parieron la guerra más cruenta de la humanidad.

70 millones de seres humanos perdieron la vida.

Para tener escalofríos: 5 veces la población de Chile, 6 veces la población de Suecia, 6 veces mi Cuba entera

5/6 millones de judíos son exterminados.

Fueron asesinados en campos de concentración, de exterminio, prisioneros soviéticos, polacos, rumanos, homosexuales, eslovenos, discapacitados, republicanos españoles y cualquiera que se terciara.

Las muertes en el Ejército Rojo, más los civiles en el asedio a Leningrado, se cuentan 24 millones de soviéticos. Más menos, 4 veces la población de Noruega.

El Ejército Rojo, entre agosto y diciembre de 1943 rompe en Dniéper el frente del ejército alemán, limpiando Ucrania de nazista y comienza la liberación de Europa de la locura.

Atraviesan Europa, entrando a territorio alemán el 12 de enero de 1945

Cinco meses más tarde, el 2 de mayo, la bandera de la hoz y el martillo, es izada en la casa de Gobierno del nazismo alemán, en Berlín.

Para los soviéticos, para los rusos, el 2 de mayo es el día de la victoria más grande de su historia.

Y le ponen harto color.

La Parada Militar, es parada, ya no es el Partido Comunista Soviético que organiza el hinchamiento de pechos de ese pueblo heroico, pero lo hace la memoria, el recuerdo.

Los rusos asoman la bandera de la Hoz y el martillo con dignidad y respeto… Y ella flamea, advirtiendo.

No es como el paracaidista español que se sacó la cresta el 12 de octubre del año pasado.

Sin embargo, los países de occidente, algunos de américa, esconden, manipulan, engañan, les avergüenza reconocer ese 2 de mayo.

Prefieren en recogimiento, asomar la traición y la mentira.

Alemania, tiene prohibido recordar.

Yo quería hablar de amor, contarles de Ecuador, hablar de Jannette Jara, candidata, que representa el pensar, el programa del Partido Comunista.

Quería hablarles de la urgencia de apoderarnos de las cámaras legislativas, única forme de ir desarmando el encofrado de la derecha y levantar una nueva estructura para el pueblo y con el pueblo.

El que entiende de táctica y estrategia, se ira por barrios y poblaciones, por aulas y patios, a conversar, a dialogar, a escuchar, sobre el programa partidario, que lleva nuestra compañera bajo el brazo.

De esas cosas quería hablar, pero la infamia y los alcances de los decires, me obliga a explicar por qué seguimos llamándonos Chile y no Colonia Dignidad, me obliga en triste, que Argentina tenga como mandatario, al que tiene.

Alejandro Fischer Alquinta.

Estocolmo 20250413



LA ENTREVISTA PRIVADA. Vasili Carrillo narra episodios de La Tarea Militar del Partido Comunista

 


Entrevistas

 

LA ENTREVISTA PRIVADA. Vasili Carrillo narra episodios de La Tarea Militar del Partido Comunista

 

abril 4, 2025 

 

Tomado de:   Prensa elSiglo

 

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Hace 50 años, más de cien jóvenes comunistas iniciaron su formación militar profesional en Cuba con el objetivo de combatir al régimen dictatorial y luego ser parte de unas Fuerzas Armadas “de nuevo tipo”. Carrillo cuenta que “La Tarea Militar comenzó el 16 de abril de 1975, en La Habana, surgió a partir de la decisión de la dirección del Partido Comunista y de un apoyo de Fidel”. Ingresaron a una academia militar donde “era alto el nivel académico, y la exigencia diaria, física, de disciplina” y donde “empiezas a entender y a mirar desde otra perspectiva la lucha”. La prueba de fuego para esos jóvenes ya convertidos en oficiales ocurrió cuando Fidel Castro les planteó ir a Nicaragua a la ofensiva final contra la dictadura somocista y cuenta el encuentro con el jefe de la Revolución Cubana. De Cuba, los oficiales y compañeros cubanos guarda una “gratitud enorme de su actitud solidaria, cariñosa, internacionalista, y particularmente en entender la necesidad de nuestra formación”. Reivindica la necesidad de enfrentar a “una dictadura sangrienta y criminal” que estaba exterminando a militantes y ciudadanos, y afirma que “nadie puede negar que el elemento militar para enfrentar a una derecha y unos militares que aplicaron el terrorismo de Estado, que instalaron una institucionalidad a partir de la fuerza de las armas, era necesario y legítimo”. Recalca: “La Tarea Militar del Partido Comunista fue una necesidad histórica, en un momento histórico en que había que prepararse en todos los planos para combatir a una derecha y a una dictadura tan sangrienta, tan criminal como la que hubo en Chile durante 17 años. Sin ese ingrediente hubiese sido imposible llegar al término de la dictadura a finales de la década del ochenta”.

