domingo, 26 de agosto de 2012

UN SABIO LLAMADO ALEJANDRO LIPSCHUTZ









El Circulo Virtual de Estudios Histórico-Políticos rinde homenaje al sabio y militante comunista Alejandro Lipschutz con moltivo de conmemorarse el martes 28 de agosto, el 129º aniversario de su nacimiento.

Carlota Espina
Editora





UN SABIO LLAMADO  ALEJANDRO LIPSCHUTZ

                                                                            
Iván Ljubetic Vargas

 “Cuando me vio llegar a esa inolvidable casa de
Teatinos y Compañía, con mi pequeño hijo Vladimir, me saludó con fineza y sencillez. Extendiendo su mano, saludó con ternura a mi pequeño. Cada vez que nos volvíamos a encontrar me preguntaba: ¿Y cómo está Vladimir?  Es que don Alejandro Lipschutz era de una altísima calidad humana”
          
(Ramón Meneses: “El Doctor Alejandro Lipschutz”. El Siglo, 29 agosto - 4 septiembre de1992)        

Alejandro Lipschutz Friedman, nació en Riga, capital de Letonia, el 28 de agosto de 1883. Científico, médico, académico y filósofo chileno de origen letón. Militante desde 1904 del Partido Obrero Social demócrata Ruso, el Partido de Lenin, participó activamente en la Revolución de 1905. La ofensiva reaccionaria que se desató a continuación lo obligó a abandonar Rusia y a vivir como exiliado en Alemania, Austria y otros países europeos.  En 1907 se tituló en Doctor en Medicina en la Universidad de Göttingen, Alemania.  En 1908 fue contratado por  la  Universidades de Berlín, donde inició investigaciones sobre el sistema nervioso . Más tarde ejerció la docencia en la Universidad de Berna, Suiza, Sus trabajos en el campo de la fisiología le dieron pronto un prestigio internacional. Sobre esta especialidad  escribió más de veinte libros. Su obra “¿Por qué morimos?” alcanzó más de dieciséis ediciones en alemán y otros idiomas, antes que abandonara Europa.

LLEGA A CHILE

En abril de 1926 llegó a Chile, acompañado de su esposa Margarita Vogel, invitado por la Universidad de Concepción para ejercer como profesor de Fisiología, especialidad recién creada. en la Facultad de Medicina. Así se inició la relación entrañable que el Profesor Lipschutz iba a mantener toda su vida con Chile, donde desplegó, a lo largo de más de medio siglo, una portentosa labor científica en diversos campos: fisiología, endocrinología, investigación sobre el cáncer, antropología, investigaciones marxistas. En 1941 el Congreso Nacional le entregó  la nacionalidad chilena.

SU LABOR CIENTÍFICA

Pronto se transformó en decano de la Facultad de Medicina de esa Universidad de Concepción. Luego fundó el  Instituto de Fisiología de la misma Universidad y la Sociedad de Biología de Concepción, y dirigió el Boletín que ésta publica. En 1937 fundó el Instituto de Medicina Experimental del Servicio Nacional de Salud, cuya dirección ejerció hasta 1960. Después fue catedrático de la Universidad de Chile, donde creó la cátedra de Fisiología

También se dedicó a la sicología. Hizo profundos estudios sobre las teorías de Freud y Pavlov. En Buenos Aires se publicó su obra “Pavlov, Freud y Schweitzer, Tres médicos contemporáneos”. Dedicó largos años a la antropología. Entre los libros que escribió sobre esta materia, hay dos que son verdaderos hitos: “El problema racial en la conquista de América y el mestizaje” e “Indoamericanismo y raza india”. En ambos se encuentran fundamentales investigaciones sobre las culturales indígenas y la destrucción que de ellas hicieron los civilizados invasores europeos. En “Oriente y Occidente: del neolítico al siglo XX”, una de sus últimas obras, entregó valiosa y desconocida información en que demostró los avances de la cultura indigenista.

MILITANTE COMUNISTA

El domingo 8 de julio de 1945, en un teatro Caupolicán que se hizo estrecho para contener a los asistentes, tuvo lugar un acto político, con el cual se clausura la XVI sesión plenaria del Comité Central del Partido Comunista de Chile. Como telón de fondo en el proscenio, un enorme retrato de Luis Emilio Recabarren, el fundador, con la consigna ‘Por la grandeza de Chile’. Abre El mitin el diputado Carlos Rosales. Se canta la canción nacional. Hace uso de la palabra el diputado y dirigente del Magisterio César Godoy Urrutia. Luego se vive un momento de honda emoción. Ingresan al Partido una serie de personalidades. Son saludados con un discurso por Galo González. Entre los que reciben su carné de militante y hacen la solemne promesa están el sabio Alejandro Lipschutz, el poeta Pablo Neruda; el director de la Orquesta Sinfónica de Chile, Armando Carvajal, la soprano Blanca Hauser, la poeta Olga Acevedo, el poeta Juvencio Valle; el director del Teatro de la Universidad de Chile, Pedro de la Barra; el escritor Nicomedes Guzmán, la maestra María Marchant y varios destacados dirigentes sindicales. Hablan Alejandro Lipschutz y Pablo Neruda.

Ricardo Fonseca pronuncia el discurso de resumen del Pleno y da cuenta de sus principales resoluciones. La Internacional, cantada a todo pulmón, puso fin a esa jornada.

“EL HOMBRE MÁS IMPORTANTE DE MI PAÍS”

En 1963, cuando Alejandro Lipschutz cumplió 80 años de edad, Pablo Neruda escribió: “El hombre más importante de mi país vive en una vieja casa que enfrenta la gran Cordillera. Desde el fondo de su jardín suele sentarse a contemplar los inmensos muros de piedra nevada que nos aíslan, haciéndonos daño, y nos preservan, haciéndonos bien. Se ve muy frágil mi amigo, con la mirada puesta en la colosal blancura, su cabeza y su barba parecen un pequeño pétalo caído desde la magnitud de la nieve... El más universal de los chilenos nació lejos de estas tierras, de estas gentes, de estas cordilleras. Pero nos ha enseñado más que millones de los que aquí nacieron: nos ha enseñado no sólo ciencia universal, método sistemático, disciplina de la inteligencia, devoción por la paz. Nos ha enseñado la verdad de nuestro origen mostrándonos el camino nacional de la conciencia. Y su sabiduría nos revela que la exactitud, la plenitud y la pasión pueden convivir con la justicia y la alegría.

“El hombre más importante de mi país en estos años en que escribo es don Alejandro Lipschutz, vecino de Los Guindos, suburbio de Santiago. En estos días cumple ochenta años de vida, y me siento orgulloso de dejar aquí este débil retrato escrito de un alma ardiente, de un sabio verdadero. Mi orgullo es, además, decir aquí que casi nunca nos vemos desde que yo me vine a vivir a Isla Negra, seguimos siendo los sencillos amigos que se intercambian de casa a casa hallazgos nuevos, flores y poesía.”

“EL MÁS UNIVERSAL DE LOS CHILENOS”

Pablo Neruda agrega más adelante:
"Es el gran iluminador marxista de regiones oscurecidas de nuestra historia, oscurecidas por la charlatanería sin sustancia o por la interesada vileza. Por lo tanto, sus palabras despiertan, como las revelaciones poéticas, la contraola del furor, la estéril espuma reaccionaria. Sobre esos oleajes del pasado, nuestro inextinguible amigo trabaja a plena conciencia dándonos tanta luz que aun somos incapaces de medirla.

