Mi ventana abierta.
Alejandro Fischer
Siempre he dicho que, la política es idea hermosa…y el hacer política, para juntar al proletariado, educarlo, generación tras generación, hasta que su intelecto social, derroche madurez política y pueda entrar en combate en calles y plazas, en lugares de trabajo, en los espacios donde este amarrado tu hermano de clase, en el mundo de las ideas, en las casas legislativas, en las alcaldías y municipales…”templando así el acero” cómo diría Nicolás Ostrovski, formar parte de los batallones que le darán otra dirección, estructura y destino al país. Por eso… Vale la pena nacer, tener hambre, andar siempre enamorado, vivir, luchar y morir, sin más abrigo que un poncho de martillo y echona.
Y para eso no es necesario ser comunista. Es necesario saber y sentir, entender, cual es tu clase y que exige ella a tu persona.
Y si eres comunista, o estas pensando en hacerlo, te metiste en un ”forro” mas o menos.
Porque allí esta la fabrica, la practica de los conceptos, de las ideas…: ”fuerza propia, política de alianzas, estar en el sindicato y gravitar en el, estudiar como loco, perseguir y arrancar de los pacos, ser leal, que no tiene nada que ver con la amistad, ser amigo, critico y autocritico, alegre, mientras mas alegre, mas se entiende las necesidades del hermano, tener problemas en la casa y con los parientes, meterse en cada cuestión que organice el pueblo, el barrio, aunque al comienzo, hayan solamente tres, contigo serán cuatro…
Es sufrir y secarse…como la “siempre viva”, mirar las estrellas y encontrarse con las tres marías, ellas también se ven desde Atacama, Valparaíso, Temuco, Punta Arenas. Duele andar lejos.
¡ Es meterse en un forro!.
Cuando yo era cabro chico, en Copiapó, la tienda en donde se repartía El Siglo, quedaba en la calle O´Higgins 456, paralela a esta, estaba la calle Atacama. Las dos calles principales de la ciudad.
En esa manzana, solamente por la calle O´Higgins, había viviendas y comercio, por la Atacama, puros negocios. Los patios de las casas tendrían unos 200 a 300 metros de profundidad; lo que quedaba para llegar, por dentro, a la calle Atacama, serian unos 700 metros.
A la altura del 456; por Atacama, estaba el cine, justamente llamado Atacama. A los costados del cine, había un baldío enorme. Como tres canchas de futbol. Allí nos juntábamos los cabros de la cuadra, hijitos de comerciantes, profesores, empresarios y “guachos”… éramos como veinte.
Empezábamos la pichanga, yo no se, no me acuerdo, en que momento, la pichanga se convertía en una “guerrilla” infernal.
Los peñascazos llovían; uno de mi grupo, el Jaime, cuando chico, mas chico, le había dado la polio, vestía un armazón de metal en las piernas chuecas y flacas, eso no le impedía ser “capo pá la piedra”; y ser nuestro arquero. Había también unos hermanos gemelos, turcos, eran colorines, se turnaban para llegar a casa con la cabeza rota.
Yo no me explico, como un niño puede hacer tantas barbaridades...Y cuando grande, se le olvida que ha sido ternero.
Yo recuerdo que las piedras realmente llovían, el otro grupo se escondía en unos muros de adobes abandonados, nosotros en un cañaveral.
No se podía quedarse uno quieto. La guerrilla terminaba, cuando a uno se le rompía algo o llegaba algún empleado del cine Atacama y nos echaba del baldío.
Esa sensación de peligro, de ver el enjambre de piedras, el ruido de las cañas, de las risas, de las carreras, gritos: “mamita linda”, “concha…”, “quien me cuida si me rompo el coco. “
Muchas veces, duele el alma saber mirar por la ventana.
¿Que habrán sentido los niños en Libia, en Beirut, Iraq, Afganistán, en Bosnia, Kosovo, Vietnam, Rwanda, Costa de Marfil.
Que pensara la niña palestina, la niña Iraní?
La existencia del Imperio, poderoso como es, se mete en todos los tejidos sociales, oxida los intelectos y los confunde.