 

 

 

 


Hugo Guzmán R. Periodista. “El Siglo”. Santiago. 4/2025. Vasili Carrillo Novoa nació en Lota en 1957. A finales de los años setenta era Subteniente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) de Cuba y estaba a cargo de una Compañía de Tanques, en la provincia de Matanzas.

 

A los 13 años había ingresado a las Juventudes Comunistas (JJCC), fue integrante de la Brigada Ramona Parra en Lota y desarrolló actividades culturales. Fue detenido y torturado. Debió salir al exilio, hacia la República Democrática Alemana (RDA). En los ochenta fue miembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez. Hijo de Isidoro Carrillo Tornería, asesinado por la dictadura.

 

Llegó a oficial de las FAR porque fue uno del centenar de jóvenes militantes comunistas que aceptó ser parte de La Tarea. Así se denominó en 1975 el trabajo de implementación de la política militar del Partido Comunista (PC) que vino a romper el llamado “vacío histórico” de la colectividad y que abrió paso a encarar con las armas a la dictadura que implementaba el terrorismo de Estado y estaba asesinando y desapareciendo a decenas de militantes del PC, las JJCC y otras organizaciones de la izquierda chilena y del movimiento sindical y social.

 

Se cumplen este mes 50 años de La Tarea. En entrevista, Vasili Carillo, uno de los protagonistas de esa historia, narra parte de lo que fue esa experiencia, que incluyó ir a combatir a Nicaragua.

 

¿Por qué celebrar ese hito de la llamada La Tarea, del Partido Comunista?

 

Más que celebrar queremos conmemorar los 50 años de La Tarea Militar, porque pensamos que hoy todo lo que fue la lucha combativa y frontal contra la dictadura, se quiere invisibilizar por todos los sectores políticos del país. Estos 50 años no debe ser solamente el momento de reivindicar el significado que tuvo La Tarea para quienes enfrentamos a la dictadura, sino también el aporte que hizo en la construcción de un camino que si bien es cierto no fue el que terminó con la dictadura, fue un aporte para poner fin a ese régimen. No sólo fueron los compañeros comunistas, fueron rodriguistas, miristas, socialistas, lautaristas, y eso hay que reivindicarlo, no se puede ocultar u olvidar.

 

¿Es la reivindicación de la lucha armada contra la dictadura?

 

A mí no me gusta el concepto de lucha armada. Se trató más bien de la implementación de la política militar por parte no solamente de los comunistas, sino de otras organizaciones, donde se incorporó el elemento militar a las formas tradicionales de lucha contra la dictadura. La derecha y la dictadura fueron cerrando puertas a salidas democráticas, todo el mundo sabe que promovieron políticas de exterminio de militantes de izquierda o ciudadanos, desarrollaron la represión y el uso de las armas contra el pueblo, y en eso contexto nadie puede negar que el elemento militar para enfrentar a una derecha y unos militares que aplicaron el terrorismo de Estado, que instalaron una institucionalidad a partir de la fuerza de las armas, era necesario y legítimo, había que tener una política militar.

 

“Surgió a partir de la decisión de la dirección del Partido Comunista y de un apoyo de Fidel”

 

Para que lo sepan las nuevas generaciones o recordarles a los que tienen mala memoria, ¿en qué consistió en concreto esa tarea militar del Partido Comunista, quiénes participaron, quién convocó? Entiendo que tuvo un papel central el Comandante Fidel Castro y Cuba.

 

La Tarea Militar comenzó el 16 de abril de 1975, en La Habana, en el marco de una fecha sumamente importante para Cuba que es la primera derrotada del imperialismo yanqui en Playa Girón, cuando quisieron invadir Cuba y fueron derrotados. Surgió a partir de la decisión de la dirección del Partido Comunista y de un apoyo de Fidel. Al inicio era muy volátil la idea. Lo único claro es que había que formar cuadros político-militares tanto para enfrentar a la dictadura como, posteriormente, con el término de la dictadura, construir una doctrina de defensa y un Ejército de nuevo tipo, tener cuadros que pudieran ingresar a cumplir un papel en unas nuevas Fuerzas Armadas.

 

¿Era tener oficiales para unas Fuerzas Armadas nuevas, posdictadura?

 

Exactamente. La visión de la dirección del PC, de Fidel, era formar cuadros político-militares profesionales que permitiera enfrentar el presente -de esos años- y lo que vendría a futuro. Bueno, igual no había total claridad sobre ese plan.