El hombre más importante de Chile no mandó nunca regimientos, ni ejerció nunca un Ministerio, no mandó sino que fue mandado en una Universidad  de provincia. Sin embargo, para nuestra conciencia, es una General del pensamiento, un Ministro de la creación nacional, el Rector de la Universidad del porvenir.

El más universal de los chilenos nació lejos de estas tierras, de estas gentes, de estas cordilleras. Pero nos ha enseñado más que millones de los que aquí nacieron; nos ha enseñado no sólo ciencia universal, método sistemático, disciplina de la inteligencia, devoción por la paz. Nos ha enseñado la verdad de nuestro origen, mostrándonos el camino nacional de la conciencia. Y su sabiduría nos revela que la exactitud, la plenitud y la pasión pueden convivir con la justicia y la alegría".

RECONCIMIENTO INTERNACIONAL

Numerosas universidades europeas, asiáticas y americanas lo designaron Doctor Honoris Causa.  Recibió premios de categoría  internacional, como el de la Academia de Ciencias de Nueva York, en 1944, el de la Casa de Las Américas, de La Habana, en 1974.

En nuestro país recibió en 1969 el Premio Nacional de Ciencias. En 1972 fue investido como Académico Honorario del Instituto de Chile..

LOS  FASCISTAS SE ENSAÑAN CON EL SABIO

Después del  11 de septiembre de 1973 la soldadesca irrumpió en su hogar de la calle Hamburgo 366.  Los esbirros de Pinochet mostraron su valor ante dos débiles ancianos. El sabio y su esposa  contemplaron cómo los asaltantes vaciaban brutalmente los estantes, botando libros y objetos que se destruían al caer; cómo les robaban cosas. En 1975 murió Margarita, su esposa. Habiendo quedado solo y  sin recursos para vivir en condiciones normales,  fue llevado al Hogar Israelita de Ancianos. Allí falleció el 10 de enero de 1980, a la edad de 97 años.

EN EL CENTENARIO DE SU NACIMIENTO

En 1983,  el escritor y periodista José Miguel Varas publicó en ‘El Boletín Rojo’ un artículo titulado “El centenario de un sabio comunista”, donde expresó: “El profesor Lipschutz nunca ocultó sus convicciones y participó a lo largo de muchos años en la actividad del Partido Comunista. Siempre acompañado por Margarita, su esposa, lo vimos participando en actos públicos de diverso carácter, incluso durante la proscripción del Partido, bajo el régimen de González Videla. En 1944, intervino en la fundación del Instituto Chileno-Soviético de Cultura, a cuya actividad entregó un gran aporte. En marzo de 1972, cuando algunos partidarios de la Unidad Popular vacilaban ante la creciente ofensiva de la reacción, ingresó en un acto público al Partido Comunista de Chile. Al periodista soviético Guenadi Sperski, que conversó con él aquel día, le dijo sonriendo; "De hecho, hace mucho que estoy en el Partido. Trabajo en él desde hace muchos años. Mi ingreso ahora es más que nada un acto formal.”









miércoles, 22 de agosto de 2012

Conversación con Barbara Figueroa






Fuente: ahoratv.cl

La elección de la CUT y el desafío de los comunistas.





La elección de la CUT y el desafío de los comunistas.

Por Marcos Barraza, Director ICAL y
Pedro Aravena, Investigador ICAL 

La presentación de la lista a la CUT del Partido Comunista encabezada por Bárbara Figueroa, constituyó una acertada solución a las circunstancias del todo inesperadas y desacostumbradas de cómo el Partido Comunista había venido resolviendo esta misma cuestión en anteriores elecciones de la Central.

Frente a la ofensiva mediática y de operaciones destinadas a fragmentar la posición y acción de los comunistas enla Central, se instala un nuevo punto de vista para la construcción del movimiento sindical y se provee de una potente señal acorde a las expectativas del demandante y creciente movimiento social en constante reconfiguración, y que se orienta a superar el inmovilismo y la escasa convocatoria que se venía dando en el último tiempo.

Se trata de una postulación que expresa adecuadamente nuestro anhelo de unidad de los trabajadores, practicada desde Recabarren con la creación de Foch, la primera Central obrera del país, y de vitalidad para las necesarias rupturas democráticas.

Sin embargo, dicha formulación no ha sido suficiente para enfrentar y resolver las situaciones problemáticas que afectan actualmente nuestra política sindical, toda vez que ellas han vuelto a salir a flote y de modo más ofensivo. Lo anterior, en el entendido de que lo que haga o deje de hacer el Partido Comunista no es un mero incidente, sino que decisivo para el devenir del movimiento sindical.

En buena parte del ya extenso período en que se han venido imponiendo las políticas de corte neoliberal, tanto por los gobiernos de la Concertación y ahora último y de forma aún más agresiva por parte de la derecha, se ha abordado el proceso de construcción de un sindicalismo que sea el actor principal de la Revolución Democrática y de la constitución de un Gobierno de Nuevo Tipo. Y hemos atribuido los obstáculos que, ora impiden ora lentifican la consecución tal objetivo, a un conjunto de causas institucionales.

Esto es, la existencia de un orden económico, legal y político que no sólo no permite la vigencia efectiva de la libertad de sindicalización y que restringe la autonomía del movimiento sindical, sino que se orienta al extremo de reprimir la expresión política de los trabajadores organizados, aunque más sofisticadamente pero de modo muy similar a los primeros años del siglo pasado.

Como consecuencia de lo anterior, el sindicalismo chileno se caracteriza por una baja tasa de afiliación, débiles organizaciones que expresan una insuficiente conciencia asociativa de parte los trabajadores pertenecientes a las nuevas ramas de la producción y de los servicios que han surgido en las últimas décadas. También por altos rangos de divisionismo, paralelismo y corporativismo organizativo en aquellos sectores con mayores niveles de afiliación de trabajadores  y que muchas veces se refugian en un incoherente apoliticismo que termina volviéndose en contra de sus intereses más vitales.

Ese cuadro  se origina, sin embargo, en un hecho histórico poco analizado, aunque mencionado tangencialmente por algunos estudios. Nos referimos a que el proyecto de transnacionalización capitalista de la economía tuvo como orientación estratégica el romper previamente el circuito de desarrollo del avance de la clase trabajadora a través de sus organizaciones sociales y políticas, que culmina con el gobierno de Salvador Allende, como su máxima expresión. En el modelo de capitalismo de Estado y de industrialización por sustitución de exportaciones, los trabajadores mediante sus sindicatos y partidos intermediaban con los poderes estatales e influían, en mayor o menor medida, en la definición de las políticas económicas y sociales.

Dicho esquema de participación política de la clase trabajadora ya no existe. Es más, está simplemente proscrito incluso constitucionalmente. Y en lo que respecta a los comunistas y su inclusión sindical, el ataque del fascismo fue más allá en el sentido de buscar el aislamiento del Partido de su base social de reproducción de su política, lo que explica, en gran medida, el alto grado violencia  y radicalidad con que la dictadura combatió a los comunistas y a las organizaciones sindicales de orientación clasista.

