domingo, 4 de octubre de 2020

De Santiago a Pueblo Hundido.


Comentario radial y escrito.  




   

Mi padre fue profesor primario, su pizarrón colgaba de un pico del macizo andino, luego, tuvo que bajar su silabario al mar...  

A Barquito llegó; un campamento minero, portuario y de energia electrica muy bonito; lugar que por brujerías el cobre desaparecía.   

Por cuestiones que no entiendo y que todavía me visten, conocí a mi padre ya de “viejo”. Yo de niño, me acuerdo de él muy re poco.  Mi hermana Julia me cuenta las cosas antiguas.  

Los seres humanos, edificamos nuestra identidad desde que nos cortan la pita...y a veces me pregunto, si vivi 9 meses en una bolsa maravillosa, porque soy tan re bruto.   

No nací de un huevo.    

Con esta cuestión del plebiscito llegaron a mi memoria cosas que vale mucho la pena contarlas...    

Héctor, mi padre, vivía en Santiago, estaba enfermo y por la edad ya le habían quitado los silabarios, los alumnos y el pizarrón.    

La tiza se le estaba acabando, tengo una foto de él, mirando sin ver absolutamente nada, creo, que estaba en paz consigo mismo. La tiza le pedía que cortara el tandeo...    

Llego marzo de 1973.  Había que ir a votar en las Parlamentarias.      

Para la Unidad Popular, estas elecciones eran claves, serian el termómetro, la balanza, la pala para hacer siembras o irse al hoyo.   

Se veria....: ¿Estaba el Pueblo con su gobierno, estaba el Gobierno con su pueblo...?    

La derecha y el Imperio perseguían la destitución de Salvador Allende, como presidente de Chile.    

Ese dia de marzo, la concurrencia electoral tuvo y es, la más alta participación ciudadana...  

Estaba inscrito un 80.6% de la población, sufrago un 81 %…    

Mucho más de 3 millones de votantes.   

La Derecha no pudo alcanzar lo necesario para destituir al presidente.   

Más aún, la Unidad Popular subió su porcentaje de votos que se habían conseguidos en las elecciones presidenciales.        

Para ese marzo de 1973, mi padre, vestido con su único terno, plomito muy tímido, en gabardina, una maleta de cuero tan anciana como él, su petaca de vino tinto y en la Estación Central, Santiago, se subieron a un tren con olor a tren y a Pueblo Hundido los boletos. 

Había que ir a cumplir su deber ciudadano, su lugar en la trinchera lo esperaba, era la forma de lucha.         

Había que defender hasta la última tiza al gobierno popular.         

No sé cuántas veces lleno la petaca, pero llego y voto...y más encima se devolvió al mismito día...   

Una semana viajando en tren.    

El compromiso de clase es serio, el voto, en tiempos como hoy, son tan imprescindibles como una FA o una chapa. (lo digo pá los extremos.)     

Mi hermanita que mi padre era un “Titiritero” ...El teatro era, lo que es hoy la televisión o el cine.    

Las compañías teatrales por el sur de América hacían nata.     

Por ahí andaba un joven Héctor, medio muerto de hambre, por equipaje lo puesto.    

Lo contratan para un cuadro teatral. No mas de 5 segundos de aparición, decir una frase y tenía asegurado el bitute para una semana.   

Tenía que entrar a una habitación y tropezarse  con un cuerpo que yacía en el suelo muerto.   

“Oh un muerto”. Tenía que decir.   

Dos días ensayando en el espejo, había que trasmitir misterio, suspenso....el “Oh un muerto”, era  muy importante para el descenlace a un ambiente criminal.  

Llegó el día de la función, el salón estaba lleno, se acercaba el cuadro que tenía mi padre que salir y salió.    

“Chucha un muerto” dijo.    

Quizás, los nervios se lo comieron...y le salió su yo.     

Ese “yo” que no puede andar por la vida diciendo cosas de otros, otros, que no tienen ni idea lo que es encontrar un muerto en el camino, que no pueden leer la memoria, es más grande la gula politica.   

La verdad, sin tapujos o quieren, por migajas miserables no terminar con la horrible verguenza de proteger gobiernos herederos de la infamia, de la injusticia social... ¿Extrañan el fascismo?..  

Es lo que pena hoy en mi paisito...  

Mienten sin arrugarse, se sienten ofendidos, asustados mirando pal cuartel.   

Otros creen saber y tener la papá...Hasta Manuel anda receloso, frente a tanto patriota junto y suelto.  

