Páginas

Páginas

lunes, 19 de mayo de 2025

Medio Siglo

 


Comentario radial.

 


 



Si retrocedemos en calendarios y llegamos al mastique del fruto seco, ese caído del árbol bueno; o, al saboreo de un asado inventado, rodeados de cabros chicos, embelesados mirando el misterio y poder del fuego, podemos ver, en todo pestañeo, a esa mujer que está en todo ángulo, incluso, absorta mirando las estrellas, la luna, el silencio, como un presagio.

Podríamos quizás, sentir, una cierta armonía, un cierto suspenso, una espera ansiosa de algo, de inventarlo.

Sentir un instinto visceral de continuar la vida.

Confiando en nuestras propias cualidades, habilidades que aparecieron por encanto y adquiridas a costalazo limpio, podemos decir:

Puta, que es lindo vivir.

Este pedacito de radiografía que les cuento, son millones de años antes de Cristo, y, muchos miles, después de él…Y ojalá que, después que yo me vaya, y la cordura quede, se siga junto al fogón, mirando las estrellas.

Siendo, el único ser existente, que pudo entender, por cachativa, la relación entre el fuego y la carne, la cueva y la intemperie; el agua rio abajo y el árbol que lo mira, el olor a lavanda, el dolor, el relajo, y, la satisfacción de intuir, que algún día; él raciocinio será como un pistilo.

La inquietud, la curiosidad nos tiene embrujados, te empuja a continuar.

No quiero mentirme, han pasado, más menos 190.000 años y hemos heredado del despelote de los seres que chorrean ideas, posibilidades que brotan como almacigo de cebolla. Nosotros, los humanos, si embargo, nos hemos convertidos en unos imbéciles, engreídos, hipócritas y criminales.

Somos traidores, verdugos de la esperanza, de esa niñez primera, con olor a humo.

Les estamos fallando al ser humano, a esa maravillosa, misteriosa, omnipotente construcción matemática, biológica, química, evolucionada, adaptada a todo terreno.

¡Maldigo lo que pasa en Gaza!

Es una infamia universal. No tiene nombre. Están haciendo lo mismo que en Irak, lo mismo consumado en Libia. Ahorcaron a Sadam Hussein y a Muamar el Gadafi, él que dijo verdades en la ONU, el que tenía a su pueblo en un buen estado de bienestar, lo acorralaron y le dieron muerte.

Benjamín Netanyahu, primer ministro de la muerte, se pasea inmaculado.

Los que soplan este infierno, el riquerio al acecho, “más temprano que tarde” tendrán su castigo.

¡Si no pá que!

 Las potencias del mundo sostienen con el gobierno sionista, con el capital, negocios por la puerta de atrás.

Los poderes fácticos de Europa, Estados Unidos y otros, con un ansiar enfermizo de apoderarse de los mostradores y peajes chinos, nos tienen a un paso del exterminio de la humanidad.

No quieren ver, aunque sea “por si las moscas”, que Rusia no quiere invadir a nadie, no lo necesita; lo único que pretende, es quedarse con los territorios ocupados, y, que Ucrania, no entre en la OTAN.

El decir esto, me avergüenza, me embrutece.

Me atrevo a decir, que la mayoría de los muertos acumulados en el conflicto Ucrania/Rusia, con los de Yemen, y otros, tienen que ver, además del petróleo, agua y pirita mentirosa, con el impedir que el fascismo, perro de presa del Imperialismo yanqui, personificado en la OTAN, se adueñe de los caminos que van y vienen desde Pekín.

Nada más.

De lo libertario, de lo patriótico, es más falso que el balazo en la oreja del pelirrojo.

Con esta cuestión, en mi paisito, de las elecciones primarias y luego las presidenciales, se me atraganta un canto:

“Un canto de amistad, de buena vecindad, unidos nos tendrá eternamente.

Por Nuestra libertad, por Nuestra lealtad,

debemos de vivir gloriosamente.”

 ¡Puta que bonito!

Se viven genocidios por el solo deseo de querer gobernarse diferente, de vivir diferente, de buscar la forma de erradicar la pobreza.

Pobreza que la llevamos como poncho, desde Toro y Zambrano.

Cuba, todo el Caribe, tiene el derecho de ser soberano, y, aparece en las redes sociales un proclamado historiador español, argumentando que los habitantes del sur de américa no pueden hablar de genocidios ni de conquistas perpetuados por la Europa colonialista.

Que, nuestra infeliz ignorancia, no ve, ni agradece las catedrales construidas, las universidades, los pudores, los inmensos conocimientos traídos de ultra mar.

Los Mayas, los Aztecas, los Incas no han aportado nada, ni el cero.

Dios mío de los coloraos.

Ellos, los de ultramar, nos ilustraron con la “Caza de Brujas”, con la prohibición de la mujer al conocimiento.

A la mujer del pueblo, le han tenido siempre, un odio calculado.

Mi colectividad, nuestros aliados, en una inmensa batalla ideológica, y, a su vez, cobarde y traidora, fuimos vencidos políticamente.

Mil días, fueron escritos para siempre en la historia de las revoluciones y sus vías de construcción.

Desde 1973, con el resultado de la guerra, en patota y lamiéndonos las heridas, lamentando pérdidas humanas maravillosas; mis viejos, colectivizan la imperiosa necesidad de reagruparnos, de “pasar lista” y regresar.

De vernos, en abrazos.

El desparramo en las bases era grande, el “día de los abrazos” fue una idea para reencontrarnos y continuar lo de Luis Emilio, lo de Don Lucho.

Inventándome que la tierra es mía, he vivido en un macetero, por más de 48 años.

He gritado, cantado, por cientos de calles, por mi país, por Nicaragua, por Cuba, por Bolivia y Perú, por Libia, por los Balcanes, por mis hermanos Polisarios, por Sudáfrica, por Angola, por Vietnam, por Argelia.

El Muro de Berlín, por poco destroza mis ilusiones.

Y todo, por una idea que no hayo como seguir protegiéndola, desarrollándola, siendo de sentido común, dialéctica, que se puede moldear.

Y tan complicada no es.

Necesita si, reflexión y honestidad.

Esa idea es como la existencia de un ser humano. Cada órgano, para su funcionalidad depende de otro y este de otro. Y, así nos vamos.

Cada instancia tiene sus necesidades bien establecidas. Si estas funcionan, todo el cuerpo humano podrá caminar, realizar sueños.

Una Empresa cualquiera, con sucursales en todo el país, prácticamente, su venta, cubre todas las necesidades de la ciudad.

El pequeño empresario, ese que vende chuchoca, tiene que cerrar, no puede competir con un coloso, que se blinda con una gerencia y estructura diversa y escalonada, con pitutos en la municipalidad, en carabineros y tribunales.

Tienen además lazos y acuerdos en todo el continente, que le proveen de los artículos que vende y comercia. Tienen programado expandirse, de esa forma crear más empleo; siempre y cuando, el gobierno, le baje los impuestos a pagar.

Esa empresa de rapiña no tiene nada que ver con mi idea de país soberano.

Además, el gerente del boliche no es el dueño, el propietario se sienta en el extranjero, es parte de una multinacional mencionada en cada genocidio angelical cometido, BlackRock se llama.

Jeannette Jara, comunista, representando a otras ideas de construcción soberana, es candidata a presidente de Chile, ella, no acepta injerencias extranjeras en el vivir integral de su país, con ella, podemos volver a construir soberano.

 

Alejandro Fischer Alquinta

Estocolmo 20250518