jueves, 28 de febrero de 2013

Editorial El Siglo: El general-presidente









Editorial El Siglo: El general-presidente



Ya hubo otro general, que se proclamó presidente sin haberlo sido nunca: apenas fue un dictador. Este, Juan Emilio Cheyre, ha sido nombrado según “todas las de la ley” y su cargo es el de presidente del Servicio Electoral.

¿Quién es este general?: Ingresó a la Escuela Militar en 1962. Tras rutinarios ascensos llega en 1994 a general de brigada, en 1998 de división; y en 2002, a comandante en jefe hasta el 10 de marzo de 2006.

Ahora está a cargo de garantizar los libres y correctos procesos electorales en este país.

Por actos realizados cuando el general era capitán, Cheyre fue citado en dos ocasiones ante los tribunales de justicia en calidad, no de testigo, sino de inculpado. Si bien es cierto que no fue procesado, cabe preguntarse: ¿es ése un antecedente meritorio para elevarlo a un puesto de tanta trascendencia y “visibilidad”?

El general Cheyre sucede, tras otros oficiales, al mismo general que el 11 de septiembre de 1973 encabezó un golpe de estado, con todas las consecuencias conocidas, que derrocó y asesinó a un presidente de la república elegido democráticamente.

El mismo general -de Pinochet hablamos, ciertamente- clausuró el congreso nacional, elegido también democráticamente, persiguió y aun asesinó a varios parlamentarios.

Destruyeron los registros electorales y negaron la ciudadanía real y efectiva a los chilenos por más de 17 años.

El general Cheyre es hijo de esa institución, comparte su “doctrina” y prolongó su historia: ¿son los mencionados antecedentes, suficientemente “habilitantes” para colocarlo en la alta posición que ha asumido recientemente?

Con motivo de las últimas elecciones municipales, quedaron al descubierto algunas “particularidades” de nuestro sistema electoral, tales como la presencia en los padrones electorales de personas fallecidas, caso del presidente Salvador Allende, y centenares de detenidos desaparecidos.

Esos detenidos desaparecidos son obra de las fuerzas armadas; entre ellas, y quizás privilegiadamente, del ejército. En incontables ocasiones los tribunales de justicia y el propio poder ejecutivo, así como organizaciones de derechos humanos y una multiplicidad de organismos e instituciones civiles, han requerido de las FFAA la entrega de los antecedentes que sin duda alguna obran en su poder para esclarecer cada uno de esos casos. Jamás se ha obtenido esa información, y tampoco el general Cheyre en sus 4 años al mando del ejército se sintió obligado legal ni éticamente a entregar la información reservada que ciertamente poseía. ¿Es éste otro “factor positivo” para su designación como garante supremo de la limpieza de los procesos electorales por venir?

En la misma ocasión –municipales de 2012- se evidenció la presencia en los padrones electorales de miles de compatriotas que viven en el extranjero, y a quienes reiteradamente los poderes públicos les han negado su condición ciudadana, así como a sus descendientes nacidos en el exterior. Estos chilenas y chilenos se hallan fuera del país ya sea porque fueron desterrados por la dictadura o porque hubieran optado “libremente” por dejar nuestro país, en ambos casos por razones de seguridad y  supervivencia. Siguen en el padrón electoral. La pregunta es: ¿serán borrados, o finalmente se les reconocerá su condición de chilenos a título completo? Entre quienes deberán dar una respuesta, se halla el general Cheyre, cuya institución está en la base como causal inmediata y directa del exilio. ¿Es éste otro elemento a considerar a la hora de designar al distinguido oficial como “garante” de las instituciones de la  democracia?

Hombre de la dictadura, Cheyre fue intendente de Atacama. Como delegado de Ricardo Izurieta, entones comandante en jefe, asumió en Londres durante el juicio a Pinochet “el control de permanente monitoreo de la salud” del arrestado asesino de masas.
Como integrante del Servicio Electoral, cuya composición “binominal” fue aprobada en el senado el 23 de enero por exiguos 34 votos a favor y 2 abstenciones, Cheyre ganó la “interna” de 5 miembros por 3 votos a 2, lo que muestra que, otro ejercicio de “transparencia” electoral, él mismo dirimió el empate a su favor.

En la búsqueda de algún símbolo de reconciliación, suelen los verdugos al descender del caldazo buscar la mano que selle la unidad de la vida y la muerte. Pero la mano de la víctima no ha podido presentarse, y la única reconciliación posible es entre el verdugo y la muerte.









Concierto para Virginia






El compañero Julio Irazzoky Basaure, de La Cisterna, escribiò este hermoso poema para nuestra querida compañera Virginia González.

     






    Concierto para Virginia
  
  

 Nos invita Hernán, es el diez.
    Nos dice , a las que asesinaron
    a las que mantienen el pecé en pie
    A las que su cuerpo encadenaron.

    Virginia, carbón de Curanilahue
    Con Elías , Américo, Julieta y Pablo
    De cobre, ladrillos cárcel y copihues
    Dan molde a este luchador pueblo

    Volvemos a encontrarnos ese ocho
    a local repleto atentos a tu voz
    con el puño en alto diste por hecho
    El golpe viene el fascimo ya llego.

    Dificil y duro trabajo clandestino
    Desde la ventana ves a Marta.
    Dijiste la traen, sola no vino.
    El Partido dice, que Sofía parta.

    Pasan los años y mueren las flores
    Vuelvo a verte en Hotel Octubre.
    Salón de visitas, miro, tu eres.
    A los del interior, no ver es costumbre

    Solo quiero decirte que veo a Jorge.
    Mi compañero, ¿Como esta el?
    ¡Bien! Le envía un beso, que no viaje,
    A la primera lo haré, vas a ver.

