El mes de marzo se volvió
traicionero.
No puedo hablar largo, se me
atraganta el habla.
Yo sé que los pájaros vuelan a
lugares más cálidos o tiritan de frio, otros andan cantado primaveras... como
que todo empieza de nuevo, hay que seguir trigando; se siente como “Borrón y
cuenta nueva”...y eso, que este mes es un mes serio, es de muerte, de memoria y
de verdad escondida.
Este sábado 29 es el día del “joven
Combatiente”, se recuerda a los hermanos Rafael y Eduardo Vergara Toledo...
asesinados en dictadura, es el mes, del día Internacional de la mujer
trabajadora, es el mes que murió nuestro comandante Chavez.
Según las Naciones Unidas, el 24 de
marzo, es el día de la verdad... es el día de conocer los crímenes de lesa
humanidad, es el día de saber quienes eran o sabían de Marta Ugarte...Este mes
de marzo, mi Marcelita, la hija de mi hermana, saco de su vientre hermoso otra
maravilla de la tierra, una japonesita,
lleva en su vientre otro nieto...estos estados de nacencias, me dan más razón,
para seguir en mis echonas y martillos.
Que marzo tan tanto, sin embargo, yo
lo veo chiquitito, cobarde, chueco.
Todos los seres humanos son unicos e
iguales al mismo tiempo...Yo tengo derecho a encojer mi mundo para llorar,
llorar no pá entro, llorar pá afuera, gritar, decir cosas: como mi mundo se
achicó, con suerte alguien me escuche
Uno va haciendo caminos, caminos que
al final de cuenta, son los objetivos del vivir; la razón de vivir y morir... La
muerte, no le temo a la pelá, menos a la mía, le tengo miedo al modo que muere
el otro...
En esos caminares, uno va juntando
cosas, cosas de todo tipo, malas y buenas; cuando son malas y te acuerdas de
ellas, te “joden el día”, las cosas buenas, te hacen sonreír, mirar los
calendarios; calendarios viejos y los que vienen en patota llegando... Son
sentimientos ré bonitos.
En mi mundo encojido, por una cuestión
de clase y de principios tengo y llevaré
conmigo a la Prosperina Torres, más Prospe que Prosperina Torres...
Yo quedo admirado, de la forma que
Prospe tejio esos caminos recorridos; si no la conociera, diría que ella “cayo
parada”... esa sonrisa hermosa, esa postura chora, esos labios rojos, ese moño,
estilo morrón o tomate rama, fragante a tierra, su forma de bailar, de trompito
en vendaval, se podría decir, que lo ha tenido todo, le cayo el bienestar como
caen las peras y manzanas.
Yo soy un andador triste, tengo
callos en el alma, soy un viejo de caminos; tengo cosas malas y buenas, las dos
las he hecho yo solito.... no, las buenas han sido colectivamente...: La Prospe tuvo caminos complicados, siempre
en subida y con el capacho lleno... le faltaba el aire, sus manos eran como el
arado de Víctor Jara, su sonrisa era de pan amasado.
En las competencias que teníamos, de
quien tenía más enfermedades. solía decirme...
”Que le vamos a hacer, hay que
echarle pá adelante no ma, no nos queda otra”
Por qué hablo de la Prospe de esta
manera... porque en mi mundo chiquitito, tengo, hay decenas de Prosperinas, las
vemos todos los días, sentimos su fuerza interior, su entereza, sus tristezas,
sus anhelos, sus necesidades.... yo no quiero perder más Prosperinas...
Mi paisito las necesita, tenemos que
vencer el conocido y practicado hambre...Cuidemos a nuestras, nuestros
andariegos, el enemigo es otro...Es el riquerio, no es la muerte, la muerte es
un Anden.
Cuando yo era cabro y estudiante,
tuve y tengo, hartos hermanos, no soy como Horacio Guarani que no los puede
contar, yo puedo contarlos, me faltan dedos, pero me acuerdo con amor, cariño y
respeto de cada uno de ellos, de ellas.
En los callejones aprendí, que cada
uno que me conoce, aunque no quiera, tendrá algo de mí y yo de ellos... por eso
este marzo es cobarde, nuevamente un pedazo de mí se fue a la cresta.
Un hermano muy querido mío... incluso
yo lo nombraba en algunos de mis escritos.
El Carlos “Cocó” Munizaga Miranda se
fue al patio de los palos blancos... me duele no saber como se fue...Y me
duele, duele mucho...más de 35 años sin verlo, sin embargo, estaba a mi lado
todos los días...
! A cuantas garrafas y botellas las
liberamos de su corcho!...uf.
Cuando pude volver a mi paisito, fui
a ver mi escuela en la que había sido profesor, él trabajaba allí... lo
llamaron y le dijeron “mira quien esta aquí”... me miro, sus ojos de esmeraldas
me miraron, estaba un tanto “pelao”, como su hermano, me miro intrigado...
quien eres me dijo, le dijeron quien era y se puso a llorar. Un abrazo que valía
por 30 años de ausencia.
Que tendrá que ver esto con politica,
pensaran algunos, con la Nueva Mayoría, con el riquerio, Ucrania, Venezuela, el
mar para Bolivia...Habrá alguna conexión...:
Tiene todo que ver, estos
sentimientos, provienen del ejército del pueblo o del simple zapatero o
sembrador de alcayotas, del estudiante, del hombre y de la mujer común. Somos
lo que somos, viviremos y lucharemos con las cosas que otros dejaron en las
alforjas, mas las nuestras, son y seran un arsenal poderoso y libertario.
Decirlo de otra manera, todos somos
algo del Negro Atilio, de la Charo, del guatón Oyarzu, de German Vazquez, de mi
viejo Juan Contreras, de Silvia, del viejo Carlos Solis, de Santiago Alvarez, de
Elias Campo, de Guerrero, de mi hermano Carlos Romero, el que me dejo solo con
sus banderas... sigo nombrando viejos, capaz que ponga Alejandro...
A todos los que nombre tienen un
denominador común... lucharon hasta el final por la echona y el martillo.
Muchas gracias.
Alejandro Fischer Alquinta
2014-03-29