sábado, 20 de diciembre de 2025

La tinca

 


Comentario radial y escrito.

 

 

 

 


El domingo 14, me desperté con una tinca que abrigaba el alma.

Al espejo me sonreía, me hacía guiños, me reía solo.

Que tinca más agradable.

El día era gris, lloviznaba, hacia frio.

Pero yo, rumbo al local de votación, una sonrisa dibujaba mi rostro flaco.

Mi garganta adornaba mi pañuelo palestino, me lo había regalado un trovador.

En mi solapa un triángulo rojo, que recuerda y trae, a los españoles republicanos, prisioneros en los campos de concentración nazi.

Era un saludo de resistencia y promesa, de combatir toda mi vida al fascismo, al nazismo, “sea por donde fuera”.

La tinca mandataba mi existencia.

¡Que sensación más de abrazos!

Nueve horas más tarde:

¡Que tinca más cobarde!

Abofeteo mi contento y vanidad.

Una dama, adherente al fascismo, saltando de alegría, salpicaba mi ignorancia de estiércol.

Se parecía a Doña Lucia Hiriart.

No sabía qué hacer con mi tinca.

Me la dejaron empelota, trate de proteger lo más preciado que tengo; mi intelecto, mi alegría, mi sentido y hogar de clase.

¡Más de 45 horas escondido!

Más de 45 horas perdido, aturdido; como que, no supiera, del porqué vivir tan lejos de mi pais.

Me despertó la consecuencia del odio, que se pernocto en Sídney, Australia.

Y aquí me tienen de nuevo.

A 5 días del Masacre en la Escuela Santa María, allá por Iquique.

Ciudad, que olvidó a los 3.600 obreros salitreros acribillados.

Me pongo en ristre el sentido de ser de Gladys Marín. Mujer y candidata a la presidencia.

Me visto de país, saliendo de a poco, de epidemias políticas endémicas, de sables y compromisos añejos, que buscan corriendo, empollar poderes fácticos en los divertículos del Estado.

Se trataba, de romper los tentáculos de un pulpo gigante, denominado neoliberalismo.

Una pega, que necesitaba ser un Sancho Panza o quizás ser un Alquimista de Paulo Coelho.

No quería ver los titulares mediáticos. Me negaba a ello.

Olvide por completo, que lo mediático es como la “caña mala”, a veces es maldita y a veces no pasa nada.

Se arregla con un huevo crudo revuelto con malta.

Hoy martes, a los medios de comunicación me fui.

El País, por ejemplo, viendo en paja ajena, olvidando el propio aserradero.

Yo, me traigo a Pedro Lemebel con su decir:

“No cambien a mi partido”.

Y por ahí me voy.

Nuestro vivir como país, tiene la memoria muy corta, y, tan corta, que se vuelve agresiva, intelectualmente imposibilitada de ver, distinguir a los que traen la pobreza, la miseria, las desigualdades sociales.

El Poder Judicial, por ejemplo, ha sido vejado, violentado y asaltado, por la corrupción del “opulento vivir”

No quiero sentir las interrogantes del poblador del Cerro Centinela, en San Antonio.

Cuantas calaminas y techos tiritan en Chile.

Los cartones andan de estampidas.

Veremos la presión arterial en la Comuna Independencia.

Me preocupa la soberanía de la mujer. A ella, le advierto de la “que viene”

La legalidad y la ilegalidad se transforman en un saltar de cuerda infantil.

Sin embargo, entre tanto descalabro, la Corte Suprema de Justicia tiene una nueva presidenta, Ana gloria Chevesich.

Ella fue la redactora de la sentencia de desafuero de Augusto Pinochet y responsable de la investigación del caso MOP-Gate.

Pá que voy a decir, que fue bajo el gobierno de Ricardo Lagos, pá que.

Fea la actitud.

Lo que sucede actualmente con el caso Hermosilla, se asoma la estafa a CODELCO que arrastra una cola de 52 años del huracán pardo.

Ministros de justicia, jueces, abogados, notarios, robaron al Estado país, a los que están en la cola, de una vivienda digna, es de una repugnancia barata.

Entre ellos, están los abogados querellantes Mario Vargas, Eduardo Lagos, que acusaron a Daniel Jadue, por hacer una comuna digna, están hoy en prisión.

Mi paisito sirve para todo.

Ese amigo de Gladys Marín, Pedro Lemebel, ande por donde ande, debe estar tranquilo, su partido, por dentro, sigue igual, esta entero; medio choriao, quizás, un tanto como yo, aturdido, y también “pegándole a la perra”, pero, pasa rápido.

Lo que tenemos que hacer, es adecuarnos, pertrecharnos mejor para los combates venideros.

Observar estrategias y tácticas del caminar en terrenos que están en manos enemigas.

Tengo otra tinca, me tinca que el 2026, el pueblo de Chile marchara por las calles con capachos llenos de pailas.

Se trata hoy, de mantener ascendente el pacto, UNIDAD POR CHILE.

Lo conseguido en los parlamentos, es hoy, super bueno.

El fascismo no ha arrasado en mi país, como dice la prensa.

Con todo el anticomunismo desatado, el tener 16 puntos menos, se siente más bien, como una sacudida y seguir haciendo país.

Recuerdo un decir, del hijo de Baviera, que se puede gobernar a través de decretos.

Es decir, meterse al bolsillo el poder legislativo.

Y nos dicen, que los comunistas somos dictatoriales.

Para enfrentar un crimen ideológico, amparado por poderes facticos, que se meten sin saberlo, en la conciencia del pan negado, como el humo de un incendio, y, salir con un 16 punto menos, políticamente, tan mal, no nos fue.

En un país punta como Chile, y que triunfe como presidente un candidato fascista, es para el Imperialismo, más bien un contratiempo.

Tienen que achuntarles a todas. Y a estas alturas del partido, achuntarle, es complicado.

Vean como está Argentina o el mismo Estados Unidos.

Vean como se vive, en El Salvador.

Europa, tiene a Viktor Orbán, primer ministro húngaro, como papá caliente en la garganta.

Lo siento sí, es triste, yo veía el triunfo de Jeannette Jara, amarrado al futuro de la infancia Gazarina.

Es cierto, nuestro hacer político se pondrá más áspero que de costumbre, pero, no nos es, tan ajeno, nuestro accionar será dialectico, organizado, familiar y sin estar en la clandestinidad.

Perdimos, es cierto, pero, no es para esconderse.

¡Perdón por haber arrancado!

Alejandro Fischer Alquinta.

Estocolmo 20251216.