    Mi custodio se acerca, dice Spaciva,
    susurro al oido de nuestra Sofia.
    A Pinochet lo van agarrar en Manila,
    Mira con ira y su rostro, enrojecía,

    Mi secreto solo quizo dar alegría,
    a una mujer que pudo ser desaparecida.
    Esta con nosotros, Dios la bendiga.-





El caso Soria








El caso Soria

Por Eduardo Contreras
   

Una vez cumplidos los correspondientes trámites judiciales y administrativos, incluída la referencia del Consejo de Ministros, el pasado 15 de febrero el gobierno español aprobó solicitar a Chile la extradición de seis ex agentes de la Dina culpables del secuestro torturas y asesinato del diplomático español Carmelo Soria Espinoza perpetrado en julio de 1976.

Los criminales imputados son ocho pero uno de ellos, Juan Delmas Ramírez, falleció y el otro, Michael Vernon Townley Welch, no se encuentra en Chile.

Los cinco autores materiales directos circulan como blancas palomas por las calles de Santiago y son el suboficial José Remigio Ríos, el capitán Jaime Lepe Orellana, el capitán Guillermo Humberto Salinas, el capitán Pablo Belmar Labbé y el teniente Patricio Quilhot. Todos miembros en retiro del ejército que integraron la Brigada Mulchen. El sexto es Manuel Contreras Sepúlveda, procesado por su responsabilidad superior.

Carmelo Soria se desempeñaba en nuestro país como Jefe del Departamento Editorial del Centro Latinoamericano de Demografía, Celade, dependiente de la Comisión Económica para América Latina, Cepal, cuando fue secuestrado el 14 de julio de 1976 en circunstancias que se dirigía a su casa ubicada en la calle Aldunate en Santiago en su automóvil Volkswagen sedan TL 1600 con patente diplomática de Naciones Unidas como correspondía a su cargo y a la estructura científica internacional para la que trabajaba.

Para detenerle, los agentes Ríos y Lepe, como parte del operativo pretextaron una supuesta infracción de tránsito y le detuvieron en la calle José Domingo Cañas alrededor de las 17.30 horas trasladándolo a la casa de Vía Naranja 4925 de Lo Curro, centro clandestino de propiedad de la Dina y en donde residía el doble agente Michael Vernon Townley que a su vez dirigía la agrupación Quetropillán. En esa mansión comenzó el martirio de Carmelo Soria a quien la DINA suponía vínculos con el Partido Comunista de Chile.

Bajo la dirección del entonces capitán Lepe, Soria, maniatado y con la cara vendada, fue golpeado brutalmente durante horas fracturándole las costillas a ambos lados de la caja torácica. Según declaraciones que constan en el proceso judicial, durante ese tiempo infernal, Soria sólo murmuraba “¡…pobre Chile ! ”

Cansados de golpearle y frustrados en su intento de arrancarle alguna declaración que les permitiera otras detenciones ilegales, el grupo criminal decidió darle muerte. Así consta en el expediente rol nº 19 / 1997 – D y se reproduce en la resolución de procesamiento y captura internacional, cuya copia tenemos, del Juzgado Central de Instrucción nº 5 de la Audiencia Nacional de España de fecha 29 de octubre de 2012.

Textualmente se señala : “Tras ello acabaron con su vida antes de las 22 horas del día 14 mediante estrangulamiento manual que le produjo la rotura del hueso hioides siendo el autor Guillermo Humberto Salinas Torres, ayudado materialmente por otros dos miembros de la Brigada de entre los participantes del hecho…”

Se deja constancia que “para hacer pasar su muerte como un accidente de tráfico, le inyectaron o hicieron ingerir previamente el contenido de media botella de pisco”.

Horas después del estrangulamiento, alrededor de la 1.30 de la madrugada del día 15 de julio introdujeron el cadáver de Soria en su Volkswagen y, conduciendo Juan Delmas, llegaron hasta el canal del Carmen, mientras en otro vehículo les acompañaban Lepe, Salinas y Belmar. Llegados al canal, echaron a andar el motor del auto de Soria y lo precipitaron al vacío lanzando en seguida el cadáver al canal. En el asiento del auto habían depositado media botella de pisco sobre la que se constató que no había huella dactilar alguna. Soria no bebía y además se comprobó que por una neuralgia del trigémino que le afectaba por esos días tomaba medicamentos incompatibles con el alcohol.

El vehículo fue encontrado el mismo día 15 y el cadáver recién el día 16 a unos mil metros del auto. Los informes forenses explican que el cuerpo estuvo un máximo de 12 horas en el agua y apareció con las manos crispadas, signo de dolor o sufrimiento, inusual en casos de accidente de tránsito.

Al sacar el cadáver de las aguas, los agentes de la Dina colocaron en la chaqueta de Soria una nota de un supuesto amigo de la misma oficina de Naciones Unidas en la que le contaba presuntas infidelidades de su mujer.

Pero la burda maniobra resistió muy poco dado que las pericias probaron que la supuesta carta había sido introducida con posterioridad ya que por la calidad del papel y el tiempo en el agua no se habría encontrado en el perfecto estado en que estaba y por otra parte el tipo de letra mecanográfica de la nota no se correspondía con ninguna de las que existían en la oficina de la ONU en Santiago cuyo origen se le atribuía.

Es más, posteriormente los propios agentes confesaron que la nota se escribió en la misma casa de Lo Curro y fue redactada por Patricio Quilhot en las últimas horas del día 14 de julio.