No obstante aquello, en diferentes momentos de estas casi cuatro décadas de hegemonía y violencia antisindical por parte del capital financiero transnacional, los comunistas hemos sido uno de los principales impulsores de grandes e importantes luchas de masas en el campo laboral, bajo las condiciones represivas de la dictadura y desde principios de los 90 hasta la actualidad, con las jornadas de protestas y los primeros paros nacionales de la salud, de la educación, del sector público, empresas del Estado, contratistas de la minería y forestales, acciones de masas que han tenido grandes repercusiones. Igualmente, nuestra defensa, sin vacilaciones de ninguna especie, de la unidad del sindicalismo en torno a la CUT, de la transformación de esta Central en  representante natural de los trabajadores para la conformación de la unidad social y política, contra la exclusión del binominal.

Pero, a la par de lo expuesto se han venido presentando síntomas que en su reciente acumulación afectan negativamente las perspectivas de nuestra política sindical de manera progresiva. En efecto, la acentuada disminución de la representatividad de organizaciones sindicales donde históricamente los comunistas fuimos altamente influyentes, tales como la Confederación Minera, la Confederación de la Construcción, la Confederación Campesina Ranquil (ex Surco), la Confederación Textil, las organizaciones de los Portuarios, entre otras. Y si bien en gran medida esos procesos obedecen a factores estructurales, lo problemático es que no se ha tenido la capacidad en todos estos años, de problematizar asertivamente y superar dichas condicionantes, al punto de que hemos terminado por aceptarlas pasivamente o no las hemos sabido enfrentar con suficiente sentido estratégico.

Agreguemos dentro de las insuficiencias, la reiterada atomización de la Confenats, el no haber leído de forma correcta el desafío de haber asumido la presidencia de la CUT durante la década de los 90, y el desarrollo y permanencia de una quinta columna de ex militantes del Partido en el gremio docente, quienes mostraron una pasividad pasmosa y buscaron su asimilación frente a las políticas de educación de corte neoliberal. Además, el desplazamiento de nuestros dirigentes de la organización histórica de los empleados particulares, la reducción de lo que originalmente fue un movimiento social que involucraba a trabajadores subcontratados de diversas ramas de la economía en una Confederación más, la dispersión de nuestra influencia en el sector metalúrgico, la extinción de la organización nacional de trabajadores eventuales, el quiebre del principal sindicato del subcontrato de El Teniente (Siteco), la pérdida de la presidencia del principal sindicato de trabajadores de CODELCO de la División de El Teniente.

Se añade que ha resultado infructuosa la táctica de fortalecer el sindicalismo antineoliberal mediante la creación de organizaciones en sectores de poca o escasa relevancia económica, política y social, no obstante el gran empuje que se hizo a partir del esfuerzo que denominamos como nuestra política del viraje, que en otros frentes generó avances, pero en este espacio de la lucha social no fructificó con igual intensidad.

Sean o no totalmente efectivos en su negatividad los casos precedentes -y lo más seguro es que no sean los únicos-, también podríamos seguir otra línea de análisis tomando en cuenta las crisis individuales, como en los casos de los dirigentes que han abandonado el Partido o renunciado a su papel de liderazgo consecuente y que reflejan las debilidades en la formación de nuestros cuadros. Es evidente que se viene gestando un escenario de más retrocesos que avances desde hace ya bastante tiempo atrás, siendo su último signo inequívoco el proceso de deterioro y/o fragmentación de nuestro accionar en el campo sindical. No otra cosa significa la pérdida de la unidad de acción y la existencia de más de una orientación de nuestro accionar en el mundo de los trabajadores, lo que nos obliga a destinar crecientes esfuerzos a lógicas internistas y disminuyendo nuestra atención en la emergencia y abordaje de conflictos sociales en curso.

De lo anterior, se aprecia una correlación directa entre el grado de conflictividad social que se instala y crece en el conjunto de la sociedad y una tendencia del movimiento sindical a fragmentarse en base a una interiorización de su práctica política. En otras palabras, las cuestiones que hoy nos interpelan no son de índole objetiva exclusivamente, sino que hay un gran componente subjetivo, constatándose la no aplicabilidad de un axioma del ejercicio de la política de clases, que los problemas no se resuelven solos y que, por el contrario, necesariamente deben ser abordados francamente.

Por eso, no es irresponsable políticamente el señalar que la salida frente a la situación de la conformación de la lista comunista y sus aliados ante las próximas elecciones de la CUT es correcta pero insuficiente. No se puede seguir eludiendo el abordaje de los problemas que entraban en lo sindical. Su irresolución no sólo se pone en riesgo el carácter del posible Gobierno de Nuevo Tipo, en cuyo interior fácilmente puede darse una hegemonía que inhiba la democratización profunda que requiere el país, sino que, además, se produzca una variación en el carácter esencial del Partido, en que se deje de ser efectivamente un Partido de la clase y se reduzca su incidencia y peso específico a una organización política con cierta influencia entre los trabajadores.

La construcción de sindicalismo de clase requiere de un esfuerzo mucho mayor que en la anterior etapa del capitalismo vigente hasta 1973, tanto en voluntades humanas y en esfuerzos materiales, como de una sólida y continua orientación en materia de táctica y estrategia sindical. Ella en base a una adecuada caracterización del trabajo y del peso de la institucionalidad en los trabajadores, toda vez, que la agresividad de clase dirigente del actual modelo es mucho más letal para los proyectos de construcción del movimiento popular.

Se trata pues de que el método de trabajo que se adopte deje atrás la deformación inmediatista que prioriza los resultados y desatiende los procesos, debiendo ser todo lo contrario. Es decir, una política sindical que en su perspectiva contribuya al fortalecimiento de una cultura organizacional que valide a la clase trabajadora, su modo de vida y se sitúe como una alternativa deseable socialmente desde donde articular las luchas sociales.

En la misma dirección. No puede, al menos en este periodo histórico, existir un sindicalismo que sea opción de fuerza popular transformadora si está desprovisto de un claro y consistente enfoque hacia la juventud en los centros de trabajo. A una nueva unidad de trabajadores y estudiantes, y de una labor de seguimiento permanente de los jóvenes profesionales y técnicos que se incorporan al mundo laboral. Ellos como un frente cada vez más relevante de lo sindical, en el entendido que en dichos espacios la conciencia sobre la creciente precariedad del empleo y ausencia de trabajo digno se alcanza con mayor rapidez.

Por tanto, una revisión del quehacer sindicalista y del rol de los comunistas implica modificar su centro de preocupaciones y orientarse decididamente hacia las organizaciones de trabajadores de mayor conciencia asociativa y de influencia en la vida nacional. Esto es, promover organización en función de nítidos espacios de lucha, como condición o requisito para avanzar hasta los sectores de menor capacidad organizativa y conciencia clasista.

Si bien es cierto que en aquellos sectores donde existe mayor conciencia sobre la amenaza neoliberal a sus condiciones laborales persiste aún mucho corporativismo, no es menos cierto que son las próximas víctimas de las políticas laborales del neoliberalismo, y en esos eventos han demostrado gran capacidad de lucha.

Sin embargo, el sindicalismo de este tiempo no puede fijar como su factor de dinamismo y crecimiento la sola articulación de sus propias fuerzas y debe necesariamente actuar como sistema abierto que le permita una interacción con un mundo social cada vez más complejo, crítico e incidente. Ello supone necesariamente un esfuerzo programático y de demandas que más allá de la retórica, aborde la totalidad de la problemática nacional; que en el fondo asuma con perspectiva estratégica un potente cuestionamiento a la institucionalidad imperante, a la calidad y al modo de vida de los trabajadores y que, como consecuencia de ello, incremente su densidad e influencia social y cultural.