Hasta el más abandonado sabe que la derecha y proveedores, podrán entre ellos arañarse y escupirse, pero llegado el momento de enfrentase a su verdadero enemigo, el pueblo organizado se juntan como puño e guagua.    

No es bueno que me salga de la rosca...  

Pero nosotros, no somos el riquerio...   

Somos el pobrerío, el moño no me lo baja nadie; preferimos descalificar, ofender, mentir...   

Nadie puede coartar lo que digo. La libre expresión es soberanía.   

Y puta que da pena cuando se muestran así... 

Nos robamos, nos matamos nuestra propia dignidad, nuestra propia soberania.  

Yo soy comunista, no porque los comunistas sean choros, sufrios y encachados...   

No, no son choros tampoco, a lo mejor los más bonitos....  

Nos hemos caídos cientos de veces, tenemos la guata rasguña de tantas veces, pero nunca ni jamás de rodillas...   

Y tampoco es por eso que soy comunista, lo soy, porque son los únicos que tienen una idea, un programa de como acabar con las injusticias del cualquier tipo...  

Y eso hace feliz la infancia.   

Los politólogos y agitadores tenemos esa pega, pasarle a los niños un mundo que refleje nuestra humildad y respeto por los que vendrán.   

A quien se les va a ocurrir escribir una Nueva Constitución sacando lo mejorcito de la fascista...  

Es como creer que no vio nunca enflorado al General  Baquedano, que no sabe de su plaza con banderas y cantos, con gritos y con ciudadanía.  

Acaso creen que el cabro, la muchacha andan disfrazados de piratas..   

A quien se le ocurre  llamar a no votar...   

A  un ignorante político que quiere aparentar un Anarco...No tiene idea de Anarquía.  

Los verdaderos Anarcos, los convencidos no llaman a la violencia con pistola de agua... 

Un Anarco es un buscador social, la mayoría se cansan, el Trotskista, también parece anarquista, se cansa más luego y se va para la derecha...   

De esos tenemos hasta para hacer guirnaldas.   

Nuestra historia tiene a Clotario Blest un ejemplo de rebeldía... Buscador de justicia social, dirigente sindical, fundador de organismos anarquistas, también cofundador del MIR, partido que abandona después  por diferencias de ideas y métodos..   

Me atrevo a decir que el Anarquismo fue  nuestro primer silabario.   

No me trago los conceptos manoseados, sobajeados, manipulados.  

Hablan de la clase política con desdén; meten en el mismo saco, a los que hacen política defendiendo los intereses, las necesidades del pueblo con criminales, a corbateados o encapuchados, a mentirosos, a falsos representantes de la clase trabajadora.   

El “Kínder” de Pinochet lo tergiversa todo...Y otros también...   

En momentos decisivos aparecen como callampas los Independientes.   

Me cuesta entender eso de Independiente, lo respeto...tan superiores son que no se pueden injertar por algun lado...Se trata de ser fuerte. 

No comprometerse con nadie y en nada es cómodo y se sale en la tele.    

Su figura y nombre lo llevara un grano de arena...En que puesto ira, no lo sé, hay muchos Catapilcos, Frei, Aylwin, Cubillos, antes que ellos.    

En estos instantes la verdad es dura y cruda. Si la oposición, sus dirigentes, no se ponen de acuerdo, seriamos traidores a la patria.    

Le fallaríamos al presidente heroico....    

!! Yo no quiero ser  traidor, tampoco solo un espectador...!!    

Por eso escribo así, por eso traigo a mi Taita pa que me ayude.    

No quiero ofender a nadie, pero lo que voy a decir es verdad, está escrito, es cuestión de moral, de humildad de entenderlo y aprender.   

El Golpe de Estado, fue bestial, sigue siendo inhumano, no estamos todos los que quisimos encaramar un nuevo país, fuimos derrotados políticamente.    

Que significa políticamente.   

Que no pudimos ser un solo palo, nos desastillamos; la palabrería, la vanidad, el oportunismo, la extrema izquierda, el izquierdismo infantil, la autosuficiencia,  lo sectario, interpretamos mal los pasos de Lenin...   

Ahí fallamos.   

A pesar de eso, el gobierno y su pueblo hizo cosas maravillosas...El estatizar la banca, las nacionalizaciones, fueron la base para levantar un nuevo país.   

No podemos cometer los mismos errores.    

La unidad es lo más revolucionario, lo más humilde, lo más generoso que se puede construir.    

Una Nueva Carta Magna a traves de Asambleas Constituyentes podemos construir.  

 

Alejandro Fischer Alquinta.    

Estocolmo, en cuarentena20201004.