 

¿Y quiénes fueron convocados, quiénes fueron los primeros?

 

Los primeros fueron un grupo de aproximadamente 50 compañeros, jóvenes, hombres y mujeres, que habían salido becados de Chile a Cuba, durante el Gobierno de la Unidad Popular, a estudiar medicina. Ellas y ellos fueron los primeros que dieron el paso al frente, dejaron su carrera, abandonaron su proyecto personal. Posteriormente nos fuimos incorporando jóvenes que habíamos salido al exilio y después compañeros que habían sido expulsados de Chile después de permanecer un año o un año y medio en los Campos de Concentración de la dictadura.

 

Se podría pensar, hablando de 1974, 1975, que podía haber una preparación militar mínima, corta, específica, para volver a luchar a Chile, es decir, una preparación básica de combatiente o resistente. Pero ese plan era para formar oficiales profesionales, que harían carrera en distintas especialidades.

 

Te vuelvo a reiterar, la iniciativa y la visión que había era tener oficiales, tener gente preparada para combatir a la dictadura pero también que después asumieran tareas militares en las Fuerzas Armadas. Otra línea era preparar gente que volvía más pronto a la lucha de resistencia. Pero nosotros fuimos a academias militares a estudiar carreras militares.

 

Fueron a academias militares…

 

Sí. Fue algo muy importante porque era inédito, Cuba, Fidel, las Fuerzas Armadas Revolucionarias, nos abrieron las puertas a academias militares para formarnos. Y no era fácil. Entramos inicialmente 120, 150, y muchas y muchos desertaron, se fueron, no siguieron, porque ser militar no es algo fácil, hay que tener vocación.

 

¿Había un nivel de exigencia académica y disciplinaria?

 

Claro, era alto el nivel académico, y la exigencia diaria, física, de disciplina. Estábamos de lunes a viernes, a veces hasta el sábado en la academia, encerrados, estudiando, levantándonos a las cinco de la mañana, no teníamos un trato especial, éramos un cadete más, teníamos las mismas exigencias que un cadete cubano. Te cuento que entre nosotros había compañeros que tenían 25, 28, 35 años, y no era fácil para ellos, si no era fácil para mí que tenía 18 años, imagínate para ellos, vivir la exigencia académica, física, psicológica, vivir el estudiar en una academia militar, y estar lejos de nuestras familias, de nuestras amistades.

 

¿Qué recuerdo, que sensación te quedó de esos profesores y esos compañeros cubanos en la academia?

 

De tremenda gratitud. No solamente de los oficiales, de nuestros compañeros, sino del pueblo cubano. Yo le dije una vez a (Alberto) Mayol cuando era candidato del Frente Amplio, estando en Lota, que me molestaba que ellos hablaran de la Revolución Cubana en forma tan despectiva, tan irrespetuosa, tan irracional, sin saber el aporte, la bondad, el cariño, de la Revolución Cubana, sobre todo en el apoyo a la lucha contra la dictadura. Por eso, hasta el día de hoy, puedo decir que el cien por ciento de los compañeros que estuvimos en diferentes momentos formándonos en Cuba, viviendo en Cuba, pese a todas las dificultades que pudimos tener, somos unos tremendos agradecidos de la Revolución Cubana. Si tú me preguntas qué recuerdo y qué sensación tengo, es gratitud enorme de su actitud solidaria, cariñosa, internacionalista, y particularmente en entender la necesidad de nuestra formación.

 

 

 


“Fuimos parte de unas Fuerzas Armadas Revolucionarias victoriosas”

 

¿Y tú vivencia cómo fue?

 

Yo estaba exiliado en la República Democrática Alemana, tuve que salir después de estar preso, ser torturado, había salido muy a contrapelo y lo único que quería era volver a Chile. Y a mí, el compañero Orlando Millas, junto con Carlos Toro, me convocan a una conversación. Yo tenía 17 años y ya se había planteado que yo volviera rápidamente a Chile de forma clandestina, pero diferentes situaciones lo impidieron. Bueno, en esa conversación con Millas y Toro me dicen, bueno compañero, ya no va a ir a Chile, pero va a ir a aprender a mandar y obedecer. Me quedé con eso y al poco tiempo me dicen que me voy a Cuba. Como joven militante disciplinado de las Juventudes Comunistas, viajé a Cuba sin tener mucha claridad a qué iba, y cuando llego, el compañero Rodrigo Rojas, que fue el primer encargado de La Tarea Militar en La Habana, me dice “tú vas a ser formado como un futuro general de un Ejército de nuevo tipo”. Eso fue todo. Me integré al grupo y vino todo el proceso de formación. Estando en Cuba, inevitablemente empiezas a recibir no sólo la formación profesional, técnica, política, militar, sino que también se te empieza a inyectar todo lo que significa la Revolución Cubana, desde el punto de vista de las convicciones, de los valores, desde el punto de vista del internacionalismo, y de la historia de ellos.