Vista así la influencia de los comunistas en el movimiento sindical, aparece como prioritario -y es condición- la edificación de un proyecto sindical con menos incertidumbre y con gran sentido estratégico. Son condiciones que limitan, o al menos atenúan, la emergencia de caudillismo y quiebres ideológicos.

En síntesis, la CUT cuenta con potencial de desarrollo como ninguna otra organización social del país, pero su incidencia no está asegurada y pesan sobre ella amenazas que pueden ser inhibidoras en su capacidad de conducción de la clase trabajadora.

Que cada uno asuma sus responsabilidades en estos momentos, en lo que se haga y deje de hacer, para la construcción de unidad de la clase trabajadora y la conformación de una conducción de la Central realmente movilizadora. Que el aporte sea en función de la unidad de todo el pueblo, requerida para poner término a la dictadura del capital financiero transnacional, y abrir paso a un gobierno de Nuevo Tipo que lleve a cabo las transformaciones democráticas hasta ahora postergadas.

Fuente:  ICAL

domingo, 19 de agosto de 2012

UN REVOLUCIONARIO LLAMADO BERNARDO O’HIGGINS



El lunes 20 de agosto se cumple el 234 natalicio del más grande combatiente por la Independencia de Chile del yugo colonial español. Su nombre es Bernardo O'Higgins Riquelme. El Círculo Virtual de Estudios Histórico-Políticos le rinde  homenaje.

Carlota Espina
Editora



UN REVOLUCIONARIO LLAMADO 
BERNARDO  O’HIGGINS

                                                                 


Iván Ljubetic Vargas
                                                                                                                 

                                                                          “Eres, O’Higgins, reloj invariable
                                                                            con una sola hora en tu cándida esfera:
                                                                            la hora de Chile, el único minuto
                                                                            que permanece en el horario rojo
                                                                            de la dignidad combatiente”
                                                                            (Pablo Neruda: “Canto General”)


Fue un revolucionario liberal. Puso su vida al servicio de la Independencia de su patria.

Utilizó todas las formas de lucha. Organizó la lucha clandestina, fue diputado consecuente, empuñó la espada en los campos de batalla;  como gobernante adoptó medidas para  consolidar  la emancipación de Chile terminar con el poder y privilegios la aristocracia; fundó  la educación pública, intentó barrer con los prejuicios y la ignorancia del pueblo.

Por todo ello fue derrocado por la oligarquía, la Iglesia Católica y otros sectores que intentaban detener la rueda de la historia.  Una vez más los reaccionarios utilizaron a los que tenían el monopolio de las armas para aplastar un gobierno patriota y progresista. Fue el 28 de enero de 1823.

¿QUIÉN ERA  BERNARDO O’HIGGINS? ¿CUÁL FUE SU ROL EN LA HISTORIA DE CHILE?

UNA NIÑEZ DIFÍCIL


Bernardo O’Higgins  nació en Chillán Viejo el 20 de agosto de 1778. Su padre fue  Ambrosio O’Higgins, un irlandés al servicio del monarca español; su madre, Isabel Riquelme, una bella joven chillaneja de 22 años. No pudieron casarse. Las leyes españolas  prohibían a los funcionarios del rey contraer matrimonio. La llegada del niño debió  ser  ocultada.  Fue arrebatado a su madre.

Su Partida de Nacimiento, fechada  en Talca el 20 de enero de 1783,  la otorgó  Pedro Pablo de la Carrera, cura y vicario de esa villa, quien  certifica  que  bautizó  “ ‘subconditione’ a un niño llamado Bernardo O’Higgins  que nació en el obispado de Concepción el 20 de agosto de 1778, hijo del maestro de campo, General de este Reino de Chile y Coronel de los reales Ejércitos de S.M., don Ambrosio O’Higgins, y de una  señora principal de aquel obispado, también soltera, que por su crédito no he expresado aquí su nombre”.

Sin embargo,  al niño se le llamará Bernardo Riquelme.  Los oligarcas y charlatanes lo apodarán  “huacho”.
Estudió primero en un colegio para hijos de jefes mapuches de Chillán. Luego su padre, designado Intendente de Concepción (en 1786) y  Gobernador de Chile (en 1787), lo envió para continuar sus estudios a Lima. Tenía 12 años. Pero don Ambrosio seguía su ascendente carrera. En 1796, asumió como Virrey del Perú. Entonces el joven Bernardo debió viajar a Inglaterra.

ATÓ SU CORAZON A UN IDEAL REVOLUCIONARIO


Tenía 16 años cuando llegó a estudiar comercio a la Academia de Richmond, cerca de Londres. Fue un buen alumno. Pronto dominó el idioma inglés. También la literatura francesa y el dibujo. Lo apasionaban la historia y la geografía. Leía mucho. Su libro predilecto era “La Araucana”  de Alonso de Ercilla. Le dolía no haber vivido la época de Lautaro para  luchar junto a los mapuches por la libertad  de su tierra.

Su profesor de matemáticas comprendió muy bien los sentimientos del joven Bernardo. Era Francisco Miranda, un patriota venezolano, desterrado en Europa que, para poder subsistir,  daba  clases en  la Academia de Richmond.

Un día, en medio de gran secreto, Miranda habló con su alumno. Le reveló que formaba parte de una sociedad secreta cuyo objetivo era emancipar las colonias españolas en América. Lo invitó a formar parte de ella. Bernardo, emocionado, abrazó a su maestro y le dijo: “Mirad en mí, señor, tristes restos de mi compaisano Lautaro, arde en mi pecho ese mismo espíritu que libertó Arauco, mi Patria, de sus opresores”.

Corría 1798. El nuevo miembro de la Logia secreta tenía 20 años de edad. Poco después debió abandonar Inglaterra. En Cádiz, España, tomó contacto con dos curas revolucionarios: el chileno José Cortés Madariaga y el argentino Juan Pablo Fretes. Le informaron sobre la situación en Chile.

Agentes del rey español descubrieron  las actividades conspirativas de Bernardo. Como consecuencia de ello, don Ambrosio O’Higgins  fue destituido de su cargo de Virrey del Perú.. Furioso con su hijo, le escribió desheredándole de todos sus bienes.
Bernardo  inició su regreso al país en 1801.

EN LA LUCHA CLANDESTINA


Había partido de España, llamándose Bernardo Riquelme y sin recurso alguno. Desembarcó en Valparaíso en septiembre de 1802, con el nombre de Bernardo O’Higgins Riquelme y convertido en  dueño de la gran hacienda de Las Canteras y de una casa en Santiago. Su padre en su lecho de muerte lo había perdonado, dado su apellido  y dejándole una apreciable herencia.

Lo primero que hizo fue llevar a su madre y a su hermana Rosita a la hacienda.
Era  ahora un latifundista, pero sus ideales se mantenían inamovibles. Se dedicó a organizar círculos clandestinos para luchar por la Independencia. Con toda razón pudo escribir en 1842: “Mis intereses personales son los menos que he cuidado en toda mi vida, particularmente cuando los de mi patria estaban de por medio”.
Encontró numerosos patriotas dispuestos a arriesgarse por la noble causa emancipadora. Uno de ellos fue Fray  Rosauro Acuña.

Con inteligencia supo coordinar el trabajo conspirativo con el legal. En 1806 fue designado Alcalde del Cabildo o Municipalidad de Chillán; en 1809, subdelegado interino de La Laja.
Ello lo libró de que cayera sobre él la represión de las autoridades, como ocurrió con algunos de sus compañeros de lucha.

El 18 de septiembre de 1810 se creó en Santiago la Primera Junta de Gobierno, para  mantener al país bajo la dominación del rey de España.