Como se sabe, la escala de mando de la época en la Dina era encabezada por Pinochet, luego Manuel Contreras, director, seguía el coronel Pedro Espinoza en la Dirección de Operaciones, luego la Brigada de Inteligencia Metropolitana a cargo del teniente coronel Marcelo Moren Brito y el jefe de la Brigada Mulchen que era Guillermo Humberto Salinas Torres. La orden de muerte de Soria, así se acreditó en el juicio, la impartió personalmente Manuel Contreras, es decir Pinochet.

En cuanto al proceso judicial en Chile se vio bruscamente truncado cuando en el año 1996 una sala de la Corte Suprema cerró el caso aplicando de modo arbitrario e irregular las normas del decreto ley de autoamnistía que los verdugos dictaron en 1978. La situación se ha mantenido por años, pese a que, con posterioridad y en diversas ocasiones, en casos de crímenes de la dictadura militar la misma Corte Suprema ha dictaminado la inaplicabilidad de la amnistía y de la prescripción dada la naturaleza de los delitos y la vigencia de tratados y convenios internacionales.

Entre ellos los Convenios de Ginebra, ratificados por Chile en la década de los 50 del siglo pasado, que eran ley interna de la República y que, en armonía con el propio Decreto nº 5 de Pinochet de 12 de septiembre de 1973 que estableció el “estado de guerra interno en Chile” y que por tal razón hizo aplicable “toda la legislación de tiempos de guerra”, conforman un fundamento jurídico sólido que además está en armonía con el desarrollo del Derecho Penal Internacional y del Derecho Humanitario a escala mundial.

Es precisamente la imposibilidad de juzgar en Chile a los asesinos de Soria por ese aberrante fallo de la Corte Suprema la que determinó a la Audiencia Nacional de España a procesar a los autores del crimen y a disponer orden de captura internacional y, ahora, a requerir a través de los gobiernos respectivos la extradición de estos sujetos.

La más alta magistratura hispana – la misma que en su propio país se ha negado a llevar adelante los juicios por los crímenes de lesa humanidad del franquismo – invoca los principios de Derecho que hacen posible la llamada jurisdicción universal cuando se trata de delitos de lesa humanidad.

Si la ofendida es la humanidad entera, precisamente ello viabiliza que cualquier Estado del mundo pueda juzgar a los autores de estos delitos con independencia de la nacionalidad de los criminales y del país en que se cometieron esos delitos. Los precedentes abundan y bien les conocemos los chilenos. En este caso específico el tribunal español es plenamente competente y los elementos indiciarios de incriminación justifican sobradamente lo resuelto en la resolución ya citada.

La petición de octubre pasado de los tribunales de Madrid se funda además en jurisprudencia del Tribunal Constitucional de España y del Tribunal Penal Internacional, aludiendo al criterio de subsidariedad que permite fuera de toda duda u objeción la intervención del tribunal madrileño.

Ante tal situación y sin perjuicio de que sigan adelante en el intertanto las diligencias propias de una extradición, en nuestro país está planteada la reapertura del proceso abruptamente interrumpido por el más alto tribunal nacional el 23 de agosto de 1996.

¿Quién juzgará en definitiva a los autores de este crimen? Lo importante es que se les juzgue.

Lo importante es que la impunidad mantenida por tanto tiempo parece retroceder.

Los próximos meses serán decisivos y no resulta posible hacer vaticinios certeros habida cuenta de que en nuestro país, como en otros, la realidad muestra el peso de los llamados poderes fácticos en las determinaciones de los tribunales.

Si no, veamos lo que acaba de suceder en Uruguay. Se han cerrado por aplicación de la prescripción todos los procesos por crímenes de la dictadura de ese país mediante extraño y sorpresivo fallo de la Corte Suprema de ese país no obstante su naturaleza jurídica, los tratados internacionales y además una ley expresa que había reiterado la imprescriptibilidad. Por si fuera poco, removieron desde los tribunales del crimen a los tribunales civiles, a la jueza Mariana Motta, reconocida internacionalmente por su destacada actuación en juicios de derechos humanos, sino que es además quien condenó a Bordaberry específicamente por el delito de golpe de Estado.

Es decir, jurídicamente el mismo tipo de querella que en enero de este año presentaron en Chile las agrupaciones de familiares de las víctimas de la dictadura.

Las alternativas sufridas en el caso Soria y en el caso uruguayo vuelven a recordarnos que la larga lucha por la vigencia plena de los derechos humanos, la verdad y la justicia, no es sólo asunto de las víctimas,sus familiares o sus abogados.

Por el contrario, son cuestiones de fondo que afectan a la sociedad en su conjunto y carece de seriedad y de sentido ético estimar que pueda desarrollarse una democracia verdadera si no se curan las graves heridas del cuerpo y el alma de un país que soportó una dictadura tan cruel como la chilena. Esas heridas sólo sanarán con toda la verdad y con justicia real.








Entre el miedo y la esperanza










Me tome un vaso de vino, agarre la guitarra y cante Zamba para no morir.
Se me paso la angustia
Que esten bien.
Alejandro



Entre el miedo y la esperanza



Me es muy complicado escribir corto, sobre todo, cuando el Riquerio, deja ver sus garras y aparentemente, nosotros estamos preocupados, con banderas en alto, mirando por otros lados.

El jueves pasado, 14 de febrero, se juntaron en la casa de Victor Jara, miembros del Partido Radical, Socialista, Independientes de Izquierda, Partidos Comunistas de Chile, de Perù y Bolivia. Estos dos últimos, nos llenan de satisfacción y orgullo, por su alto sentido internacionalista y de solidaridad. 

Se juntaron para analizar e intercambiar experiencias, en relación con documentos emanados de compromisos politicos de la oposición; para poder incrustar en las diferencias, una sola actitud en la palabra y en la acción.

