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miércoles, 6 de agosto de 2025

No todos los callejones llegan a Jerusalén

 


Comentario radial y escrito.


 

 


De acuerdo con los acontecimientos que me rodean, cachureo, analizo, vivo los recuerdos y memoria a lo García Lorca; con la cara complaciente, aunque por dentro la murga zapatea

 

Yo no quiero morir como un pajarito. 

Creo haber vivido de lo bueno y de lo malo. 

Me arriesgo a decir que he conocido, olfateado, palmado, y, por los libros imaginado, el desarrollado hasta ahora, por nuestro insólito siglo XX/ siglo XXI. 

Uno, al irse enterándose de cosas, cierra los ojos y se traslada inconsciente, se imagina.

 

Por ejemplo: 

El tiempo en el cual trabaje en jardines infantiles, en la escuela básica, viendo a la infancia jugar, jugando con ellos; me veía en tiempos lejanos en Marquesa, en Vicuña; los niños no eran tan diferentes. 

Por aquí, en macetero; observaba sus haceres, sus trajines, 40/50 niños en el patio; algunos, para ahuyentar los miedos, andaban chupete en ristre, otros, jugando al “brännboll” (una cuestión como el “queche”, pero esté, con un bateador) otros jugando al almacén, y, los del 4 básico, persiguiendo desenfrenados a sus compañeras de curso. 

Hoy, endemoniado, cierro los ojos, y me invento a unos alumnos de secundaria, mezclados con cimarreros, 16/19 años, entrando al jardín o a esa escuelita que recuerdo, con palos y fierros en las manos, arrasando todo, matando cada infancia que respira.

 

Así me imagino, el genocidio en Gaza. 

Los muertos podrían repletar el Estadio Nacional en Chile; quedando 11.000 muertos, esperando en la cola.

 

60.000 van. Mayoría civiles, niños y mujeres. 

No faltará quien, bajándole el perfil al genocidio, mencione el ataque perpetuado por Hamas; brazo armado y político de Palestina, que, en el fatídico octubre, del año pasado, asesinaran a 1200 personas y 250 convertidos en rehenes.

 

El morir por causa del infierno de las armas, sin poder defenderse es hediondo de feo. Es un crimen. Y, más feo aún, si esas muertes aumentan sin asco, las riquezas del riquerio. 

Al término de la segunda guerra mundial, Inglaterra y el sionismo internacional, comenzó a imaginarse para sí, Gaza; que más bien es hoy, una raya segmentada, cubierta de incertidumbre, muerte y escombros. 

Este matar, viene de muy re lejos. 

Tuve la oportunidad, en Estocolmo, en diciembre de 1988, en la Casa del Pueblo, junto a otros hermanos de amaranto, cuidar la seguridad de Yaser Arafat.

En esa oportunidad, Arafat, menciono la necesidad de reconocer el Estado de Israel y el Estado de Palestina.

 

Este palestino menciono una realidad, que hoy es un infierno. “Traigo en una mano, un fusil, y, en la otra una rama de olivo, no dejen que vote el olivo” 

Satanás, lleva tiempo metiendo la cola. 

Qué clase de odio, vivencias, pueden albergar en sus tripas, un niño de 6 años, allá por Gaza. 

Que sentimientos, que dinamita esconderá en su interior de dátil.

 

¿Que pensara Samira, Yafa, Cerdal; que pensaran? 

Y, muy sueltos de nalgas, el Reino Unido, Francia y otros países, quieren verse en septiembre, humanistas, en la Asamblea inútil de las Naciones Unidas, y, proponer, empático la existencia de Israel y Palestina en dos países soberanos. 

Parecen buitres después de los despellejados 

Los conflictos manipulados y de callejones pavimentados de sangre, en todo ese Medio Oriente, en la india, en China, por los imperios de Inglaterra, Francia y otros, que se hacen los huevos de avestruz, pudieran levantar pilastras y regentarlas.

 

La existencia del sionismo, el colonialismo, en Israel tiene patente anglosajona. 

Para continuar el rotativo, una serie de países, incluidos Brasil, España, Egipto, demandan a Hamas, que entregue sus armas a las autoridades palestinas. Autoridades elegidas por escombros y hospitales bombardeados. 

Yo no soy violento, no quiero ser violento.

 

Creen ustedes que el origen de la Muralla fue porque a los chinos les gustaba jugar con arcilla y barro. 

Creen ustedes, que Europa, tan religiosa y abnegada, tan de Imperios, tan vestida de misoginia, es para a repeler brujerías 

Tan bondadosa ella, intentando en las Cruzadas, salvar Jerusalén, del bárbaro musulmán. 

Thomas Edwards Lawrence, más conocido como Lawrence de Arabia, era un altruista de los desiertos. No podía consentir que los Otomanos siguieran con sus enredos de conquistas. 

Los Imperios de Europa sufren de un delirio, ser dueños y señores de pilastras y callejones del Asia del Sur y del Asia occidental

 

África, un almacén de esclavos y de especies.