DIPUTADO Y  SOLDADO  PATRIOTA


En ese momento O’Higgins era subdelegado de la Isla de Laja. Comprendió el carácter de la Junta constituida por los criollos, poderosos terratenientes, y no tardó en formar, con los huasos e inquilinos de su hacienda de Las Canteras, un regimiento patriota. El doctor Rozas, que encabezó  el movimiento emancipador en Concepción, lo nombró teniente coronel y segundo comandante.

O’Higgins no fue un soldado de profesión. Había estudiado comercio en la Academia de Richmond.  Escribió en 1810: “La carrera a que me siento inclinado por naturaleza y carácter es la del labrador”. Y en 1813 explicó: “Soy un militar de circunstancias, que había tomado las armas para defender la patria como simple comandante de guerrilleros en un momento de peligro”.

El 4 de julio de 1811 se inauguró el Primer Congreso Nacional. O’Higgins había sido elegido diputado por Isla de La Laja. De los 42 congresistas, 24 eran  los que la historia oficial llama “moderados”,  y  estaban  contra la plena independencia de Chile. Siempre votaron con ellos los 4 “realistas”, partidarios del monarca español. Catorce diputados  formaban la minoría patriota, a su cabeza estaba Bernardo O’Higgins. En medio de la discusión sobre una proposición de “moderados” y “realistas” de enviar  recursos económicos  a España, el padre de la patria  manifestó: “Aunque estamos en minoría sabremos suplir nuestra inferioridad numérica con nuestra energía y nuestro arrojo y no dejaremos de tener bastantes brazos para oponernos eficazmente a la salida de este dinero”.  Se impuso la minoría patriota  y los fondos no fueron enviados a la península..

En 1813 se iniciaron las guerras de la Independencia. O’Higgins  puso su espada al servicio de José Miguel Carrera designado comandante en jefe del Ejército patriota por la Junta de Gobierno de 1813.  Meses después reemplazó a Carrera. Mostró su valor en  el combate de El Roble y en la batalla de Rancagua. En esta última, que lugar el 1 y 2 de octubre de 1814, cuando al segundo día de combates, los patriotas ya no podían resistir las embestidas de la fuerzas realistas muy superiores en número, O’Higgins ordenó a los sobrevivientes montar a caballo y se lanzaron por sobre las barricadas enemigas. Esas tropas, junto a  numerosos otros patriotas emigraron a  Mendoza, provincia de Cuyo, para preparar la revancha.  Se iniciaba  el período de la Reconquista española. En Chile, los guerrilleros de Manuel Rodríguez no dejan tranquilos a los realistas. En Mendoza, con la inmensa solidaridad del general José de San Martín, gobernador de Cuyo, se organizó el Ejército Libertador, que en los primeros días de febrero de 1817, atravesó la cordillera de los Andes y el 12 de ese mes derrotó a las tropas del rey español en la batalla de Chacabuco.

GOBERNANTE  ANTIOLIGARQUICO


El 16 de febrero de 1817, O’Higgins fue designado Director Supremo de Chile por un Cabildo Abierto en Santiago.

Entre sus obras tenemos:
a)  Consolidación de  la Independencia. A comienzos de 1818, una nueva expedición realista invadió el país. O’Higgins  convocó en ese momento de peligro a los ciudadanos a suscribir el 12 de febrero de 1818, el  Acta de Proclamación de la Independencia de Chile.

En ella se hacía “saber a la confederación del género humano, que el territorio continental de Chile y sus islas adyacentes, forman, de hecho y por derecho, un Estado libre, independiente y soberano, y quedan para siempre separados de la Monarquía de España y de otra cualquiera dominación, con plena aptitud de adoptar la forma de Gobierno que más convenga a sus intereses”.
El 5 de abril de 1818, en la batalla de Maipú fueron derrotadas las tropas realistas.

O’Higgins pensó en la necesidad de formar un ejército nacional sin relación alguna con el del rey español. Por ello fundó la Escuela Militar. En cambio los fascistas chilenos conciben el Ejército como heredero de las tropas realistas. El general Herman Brady, ministro  de Defensa de la dictadura, en un acto en homenaje a Pinochet, efectuado el 23 de agosto de 1976, sostuvo que “desde la época de la Colonia el Ejército de Chile ha sido la piedra angular para formar historia, formar tradición, formar hombría y mantener inalterable la institucionalidad de este Chile que tanto queremos”.

Creó la Primera Escuadra Nacional, el 11 de agosto de 1818.
También con el objeto de consolidar la emancipación del país, organizó la Expedición Libertadora del Perú, que zarpó de Valparaíso el 20 de agosto de 1820. La formaban 23 buques, que transportaron a 4.100 soldados.

b) Medidas contra la oligarquía. En 1812 había escrito: “Detesto por naturaleza la aristocracia y la adorada igualdad es mi ídolo”. Siendo Director Supremo fue consecuente con esas palabras. El 28 de noviembre suprimió los títulos de nobleza y prohibió el uso de los escudos de armas. En el decreto  respectivo señaló: “En una república es intolerable el uso de aquellos jeroglíficos, con que los tiranos premian a sus servidores. Son una ofensa a las ideas de libertad e igualdad”. (Los requisitos para obtener un título de nobleza eran: demostrar pureza de sangre por los cuatro abuelos, saber montar a caballo y no haber ejercido oficios manuales).

Obligó a los oligarcas que colaboraron con los realistas durante la Colonia a pagar fuertes contribuciones para cancelar los gastos del Ejército Libertador de los Andes y a entregar caballos y dinero para la Expedición Libertadora del Perú.

Con fecha 5 de junio de 1818, firmó un decreto aboliendo los mayorazgos, institución del derecho español que consistía que el hijo mayor heredaba todos los bienes, con ello se impedía la división de los grandes latifundios.  Esta medida no pudo ser aplicada porque el Senado, con mayoría  reaccionaria, la aplazó indefinidamente.

c) Obras de progreso: inició la educación estatal: fundó escuelas primarias y el Liceo de La Serena; además reabrió el Instituto Nacional y la Biblioteca Nacional.
En 1819 ordenó la construcción del Cementerio General, medida muy resistida por la Iglesia. Creó el mercado de abasto, el paseo de La Alameda, terminó el Canal del Maipo.
Inauguró el  Teatro o Casa de Comedias; permitió el desarrollo de la prensa, hubo 15 periódicos. Fundó las ciudades de La Unión, Vicuña y San Bernardo. Aplicó la vacuna.
Estableció el servicio de diligencias y correos diarios entre Santiago y Valparaíso.

d) Fue un internacionalista. Además de la Expedición al Perú, planteó la unidad de los países americanos, desde México hasta Tierra del Fuego. Escribió: “Se  podía ser chileno, peruano o venezolano y al mismo tiempo sentirse americano y compatriota en cualquier país de Hispanoamérica”.  El 6 de mayo de 1818, publicó un Manifiesto en que pedía “instituir una Gran Federación de Pueblos Americanos”.

DERROCAMIENTO Y DESTIERRO


La oligarquía y la Iglesia se unieron y utilizaron a  militares para derrocar a O’Higgins el  28 de enero de 1823. Fue detenido por el general Ramón Freire el 6 de febrero de 1823. El 17 de julio salió al exilio rumbo a Perú.  En este país, en  cuyo ejército era Capitán General, se incorporó a las tropas de Simón Bolívar. Combatió.  A la celebración de la victoria de  Ayacucho, en 1824, O’Higgins concurrió de civil. Bolívar le preguntó el por qué de su indumentaria paisana. Le respondió: “Señor, la América está libre. Desde hoy el general O’Higgins ya no existe; soy sólo el ciudadano particular Bernardo O’Higgins.”

