viernes, 6 de enero de 2012

NUESTROS HEROES








NUESTROS HEROES



por Luis Fuentealba Medina



El 22 de Octubre se han cumplido 10 años del cobarde asesinato de los compañeros, Isidoro Carrillo, Danilo González, Bernabé Cabréra y Wladimir Araneda. Escribo estas lineas ante la imposibilidad de estar en Lota, mi patria chica, para rendir junto a los núestros el justo homenaje a estas cuatro voluntades, a estos cuatro ejemplos de lealtad a su Partido y a su clase.



Camaradas ustedes recordaran que fuimos acusados de un tal plan "Z" y en tiempo record se realizó el primer Consejo de Guerra. Concretamente empezó el día 8 de Octubre, el día 20 de Octubre se nos comunicó la sentencia definitiva la que fue aprobada por unanimidad por los facciosos, entre otros Washinton Carrasco, Urrejola, Pinares.



Recuerdo aquella tarde triste, fueron comunicando las sentencias de menor a mayor cantidad de años y llegamos a los condenados a la perpetuidad, dejando para el final a los cuatro compañeros; una hora más tarde era conducido a la cárcel el compañero Carrillo y me comunicó que le habían condenado a muerte, luego fueron llegando los otros tres, quienes nos informaron de la bestialidad de los infames que componían el consejo de guerra. Esa fue una tarde terriblemente amarga, la noche fue en extremo dura, yo compartí esa noche la celda con los compañeros Carrillo y Cabrera, le hicimos un repaso a nuestras vidas, cómo habíamos llegado al Partido. Con el compañero Carrillo fuimos 9 años dirigentes del Sindicato Industrial minero de Lota, vivíamos vecinos, nos unía una gran amistad» El me dijo "siento a mis 12 hijos, a usted lo quieren mucho, hable con ellos sobre todo con el mayor" (Fedor), éste se encontraba recluido en el Estadio Regional de Concepción y era brutalmente torturado, otro de los hijos era buscado vivo o muerto. La otra cosa que le preocupaba era no poder seguir luchando, no poder entregar más al Partido.



Bernabé Cabrera, hombre de pocas palabras, pero de resuelto accionar, dijo: a mi nadie me trajo al partido, yo vine solo por que éste es mi lugar, no tengo nada que reprocharme, le pido que cuiden al cabro grande va pintando bien para la causa.



El día 21, a primera hora hablo Danilo conmigo, me dijo "en cualquier momento nos van a separar, debemos tomar algunas medidas orgánicas". Nos metimos en una celda de un metro diez por dos, los 19 compañeros del proceso. Dijo Danilo, "no hay que desesperarse no hay que desconfiar en el Partido, hay que mantener la organización aquí adentro, nada se debe hacer sin el visto bueno de la Dirección, ésto que sea bien comprendido, ya ven ustedes yo he pedido esta reunión para tener una actitud en nuestro propio asesinato y a mis compañeros les pido, que sepamos morir como comunistas".




Hablo, Vladmir Araneda, dijo "el camino que elegimos es el más duro pero el más noble, en nuestra lucha han caído muchos ahora nos toca a nosotros, traten de salir vivos, que no entre la desesperación, hay que ser fiel al Partido, cumplir con los acuerdos, aunque el precio sea la vida. Luego se dirigió a Danilo, le dijo: fuimos a la escuela juntos, nos graduamos de profesores juntos y juntos fuimos designados como profesores justo a Lota y ahora nos pilla la muerte juntos" termino dirigiéndose a mi, diciendome camarada trate por todos los medios de salvarse, usted no necesita consejos".



Bernabé Cabrera, repitió lo dicho en la noche, ¡fuí solo al Partido, ese era mi lugar, no tengo nada de que arrepentirme! Isidoro Carrillo, repitió, lo ya dicho, su preocupación por sus doce hijos, y la pena de no poder entregar más a su Partido y a su clase.



Al terminar de escuchar a nuestros compañeros, que nos entregaban una lección de nobleza, de hombría, de verdaderos comunistas, nos quedamos conmovidos, con un nudo en la garganta y nuestros corazones hacían circular con más fuerzas nuestra sangre; se produjo un silencio momentáneo de nosotros los que sobrevivíamos, ésto fue captado por Danilo quien nos dijo: "no hablemos más de muertos, yo tengo aquí mi guitarra toquemos y cantemos hasta cuando nos sea permitido", y cantamos una canción tras otra, se inició el concierto de la dignidad con la canción revolucionaria española "La Morena".



Una hora más tarde eran llevados a una celda de aislamiento y no los veríamos más, Pero sus enseñanzas se quedaron con nosotros, ellos no callarán nunca porque nosotros prometimos no callar nunca sus nombres y sus ejemplos. Llegara el ansiado dia de la libertad, calles y plazas llevaran sus nombres. Cuando se pueda escribir la verdadera historia de las luchas sociales de mi patria, se podra conocer la obra de estos esclarecidos hijos del pueblo, se conocerá las causas por las que entregaron sus vidas. Los estudiantes, las generaciones del porvenir, encontrarán en estos ejemplos fuente de inspiración para moldear sus vidas y con ello encontrarán el camino de la justicia social, el progreso y la Paz.



Deseo con cariño, recordar a sus padres que le dieron el ser, a sus esposas, a sus hijos, que siempre le dieron la alegría de luchar, saludar agradecidos a sus compañeros del carbón, quienes en mil batallas ayudaron a moldear sus vidas; recordar en forma muy especial a su Partido, el Comunista de Chile, el cual con gran honra representaron y en él hicieron sus primeras armas, en él se educaron, escuela de lealtad a los principios del Marxismo - Leninismo; a ellos no fallaron ni en la hora de su muerte y como es sabido murieron cantando la gloriosa internacional.






Gloria y Honor a nuestros compañeros caídos defendiendo la libertad y la democracia.



¡ Honor y Gloria a quienes nos legaron esta gran enseñanza !



Publicado en:


Boletín del Exterior N°63


Enero – Febrero 1984


Paginas 29 al 31


Partido Comunista de Chile