Esta cuestión de la clase obrera, no es una cuestión sanguínea, es una cuestión de experiencia, al ver las fotos de mis padres, escucho la tierra, el hielo, el cobre, los cerros y la angustia de haber nacido en tiempo y vientre que se fue temprano.
La habilidad de mirar por la ventana, gracias al desarrollo del intelecto y a una” intuición” de clase, nos permite ver al Imperio y sus amigos empelota.
Los amigos del Imperio, son los que son, gente con intelecto o con poco de él, que le puso precio a la inteligencia, a la ética, a la moral, al crimen y a la mentira…
!! y el Imperio pago y compro!!.
En la historia tenemos montones…
Un Somoza, un Trujillo, Banzer, Stroessner, Batista, Videla, el ladrón… no quisieron nunca mirar por la ventana, habían vendido los ojos y la moral.
La mayoría de ellos eran militares, es decir, mercenarios del Imperio, que usufructuaban de la familia obrera, proletaria, de sus miembros, de sus hijos; para crear grupos armados, criminales, dispuestos a defender los intereses del Imperio y de la burguesía.
En una limpieza profunda de la tierra, antes, tenemos que sacar a O’Higgins, los Carreras y al Mañungo. Los dejamos a un lado, con respeto y entendimiento; le dieron a Chile, sentido de Patria, sublevación y libertad. Y yo les digo, que esos cuatros, tenían entre ellos enormes diferencias, eran “mijitos ricos”, cual más, cual menos, querían quedarse con la novia, La republica.
Los amoríos, los celos, hacían paredones, crímenes, destierros, balas y lagrimas.
Vamos limpiando melgas, melgas y surcos de doscientos años… y muchos mas, si contamos las siembras de vainilla y de canelos, los canelos de pelo chuzo.
Encontramos a José Manuel Balmaceda, que les hizo”tapitas” al Imperio Ingles. Luego, los amigos del Imperio, los que vendieron su dignidad, presionaron de tal manera, que José Manuel Balmaceda se suicida.
Tenemos a Pedro Aguirre Cerda, político visionario y ágil. La educación para él, era gobernar, le dio a la Educación, pensando en el pueblo, un salto cualitativo y cuantitativo enorme. Después de un terremoto infernal, Chile quedo de rodillas, lo levanto y le puso la pala y un martillo al trabajador,(igualito que el otro) Industrializo el país, creo la CORFO.
Clavo la bandera chilena en una parte de la Antártica.(no la vendio, como el otro). Murió de tuberculosis, antes de terminar su vida ; junto a Pablo Neruda, elaboran y practican la llegada, de miles de españoles republicanos, que escapaban de las hordas fascistas de Franco, Hitler y Mussolini. Valparaíso recibió con brazos abiertos a las victimas del fascismo de Franco. El mismo fascismo que quiere amordazar y maniatar al Juez Garzón, actualmente juzgado en España.
Después de eso, tenemos nosotros, el fruto de miles de segundos, millones de millones de segundos…El triunfo de la Unidad Popular y su candidato. Salvador Allende.
No quiero ser insolente, ni roto ordinario; tampoco ignorante ni pajarón, pero el resto, Dios mio:
¡! valen Hongo!!
Uno entiende entonces, el porqué de esas tres aniñas y el porqué, los hijos del crimen gobiernan actualmente mi país…Doscientos años jugando a las “cambiaditas con violencia” y nosotros, el pueblo, le achuntamos con tres mandatarios, casi 9 años, más menos.
Dos se suicidan y otro muere antes de terminar su mandato, la tuberculosis lo mató.
Casi todas los himnos y marchas que se aprendían en liceos y escuelas de mi tiempo, eran la melodía de himnos facciosos pardos de Mussolini y de las juventudes Hitlerianos.
Lili Marleen, himno militar, que sirvió para fomentar el nacionalismo extremo y racial, en Chile la cantaban hasta los Boy Scout.
Y uno, orgulloso, Ay mi Dios, iba a ver la “Parada Militar”.