De allí, algunas interrogantes, tratando de situar en esta complejidad de nacimiento, a las fuerzas armadas.

El ofrecer a destajo, es propio de los que hacen uso de la violencia y de la irracionalidad.  

El riquerio nacional, con soberbia; desprecia todas las reglas del juego, que dicta la moral y la etica.

Cuando las palabras, en la Casa de Victor Jara, buscaban, exponían experiencias y formación; en Chile, una bala certera y maldita, truncaba la vida de un obrero: Pablo Jimenez, presidente de la Federación de trabajadores de AZETA. Empresa que se dedica a prestar servicios calificados.

Se sabe, que Pablo Jimenez, el asesinado, había tenido serios enfrentamientos laborales, defendiendo los derechos de sus sindicados.

Unos de los más agrios enfrentamientos entre patrón y sindicato, tuvo lugar un año atrás. Las argumentaciones no fueron suficientes, y según la ley, tendría que verse, nuevamente el conflicto un año despues.

En esos tramites sindicales andaba el compañero, las demandas de los trabajadores de AZETA, tenían que ser expuestos este año en curso.

Una bala, canalla y mortal perforo su cabeza y mato a un esposo, a un padre y a un dirigente sindical.

Fue un ajusticiamiento… Mucho estorbo, eliminar al causante.

El contenido es el mismo al de una funcionaria de Gobierno, incitando al crimen, para acallar a Camila Vallejos.




Los métodos no cambian… Los asesinos que nos quitaron los abrazos, la sonrisa, el luchar juntos con Tucapel Jimenez, de Manuel Guerrero, Santiago Nattino, y de José Manuel Parada, vienen de la misma ciénaga. 

Ha cambiado la coreografía del terror… Ya no van en un operativo a buscar a sus estorbos… Los eliminan desde lejos… o muy de cerca: como a Frei Montalva, Pablo Neruda, José Tohá, Alberto Bachelet, Victor Jara, Marta Ugarte… el objetivo es el mismo: aterrorizar, manipular, mentir.

¡Es el terrorismo de Estado con corbata y traje!

Tengo miedo, mi miedo es antiguo, no le creo la risa al  Festival de Viña del Mar… Le tengo miedo a lo bestial.

La Dictadura Militar fue un averno sin control ni limites. El límite lo ponía la muerte y la nada: el mar o lo profundo de unas fosas.

Por mi memoria lacerada, aquellos tiempos no han pasado, no se desvanecen… Cada día que pasa, cada minuto, los horrores, la falsedad y la avaricia, se descuelgan de la oscuridad salvaje.

Me duele el dolor olvidado.

Las intuiciones florecen y me golpean los ojos, como una primavera negra.

La violación en mi país, es en patota, son buitres y hienas en celos.

Los que no hacemos nada, seremos cómplices de los sepultureros.

Desde el punto de vista del pan, del techo y de la escuela, muy poco cambio la vida, cuando se jugo a las “cambiaditas” con la Concertación.

Y las elecciones otra vez. Se elige a los hijos y cómplices del ladrón, que por extraño que parezca, hicieron un movimiento mágico; El humanismo cerro los ojos, los estudiantes miraron y la “caja de Pandora, bien peinadita, se abrió…

La historia nos ha enseñado en carne propia, situaciones de estado catatónico, que te impide ver la realidad, el peligro, la muerte.

Los judíos morían como moscas en los campos de concentración. Los prisioneros eran muchos más que los opresores.

En una sublevación, con seguridad habrían muerto cientos de judíos, pero la mayoría se habría liberado de los Campos de Exterminios.

¿Que los incitaba a ir “cogote gacho” a la muerte?

¿Qué nos incita a nosotros?

Que pasa con las victimas del Tsunami: Los que recibieron “casitas”. Tendrían por deber ciudadano, contarles a los de Rodelillo la falsedad en la caridad.
Es el gobierno, los hacedores intelectuales de las catástrofes no naturales que sufre mi pueblo y paisito; incluso los daños de las naturales, es el gobierno el que tiene que prevenir los accidentes de todo tipo. Y… si los ciudadanos organizados en sindicatos, denuncian anomalías de la seguridad laboral y del que los provoca.

! No hay que asesinarlos.!

Valparaiso con sus casas colgantes, como el jardín de Babilonia, tiene la oportunidad de empezar de nuevo.

Las casas que le quieren dar, no les resolverá el problema.

Construyan como se debe… Inviertan la catástrofe en seguridad y bienestar para el pueblo.

El País esta en ácidas batallas de clases. Las aniñas son de todos los días. La cuestión es contra el reloj.

Si nos demoramos mucho en ponernos de acuerdo, el tiempo para convencer a ese 60% histórico, que no vota o no voto, será muy difícil tener un país del pueblo…

Se puede  perder una ocasión única.

Me aterra, que por proposición del Piñera, en el Senado de la Republica, haya sido aprobado, por proposición del jefe de Gobierno, presidente de la “Comisión electoral”, el exjefe del Ejército Juan Emilio Cheyre.

Este susodicho, aun tiene cuentas pendientes con la justicia con relación a los crímenes de lesa humanidad. La justicia aún, no lo ha dejado libre de polvo y paja, además es un mentiroso.

Repito, tenemos poco tiempo.

La farándula de diferencias entre ellos, es eso, una farándula.

El asesinato del obrero, la comisión electoral, los mapuches, los festivales, los soldados bolivianos, son movimientos de ajedrez, preparando el “Bunker”.

Muchas gracias.

Alejandro Fischer Alquinta
2013-02-25




Intervención del líder histórico de la Revolución Cubana, Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, durante la Sesión de Constitución de la VIII Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular.






Fuente:cubadebate.cu




Intervención del líder histórico de la Revolución Cubana, Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, durante la Sesión de Constitución de la VIII Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular.