 

Ustedes se graduaron de la academia militar y salieron al campo laboral militar en Cuba. ¿Cómo fue esa experiencia? Tú estuviste en Matanzas, a cargo de una Unidad de Tanques.

 

Indudablemente fue una tremenda experiencia porque implicaba ya no ser alumno de la escuela militar sino que te transformabas en jefe, como instructor de tropas cubanas de distintas unidas militares cubanas. Fue una experiencia gigante en función de nuestra formación. No solamente en la formación militar, sino en el espíritu revolucionario, internacionalista de Cuba. Mira, nosotros llegamos en 1975, y en 1976 se produjeron las grandes movilizaciones de tropas cubanas hacia Angola, a apoyar la defensa de Angola y su independencia, fueron movilizados miles de oficiales y de tropas. Nosotros estábamos en segundo año de la carrera, en la Escuela Antonio Maceo, y fueron convocados los alumnos de tercer año y enviados a cumplir la misión internacionalista a Angola. Nosotros golpeamos las puertas de nuestros jefes, nuestros mandos en la escuela militar, y dijimos que queríamos ir. Sabemos que fue decisiva la presencia militar cubana en Angola y en África.

 

Ustedes fueron parte de unas Fuerzas Armadas que ganaron una o dos guerras, que derrotaron al Ejército de Sudáfrica, que derrotaron a fuerzas militares apoyadas y financiadas por Estados Unidos, que lograron consolidar la independencia de Angola, el fin de Apartheid en Sudáfrica y la liberación de naciones africanas. Ese fue el Ejército donde ustedes se formaron y trabajaron.

 

Es así como lo dices. Fuimos parte de unas Fuerzas Armadas Revolucionarias victoriosas y que entregaron todo. África le debe mucho al pueblo cubano, en Angola, Mozambique, Sudáfrica, Etiopía, la lucha contra el Apartheid. Ese espíritu internacionalista se transmitía en nuestra formación. Lo vivimos cuando después fuimos a Nicaragua, a El Salvador, eso no sólo fue a partir de nuestras convicciones, sino de nuestras enseñanzas que nos inculcaron Cuba, las FAR, el pueblo cubano.

 

Y algo pasó con eso un par de años después.

 

Sí, eso llevó a que el año 1979, esos jóvenes que habíamos empezado la tarea en 1975, y que ya éramos oficiales, trabajábamos como oficiales en las FAR de Cuba, nuevamente por iniciativa de Fidel se nos convocara y se nos planteara la necesidad de asumir la responsabilidad de la lucha internacionalista en Nicaragua. Lo asumimos. Y cuando tú vas a Nicaragua y participas y entregas un granito de arena en la lucha insurreccional que llevaba años el pueblo nicaragüense y el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), empiezas a entender y a mirar desde otra perspectiva la lucha, los objetivos y yo particularmente me dije, chuta, para ser general de un Ejército de nuevo tipo primero hay que ganar la guerra. Y ganar la guerra, para nosotros, era terminar con la dictadura, combatir a la dictadura. Ahí empezamos el proceso de construcción de la política militar del Partido Comunista que, además, te recuerdo que en 1977 el PC había hecho un Pleno de su Comité Central, que es histórico, porque ahí se habla del “vacío histórico” en la política general del partido en cuanto a no haber tenido una política militar durante muchas décadas.

 

¿Cómo fue aquello de ir a combatir a Nicaragua? ¿Fue Fidel personalmente a verlos y convocarlos?

 

Nosotros fuimos acuartelados en ese tiempo por iniciativa de Fidel. No sabíamos para qué nos estaban acuartelando, estábamos en una unidad militar. Y de repente aparece Fidel, en persona, como a las 11 de la noche y nos saluda. Después, en esas formas típicas de Fidel, se coloca en una pizarra, agarra una tiza -no había como ahora plumones para pizarras-, pinta el mapa de Nicaragua, y comienza a explicarnos la situación en ese país y nos dice que el FSLN (Frente Sandinista de Liberación Nacional) necesita el apoyo, para la ofensiva final, de unidades regulares de artillería. Nos dice que los cubanos no podían enviar a sus Fuerzas Armadas y nos dice que habían pensado en nosotros. Nos emocionamos mucho. Es difícil describir lo que pasaba en la mente de cada uno de nosotros. Pero, Fidel nos dice que tenía que esperar la respuesta del emisario que había enviado a Moscú a hablar con la dirección del Partido Comunista a ver si autorizaban nuestra ida a combatir a Nicaragua. Se fue. Y a las tres horas, eran como las tres de la madrugada, vuelve y nos dice: “Iba llegando a mi casa a descansar, y recibí un télex de Moscú” y nos lee el télex. Decía que Don Lucho, Luis Corvalán, “da respuesta positiva”. En ese momento nos paramos todos, cantamos la Internacional, Fidel estaba muy emocionado. Estábamos respondiendo a nuestra formación y convicciones. Al otro día partieron de inmediato cuatro compañeros, después partimos en grupos más grandes, y así llegamos al Frente Sur en la frontera con Costa Rica.