Hablo de millones de segundos…porque mi generación, 10 años antes, 10 después, mi generación de izquierda, aquella de la Unidad Popular, aquella critica también, las vio bien fea, algunos muertos, otros, no tenemos ni idea, otros presos, otros torturados casi hasta la locura, otros por lugares extranjeros, perdidos o enraizados, como el luche…y cuando uno ha estado, esta así; la vida pasa en segundos, se le tiene miedo al minuto, a las horas, al otro día.
Uno vive por segundos. Un segundo puede ser un día o ser la muerte.
Una ventanita de segundos abierta, quiero mostrar: Aquí en Suecia, la cuestión es triste… Con mis ojos de extranjero, yo puedo hablar, de Estocolmo y sus partidos.
Pienso que tengo derecho. He estado, invitado cantando en Congresos y actos de la Social Democracia y Olof Palme escuchando. “Te Recuerdo Amanda”, ”El Arado”. La Social Democracia, con ayuda de un granito de arena de mi voz, no de mi voto, fue varias veces gobierno.
Pero ahora, esa amontonada de creyentes, que no encontraban que hacer con su intelecto, perdidos con su humanismo estrecho, lo vendieron y entraron al círculo de amigos del Imperio. El Imperio los arrastra en su caída de Alacrán.
Yo entiendo las desconfianzas y a los “cachuos” políticos…pero siento en mi alma de damasco seco, que es momento que ese bosque de Comunistas del Valhala, se pegue “la cacha”. No se trata de principios, se trata de estrategia. Un Partido revolucionario, marxista leninista como el mio y como los de aquí, se tienen que hacer la autocritica, con una piedra enorme en el pecho, del porque la derecha reaccionaria es gobierno, y como es posible, que pestes sociales, como el fascismo estén sentados en los estrados gubernamentales, en la que se supone, a estas alturas del desarrollo humano, en que todos los planes de estudios, desde la pre-escolar hasta la Universidades Superiores, condenan dichas ideologías.
Claro, es la democracia…
Por ella se están matando en el Cairo, por ella, Libia es agonizante, tiembla y se resiste, la violan, me violan en Tripoli…como en Afganistán, Irak, Tunes, Marruecos, Honduras.
Por ella, bloquean a la hermosa Cuba y tienen encarcelados a los cincos.
Que la cosa es corrupta entre los líderes suecos, no creo, más bien es sueca y de chocolate.
Políticamente se cree que aquí, en la nieve, hay una escala de valores, de acuerdo a su desarrollo integral…”Pa na”.
Aquí funciona el silencio y las narices tapadas por la hediondez:…Tres, cuatro para Guantánamo,”ri-ri”, que un ministro del exterior tiene intereses donde tiene que practicar la moral…! no “ri-ri”!!
Aquí vive la prepotencia del imperio y sus amigos. Tratan de vender todo lo que se mueve… A los obreros le roban casi todas sus conquistas ganadas en sus luchas proletarias, sindicales; los estudiantes no tienen las viviendas prometidas, sus federaciones acuden a la población civil, pidiendo alojamiento, para los cientos de estudiantes, que andan de casa en casa.
Ingenieros, otros profesionales, los mantienen con amenazas vedadas…”no puedo subirte el sueldo, pero si mantenerte en la empresa, tenemos mas jóvenes ingenieros pidiendo trabajo…”
La explotación, el abuso; antes, era pan de todos los días para el emigrantes, hoy, los rubios, parecen negros.
El capital, no entiende de colores, por eso un Obama una Constanza.
Veinte años atrás, yo vivía en Rinkeby. Tenia, tengo un hermano, Julio Chapa se llama, con el trabajamos políticamente en toda Spånga.
Tensta y Rinkeby era nuestro.
Los días Domingos, Julio, organizaba el día de “pegatina”: Con pistolas o con “engrudo” al centro de Estocolmo, una ciudad casi vacía, los centros comerciales cerrados, andaban los despistados o los trabajadores de la “mopa”. Drottninggatan, en invierno, era una acequia triste y en verano un “quitasol” vacío. Los tiempos cambian.
¿Quien me cambio Estocolmo?
El Imperio… Las contradicciones de crecer, de huir, las culturas, el hambre del Mercado, los criterios compartidos, la solidaridad y el crimen, la necesidad de fabricar sepultureros.
Muchas gracias.