Queridos compañeros:

Agradezco profundamente el noble gesto del pueblo al elegirme como diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba.

No será mucho el tiempo que ocupe en la intervención de hoy, ni tampoco el espacio de este honroso escaño como diputado, y no por falta de voluntad, sino por imperativo de la naturaleza.
Jamás pensé que mi existencia se prolongara tanto, y que el enemigo fuera suficientemente torpe en su odioso oficio de eliminar adversarios decididos a luchar.

En esa desigual lucha, nuestro pueblo demostró su asombrosa capacidad de resistir y de vencer. ¡Sí, porque cada año de resistencia entre 1959 y 2013 fue una victoria que nuestro pequeño país tiene derecho a proclamar!

No luchamos por gloria ni honores; luchamos por ideas que consideramos justas, a las que, como herederos de una larga lista de ejemplos, millones de cubanos han consagrado su juventud y su vida. Una cifra lo expresa todo: a ochocientas mil personas se eleva el número de los cubanos que han cumplido abnegadas misiones internacionalistas. Si al triunfo de la Revolución en el año 1959 no llegábamos a 7 millones de habitantes, se puede medir el significado de tales esfuerzos.
Esto sin embargo no lo expresa todo. En octubre de 1962, la nación estuvo a punto de convertirse en campo de batalla nuclear. Un año y medio antes, en abril de 1961, una expedición mercenaria entrenada, armada y escoltada por la Marina de Estados Unidos, desembarcó en Bahía de Cochinos y estuvo a punto de provocar una sangrienta guerra que habría costado a los invasores norteamericanos cientos de miles de vidas —lo afirmo sin exageración— y a nuestro país, destrucción y pérdidas humanas realmente incalculables.

Poseíamos entonces alrededor de cuatrocientas mil armas y sabíamos como usarlas. En menos de 72 horas el fulminante contraataque revolucionario evitó aquella tragedia, tanto a Cuba, como al pueblo de Estados Unidos.

Fuimos víctimas de la “guerra sucia” durante mucho tiempo, y 25 años después de la Crisis de Octubre, tropas internacionalistas defendían Angola de los invasores racistas sudafricanos, provistos ya en esa época de varias armas nucleares con tecnología y partes esenciales suministradas por Israel con la aprobación de Estados Unidos. En aquella ocasión la victoria de Cuito Cuanavale, y el posterior avance resuelto y audaz de las fuerzas cubanas y angolanas, equipadas con los medios aéreos, antiaéreos y la organización adecuada para liberar territorios todavía ocupados por los invasores, disuadieron a Sudáfrica, de que no le quedaba otra alternativa que abandonar sus ambiciones nucleares y sentarse en la mesa de negociaciones: El odioso sistema racista dejó de existir.

Entre todos hemos llevado a cabo la modesta proeza de una Revolución profunda que, partiendo de cero, nuestro pueblo fue capaz de realizar. A los primeros núcleos revolucionarios se fueron sumando otros. Nos unía el deseo de luchar y el dolor por la tragedia del país ante el golpe brutal. Mientras unos tenían esperanzas en un futuro al que veían todavía muy lejano, otros meditábamos ya en la necesidad de dar un salto en la historia.

Entre el golpe de Estado del 10 de Marzo de 1952 y el 1º de Enero de 1959 transcurrieron solo 6 años y 296 días; por primera vez, en nuestra Patria, el poder había quedado totalmente en manos del pueblo.

La batalla comenzó entonces contra la ignorancia política y los principios antisocialistas que el imperio y la burguesía habían sembrado en nuestro país. La lucha de clases desatada a pocas millas de la sede del imperio fue la escuela política más eficiente que ha tenido nunca un país; hablo de una escuela que abrió sus puertas hace más de 50 años. Hombres y mujeres, desde los pioneros hasta las personas que posean muchos más años, hemos sido alumnos de esa escuela.
Sin embargo la gran batalla que, de acuerdo a lo que me contaba Raúl hace unos días, se impone, es la necesidad de una lucha enérgica y sin tregua contra los malos hábitos y los errores que en las más diversas esferas cometen diariamente muchos ciudadanos, incluso militantes.
La humanidad ha entrado en una etapa única de su historia. Los últimos decenios no guardan relación alguna con los miles de siglos que la precedieron.

En el año 2011 la población mundial arribó a 7 mil millones de habitantes, lo que constituye una cifra alarmante. En solo dos siglos la población del mundo se multiplicó por siete, alcanzando un ritmo de necesidades alimentarias vitales que la ciencia, la tecnología y los recursos naturales del planeta están muy lejos de lograr.

Pueden hacerse decenas de cálculos, hablar de Malthus o del Arca de Noé, basta saber lo que es un gramo y lo que produce una hectárea de cualquier alimento y sacar sus conclusiones.
Tal vez el Primer Ministro inglés o el presidente Obama sepan la respuesta que prolongue unos días más la vida humana, la multiplicación de los panes y los peces, y las palabras mágicas para persuadir a los africanos, los habitantes de la India, América latina y todos los países del Tercer Mundo, que no tengan hijos.

Hace dos días una agencia internacional recordaba que un multimillonario estadounidense, Dennis Tito, había gastado 20 millones de dólares para pagar su viaje a la Estación Espacial Internacional, donde permaneció varios días en el año 2001.

Ahora Tito, que parece ser de verdad un fanático de la exploración espacial, estaba discutiendo los detalles para incursionar al planeta Marte. El viaje durará 501 días. ¡Eso sí es disfrutar la plusvalía! Mientras los polos se derriten velozmente, el nivel de los mares sube por el cambio climático, inundando grandes áreas en unas pocas decenas de años, todo lo cual supone que no habrá guerras y las sofisticadas armas que se están produciendo a ritmo acelerado no se usarán nunca. ¿Quién los entiende?