En Perú vivió él y su familia con grandes privaciones. Solicitó en varias  oportunidades autorización para regresar a Chile. Se la negaron. Murió en  el exilio el 24 de octubre de 1842,  a la edad de 64 años. Ni siquiera muerto  sus enemigos le perdonaron su conducta progresista y patriota. Sólo 27 años después de su fallecimiento sus restos pudieron descansar en la  Patria a la que tanto amó y  por la que tanto hizo. Retornó a su tierra 46 años de su salida al exilio.

LOS REVOLUCIONARIOS HOY DECIMOS CON NERUDA:

                                   “Pero hemos heredado tu firmeza,
                                    tu inalterable corazón callado,
                                    tu indestructible posición paterna,
                                    y tú, entre la avalancha cegadora
                                    de húsares del pasado, entre los ágiles
                                    uniformes azules y dorados,
                                    estás hoy con nosotros, eres nuestro,
                                    padre del pueblo, inmutable soldado”


BARBARA FIGUEROA a la CUT- LISTA B





sábado, 18 de agosto de 2012

Entrega de Carné en la Célula Danilo Gonzales y algo más.





Entrega de Carné en la Célula Danilo Gonzales y algo más.



Los enfrentamientos de clase se procrean y nacen en todos los ámbitos del país.
A plena” luz del día” se siente esa realidad estudiada y buscada…:
“Las movilizaciones sociales”…
En la práctica de hacer politica y el sentir del pueblo, las consignas de nuestros eventos toman carne y hueso en la geografía humana y de país…  
Esta situación politica se llama “acumulación de fuerzas” o tanteando los terrenos. “Que me voy para allá, me vengo para acá, le cierro el ojo a este mejor, a esé no, el flaco se ve más noble, me hago el difícil, espero los acontecimientos”…
Estas aniñas con choreza y pueblo en las calles, ha  permitido mirarse con “Dinosaurios y Pandoras” a una misma altura.
Desde la llegada de nuestros diputados a la Camara, refugio de hartos Cíclopes con ningún ojo, hasta las acciones de la CUT, de los estudiantes, jóvenes, poblaciones, padres, organizaciones politicas… ha permitido que las correlaciones de fuerza, den vida a algunos pactos, compromisos, acuerdos, que indiscutiblemente van en favor de la lucha del pueblo y de la izquierda chilena, principalmente en los andares de nuestro partido.
Esto no ha sido producido de la nada, son los resultados, de cientos de batallas y de tratar que vastos sectores mas cerca de nosotros que del Imperio, entiendan que han sido peones del Imperio y que solamente la unidad más amplia, nos puede  sacudirnos de encima a los señores de la muerte, de la felonía y la traición.…
Esa unidad, no la “unidad de codos”, nos puede llevar a una victoria. En esa idea, no se vende nada, se conquista con madurez, tolerancia, sacrificio y educación. Y más aún, tenemos la experiencia de cien años del Partido Comunista de Chile y la maravillosa UP. 
La crisis, del Capital, su neoliberalismo, entrenado en nuestro Sur, se convertirá en un retroceso social hacia el infierno.
Su caída, nos empuja a nosotros a saludar a Satanas, de allí la importancia vital de aislarlo, acorralarlo, sacarle la careta a los esbirros y “fondeados”, impedir robos y corrupciones. Desgraciadamente en estos retrocesos, el Imperio es más maldito, cruel, mas fuerte que nunca, todo su poderío lo utiliza para evitar la organización de los trabajadores, de los partidos, de la juventud en general. Cuando ni eso para el avanze del pueblo, el Imperio suelta sus perros de presa a matar obreros…:El fascismo
En nuestro país, nuestra juventud se las está jugando, de la misma manera que se las juega el Imperio. Para la oligarquía, la derecha y los asesinos esta en juego sus privilegios y los disfraces; para la izquierda, la libertad y la vida, toda una existencia de más de cien años…
“Che mi Mare”….Como impedir que una bala inmunda rompa los tejidos nuevos, de nuestros dirigentes estudiantiles, de nuestros viejos y jóvenes del sindicato, del barrio, del liceo.
¿Cómo defender la “ira” que busca el pan y los derechos integrales que se juntan en plazas, fabricas, esquinas y aulas? 
Cuales son nuestras verdades:
Verdad uno: Vivimos lejos y tenemos frio, no tenemos retaguardia.
Verdad dos: Las autoridades Suecas, han terminado con la ayuda antes recibida por las organizaciones sociales, círculos de estudios; etc. Instancias en la que nosotros figurábamos con “chapa”. Sin lugar a duda, en esos tiempos y ahora también, las autoridades nunca creyeron, que éramos y somos “La caperucita roja”. 
El Imperio y la Concertación se encargaron que a los comunistas, tantos del interior como del exterior, la pista se nos pusiera muy pesada.
Aquí, en Suecia, raro no seria, si el orador en un primero de mayo fuera Carl Bild.
De allí, que este local, la casa de Victor Jara, los habitantes que en ellos viven; lo contingente y lo no contingenten, tengan un valor inmenso, heroico y maravilloso de pan amasado. 
Verdad tres: La vida de la juventud en rebelión, en los sindicatos, en  las poblaciones; el quehacer del Partido en el interior y también aquí, tiene para nosotros responsabilidades enormes. Tan enormes, que me atrevo a decir, enamorado de mi pueblo, que ha veces somos cómplices de los asesinos, de los sepultureros, cuando cae una victima mutilada en un enfrentamiento de clase…cuando no alcanzan los recursos, para esto y esto otro, me pego en el alma y con el mismo martillo, en el dedo guatón, al recordar mi ausencia de ese o de aquella tarea partidaria.
Enviando más recursos, mas son las posibilidades de victoria. Pequeñas victorias que se irán sumando, poco a poco a la victoria final…Y no estoy hablando de socialismo, estoy hablando de victoria de un conglomerado politico, diverso, popular, que interprete claramente, sin platas ni prestigios por debajo de la mesa, con el riquerio y con el Imperio; las justas necesidades del pueblo trabajador, del estudiante, de la madre y la mujer y de los oriundos al Sur del Bio-Bio.
¿Y como hacemos el milagro de enviar más recursos, solamente somos seres humanos?
En tiempos antiguos hicimos trincheras con “empanadas”.
Sin lugar a dudas; los acontecimientos nos exijen más empanadas, con más aceitunas y más huevos adentro…
Es responsabilidad del partido, de los encargados de finanzas, de los organicos, de cada militante, fabricar su “empanada”, su trinchera…..
El ser Comunista es una cuestión de moral, de amor y de respeto, de tolerancia.
El pagar la cotización, ser el cocinero, el cantante, el que escribe, el enfermo, torturado y soldado, el trabajador, el que se cree utilizado, el andar pá la patá y el combo…:
 ¡No te hace comunista…!!
Quizás ser comunista sea un acto de renuncia a la muerte o de amor y respeto incontrolable a la vida. Seguro está, que ser “Colorado”, nunca ha sido fácil, el ejercicio de ser honesto, leal y sentir en cada rasguido de guitarra, en cada clavo en horma, en ladrillos y letras, en corcheas, en bandera, en la marcha, en cada despertar de ojos, en cada lagrima, dolor, parimiento, tristeza, cachudez, mala leche, te tengo entre ceja y ceja, maricón, flojo, poesía y poeta, posturero, te gusta el microfono, miedo, el gallo colorao, la cueca y la radio, el cine, bonito, bonita, los achaques y los domigos bailables …: 
¡¡Es ser Comunista.!!
Mas humano que una coronta de choclo.
Los Comunistas somos  seres diferentes, digan lo que digan… somos diferentes al resto del humano. Eso no quiere decir que seamos mejores, pá ná, solamente diferentes.
El humanismo para los comunistas es el entendimiento de la libertad.
Libertad sin apellidos ni fronteras…Por eso el Partido Comunista de Chile ha ofrendado en su “carnalidad” esos conceptos… La Libertad, la igualdad a la vida, en todos los Continentes.
Por eso… El Partido Comunista de Chile, quiere, a travez de mis vocales decir:
Erika Muñoz, hermana nuestra, muchas gracias.
Tu fuerza, tu entrega y tolerancia, es y serán las espigas de fuego, que levantaran puentes, para alcanzar los primeros escalones de las grandes Alamedas. Gracias Erika, por tu vida.
(Se le entrega un certificado de agradecimiento por sus tareas Internacionalistas).
Sin calles, solamente el frio y las estrellas…estrellas cartográficas, de subsistencias, te dejaron para siempre la piel disfrazada de Amaranto.
África esta muda y parte de América se siente liberada, una parte del pacífico y de arenas, sonríe agradecida …
Gracias Winston Cofre.
Gracias por entender y por tu vida
(Se le entrega certificado de agradecimiento por sus tareas Internacionalistas)
Camaradas
Ya dijimos … No es fácil ser Comunista… pero créanme, es lindo ser Comunista.
Se nombran a los Camaradas antiguos a los cuales se les otorgara su carné de militancia y reafirmaremos todos juntos, la promesa, el compromiso que tenemos con la libertad y la vida.
Promesa:
-Prometo luchar por el cumplimiento del Programa del Partido Comunista de Chile y respetar sus Estatutos.
-Prometo lealtad a mi Partido y fraternidad con mis compañeros.
-Prometo luchar por los intereses de los trabajadores y las trabajadoras y el bienestar del pueblo.
-Prometo luchar para terminar con la explotación del hombre por el hombre y con toda forma a la violación de los derechos humanos.
Prometo luchar por la explotación irracional de la naturaleza.
Prometo luchar por una sociedad socialista y democroática, que supere las injusticias del capitalismo.
Prometo mantener viva la memoria y honrar a los compañeros caídos en la lucha del pueblo
Y así terminó la ceremonia, casi todos lloramos, los otros que no eran “casi”, se les quebro la voz y cerraron los ojos.
Fue una velada linda…Algunos dijeron…”Aquí estoy de vuelta”.”me abrazo a mi partido”
…Todos hablaron de esa gran “Familia Comunista” y tienen que creerme, ese viernes 17 de Agosto, esa familia, tan fantasma a veces, estaba en la casa de Victor Jara.
Se terminó mis andares de “huacho”…tengo una familia linda, más grande que la cresta.
Alejandro Fischer.
Agosto 2012.-