 

 

 


La política militar como punto de inflexión para el PC

 

Hay un punto de inflexión, específicamente en 1975, en la línea política del PC. Asume una política militar.

 

Por supuesto que hubo un punto de inflexión y no sólo en 1975, sino que a partir del mismo 11 de septiembre de 1973, porque tienes que recordar que el Presidente Salvador Allende enfrentó a la dictadura, enfrentó el golpe militar combatiendo, resistiendo. Podríamos decir que fue el primer combatiente, el primero que resistió, junto a sus compañeros en La Moneda, junto a compañeros apostados en ministerios, como el Ministerio de Obras Públicas, junto a compañeros que enfrentaron el golpe en poblaciones como La Legua, en cordones industriales. Ahí comienza el punto de inflexión realmente. Cuando el Partido Comunista y otras fuerzas políticas comienzan a ser golpeadas militarmente, represivamente, a través de la acción criminal, terrorista, de la derecha y la dictadura. Comienza una aniquilación, un ataque a la población, comienzan las ejecuciones, las desapariciones, las torturas, las detenciones, los violentos allanamientos, los asesinatos.

 

¿Hay una relación entre La Tarea y lo que fue después el concepto de la Rebelión Popular de Masas y la creación del Frente Patriótico Manuel Rodríguez?

 

Por supuesto que sí. No solamente eso. Hay una relación con la lucha, con la voluntad, con la decisión de combate contra la dictadura de parte del pueblo y de la experiencia que fue desarrollada aquí en Chile, antes de La Tarea Militar. Hay que entender que antes del año 80, cuando Luis Corvalán anuncia la política de Rebelión Popular, ya existía el Frente Cero al interior del partido, grupos de militantes que incluso sin formación militar, realizaban acciones combativas, acciones de sabotaje contra la dictadura. Por lo tanto, hay que tener claro que no pretendemos conmemorar y mirarnos al ombligo los oficiales que fuimos formados en La Tarea. La Tarea Militar fue un elemento que contribuyó a la lucha que se desarrollaba en Chile.

 

¿Qué frase usarías para sintetizar lo que fue La Tarea?

 

La tarea militar del Partido Comunista fue una necesidad histórica, en un momento histórico en que había que prepararse en todos los planos para combatir a una derecha y a una dictadura tan sangrienta, tan criminal, como la que hubo en Chile durante 17 años. Sin ese ingrediente hubiese sido imposible llegar al término de la dictadura a finales de la década del ochenta.

 

¿Qué responderle a la gente de derecha, de extrema derecha, a otros sectores, que cuestionan esta tarea, que cuestionan el apoyo de Cuba, que dicen que eso demuestra que el Partido Comunista es violentista y antidemocrático?

 

Es importante la pregunta que me haces, porque creo que estamos viviendo un momento complejo, momento donde no solamente la derecha funciona en el marco del negacionismo de lo que fue la dictadura y la violación a los derechos humanos, sino que soy un convencido de que si la derecha hoy o mañana tuviera la necesidad o la oportunidad nuevamente de ejercer el terrorismo de Estado y la fuerza de las armas contra la democracia y el pueblo, lo volvería a hacer. Por lo tanto, la respuesta no la voy a dar yo o la va a dar el Partido Comunista o el pueblo. La respuesta la da la historia universal e instituciones muy importantes. Sin la decisión, el combate, la consecuencia y la dignidad de los partisanos en Europa, no se habría terminado con el fascismo nazi. La doctrina social de la Iglesia, la Declaración Universal de los Derechos Humanos, avala el derecho a rebelarse contra las tiranías. Por último, la derecha en este país no tiene ninguna autoridad moral para criticar y cuestionar el uso de las armas, de lo militar, contra una dictadura atroz y criminal de la cual fueron parte, la impulsaron y aún la defienden, y serían capaces de volver a repetirlo.