Concluyo para cumplir mi promesa de ser breve en estas palabras de saludo a nuestra Asamblea Nacional.

En el 118 Aniversario del Grito de Baire y el 160 del nacimiento de nuestro Héroe Nacional, me complace rendir tributo al revolucionario, antiimperialista y bolivariano que sembró en nuestros jóvenes las primeras semillas del deber.

¡Muchas gracias!




ARDE RODELILLO








ARDE RODELILLO



Hoy se ha informado que el reciente incendio ocurrido en el sector de Rodelillo y Cerro Los Placeres de Valparaíso, arrasó  con 284 viviendas.

El sector tuvo su origen en un asentamiento espontáneo, instalado desde hace años, sobre la singular topografía porteña caracterizada por una sucesión de  cerros y quebradas, rodeando la bahía como un collar  multifacético.

El poblamiento de Valparaíso es un caso muy singular, obra del ciudadano común, ejecutada con escasa asesoría profesional, frágil, es verdad, pero con mucha dosis de imaginación sacando partido a los caprichos del terreno y a los escasos recursos materiales disponibles.
  
Así lo ha valorizado la Unesco que declaró patrimonio de la Humanidad a un importante sector de la ciudad.

El incendio del Domingo 18 de Febrero puso al descubierto, una vez más, la extrema  vulnerabilidad que afecta a decenas de  miles de porteños, establecidos irregularmente en laderas escarpadas donde levantaron viviendas construidas en su mayoría con  materiales ligeros, desprovistas de cortafuegos, rodeados de una forestación que nadie mantiene, con grifos donde no sale el agua y varios etcéteras.

El presidente Piñera se constituyó en terreno para anunciar hoy día un plan de reconstrucción, que establece lo siguiente: 117 viviendas se construirán en Rodelillo Alto,  en un plazo de 16 meses; subsidios para comprar en otro lugar viviendas nuevas o usadas; subsidios de arriendo por un valor de $ 100.00 mensuales durante 10 meses, mientras se encuentra una solución definitiva, subsidios  para la adquisición de viviendas prefabricadas o para adquirir materiales de construcción a quienes deseen reconstruir en su sitio propio.

Debo llamar la atención una vez más,  que las soluciones propuestas desestiman la posibilidad de aprovechar la catástrofe para  mejorar el entorno y beneficiar de verdad a las familias afectadas.  Esto ocurre porque se vuelve a optar por una solución individual: el perverso subsidio personal, que hace imposible la solución colectiva.

Se requiere la existencia de una entidad técnica que asuma la planificación del conjunto, que aproveche de regularizar las divisiones prediales y la vialidad, diseñar los muros de contención y los movimientos de tierra necesarios para garantizar la seguridad de todo el asentamiento, y  reestudiar la vialidad, las redes de los servicios de agua, alcantarillado y electricidad. En suma, se trata de recuperar una disciplina sepultada por el actual modelo económico: la planificación física.

Tengo entendido que está vigente la CORMUVAL, Sociedad Mixta formada por la ex CORMU y la Municipalidad de Valparaíso. Dado que los SERVIU fueron herederos de las atribuciones de Cormu, basta reconstituir la CORMUVAL con la participación del SERVIU y la Municipalidad de Valparaíso.

Esta Sociedad, integrando a los representantes de las Juntas de Vecinos,  debe administrar un fondo común destinado al estudio y la construcción de las obras de infraestructura señaladas más arriba.

De no proceder así, cualquier reconstrucción quedará siempre expuesta a los riesgos de situaciones como el reciente incendio.

El plan presentado por el presidente Piñera no dice una palabra al respecto, porque para llevar a cabo estas obras se requiere de la acción directa del estado o de los municipios y no hay voluntad de
enfrentar así la catástrofe. Jamás las empresas inmobiliarias las acometerán y obviamente no pueden descansar sobre las familias afectadas. En consecuencia, el repoblamiento del sector volverá a reproducir su actual vulnerabilidad.

También la renacida CORMUVAL debiera administrar los fondos destinados al subsidio de las familias interesadas en levantar sus viviendas en su sitio propio, que estoy seguro constituyen  la inmensa mayoría.

No tiene sentido pensar en soluciones de viviendas prefabricadas. dada la naturaleza del terreno. Cada caso es diferente y se requiere un traje a la medida. 

Al observar las imágenes del siniestro, se puede observar que en muchos casos han quedado en pie muros de albañilería, radieres, cimientos o sobrecimientos; existen las conexiones a los servicios públicos; más de algún damnificado alcanzó a rescatar planchas de techo o materiales diversos.

Todo es aprovechable si se actúa con un mínimo sentido de rentabilidad.
Con el auxilio del Servicio de Asistencia Técnica del Colegio de Arquitectos de Valparaíso, se puede conformar una brigada de jóvenes profesionales que asumirán con gran entusiasmo los proyectos respectivos preservando la singularidad del entorno y su valor patrimonial,  desarrollando un  proyecto de arquitectura para cada caso, resuelto en conformidad con las aspiraciones de cada damnificado. 

Es una tarea solidaria de verdad. No la que pregona la donación de ropa o alimento. No se trata de ofrecer a las familias afectadas un
mendrugo, sino que otorgarles un beneficio al cual tienen el más pleno derecho.

Miguel Lawner,

21 de Febrero de 2013.






  

jueves, 21 de febrero de 2013

Vientos del pueblo…






Editorial de El Siglo, edición 1651 del 22 de febrero de 2013



Vientos del pueblo…


“Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta”.