EL 8 DE MARZO DE 1978 EN CHILE


LUCHA ANTIFASCISTA




EL 8 DE MARZO DE 1978 EN CHILE


Por Iris Largo


No puede haber revolución socialista
si la inmensa mayoría de las mujeres
trabajadoras no participa en ella en
grado considerable.
                                      LENIN



Pinochet y su Junta pensaron que dictando decretos, torturando, violando, asesinando y sometiendo al pueblo chileno a la mas patética situación de miseria que jamás ha vivido, podrían aplastarlo. Creyeron también que podrían doblegar a la mujer chilena y trataron de destruirle incluso la felicidad de la maternidad, y creyeron que por medio de una disposición leqal podrían hacer desaparecer el 8 de Marzo -Día Internacional de la Mujer- y dispusieron que el Día de la Mujer (nada de "internacional") sería el 2 de diciembre, aniversario de la grotesca "marcha de las cacerolas".

¿Y que pasó en nuestra patria el 8 de marzo?

Ese día, las mujeres chilenas -al igual que millones de mujeres progresistas del mundo entero- sintieron renacer los anhelos de paz, de felicidad para los niños, de una vida plena para los jóvenes. Y un acto grandioso fue expresión de lo que quiere y de lo que es capaz la mujer chilena.

Desde una semana antes se rindió homenaje al Día Internacional de la Mujer. Sindicatos, pobladores, estudiantes, bolsas de cesantes, familiares de los detenidos políticos desaparecidos, profesionales, obreras, empleadas de servicios públicos, mujeres de todos los sectores estuvieron presentes en los diferentes actos y hubo volantes, tarjetas de saludo, afiches con el rostro de una mujer llamando al acto, páginas de los boletines informativos de algunas organizaciones sindicales dedicadas al 8 de marzo, etc.

La propia prensa oficialista, como la revista "Qué Pasa", informó que "algunas instituciones, entre ellas varios colegios, han estado celebrando la última semana el Día Internacional de la Mujer". Y otros órganos informativos como radios, "El Mercurio", la revista "Hoy" se refirieron al acto del día 8.

Formando parte de esta recordación dentro de la patria llegaba el eco de lo que las mujeres chilenas hacían en el exterior con motivo del 8 de marzo. Las emisiones de "Escucha Chile", "Radio Magallanes", Radio Berlín Internacional, Radio Praga, Radio Sofía, Radio Budapest y Radio La Habana, dedicaban programas especiales destacando la dignidad, la valentía y el ánimo de combate con que enfrenta la mujer chilena a la dictadura fascista e informaban de las diversas actividades de las miles de mujeres que han tenido que dejar su tierra y que entregan la mayor parte de sus energías a las tareas de la solidaridad. En París, la Comisión femenina da la Unidad Popular daba a conocer, en un gran mitin, un mensaje destacando el valor de las mujeres en Chile y rindiendo homenaje a la entereza y coraje conque las mujeres familiares de patriotas desaparecidos emprenden mil iniciativas para arrancar de la dictadura la verdad acerca de esos seres queridos.

Y mientras desde Valparaíso un grupo de mujeres hacia llegar un sentido y fraternal saludo a Hortensia Bussi de Allende, desde Londres las mujeres enviaban saludos a través de las radios a las mujeres en Chile. Y en Caracas, en el Primer Congreso Internacional de Mujeres Abogadas se rendía homenaje a la mujer chilena y se emitía un voto de apoyo en su lucha por los patriotas desaparecidos, en tanto que en Moscú se entregaban saludos y se buscaban iniciativas de apoyo a la lucha de la mujer y en Roma las chilenas eran recibidas por un grupo de parlamentarios que expresaban su solidaridad con las exiliadas chilenas y ofrecían decidido apoyo en la búsqueda de los patriotas desaparecidos. Hasta la propia revista "Ercilla" acusaba recibo y transcribía el texto de tarjetas de saludo enviadas a Chile por las chilenas exiliadas en Yugoslavia.

En Chile y en los más diversos rincones de la tierra, el 8 de marro, las mujeres chilenas se aunaban en los mismos anhelos de recuperar la paz, la libertad, de poder luchar dentro de la patria por sus derechos y por el derecho de los niños chilenos de conocer también la auténtica alegría de la infancia.

