Apareció el 27 de noviembre de 1947:
Iván Ljubetic Vargas, historiador del
Centro de Extensión e
Investigación
Luis Emilio Recabarren, CEILER
Pablo Neruda fue el Encargado de Propaganda de la
candidatura presidencial del radical González Videla, quien triunfó en las
elecciones del 4 de septiembre de 1946 y asumió
En su primer Gabinete participaron tres ministros comunistas.
González Videla traicionó el Programa que había
jurado cumplir. El 21 de octubre de 1947 comenzó la represión contra los comunistas.
Fueron detenidos cientos de dirigentes y militantes. Los enviaron al campo de
concentración de Pisagua y a otros lugares del país.
González Videla en septiembre de 1948 promulgó la “Ley Maldita”.
Pablo
Neruda – entonces senador de
Relata Volodia Teitelboim en su libro ‘Neruda’ que, en las condiciones de la más severa clandestinidad, solía reunirse con el poeta, “en una casa, por cuyas ventanas podía yo mirar hacia la plaza Pedro de Valdivia”. En uno de esos encuentros – agrega – “supe que estaba preparando un documento político... Lo concibió como un informe político hacia a la opinión pública internacional sobre la situación del país. Por eso lo tituló originalmente ‘La crisis democrática de Chile es una advertencia dramática para nuestro continente’. Aquí el poeta – añade Volodia Teitelboim – usa un lenguaje de franqueza total. Piensa que Chile no será el único país de América que sufrirá los efectos de un plan que viene de afuera. Subraya la presión extranjera. Historia las relaciones entre el Partido Comunista y González Videla...”
Ante la imposibilidad de publicarlo en Chile – el único diario que se atrevería a hacerlo, ‘El Siglo’, está sometido a censura – lo envía a Venezuela con el título de “Carta íntima para ser leída por millones de hombres”.
El 27 de noviembre de 1947 aparece en “El Nacional”, de Caracas, causando enorme expectación mundial. En esta carta, Neruda escribe:
“Me disponía a trenzar de
nuevo el ritmo y el sonido de mi poesía, me preparaba a cantar de nuevo
ensimismándome en la profundidad de mi tierra y en sus más profundas raíces,
cuando el drama que os he revelado a grandes trazos comenzó a gravitar sobre
todas las vidas chilenas. Cuando la
traición y estos dolores de mi pueblo me han llenado de angustia”.
En esa carta, Neruda denunciaba la traición del Presidente Gabriel González Videla.
El 6 de abril de 1947 se llevaron a cabo elecciones municipales. El Partido Comunista surgió de ellas como la tercera fuerza política nacional. Esto inquietó al imperialismo estadounidense y a la reacción criolla, los que presionaron a González Videla para que sacara del gobierno a los comunistas y lanzara por la borda el programa jurado al pueblo.
Los
mineros del carbón, que habían presentado en agosto un pliego de peticiones a
los patrones, al no recibir respuesta alguna, declararon una huelga legal a
partir del 4 de octubre de 1947. El gobierno presentó ese movimiento
reivindicativo como el inicio de un complot internacional comunista en contra suya.
Desató una feroz represión contra los huelguistas, utilizando a las tres ramas
de las fuerzas armadas y proclamando que esa es la primera batalla de
González Videla inició un juicio político contra el poeta. Este respondió pronunciando, el 6 de enero de 1948 un valiente discurso en el Senado, publicado con el título “Yo acuso”.
En esa intervención señaló Neruda:
“Al acusarme de haber herido
el prestigio de mi patria por haber publicado en el extranjero la verdad que en
mi patria un régimen de facultades extraordinarias y de censura no me permite
hacer saber, no me infiere una injuria a mí mismo sino a los más grandes
hombres de la humanidad y a los padres de la patria”.
Neruda
como Senador de
Al día siguiente los tribunales
ordenan su detención. El poeta pasa a la
clandestinidad.