Así cantaba Miguel Hernández, que nació pastor de cabras en Orihuela en 1910 y moriría como una de las voces más altas de la poesía de nuestro tiempo, a los 32 años, en Alicante, tras las rejas de una cárcel franquista.

Esos mismos “vientos del pueblo” han vuelto a decir su bella melodía en las ciudades y pueblos de una nación hermana. Son la expresión de fuerzas que se oponen a los huracanes torvos que durante décadas marcaron el destino de lo que alguna vez los Estados Unidos de Norteamericano bautizaron como su “patio trasero”.

La intensa campaña con que “los grandes medios” de prensa internacionales intentaron debilitar las opciones presidenciales de Rafael Correa en Ecuador, pues de ese país es del que hablamos, se estrellaron contra un pueblo conciente y organizado.

Tras el contundente triunfo del mandatario, un joven economista y político dotado de coraje y lucidez ejemplares, han venido los agoreros de siempre.

Pronostican un tiempo de “vacas flacas” que impediría la continuidad de los programas “sociales”.

Como se indica en las páginas de este semanario, bajo la administración de Rafael Correa el presupuesto para la salud pública se triplicó entre 2006 y 2012; en tanto, la inversión para la educación aumentó en igual periodo del 2.5% al 5.5% del Producto Interno Bruto. Son datos demasiado “dolorosos” para los defensores del neoliberalismo a ultranza y de la resignación pasiva a “las leyes del mercado”. Con Rafael Correa, Ecuador nos demuestra que sí, efectivamente, “otro mundo es posible”.

Es claro que las derechas de todo el mundo tienen poderosos motivos para indignarse y alarmarse.

Como otra forma de hallar consuelo, esas derechas “advierten” que tras Rafael Correa no hay “un partido” -cuando lo hay, como en Cuba, eso es motivo de furibundas descalificaciones- y que por ello y la falta de un liderazgo personal de recambio el proceso político del pueblo ecuatoriano tendría sus días –o, a lo más, sus años- contados.

Las oligarquías de todo el mundo, fuertemente apoyadas en las anchas y muy remuneradoras espaldas del imperio, buscarán todos los flancos para atacar al reelegido presidente ecuatoriano. Aducirán “atentados a la libertad de prensa”, lo que como bien sabemos los chilenos significa la garantía que un gobierno progresista y transformador debería –sin duda- otorgar a los conspiradores. No debe olvidarse que, tal como había ocurrido en Venezuela, esas mismas fuerzas no se detuvieron ni ante la asonada precursora de un golpe de estado. Como en el caso de Venezuela, fue el pueblo el que confirmó en las calle de todo su territorio lo que había expresado en las urnas.
Y es que si algo no pueden negar los elementos más reaccionarios de todos los países, es el más que elocuente respaldo que la inmensa mayoría de sus ciudadanos entregó a Rafael Correa en su país, como invariablemente a Hugo Chávez en su Venezuela.

Con los mismos “vientos del pueblo”, ha vuelto a su patria el mandatario venezolano.

Con esos mismos vientos volveremos sin duda en nuestro propio país a los tiempos de la esperanza, con una salud y una educación en que el estado se comprometa con su pueblo. Las vergonzosas escenas de consultorios y hospitales “colapsados”, ante la indiferencia del gobierno, nos están indicando el único camino posible: el de la dignidad en unidad.

Todo ello, para que vuelvan a recorrer nuestro territorio los “vientos del pueblo” que cantara el poeta pastor de Orihuela.

EL DIRECTOR




lunes, 18 de febrero de 2013

UNA MIRADA A LA PRENSA REVOLUCIONARIA DESDE LA TIERRA DE RECABARREN Y NERUDA












ESPECIAL 65º ANIVERSARIO DE TRIBUNA POPULAR  




UNA  MIRADA  A  LA  PRENSA  REVOLUCIONARIA
DESDE LA TIERRA DE RECABARREN Y NERUDA





Por:  Fernando Quilodrán **
Director del semanario El Siglo,
órgano de prensa del Partido Comunista de Chile *



Nada nuevo decimos si comenzamos postulando la estrecha unidad entre historia y presente, como desde ya lo sugiere el contenido propuesto para estas reflexiones: “Experiencias y retos actuales de la prensa revolucionaria”. Esto es particularmente relevante si consideramos que el agudo enfrentamiento ideológico que acompaña como momento esencial e inseparable cada una de las formas que adquiere la lucha de clases en la sociedad capitalista, se halla en nuestros días en un estadio en que es precisamente esta manifestación del enfrentamiento entre las clases fundamentales del modo capitalista de producción el que aparece como decisiva y dramáticamente activa, tanto al nivel de la lucha económica de los trabajadores como de su quehacer político transformador.

Avala esta afirmación una simple mirada a las formas que ha adquirido en nuestros días esa “lucha de las ideas”, como también se la suele llamar, preferentemente al compás y ritmo de las necesidades e imposiciones de los exponentes del credo neoliberal imperante.

Efectivamente, una precondición del sometimiento a que condenan los grandes monopolios transnacionales, y sus traducciones y ramificaciones locales particularmente en las naciones de “la periferia” de las ciudadelas del imperialismo, es la pérdida de “las identidades”. Queremos decir con esto que entendemos a la identidad como la forma libre, individual e irrepetible de ejercer la condición humana en sus particulares circunstancias de tiempo, espacio y clase.

El rasgo que caracteriza al modelo neoliberal –su teoría y su práctica– en el terreno de la ideología, es su atentado a la identidad.