8 de marzo - Acto - Caupolicán - 8 de marzo - Acto - Caupolicán -

Las 4 de la tarde en Santiago. Hay ansiedad en las primeras mujeres que avanzan caminando con cierta timidez por la calle San Diego para "echar una miradita" ("¡ Tanto tiempo que no veniamos al Caupolicán! ¿Lo llenaremos? ¿Cómo nos irá a ir?"). La ansiedad inicial y la cierta timidez desaparecen rápidamente al ver que son muchas, muchísimas, las mujeres que van llegando. Tantas que ya a las 5 de la tarde hay que dar la orden de cerrar la entrada a la platea. Asombro de las que van llegando luego. ("¡Cómo, si el acto empieza a las 6! ¡ Cómo no vamos a poder entrar en la platea! ¡ Por algo nos vinimos una hora antes!"). Y siguen llegando centenares de mujeres: las familiares de presos desaparecidos con la foto del ser querido colgando del pecho; las esposas de los cesantes: "Aquí presentes los trabajadores cesantes"; grupos de mujeres de diversos sectores con distintivos diferentes: una paloma, una rosa, una flor roja. Algunas con carteles. "Basta de alzas". Y distintivos y flores y colores y consignas y las últimas tibiezas del verano y tanto inesperado encuentro van creando dentro del Teatro Caupolicán un ambiente cargado de emoción, de alegría, entusiasmo, optimismo. La emoción del reencuentro tanto tiempo esperado. En tanto colores y emociones van entremezclándose, un cartel grande se extiende a lo largo de la galería: "Saludamos al Día Internacional de la Mujer".

Comienzan a leerse los saludos que llegan. ("Son tantos. Mejor no los leamos enteros"). La CEPCH, la Sociedad de Escritores, sindicatos, escuelas. Y son tantos que la lectura de sus textos tiene que suprimirse del todo para poder mencionar los nombres de las 50 organizaciones, colegios profesionales, centros de madres, escuelas, etc. largamente ovacionados.

Se da comienzo a la primera parte del acto artísticos- "La Misa Criolla", el Illapu que es aplaudido hasta con los pies; un cantante de la Ranquil. Luego se presenta el conjunto de Familiares de Presos Desaparecidos que canta y anima una cueca bailada por una mujer sola. La cueca de nuestro pueblo, canto de fe y de alegría, de amor y de esperanza, bailada por esa mujer sola se convirtió en protesta, en rebeldía, en decisión agresiva de seguir luchando por el ser querido y, sobre todo, en expresión de tenacidad y firmeza revolucionaría. ("No importa que no estés bailando conmigo, compañero de mi vida. Porque siempre estas. Estas en mi lecho. Estás en la mirada interrogante de mi hijo cuando pareciera que una lagrima se me va a escapar y, sobre todo, estás muy dentro de la inmensa, de la inquebrantable necesidad de seguir luchando hasta que desaparezca la desgracia que se nos vino encima"). Esa cueca hizo correr incontenibles las lágrimas e hizo también reafirmarse la alegría y la decisión de seguir luchando.

Luego, dirigentes de diferentes organizaciones sindicales que llegaron a saludar a las mujeres, entregando un ramillete de flores a cada una de las delegadas femeninas que ocupaban el presidium. Cuando subieron los dirigentes sindicales fueron muy aplaudidos. Entre otros estaban representantes de la Federación Textil, de la Construcción, Metalúrgicos, Confederación Campesina e Indígena "Ranquil", Asociación Nacional de Pensionados, Federación Provincial Campesina "Eduardo Frei", Confederación Campesina "Triunfo Campesino". Anteriormente, al ser anunciadas las delegadas femeninas de las diferentes organizaciones y mencionarse la Federación Provincial Campesina "Eduardo Freí" un comienzo de silbatina que hizo enrojecer a su delegada, fue acallado de inmediato por el grito espontáneo de "Unídad", "Unidad", "Unidad" que las casi 8 mil personas que llenaban el teatro corearon de pie.

Antes de la única intervención programada, la dirigente sindical Georgina Aceituno, visiblemente emocionada, entregó un combativo saludo al acto dedicándolo a su madre que murió mientras ella estaba relegada. El teatro entero estuvo con ella en su emoción.

Y mientras los animadores anunciaban nuevos saludos llegados al Teatro, el público que había divisado, perdida en la multitud, a Matilde Urrutia comenzó a gritar su nombre pidiéndole que hablara. Matilde, a cuyo amor cantara el poeta en sus versos y a quien dijera. "Eres del pobre Sur, de donde viene mi alma:/ en su cielo tu madre sigue lavando ropa / con mi madre. Por eso te escogí, compañera". Matilde subió, paso a paso, al escenario y entregó un breve y emocionado saludo diciendo que si Pablo Neruda viviera estaría en la primera fila del teatro saludando a la mujer chilena y llamando a la más amplia unidad de los chilenos por la reconquista da la libertad. Cuando terminó de hablar, se levantó como un clamor el nombre de "Neruda", "Neruda", "Neruda", que todo el teatro, de pie, gritaba con la misma desbordante emoción con que lo acompañó por las calles de Santiago aquel sombrío martes 25 de septiembre de 1973.

Aida Moreno, la Secretaria del Sindicato de Empleadas de Casas Particulares, organizador del acto, recordó en su intervención la participación que le ha correspondido a la mujer chilena en el desarrollo político, cultural y social del país. Hizo un recuento de cómo empezó esa participación, liberándose de los prejuicios y discriminaciones que la ataban y de cómo logró organizarse llegando a partícipar activamente en la vida nacional. Se refirió a las conquistas que había conseguido la mujer partiendo del primer jardín infantil y de cómo ahora tiene que enfrentar, en primer lugar, la cesantía con sus secuelas de hambre y desnutrición para los niños. Dio a conocer cómo han desaparecido las salas cunas y cómo ha ido recrudeciendo la discriminación contra la mujer. Habló Aída Moreno de la pérdida de las libertades sindicales detallando el significado del decreto 198 y de la violación de las libertades individuales denunciando con fuerza el dramático problema de los seres queridos desaparecidos y enfáticamente seña1ó que las mujeres están resueltas a no encontrarse el próximo año en la misma situación de no saber de sus esposos, novios, hermanos, padres desaparecidos. Llamó, finalmente, con decisión, a la unidad de todos contra la represión y el hambre. La unidad, factor fundamental de la victoria.

Luego vino la segunda parte del programa artístico: el Piojo Salinas, Nano Acevedo, Jorge Yañez, para nombrar a algunos de los que lograron actuar, ya que fueron numerosos los que no alcanzaron a hacerlo. La música y las canciones de Violeta Parra animaron y alegraron, entre otros temas, ese combativo encuentro.

A las 11 de la noche termina el acto. (¿Cómo se pasaron las horas?). A medida que sale la gente, peso a peso va entregando su ayuda para la resistencia, pero, antes de irse lanza una última mirada al teatro, al telón de fondo y se vuelve a llenar de esperanzas el corazón; qué bien quedaron en ese telón de fondo la paloma que simboliza la paz a la que aspiran los pueblos de la tierra; el signo de la igualdad que queremos conseguir y el símbolo femenino de la fecundidad que engendra la vida que tenemos. Vida tan pobre ahora. Vida que volverá a ser plena y feliz cuando en Chile sea aplastado el fascismo y comience a estructurarse la nueva vida.


Publicado en:

Boletín del Exterior Partido Comunista de Chile Nº29
mayo - junio 1978 - páginas 57 - 61