SESENTA DÍAS AL ROJO (IV)
Iván
Ljubetic Vargas, historiador del
Centro
de Extensión e Investigación
Luis
Emilio Recabarren, CEILER
El 27 de septiembre de 1970 se produjeron en Santiago
atentados de elementos fascistas.
La decisión de la DC de apoyar a Allende en la votación del
Congreso Pleno sepultó la “fórmula Alessandri”.
Los enemigos de Allende estaban desolados. Un
documento de la ITT ,
fechado el 16 de octubre y enviado por Hal Hendrix a E.J. Gerrity, advertía:
“A menos que hay un movimiento por parte de elementos militares disidentes
a mediados de la próxima semana, el consenso en Santiago es que Salvador
Allende triunfará fácilmente en el Congreso Pleno del 24 de octubre y asumirá
como presidente el 4 de noviembre.” 960
“Una figura clave de esta posibilidad –agrega el Memorándum de la ITT – es el general de brigada
Roberto Viaux... Sin lugar a duda, Viaux se estaba preparando para lanzar un
movimiento la semana pasada... Washington dio instrucciones a Viaux de echarse
atrás... Como parte de la persuasión para demorarse, se le dieron a Viaux
seguridades verbales de que recibiría asistencia material y apoyo de los
Estados Unidos y otros para una maniobra posterior.” 961
En ese mismo documento se afirma:
“En el intertanto, Viaux ha estado conferenciando con oficiales de alto
rango y bajo rango sobre la necesidad de tomar algunas medidas para evitar que
Allende se convirtiera en presidente.” 962
En el fallo de primera instancia suscrito por el Juez
Militar Titular, General de División Orlando Urbina H. y por el Auditor de
Ejército en propiedad, Coronel de Justicia Francisco Saavedra M., relativo al
“Caso Schneider”, se lee:
“Elementos contrarios a la posibilidad constitucional –ya cierta– de que se
eligiera al candidato Salvador Allende Gossens, por ser de ideología marxista,
en reuniones efectuadas, entre otros lugares, en Diagonal Oriente N.º 1410,
domicilio del reo Roberto Viaux, en la oficina del reo Julio Fontecilla ubicada
en calle Huérfanos ‘en la cuadra del 900’ y en un departamento de un edificio
ubicado en Hernando de Aguirre con Providencia, conversaron, discutieron y se
concertaron para lograr ese su objetivo por medio de actuares estudiados y correlacionados destinados a producir
pánico, temor y desconcierto en la ciudadanía, terreno propicio, necesario
–según ellos– para que las Fuerzas Armadas se decidieran a asumir el control
total del país con miras de que éstas hicieran un gobierno fuerte y de tipo
nacionalista.” 963
Entre los uniformados de “alto rango” involucrados en
el movimiento sedicioso están el General de División, comandante de la Guarnición de Santiago,
Camilo Valenzuela Godoy; el Vicealmirante y Comandante en Jefe de la Primera Zona Naval,
Hugo Tirado Barros; el comandante de la
FACH , Carlos Guerraty, y el Director General de Carabineros,
Vicente Huerta.
El plan consiste en derrocar el Gobierno de Frei a
través de un golpe e instaurar una Junta Militar, encabezada por el general
Camilo Valenzuela. Con ello le cerrarían el paso a Salvador Allende.
Un obstáculo se alza ante los sediciosos: el
Comandante en Jefe del Ejército, General René Schneider Chereau. Este tiene a
la fecha 41 años. Oficial de Estado Mayor, de brillante carrera; designado
Comandante en Jefe el 23 de octubre de 1969.
El 7 de mayo de 1970 el General Schneider expresa a un
diario de Santiago que el Ejército es
“garantía de una elección normal y de la asunción al poder de cualquiera
que hubiese sido elegido por el pueblo, fuera de que hubiese logrado la mayoría
absoluta o por decisión del Congreso Pleno, en el caso de que ninguno de los
candidatos hubiera obtenido más del 50% de los sufragios.” 964
Nació así la Doctrina Schneider. Después del 4 de septiembre, Schneider insistió en su posición
constitucionalista. Cuando detectó pasos sediciosos en las filas del Ejército,
no vaciló en salirle al encuentro. Se reunió con la alta oficialidad y con la
tropa, repitiendo – incansable – su posición.
El 8 de octubre, los altos mandos de las FF.AA.,
presididos por el General Schneider, resolvieron acatar la decisión que
adoptara el Congreso Pleno. 965
El periodista Augusto Olivares sostuvo:
“Tan decisiva fue la posición pública del General, que bien puede decirse
que es la razón número uno para los chilenos y extranjeros que decidieron
asesinarlo”. 966
El escritor inglés Robert Moss afirma que,
“a los ojos de algunos oficiales conservadores, la política de Schneider
era sospechosa, ya que dos de sus cuatro hijos habían intervenido activamente
para hacer triunfar a Allende.” 967
Los dirigentes de la Unidad Popular y,
especialmente Salvador Allende, no se limitaban a conocer las acciones de la
reacción. Actuaban. No dejaban espacios libres. Refiriéndose a un aspecto de lo
realizado por la Izquierda ,
un Memorándum de la ITT ,
transmitido telefónicamente desde San Juan por Hal Hendrix a Gerrity el 16 de
octubre de 1970, señala:
“En el intertanto, Allende y sus representantes han estado cortejando a las
Fuerzas Armadas a diversos niveles y han continuado infiltrándose en los grados
más bajos. Muchos han estado de acuerdo en apoyar a Allende, después de
escuchar sus promesas de dar al Ejército un papel más importante en el
desarrollo de la infraestructura del país.”
968
Refiriéndose a este tema, Luis Corvalán afirmó:
“Apenas conocido el resultado de las elecciones del 4 de septiembre de
1970, el enemigo buscó afanosamente el golpe de Estado para impedir que
Salvador Allende asumiera la
Presidencia de la República. Con tal fin, confió en el carácter de
clase de las FF.AA. y trató de usarlas a su favor.
“En esas circunstancias, Salvador Allende y los partidos de la Unidad Popular
entraron en un diálogo activo con las diversas instituciones militares. A
nuestro partido le correspondió un papel especial en este diálogo en relación
con el Ejército. Los compañeros Volodia Teitelboim, Américo Zorrilla y José
Cademártori mantuvieron diferentes reuniones con varios generales y fueron los
principales intermediarios entre ellos y el compañero Allende. El compañero
Allende tuvo en alta estima estos contactos.”
969
960 Error: el día que debe asumir
Allende es el 3 de noviembre (el autor)
961 “Documentos Secretos de la ITT ”, p. 40
962 Ibidem.
963
Editora Quimantú: “El Caso Schneider. Operación Alfa”, pp. 130 y 131
964 “El Mercurio”, 7 de mayo 1970
965 Ver “Ercilla” N.º 1947, 8 al 14 noviembre 1972, p. 9
966 Olivares, Augusto: “La Doctrina Schneider
y los ‘sesenta días’.” En “El Caso
Schneider. Operación Alfa”, p. 174
967 Moss, Robert: obra citada, p.
47
969 Corvalán, Luis: “Informe al
Pleno de agosto de 1977 del Comité Central del PC de Chile”. Ediciones
Colo-Colo, p. 26