Como enunciados notorios del neoliberalismo, sobresalen:

a) La noción de “fin de la historia”, o devaluación del tiempo histórico.
b) La noción de “aldea global” –“globalización”, “mundialización”–, o destitución de las fronteras nacionales y locales.
c) La noción de superación de los conflictos sociales y de la existencia de las clases, como premisa o conclusión del “fin de las ideologías”.

Al “fin de la historia” y de las ideologías, se corresponden otras nociones, muy en boga. Veamos algunas: hemos entrado a una etapa de mundialización, de transnacionalización. Se han borrado las fronteras, compartimos una “aldea global” en donde el mercado es el regulador supremo y árbitro de todos los valores. Los viejos dogmas están sepultados.

Entre ellos, el dogma del Estado empresario, el Estado regulador, el Estado providencia. El estatismo es siempre malo. Para siempre, está demostrado que sólo la iniciativa privada, gestionando la empresa privada y con capitales privados, puede actuar como un agente económico eficaz. Aquello de la planificación central es una idea tan vieja como la rueca y el huso. ¡Modernidad es la consigna! La verdad reside en las cifras. El que fracasa en el mercado, es porque no era apto. Y los muertos en la competencia, bien muertos están. Lo que no existe dentro del mercado, simplemente no existe. Al “todo lo racional es real y todo lo real es racional”, de Hegel, se superpone el “todo lo racional es mercantil y todo lo mercantil es racional”.

“OBJETIVIDAD” Y “APARTIDISMO”

Al decir, eso, reafirmamos el valor político manifestado en el enunciado propuesto por Tribuna Popular, “Experiencias y retos actuales de la prensa revolucionaria”, pues nos invita a restablecer la continuidad de la conciencia y a entender a la “rebeldía” como la condición contemporánea del conocimiento, y por lo tanto de la acción y el cambio hacia formas más evolucionadas de organización de la sociedad.

Lo que quisiéramos, modestamente, postular es que sin una mirada lúcida hacia las “experiencias” del pasado de su clase, la prensa revolucionaria no podría pretender el conocimiento de “los retos del presente” ni, con ello, asumirlos de una manera apta para convocar a la rebeldía necesaria y la formulación de políticas basadas en los intereses específicos, lo que no obsta a su amplitud, de las clases y sectores en pugna con el modo de producción imperante y sus formas cada vez más estrechas y perversas de sostenerlo por parte de las minorías dominantes en la mayor parte del mundo.

Otras consideraciones necesarias nos incitan a volver a las viejas nociones de “objetividad” versus “partidismo”. Una suerte de “ganancia adquirida” por la prensa de los monopolios es su juego con la noción de “objetividad” y su aparente “apartidismo”. Lo cierto, e innegable, es que dados su control monopólico o al menos coludido, y con ello su consiguiente copamiento del mercado de las comunicaciones, fácil les es a los grandes medios ocultar sus orígenes e intereses de clase y el tratamiento astuto y muy “profesional” de “la noticia”.

Sin embargo de sus pretensiones, salta a cualquiera mirada “entrenada” la óptica con la que se aproximan a los hechos para darles un tratamiento acorde a sus intereses. Para ello, utilizan todas las argucias de las “ciencias sociales” y hacen uso muy particularmente del supremo recurso a la omisión. Ejemplifico esto último con una invitación a buscar en esa prensa cualquiera alusión –no digamos, “reconocimiento”– al origen de clase que explique los conflictos sociales. En el caso de Chile, es prácticamente imposible hallar la simple palabra “cobre”, que es la principal riqueza del país, porque su sola alusión conduce inevitablemente a la memoria del gobierno de Salvador Allende, que nacionalizó todos los yacimientos de ese metal, lo que traería como resultado inevitable una discusión más abierta acerca de los intentos de la derecha, hoy en el gobierno, por revertir completamente lo que hasta ahora –y ello no es poco– no han logrado sino modificar en beneficio de “la inversión” transnacional.

CLARO CARÁCTER DE CLASE

Al contrario de las argucias de los ideólogos y voceros del sistema, la prensa revolucionaria no hace esfuerzo alguno por ocultar su mirada de clase. Y es que sin una óptica crítica y de vocación abiertamente transformadora es imposible conocer la realidad y, por lo tanto, exponerla para ejercer la pedagogía necesaria y con ello legitimar e impulsar la organización y las luchas reivindicativas en los terrenos económico y político.

Y es que la realidad no admite “consensos”: es, simplemente, como es. Y todo acuerdo puede pactar con respecto a su “tratamiento”, pero jamás podrá modificar su esencia.

Dicho en otras palabras, no somos ni nos queremos “neutrales” o indiferentes.

Es claro que entre los retos que debemos asumir en el ejercicio de la prensa popular, de izquierda y revolucionaria, está el de asimilar todo lo nuevo en materia de instrumentos y técnicas que inciden en el oficio de la investigación y la información periodísticas. Ese componente de la formación profesional, que aparece como el gran aporte del sistema universitario, no se acompaña, salvo muy honrosas excepciones de difícil rastreo, de la entrega de elementos indispensables para la comprensión cabal del “fenómeno histórico”.

Muchas veces, las promociones salidas de esas aulas las componen “expertos” aptos a lo más para llenar los casilleros de las pautas desinformativas que dictan e imponen los agentes de los medios.

Y es allí en donde alcanza una dimensión decisiva la “escuela” que han sido a lo largo de su historia órganos que como Tribuna Popular de Venezuela y El Siglo en Chile entre otros diarios y periódicos de las avanzadas revolucionarias de tantos países a lo largo de tantos años, han asumido como una vocación integrada al conjunto de las tareas de las vanguardias.

*El PCCh se fundó el 4 de junio de 1912, el primer número de ES aparece el 24 de agosto de 1940.
**Director del semanario El Siglo, órgano de prensa del Partido Comunista de Chile*