 

El dominio de esos caminos es por ayer y hoy, el hoyo del picarón. 

Tanta trifulca y fuego, tanta avidez, conllevo a que algunos pueblos de nuestro sur, por un pelo, no nos dejaron hablando francés.

 

Esos gloriosos contubernios imperiales, nos dejaron otra herencia, una caspa que desea servir a los Imperios. 

Los minerales, el mar y la tierra han sido nuestro cilicio. 

Chañarcillo, El Teniente, María Elena, mi triste Chacabuco y el mar. 

Los gringos, los ingleses, los franceses y los prusianos habitaban mi paisito, como Pedro por su casa. 

Es para mí, un esperpento estar trayendo tanto dolor Imperial, tanto grito y vulnerabilidad palestina, tanta hegemonía traidora, tanta vida sin poder sobrevivir. 

Y yo, gritando la lucha cruenta de mi pueblo, de mi paisito, que quiere construir nuevos contrapisos y levantar columnas nuevas. 

Las famosas encomiendas de ultramar llegando hasta América, las encuentro hediondas, pero las entiendo. 

Fueron los orígenes de nuestro Estado, de nuestro continente, de nuestra cultura, lo que me da rabia y avergüenza, es, que, por más de dos siglos, hayamos permitido que, en esas encomiendas, por gratitud al servicio prestado, vaya nuestro pueblo apretujado y de yapa.

 

El bandolerismo en Chile tiene esos orígenes. 

A veces siento, que esos estallidos sociales que han acontecidos en Chile son eso, estallidos, no se alcanza a clasificarlos, a madurarlos, mantenerlos, a comerlos. 

El enemigo y el amigo hacen una polvareda que el que anda a pie, no ve ni jota. 

Se hablan de la inquietud y juicio de la clase media, como que esa clase, estuviera por otro mostrador y no en la explotación del hombre por el hombre.

Muchos años atrás, en un libro leído, se incrusto en mi intelecto un párrafo, que, lo he comentado en algún momento, años atrás.

 

El libro, trataba del “Proceso de Nuremberg”. 

Cuando el Ejército Rojo, comenzaba a liberar a Europa del nazismo, algunos de ellos, los criminales pardos, no alcanzaron a arrancar a nuestro sur de américa. Los apresaron, fueron interrogados y condenados.

 

El párrafo que ensucio mi intelecto relataba el interrogatorio a un oficial de la Gestapo, acusado de crímenes de lesa humanidad 

El oficial nazi contesto. “Yo, no he matado jamás a un ser humano, solamente a polacos.” 

“Qué clase de gente son aquellos de la cruz gamada” 

Y, en mi pais, hay devotos del mismito calibre, suspirando para chantarse el duplicado de la Piocha de O’Higgins.

 

¡Anda mundo y piérdete! 

La corrupción en mi Chile es una herramienta y un castigo para acomodar las inmensas diferencias sociales, para mentir las infamias. 

Y sobre todo, para desparramar caos. 

Desde el martillazo de Toro y Zambrano, la corrupción se fue enconando como una peste incolora, de nobleza y nombre, liquida, amorfa, bestial; se agarra como garrapata domesticada y servil, alimenta cualquier mentira, engaño, traición, genocidio.

 

Es una garrapata domesticada. 

La abolición de los títulos de nobleza y de armas por Bernardo O’Higgins, no sirvieron para exterminar las garrapatas.

 

Este país mío y tuyo, me tiene divagando. 

Uno ve con orgullo lo conquistado y conseguido por el gobierno de la Unidad Popular; al mismo tiempo, sabiendo lo que sé, le jugamos chueco a Salvador. 

Nos juntamos para aunar fuerzas, pero no entendimientos. ¡Concepción, territorio libre de América del Sur!

 

Pá onde nos fuimos.

“Te voy a matar comunista e mierda, me decía un guerrillero apuntándome con una “mata gato”.

El fascismo nos mató, y, lo civil de él, nos venció políticamente.

 

Le jugamos chueco a Salvador.

 

El, se atrevió a nacionalizar La gran Minería del cobre. Y no, porque, el congreso estaba de acuerdo, no; políticamente fue una audacia quirúrgica.

 

Estatizo la Banca.


La ITT, fachada del pilastrerio imperialista, sus bienes y lombrices, son intervenidos y nacionalizados. 

Si la organización de país, territorio con recursos inmensurables, como para tirar a la chuña y darle a cada familia chilena y a emigrantes también, una casa y jardín y no hacerlo; el hacer de su política no cumple con su razón de ser, los medios de producción se transforman ajenos, y, a la tierra, le chantan alambre de púas. Alguien anda robando, matando y corrompiendo. 

Nuevamente, el caminar de la historia, con riendas en la memoria, con la unidad del progresismo, con los partidos de izquierda en compromiso, tienen la posibilidad de sacar al país, “de los pies de los caballos”, y, no hacerlo, sería un insulto al intelecto humano y al instinto animal. 

Jeannette Jara Román, en la esquina nos espera.

 

Alejandro Fischer Alquinta.

Estocolmo 20250802.